El vaticano debe vender su tesoro y donar ese dinero…
Es un tema que escuchamos frecuentemente en los momentos que nos
acompaña una tragedia y nos sentimos vulnerables, también en aquellas situaciones cuando nos reclama nuestro “yo” de qué tan solidario estoy siendo con la humanidad, o simplemente porque ignoro la verdad y me dejo llevar por el vulgo que nos avasalla en la sociedad y sobretodo, específicamente, en las redes sociales. Tendemos a especializarnos, de una manera tan express, en temas como la economía, la política, la salud (sobre todo en estos momentos en la epidemiología), la religión y mostrar nuestras impresionantes argumentaciones queriendo proyectar que somos “sabihondos”, pero reflejando nada más que ignorancia y mentira. ¿Verdaderamente el Vaticano es multimillonario? La revista estadounidense “Fortune”, especializada en temas económicos ha asegurado que, si la santa sede fuera una corporación, ni siquiera se acercaría a las 500 más adineradas de su famosa lista, Fortune 500. No olvidemos que el Vaticano es una ciudad estado ubicada dentro de Roma, Italia, a la cual la visitan alrededor de 15 millones de turistas al año, por ende, tiene ingresos económicos considerables, pero no para tener la fortuna multimillonaria que acabaría con el hambre en la tierra. El Vaticano sostiene innumerables obras de caridad alrededor del mundo, sobre todo en las regiones más marginadas, y se mantiene en silencio, sin escándalo, haciendo el bien. ¿Entonces, donde están o qué son los famosos tesoros del Vaticano? Eso ya lo respondió el Papa Francisco en una entrevista en el 2015, donde dijo: “estos no son tesoros de la iglesia, son tesoros de la humanidad”, y puede resultar difícil de entender, pues ante nuestra limitada cognoscibilidad cultural, desconocemos el valor que tienen en sí estas obras (que nosotros se lo hemos depositado). Son tesoros de la humanidad que resguarda el vaticano, de un valor histórico-cultural, manifestado en su belleza. No me imagino a personas levantando la voz diciendo: “la ciudad de México debería vender la pirámide del sol que se encuentra en Teotihuacán, y ese dinero dárselo a los pobres” ¿suena absurdo? Así suena el ya tan famoso: “Que el Vaticano venda sus tesoros…” Tengamos mucho con las redes sociales, pues son herramientas que poseen información, la cual hacemos objeto de nuestro conocimiento y a través de ellas estamos informados, pero si esa información en fundada en la mentira, somos poseedores de la mentira.