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MONOGRAFÍAS Y ENSAYOS

EL ASPECTO
ECONÓMICO DE LA
PRIMERA GUERRA
MUNDIAL
Jorge Vidal Stuardo*

La Primera Guerra Mundial dejó para la humanidad un sinnúmero de experiencias a


partir de su origen en Europa por la rivalidad entre las potencias imperialistas, como por
la desaparición a su término de cuatro imperios y tres grandes dinastías, calculándose que
produjo aproximadamente ocho millones de muertos y seis millones de inválidos.
Durante dicho período bélico, las colonias suministraron víveres, materias primas
y soldados, reclamando al término de éste una mejora de su situación, lo que debilitó la
influencia de Europa en las colonias. A ello se sumó la expansión de Estados Unidos, el
mayor beneficiado de la guerra junto a Japón.
Estudiar cada etapa de este conflicto armado, desde sus orígenes, su desarrollo hasta su
término, constituye un aporte al conocimiento de la Gran Guerra a través de las medidas
económicas que los países beligerantes fueron adoptando durante el transcurso de los
acontecimientos, como también por los intentos para calcular su costo al final de las hostilidades.

- Introducción. la mayor parte del continente europeo el

S in duda alguna, el estudio de la Pri-


mera Guerra Mundial representa una
retrospectiva histórica ineludible para
todo ser humano, por el impacto en el curso
de los acontecimientos del Mundo Moderno
concepto de democracia, extendiéndose
así la idea de que las poblaciones que
compartían un origen étnico, una lengua
y unos mismos ideales políticos tenían
derecho a formar estados independientes.
y por el alto costo que significó para todas Sin embargo, muchos de los pueblos que
las naciones involucradas en el conflicto. deseaban su autonomía quedaron someti-
Muchas son las causas invocadas dos a dinastías locales o a otras naciones.
para justificar su nacimiento, desde El espíritu nacionalista también se
el intenso espíritu nacionalista que se puso de manifiesto en el terreno econó-
extendió por Europa a lo largo del siglo mico. La Revolución Industrial, iniciada
XIX y comienzos del XX, hasta la riva- en Gran Bretaña a finales del siglo XVIII,
lidad económica y política entre las en Francia a comienzos del XIX y en Ale-
distintas naciones y el proceso de mili- mania a partir de 1870, provocó un gran
tarización y de vertiginosa carrera arma- incremento de productos manufactura-
mentística que caracterizó a la sociedad dos, por lo que estos países se vieron
internacional durante el último tercio del obligados a buscar nuevos mercados en
siglo XIX, a partir de la creación de dos el exterior. El área en la que se desarro-
sistemas de alianzas enfrentadas. lló principalmente la política europea de
La Revolución Francesa y las Gue- expansión económica fue África, donde
rras Napoleónicas habían difundido por los respectivos intereses coloniales
* Comodoro. AB. Contador Auditor y Licenciado en Auditoría de la Universidad de Valparaíso. Diplomado en Gestión Financiera
de la Universidad de Chile. Diplomado en Historia Naval y Marítima de la UMACH y egresado del Magíster en Ciencias Políticas
Integrada de la Academia de Guerra Naval.

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AUTOR VIDAL
JORGE ARTÍCULO
STUARDO

entraron en conflicto con cierta frecuen- ridad el centro de la época victoriana. La


cia. La rivalidad económica por el domi- participación del Reino Unido en el total
nio del territorio africano entre Francia, de la producción mundial alcanza en esos
Alemania y Gran Bretaña estuvo a punto, momentos altos porcentajes, produciendo
desde 1898 hasta 1914, de provocar una hacia 1860 la mitad del hierro y del carbón
guerra en Europa en varias ocasiones. del mundo y empleando como materia
Como consecuencia de estas tensiones, prima de su industria textil, la mitad de
las naciones europeas adoptaron medi- la producción bruta de algodón. La mano
das tanto en política interior como exterior de obra empleada en la industria crece
entre 1871 y 1914 que, a su vez, aumenta- considerablemente. Se aprecia, junto al
ron el peligro de un conflicto; mantuvieron aumento de las ocupaciones ligadas al
numerosos ejércitos permanentes y cons- desarrollo de la siderurgia y el ferroca-
truyeron naves de guerra de mayor tamaño. rril, la primacía que sigue manteniendo el
Los dirigentes de todos los países tomaron sector textil y la presencia importante de
conciencia de que los crecientes gastos de actividades de corte tradicional.
armamento desembocarían con el tiempo La Gran Exposición Universal de
en quiebras nacionales o en una guerra; por 1851, celebrada en Londres en el majes-
este motivo se intentó favorecer el desarme tuoso marco del Cristal Palace, creado
mundial en varias ocasiones, especialmente para albergarla, es una demostración
en las Conferencias de La Haya de 1899 y del potencial industrial británico, supe-
1907. Sin embargo, la rivalidad internacional rando a otras exposiciones francesas de
había llegado a tal punto que no fue posible la época por su grandiosidad.
alcanzar ningún acuerdo efectivo para deci-
dir el desarme internacional.
La historia económica, en general, se
salta el período de la Gran Guerra como
objeto de un estudio central de esta dis-
ciplina, quizás por constituir un episodio
ingrato debido a la destrucción de aque-
lla economía mundial que se suele evocar
como “los buenos tiempos de antaño”,
haciendo el estallido de la guerra en agosto
de 1914 pedazos la complicada red de rela-
El Palacio de Cristal en Londres, albergaba la gran
ciones económicas internacionales esta- exposición en 1851.
blecidas hasta esa fecha. El profundizar en
este aspecto, tanto antes como durante el A partir de 1873 la economía británica
desarrollo del conflicto mismo, representa sufrió una inflexión que instaló un clima
un interesante desafío, destacando todo de menor optimismo y confianza en la
antecedente, hecho o circunstancia que capacidad industrial del país. A pesar de
permita una ilación desde el punto de vista que la crisis no fue tan severa, pues la
económico, a partir de 1871, fecha de la economía no dejó de crecer, ésta lo hizo
unificación alemana, hasta 1918, fecha de a un ritmo menor que en el período pre-
cese de las hostilidades. cedente y que en el conjunto de países
industrializados.
- Período Pre-Guerra de 1871 a 1914. Diversos indicadores testimonian
A mediados del siglo XIX Gran Bretaña esta decadencia relativa de la economía
se había convertido en la principal poten- británica, tanto respecto a otros países
cia económica mundial. Era “el taller del como respecto a su propio ritmo de cre-
mundo”, abarcando esta fase de prospe- cimiento anterior:

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EL ASPECTO ECONÓMICO DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL
TÍTULO

• El más lento crecimiento británico durante taña dejó de ser incuestionable, a pesar
las dos últimas décadas del siglo conduce de que en los años de preguerra todavía
a que, primero Estados Unidos y luego no se podía prever que otro país llegaría
Alemania, la sobrepasen en la producción a desempeñar este papel. En efecto, las
de carbón, lingotes de hierro y acero. inversiones alemanas en el extranjero, en
• Como resultado de este menor creci- el período 1913-1914 se estiman en alre-
miento, la parte correspondiente al Reino dedor de 5,8 miles de millones de dóla-
Unido disminuyó de forma extrema, una res, lo que representa apenas un tercio de
trayectoria inversa a la seguida por sus las inversiones británicas en el extranjero.
principales competidores. Por el volumen y la distribución regio-
• El conjunto de la economía del Reino nal de su comercio exterior, los Estados
Unido creció no sólo menos que los Unidos parecían estar más calificados
principales países competidores, sino para convertirse en potencia económica
que muchos otros países europeos, mundial. En 1913 todavía era un país
y este menor crecimiento también se que tenía una deuda neta considerable,
dio en el ámbito de la productividad aunque debido al reciente aumento de
(producción por persona y hora). sus exportaciones en los últimos veinte
años, en un tiempo no muy lejano se
En las décadas que precedieron a la podía esperar un vuelco en la situación.
guerra, la participación británica en el La rivalidad de las grandes potencias en
comercio mundial se redujo también de el campo de la exportación se susten-
un 20% (1876-1880) a un 14%, tendencia taba en una base racional, en la medida
explicable en parte por la expansión del que la demanda de exportación tenía una
desarrollo industrial y económico en ultra- incidencia decisiva en la coyuntura. Las
mar, aunque también es posible que sea cuotas de exportación aumentaron en
expresión de una pérdida de capacidad de los años de preguerra; en Gran Bretaña y
producción1. El saldo, todavía positivo en en Francia éstas establecían la pauta del
este período, de la balanza de pagos britá- desarrollo económico y de ahí que reper-
nica que le permitía preservar y extender cutieran enormemente en los ingresos y
su posición internacional de acreedor, se en la ocupación3.
basaba en la alta rentabilidad de las inver- Dado que la existencia a escala inter-
siones en el extranjero y en los ingresos nacional del sistema del patrón oro
de los fletes. En los años 1911-1914 Gran no permitía llevar a cabo una política
Bretaña financiaba por término medio el de coyuntura basada en la demanda
84% de sus exportaciones de capital con el interna, impensable además por la hege-
producto de sus inversiones en el extran- monía de la ideología liberal, los gobier-
jero, mientras que la marina mercante nos se vieron en cierto modo forzados a
inglesa representaba alrededor de una ter- adoptar una agresiva política de comer-
cera parte del tonelaje mundial2. cio exterior, considerada como la única
Como consecuencia de que en la política coyuntural posible en la época4.
época se observaba minuciosamente y La rivalidad entre las grandes poten-
se comparaba la evolución económica de cias industriales en el terreno de la
cada uno de los países, surgió una espe- exportación demuestra que en el sistema
cie de rivalidad nacional en la economía económico mundial, aparentemente
mundial. El papel dirigente de Gran Bre- estable y armónico desde el punto de

1. W. Ashworth, An Economic History of England, 1870-1939, Methuen, Londres, 1960.Reedición 1969, p. 147.
2. Naciones Unidas, International Capital Movements During the Inter-War Period, Lake Succes, 1949, p. 15.
3. Ph. Deane y W. A. Cole, British Economic Growth 1688-1959, Cambridge University Press, 1967, p. 311.
4. J.M. Keynes, The General Theory of Employment, Interest and Money, Macmillan, Londres, 1951, p. 381.

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vista liberal, existían considerables ten- guerra parecía como si el apremio del
siones. Un área de conflictos no menos hambre lograra materializar objetivos
importante era la creciente rivalidad de que estaban fuera del alcance de los
las grandes potencias en pugna por la ejércitos atrincherados o de las flotas
explotación económica del mundo, riva- inmovilizadas5.
lidad que bajo el concepto de “imperia-
lismo” dio nombre a toda la época. Los
países no industrializados “de produc-
ción primaria” fueron integrados en la
economía capitalista mundial en calidad
de proveedores de materias primas, de
compradores de productos manufac-
turados y de esferas de influencia para
la exportación de capitales. La penetra-
ción económica en estos países se inició,
generalmente, a través de acciones polí-
tico-militares. La igualdad de fuerzas estabilizó los frentes.

Al comienzo de las hostilidades, la


- El Bloqueo Aliado de las Potencias guerra económica se hallaba sujeta a
Centrales. normas de Derecho Internacional que se
El estallido de la guerra en agosto basaban en experiencias del siglo XIX y
de 1914 hizo pedazos, de un solo zar- que representaban un compromiso entre
pazo, la complicada red de las relaciones los intereses estratégicos de las partes
económicas internacionales, ya que la beligerantes y los intereses comerciales
legislación de los estados beligerantes de los países neutrales. Estas normas
prohibió el comercio con el enemigo. fueron codificadas e internacionalmente
Además, ambos bandos intentaron pactadas en la Declaración de París de
desalojar al enemigo del comercio inter- 1856 como resultado de las negociacio-
nacional a través de una guerra econó- nes de paz tras la guerra de Crimea. La
mica ofensiva. Los aliados establecieron declaración contemplaba dos medidas
un bloqueo cada vez más denso en torno económicas “legítimas” en tiempos de
a las potencias centrales, mientras que el guerra: el bloqueo de las costas o los
gobierno alemán, por su parte, intentó puertos enemigos y la confiscación de
aislar económicamente a Gran Bretaña mercancías o navíos en alta mar.
mediante una guerra comercial con sub- En 1907, en la segunda conferen-
marinos. A medida que la guerra se iba cia sobre la paz de La Haya, se volvió a
prolongando, mayor era la esperanza plantear la cuestión de la guerra econó-
que cada una de las partes depositaba mica. El resultado de los trabajos de la
en la guerra económica. conferencia fue la creación de un tribu-
La guerra mundial, fue tanto una nal internacional de presas, una instan-
guerra de bloqueos, desde la superficie cia de apelación al que podían recurrir
de las aguas o desde submarinos, como los tribunales de presas nacionales. De
una guerra de los ejércitos. Tras estos este modo los beligerantes perdieron la
dos bloqueos, los sistemas económi- capacidad de dirimir, en última instancia,
cos de ambos grupos de países enfren- las cuestiones en litigio, habida cuenta
tados libraban una batalla a muerte por que su posición de jueces y parte no
la supervivencia, y en varias fases de la podía satisfacer a nadie. Sin embargo,
5. J.A. Salter, Allied Shipping Control An Experiment in International Administration, Clarendon Press, Oxford, 1921, p. 1.

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mientras siguieran existiendo divergen- directamente afectado, pero, de hecho,


cias sobre las normas de la guerra eco- nunca lo hizo. De modo que la Declara-
nómica, el tribunal internacional carecía ción de Londres fue un instrumento legal
de fundamento legal. Para remediar esta de dudoso valor, al margen de la dificul-
carencia, las potencias interesadas (Gran tad que entraña lograr el cumplimiento
Bretaña, Francia, Alemania, Estados de los acuerdos en momentos de con-
Unidos, Austria-Hungría, España, Países flicto.
Bajos) se reunieron en una conferencia La primera fase del bloqueo, que se
en Londres en 1908, tras lo cual, el año puede designar como bloqueo restrin-
siguiente, firmaron la Declaración de gido, duró desde agosto de 1914 hasta
Londres. marzo de 1915. Las condiciones militares
Esta declaración ratificó en lo funda- para el bloqueo aliado se crearon muy
mental las normas sobre la guerra eco- poco después de iniciarse las hostilida-
nómica establecidas en la Declaración des. Cruceros y buques auxiliares ale-
de París e intentó clarificar las cues- manes en aguas internacionales fueron
tiones litigiosas mediante definiciones interceptados y destruidos por fuerzas
más ajustadas. Se confirmó el derecho aliadas superiores. Se llegó a una situa-
a bloqueo, dependiendo todo en delante ción de estancamiento de ambas flotas
de la efectividad de esta maniobra, esto de guerra por mutua intimidación: las
es, de la capacidad de los organizadores flotas permanecían en los puertos defen-
del bloqueo para mantener una línea de diendo así eficazmente las respectivas
control frente a los puertos y las costas aguas territoriales, pero ninguna de ellas
enemigas. No se permitía el bloqueo quería arriesgarse a librar una batalla
de los puertos y las costas de los países decisiva contra la base enemiga.
neutrales, distinguiéndose 3 grupos de El bloqueo en alta mar, mediante el
mercancías para regular las presas en cual las fuerzas navales aliadas controla-
alta mar: ban los accesos al Mar del Norte y al Mar
Mediterráneo, no fue un bloqueo en el
• Se consideraba “contrabando abso- sentido de la Declaración de Londres, y
luto” a las mercancías bélicas, tales oficialmente se evitó escrupulosamente
como armas, municiones y equipos aludir al término bloqueo. Al respecto,
militares. los aliados marcaron el acento sobre dos
• Se consideraba “contrabando rela- puntos: en primer lugar, endurecimiento
tivo” a las mercancías no bélicas que de la legislación de presas junto a la
podían también ser utilizadas con extensión de la lista de contrabando y,
propósitos militares, especialmente en segundo lugar, controles más riguro-
productos alimentarios, forrajes, com- sos del comercio de los países neutrales,
bustibles, lubricantes y vestimenta. tanto en alta mar como sobretodo, en
• Finalmente había una “lista libre” los propios países neutrales.
de mercancías que en ningún caso En febrero de 1915, el sistema de
podían ser consideradas como con- bloqueo restringido entró en su fase
trabando. A esta lista pertenecían final, al comprometerse todos los
sobretodo materias primas para la países neutrales a dejar de hacer de
industria y la agricultura, tales como intermediarios comerciales de mercan-
minerales, algodón y fertilizantes. cías de contrabando y en marzo de 1915
comenzó una nueva fase de la guerra
Tras la firma de la Declaración de económica, con el inicio de una política
Londres, se esperaba que Gran Bretaña de bloqueo ilimitado. Los aliados, en
la ratificara, puesto que era el país más esa fecha, anunciaron su propósito de

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cerrar el paso a todo tipo de movimiento garon a manos


marítimo que procediera o se dirigiera a de las potencias
puertos de las potencias centrales efec- centrales o a lo
tuadas a través de puertos neutrales. sumo llegaron
La intensificación de la política de blo- en cantidades
queo oficialmente fue una medida de mínimas, como
represalia contra el desencadenamiento por ejemplo,
por parte del gobierno alemán de la salitre, algo-
guerra submarina a ultranza, aunque de dón y diver-
hecho cabe suponer que ello sólo fue sos metales no
un pretexto dictado por la conveniencia, ferrosos. Almirante Alfred von Tirpitz.
puesto que el propósito de intensificar
la guerra económica ya existía previa- - La Guerra Comercial Submarina.
mente en los aliados. Antes de 1914, la guerra comercial
El sistema de bloqueo llegó a su ocupaba, en los planes alemanes para
culminación con el control postal, la la guerra naval, un lugar subordinado.
regulación de los suministros británi- En 1907 el Almirante Tirpitz se refirió en
cos de carbón para buques neutrales, un memorándum a la guerra comercial
y también con las “listas negras” y los como una posible medida de represalia
pasavantes (navicerts), medidas todas contra un bloqueo inglés en alta mar,
ellas cuyos efectos es difícil estable- pero en torno a esa contingencia no se
cer con detalle, pero que por lo menos elaboró ningún plan. Durante el invierno
merecen ser mencionadas. Casi al de 1913-1914, la guerra comercial con
mismo tiempo que se establecía el blo- cruceros y buques de auxilio fue el
queo ilimitado en el Mar del Norte, los objeto de un ejercicio del Estado Mayor
aliados cerraron el cerco del bloqueo de la Armada. El estudio, que llegaba a
por el sur. Unidades navales británicas la conclusión que la guerra comercial
controlaron los accesos al Mediterrá- podía causar graves pérdidas a Gran
neo por el Canal de Suez y en Gibraltar, Bretaña, adolecía sin embargo de una
además que fuerzas navales francesas, defectuosa utilización del material esta-
y luego italianas, bloquearon los puer- dístico, y lo que es peor, no se hacía en él
tos austriacos, estableciendo en sentido la menor alusión a la cuestión de las uni-
estricto un bloqueo acorde a la Declara- dades de reserva. A partir de comienzos
ción de Londres. de 1914, oficiales que prestaban servicio
A finales de 1916, los aliados valo- en unidades de submarinos, estimaban
raron, en términos generales, con que la nueva arma submarina era el ins-
mucho escepticismo los resultados de trumento más apropiado para intervenir
la guerra comercial con relación a las en la guerra comercial, aunque el plan
expectativas despertadas cuando se de guerra respectivo elaborado para el
inició el bloqueo ilimitado, debido a efecto y sometido a juicio de Tirpitz en
que no parecía que la ofensiva econó- junio de 1914, no fue tomado en consi-
mica hubiera dañado de forma aprecia- deración.
ble la eficacia militar de las potencias Tras el inicio de las hostilidades
centrales. Aun así, el bloqueo fue efec- pronto se llegó al convencimiento que,
tivo en la medida que marginó a las habida cuenta de la superioridad naval
potencias centrales de la división inter- de los aliados y la carencia de una apro-
nacional del trabajo. Hubo toda una piada base logística, las potencias cen-
serie de materias primas consideradas trales no tenían la capacidad de llevar a
de importancia estratégica que no lle- cabo con eficacia una guerra comercial
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con unidades navales de superficie. Sin marina a ultranza pudiera suscitar en los
embargo, la idea de una guerra comer- países neutrales, particularmente en los
cial submarina empezó a tomar cuerpo Estados Unidos, y estimó que las desven-
cuando en septiembre de 1914 dos sub- tajas del momento no compensaban las
marinos alemanes atacaron por sorpresa eventuales ventajas.
y hundieron algunos buques de guerra La primera campaña de los sub-
ingleses. marinos tuvo, imprevisiblemente, una
Las autoridades navales, a partir de enorme repercusión internacional, res-
noviembre de 1914 se mostraron parti- pondiendo los aliados con una intensifi-
darias de la guerra submarina a ultranza cación del bloqueo. El conflicto alcanzó
y del “hundimiento sin previo aviso”, su punto álgido con el hundimiento sin
estableciendo una amplia zona prohi- previo aviso del buque de línea “Lusi-
bida frente a las costas británicas y fran- tania”, el 7 de mayo de 1915, en el que
cesas, dentro de cuyos límites cualquier murieron más de mil pasajeros, entre
buque, independientemente de su nacio- ellos muchos ciudadanos americanos.
nalidad, podía ser atacado y hundido sin Tras la oleada de indignación que se
previo aviso. Este procedimiento entraba levantó de un extremo a otro en Esta-
en franca contradicción con el derecho dos Unidos, el gobierno alemán, para
internacional vigente. evitar la abierta ruptura con este país,
instó al Alto Mando de la Armada a que
moderara sus impulsos en la guerra
submarina. Después del hundimiento
del “Arabic”, en el que también perdie-
ron la vida ciudadanos americanos, se
prohibieron expresamente los ataques
sin aviso previo a los buques de pasa-
jeros. En septiembre de 1915, la guerra
submarina quedó reducida a una guerra
comercial ajustada a la “ley de presas”
El U-9, submarino alemán, hundió en septiembre de 1914 tres
y se suspendieron definitivamente las
cruceros británicos. operaciones en las costas occidentales
británicas.
La controversia que tuvo lugar en Ale-
La intensificación de la actividad
mania fue principalmente un debate entre
en la guerra submarina limitada bastó
dirigentes políticos y jefes de la Armada
para que la cifra mensual de hundi-
que en ningún momento se refirió a sutiles
mientos sobrepasara la cifra de 300.000
interpretaciones del derecho internacional.
toneladas, cantidad que no había sido
Tanto las instancias civiles como las milita-
alcanzada hasta la fecha. Fue entonces
res siempre estimaron que la guerra sub-
cuando el peligro de los submarinos des-
marina a ultranza era una legítima medida
pertó en Gran Bretaña, por primera vez,
de represalia contra una previa vulneración
una auténtica preocupación. Estos éxitos
aliada del derecho marítimo, sumándose
tácticos, junto a la situación política rela-
a esa interpretación más tarde la Comi-
tivamente favorable de las potencias
sión Investigadora de la Asamblea Nacio-
centrales tras la derrota de Rumania,
nal de Weimar6. El gobierno, sin embargo,
sirvieron de pretexto a las fuerzas arma-
abrigaba el temor a las reacciones contra
das alemanas para exigir de nuevo en
las potencias centrales que la guerra sub-
diciembre de 1916 la reanudación de los

6. Spindler, Der Handelskrieg, vol. 1, pp. 42 ss.

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hundimientos sin aviso previo, comen- Guerra Mundial se puso de manifiesto


zando una vez más la guerra a ultranza a que la economía en tiempos de guerra
partir del 1º de febrero de 1917. era ante todo un problema de recursos
Se hizo frente a la amenaza de los reales, de fuerza de trabajo, de materias
submarinos con medidas de distinto primas y de capacidad de producción.
orden desde la adopción del sistema de El armamento con fines bélicos aca-
convoyes para reducir las pérdidas y la rreó, en un doble sentido, el desman-
intensificación de la construcción naval telamiento de la economía mundial. La
para cubrir las mermas. A ellas cabe industria de armamentos, según Kenneth
añadir medidas de represalias econó- Boulding, es un componente de un sis-
micas de mucho mayor alcance: control tema internacional de intimación y lucha,
central de la navegación mercantil dis- a diferencia de todas las demás industrias
ponible, tanto de los aliados como de los que establecen relaciones de intercambio
países neutrales, control de las impor- internacional8. De modo que cada ele-
taciones y completa reestructuración de mento que entra en juego en la lucha por
la producción y del consumo interno. el poder significa un paso atrás en el sis-
Estas medidas se vieron reforzadas con tema de mutua dependencia. La guerra
la incorporación de un nuevo aliado, los europea erosionó, en una medida que
Estados Unidos, cuando en abril de 1917 carecía de precedentes, los recursos de las
entraron en guerra después de haber potencias industriales y socavó, al propio
roto relaciones diplomáticas con Alema- tiempo, la economía mundial, que en más
nia dos meses antes. de sus dos terceras partes se identificaba
en esta época con la economía europea.
- La Política de Armamentos.
El objeto de la política económica en
tiempos de guerra la formuló con una
gran fuerza expresiva Bertrand Russell
ante John Maynard Keynes, cuando éste
en el curso de la Primera Guerra Mundial
se hizo cargo de un puesto en el Minis-
terio del Tesoro: “maximun slaughter at
minimun expense”7. Técnicamente esta
política consiste en la optimización de la
distribución de los recursos disponibles
de un país entre las fuerzas armadas, la Puesto de ametralladora británico durante la Batalla del
Somme, julio de 1916.
industria de armamentos, los produc-
tores de bienes de capital y los abaste- En el caso germano, es evidente
cedores de la población, con el objeto que el gobierno planeaba y preparaba
final de infligir el máximo daño posible la guerra desde mucho tiempo atrás,
al enemigo. En las guerras europeas pero, tras el inicio de las hostilidades, al
del siglo XIX, raramente se movilizaron margen de algunas disposiciones mone-
a fondo las economías de las naciones tarias, la preparación económico-militar
beligerantes, de forma que se adquirió el resultó ser altamente insuficiente. Los
hábito de identificar política económica problemas de estrategia económica en
en tiempos de guerra con política finan- una guerra de carácter “industrial” no se
ciera. Sólo en el transcurso de la Primera anticiparon en lo más mínimo, aunque el

7. W. E. Hancock, For Studies of War and Peace in this Century, Cambridge University Press, 1961, p. 18.
8. K.Boulding, The Role of the War Industry in International Conflict, en Journal of Social Issues, Nº 23

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aspecto conservador de la preparación de producción de armas, municiones y


bélica se explica por una serie de razo- otros equipamientos bélicos, más bien
nes, siendo la más importante la idea se tendió a creer que la capacidad de pro-
que la guerra debía durar muy poco. ducción existente en tiempos de paz sería
Según Schlieffen, Jefe del Estado Mayor, suficiente.
era absolutamente inconcebible una En julio de 1915 se crea el Ministerio
guerra larga entre países industriales, un de Armamentos en Gran Bretaña, bajo
punto de vista que siguió manteniendo la dirección de Lloyd George, anterior
incluso tras la guerra ruso-japonesa que, Ministro de Finanzas, y se inicia una estre-
en muchos aspectos, anticipó la guerra cha colaboración entre el gobierno y los
de desgaste en las trincheras del frente representantes de la industria, a tal punto
occidental. de ser denominado su
La concepción de ministerio una verdadera
Schlieffen de la “solución “organización de hom-
rápida” influyó decisiva- bres de negocios”, en la
mente en las ideas tanto medida que los puestos
del Estado Mayor como de máxima responsabi-
de los servicios civiles lidad eran ocupados por
sobre la probable dura- “capitanes de la indus-
ción de la guerra. Moltke tria” convertidos en servi-
que fue su sucesor sus- dores del Estado mientras
tentó otras ideas. Parece durara la guerra9. A pesar
que globalmente estimó de que los objetivos fija-
con menos optimismo dos en los programas de
que su predecesor la armamentos nunca llega-
perspectiva de una victo- ron a alcanzarse, el Minis-
ria rápida y, en todo caso, terio del ramo aumentó
no excluyó la posibilidad sustancialmente las cifras
de una guerra “larga” del plan, incluso duplicán-
que pudiera durar dos dolas en algunos casos.
años como máximo. Par-
tiendo de estas premisas no se podía ela- - Descentralización de la Economía
borar un plan económico de guerra que Internacional.
contemplara la movilización de amplios Una de las consecuencias más rele-
sectores de la economía nacional, des- vantes de la Primera Guerra Mundial
tacando que los expertos militares sub- fue la descentralización de la economía
estimaron enormemente las previsiones internacional. La importancia económica
de consumo de material. La planifica- de Europa entró en una fase de declive.
ción económica contemplaba, en caso Durante una serie de años el nivel de
de guerra, la sustitución del material esta actividad estuvo por debajo del
destruido, pero no preveía en absoluto período de preguerra y cuando se recu-
el constante incremento del consumo de peró el proceso de crecimiento, Europa
material y la correspondiente necesidad había quedado relativamente rezagada
de acrecentar la producción de armamen- en relación a varios países no europeos
tos. En consecuencia tampoco se contem- que mientras tanto habían hecho nota-
pló la creación, al margen de la industria bles progresos. La reconstrucción tras
de armamentos existente, de empresas el armisticio se inició arrastrando un

9. Lloyd George, War Memories, vol. 1, p. 245.

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duro lastre de muertes y devastacio- dos Unidos, materias primas, alimentos


nes y no faltaron esfuerzos tendientes a y productos industriales a Europa, lle-
mantener vigentes después de esto los gando a suministrar temporalmente de
controles introducidos en el curso de la un cuarto a un tercio del amuniciona-
guerra, para acelerar con ello la recons- miento del ejército británico.
trucción de la economía europea y su Por otro lado, Japón al iniciarse la
reintegración en la economía interna- contienda acababa de recorrer la primera
cional propiciando, al mismo tiempo, fase de su industrialización y su economía
una modificación estructural del sistema reflejaba un extraordinario incremento de
capitalista a largo plazo. las exportaciones que, a través del efecto
El empobrecimiento de Europa multiplicador y acelerador, se transmi-
durante la guerra contrastaba visible- tió a la dinámica económica interna. La
mente con la prosperidad de algunos industria japonesa de exportación se
países de ultramar, los que se beneficia- aprovechó fundamentalmente de la reti-
ron de un equivalente de barrera protec- rada de productos europeos de los mer-
cionista contra la competencia europea, cados asiáticos y también de la coyuntura
puesto que los principales estados indus- de guerra de los Estados Unidos.
triales, plenamente concentrados en la La economía china, aunque partía
producción bélica, retiraron mercancías de un nivel de desarrollo mucho más
del mercado mundial. La guerra, además, modesto que el de Japón, también expe-
abrió grandes perspectivas exportadoras rimentó un notable incremento, tanto
a algunos países, pues los aliados euro- en el terreno de las exportaciones como
peos estaban dispuestos a adquirir, casi en el de la industrialización. Además de
a cualquier precio, materias primas, ali- seda y té, que antes de la guerra cons-
mentos y mercancías industriales. Esta tituían alrededor de una tercera parte
evolución favoreció especialmente a de las exportaciones, la demanda exte-
Estados Unidos y Canadá y a ello con- rior de productos chinos incluía tam-
tribuyó su estructura económica y su bién lana, pieles y cuero, aceite vegetal y
relativa proximidad geográfica a Europa diversos minerales.
occidental. Con anterioridad a 1914, los
Estados Unidos ya se habían integrado al
grupo de naciones más industrializadas,
y, en cuanto a su producción de carbón y
acero que entonces se solía tomar como
índice para medir el potencial industrial
de un país, ocupaban el primer lugar.
Desde el punto de vista de la eco-
nomía mundial, el auge de la coyuntura
de guerra reforzó enormemente la posi-
ción internacional de Estados Unidos.
En las industrias, las mujeres participaron activamente en la
Su posición de absoluto privilegio como gran guerra.
suministrador de materias primas, ali-
mentos y productos manufacturados, - Lecciones de la Gran Guerra.
propició un sustancial incremento del Inmediatamente después de finali-
saldo positivo de su balanza comercial, zada la contienda se quiso averiguar,
pasando a ser un país acreedor en vez y se intentó expresar en cifras, cuánto
de deudor como lo era antes. De forma le había costado al mundo la Primera
parecida, Canadá suministró, aunque Guerra Mundial. El profesor Bogart que,
no en la misma proporción que Esta- por encargo de la Fundación Carnegie,

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EL ASPECTO ECONÓMICO DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL

realizó la más exhaustiva investigación producción industrial y de 1,25 años en


de este tipo, distinguió seis clases de la producción de materias primas. Dicho
costes: gastos de guerra gubernamen- de otro modo, extrapolando la cuota de
tales (costes directos); pérdidas huma- crecimiento de la preguerra, el nivel de la
nas; destrucción de bienes materiales en producción mundial de 1929 se hubiera
tierra y mar; mermas en la producción; alcanzado, en el caso de los alimentos,
subsidios de guerra no incluidos en el en 1923, en el de los bienes industriales
presupuesto del Estado y costes y/o pér- en 1924 y en el de las materias primas
didas de los países neutrales como con- en 1927. Esta comparación ofrece una
secuencia de la guerra10. idea muy clara del efecto desacelerador
Bogart calculó los gastos de guerra provocado por la Gran Guerra, pero el
de los estados implicados estable- procedimiento adolece de algunas insu-
ciendo la diferencia entre el gasto ficiencias al atribuir los cambios apareci-
total de guerra y una cifra extrapolada dos en el desarrollo económico después
del último presupuesto de preguerra, de 1913 exclusivamente a la guerra, omi-
y de este modo llegó a una suma total tiendo factores tales como crecimiento
de 186.000.000.000 dólares11. También demográfico, progreso técnico o modi-
estimó en términos monetarios el valor ficación del gusto de los consumidores.
de las pérdidas humanas calculando la Por otro lado y tal como ya se vis-
previsible capacidad productiva actual lumbraba antes de 1914, el gran rival de
de un obrero medio, habida cuenta del Gran Bretaña en la lucha por el predomi-
estado de las fuerzas productivas en los nio en el comercio internacional no era
respectivos países, y las pérdidas de pro- Alemania, sino los Estados Unidos. Des-
ducción las calculó por separado en fun- pués de la guerra y, en gran parte, como
ción de los costos de oportunidad. una de sus más directas consecuencias,
Las estimaciones efectuadas por el centro de la economía mundial se
Bogart sobre los gastos de guerra guber- desplazó de Londres a Nueva York, pro-
namentales fueron, como es lógico, la duciéndose una transformación radical
mejor aproximación posible al tener que en su naturaleza ya que, si bien antes de
trabajar sobre bases materiales más bien 1914 la economía mundial se sustentaba
precarias al término de la guerra. en la política británica de libre comer-
Mucho más razonable resultó el cio y en la orientación internacional del
propósito de W. A. Lewis de valorar la mercado monetario y de capitales de
interrupción del desarrollo económico Londres, al término de la guerra asomó
provocado por la guerra mundial12. La el proteccionismo propio de los Estados
cuestión que plantea es la siguiente: Unidos.
¿Con cuántos años de anticipación se La descentralización de la economía
hubiera alcanzado el nivel de produc- internacional en la práctica significaba
ción de 1929 si, a partir de 1913, la eco- que el centro de gravedad de la eco-
nomía internacional se hubiera seguido nomía mundial se alejaba de Europa,
desarrollando al mismo ritmo medio pero ello no implicaba una distribución
de crecimiento del periodo 1890-1913? más homogénea de esta actividad en el
Según los cálculos de Lewis la anticipa- mundo. En Europa y América del Norte
ción hubiera sido de 5,2 años en la pro- se concentraba después de la guerra,
ducción de alimentos; de 4,5 años en la igual que antes de la contienda, alrede-

10. E. L. Bogart, Direct and Indirect Costs of The Great World War, 2ª edición revisada, Oxford University Press, Nueva York. 1920.
11. Bogart convirtió las respectivas monedas nacionales en dólares, según la paridad de preguerra.
12. W. A. Lewis, World Production, Price and Trade, 1870-1960, en The Manchester School of Economic and Social Studies, Nº 20,
1952.

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JORGE VIDAL STUARDO

dor de dos terceras partes de la produc- didas virtudes del patrón oro interna-
ción mundial, y aunque su participación cional, lo que dio cierta estabilidad al
en el comercio mundial se redujo de tres sistema prebélico; una estabilidad que
cuartas partes a dos terceras partes, su se contempló con cierta nostalgia en los
posición siguió siendo dominante. años de desequilibrio que siguieron a la
Primera Guerra Mundial.
- Conclusiones. Puede decirse con certeza que la
El revisar desde un punto de vista guerra afectó adversamente a la situación
económico las causas, desarrollo y con- económica de Europa, ya que ésta salió
secuencias de la Primera Guerra Mun- de la guerra en un estado seriamente
dial, nos permite dimensionar el enorme debilitado y con un saldo de problemas
desgaste que sufrieron las naciones que iban a atormentarla a ella y a la eco-
participantes, como asimismo advertir nomía internacional durante buena parte
determinados aspectos que conviene del período entreguerras. Dada la escala
destacar al cierre de este trabajo. de la guerra europea no es sorprendente
Hacia fines del siglo XIX, el conti- que las consecuencias fueran de gran
nente europeo había experimentado un alcance. La movilización de recursos
desarrollo económico sustancial y pocos superó todo lo conocido hasta entonces.
países habían dejado de verse afectados En conjunto, más de sesenta millones de
de alguna manera por las fuerzas del hombres fueron enrolados en los servi-
crecimiento económico moderno, pero cios armados durante aproximadamente
la transmisión de estas fuerzas desde el los cuatro años de hostilidades y en todos
punto de origen encontró en los territo- los países beligerantes hubo un extenso
rios ultramarinos un área de recepción control de la actividad económica, espe-
de mayor significación para los flujos del cialmente en la última mitad del período.
capitalismo, llámense éstos: capital, tra- La guerra originó las pérdidas de
bajo y tecnología. mano de obra, destrucción física, desor-
Hasta cierto punto la posición de ganización financiera, contracción del
Europa ya estaba siendo desafiada por producto y condiciones sociales y políti-
los desarrollos ultramarinos, especial- cas inestables. Tal vez más grave que las
mente por el rápido crecimiento de la pérdidas y la destrucción por la guerra,
potencia económica de los Estados desde un punto de vista a largo plazo,
Unidos, aunque en muchos aspectos fue el fuerte freno al crecimiento de la
los desarrollos en ambos continentes renta y del producto europeo durante
eran parcialmente complementarios en la guerra, y el hecho de que desde este
el período de preguerra. La fuerza del momento la posición de Europa en la
desarrollo capitalista de antes de la economía mundial comenzó a decli-
guerra descansó en la libertad con que nar. Al fin de la guerra, muchos países
los recursos podían ser transferidos europeos pasaron a ser dependientes
entre las naciones, la facilidad con que de fuentes exteriores de oferta y finan-
las naciones industriales del centro, ciación, mientras que algunos fueron
especialmente la Europa noroccidental, obligados a vender activos nacionales y
podían hacerse con los recursos prima- extranjeros. En un contexto global, Esta-
rios de la periferia y el hecho de que no dos Unidos fue el principal beneficiario
existiera ninguna disparidad seria en de la guerra y a su vez ayudó a finan-
la tasa de progreso económico entre ciar la causa aliada, convirtiéndose más
los principales países industriales. Este tarde en una fuente de financiación de
último punto es importante, porque fue los préstamos europeos. Pero no fue el
esto, más que las comúnmente preten- único, ya que muchos países de la peri-

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EL ASPECTO ECONÓMICO DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL

feria de la economía internacional reci- vidad, fue un desplazamiento en el


bieron un estímulo de la demanda del equilibrio del poder económico desde
tiempo de guerra, de alimentos y mate- Europa hacia las Américas y en menor
rias primas, mientras que la escasez de medida hacia el Pacífico. En los años
bienes manufacturados en Europa ace- de entreguerras, Europa nunca recu-
leró el proceso de desarrollo industrial peró su antigua posición de poder
en los países ultramarinos. económico, siendo buena parte del
Así, el efecto total del freno que beneficio acumulado por Norteamé-
el período bélico supuso para la acti- rica y Japón.

***

BIBLIOGRAFÍA

1. Historia de la Economía Europea 1914-1980, Derek H. Aldcroft, Biblioteca de Economía, Edicio-


nes Folio S.A., Barcelona, España, 1997.
2. La Primera Guerra Mundial 1914-1918, Gerd Hardach, Biblioteca de Economía, Ediciones Folio
S.A., Barcelona, España, 1997.
3. De Versalles a Wall Street, 1919-1929, Derek H. Aldcroft, Biblioteca de Economía, Ediciones Folio
S.A., Barcelona, España, 1997.
4. Inglaterra Victoriana, página web seneca.uab.es/historia/victini.htm
5. Apuntes de clases y personales del autor del Diplomado en Historia Naval y Marítima, Universi-
dad Marítima de Chile, año 2004.

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