Está en la página 1de 4

Al honrar a nuestros

padres estamos bajo el


gobierno de Dios

Mateo 15:3-6 Respondiendo El, les


dijo: ¿Por qué también vosotros
quebrantáis el mandamiento de Dios por
causa de vuestra tradición? Porque Dios
dijo: "Honra a tu padre y a tu madre"; y:
"Quien hable mal de su padre o su
madre, que muera". Pero vosotros decís:
Cualquiera que diga a su padre o a su
madre: Ya es ofrenda a Dios todo lo mío
con que hubieras sido beneficiado, ya no
ha de honrar a su padre o a su madre.
Así habéis invalidado la palabra de Dios
por causa de vuestra tradición.

Aquí el Señor no solo condenó a los


fariseos y escribas por haber invalidado
la palabra de Dios por causa de su
tradición, sino que al hacerlo también

1
dejó implícito que el hombre debe honrar
a sus padres. Dios, en Su gobierno entre
los hombres, ha ordenado que el hombre
honre a sus padres. De los Diez
Mandamientos, este es el primero que
Dios dio con respecto a las relaciones
humanas (Ex.20:12). No obstante, la
naturaleza caída del hombre siempre le
incita a no hacer caso a sus padres, es
decir, a rebelarse contra el gobierno de
Dios.

Para hacer que el hombre regresara al


gobierno de Dios, el Señor como el Rey
celestial recalcó que el hombre debe
honrar a sus padres. Esto corresponde a
Su palabra en la constitución del reino de
los cielos con respecto al cumplimiento
de la ley (Mt.5:17-19). Así que, también
el apóstol Pablo recalcó este asunto
contundentemente (Ef.6:1-3; Col3:20).

Nosotros, el pueblo del reino, debemos


honrar a nuestros padres sin buscar
pretextos para no hacerlo, como los
2
judíos fanáticos lo hacían. Presentar
cualquier excusa indica que no estamos
bajo el gobierno celestial, sino que
vivimos según nuestra naturaleza caída y
seguimos la corriente rebelde de la
generación actual.

(c) 2015 LSM / del Estudio-vida de Mateo, págs. 533,


escrito por Witness Lee.

Puede escuchar o descargar el programa radial Estudio-vida en:


https://www.lsmradio.com/espanol/

También podría gustarte