Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
OBJETIVO: Que cada niño pueda entender que solo Dios es El Unico y el Verdadero y que no hay otro que se compare a
El.
TEXTO BIBLICO: “Hijitos, guardaos de los ídolos. Amén” 1 Juan 5:21
Basado en esta historia, ¿Por qué no pudo ver a Dios como un Padre
amoroso?
¿Y tú? ¿Cómo podría ser posible que tu trasfondo familiar o religioso pueda
tener una influencia – sea positiva o negativa – sobre tu concepto de Dios?
1. El Dios Ogro
Muchos, por haber tenido un padre abusivo o por haber aprendido una religión legalista, miramos
a Dios
con desconfianza. No nos atrevemos a tener intimidad con él. Pensamos que él está listo para
castigarnos por cualquier pequeñez. Pero veremos hoy que Dios es amor - ¡más
misericordioso y paciente de lo que podemos imaginar! (1 juan 3:16)
Muchos miramos a Dios como si fuera una mascota para buena suerte o un “teddy bear.” Pero
veremos que Dios es santo y temible, omnisciente, omnipresente, y omnipotente. Es más
grande de lo que podemos imaginar. (Apocalipsis 4:11)
Hay muchos que miran a Dios como si fuera electricidad y nada mas – una fuerza
impersonal para manipular. No lo ven como un Dios Personal, a quien podemos
conocer y respetar, sino una fuerza para controlar. En la brujería, Dios se concibe
de esta manera. Si sabes hacer los encantos apropiados, puedes usar la fuerza para
hacer “obras” espirituales. Muchos tratan al Dios Cristiano de esta manera.
Ofrecemos sacrificios “religiosos” y hacemos actividades religiosas, pensando activar
la buena suerte de nuestro dios. ()
Muchos tratan a Dios como si fuera un amuleto para la buena suerte. Llevan una cruz y un
“santo” con ellos para protegerlos de las malas ondas. O tal vez pueden ganar la buena suerte
con acciones religiosas, contribuciones a la iglesia u oraciones de unción. Si cumplen estos
deberes religiosos, no importa su estilo de vida. Se ha cumplido los requisitos del “dios” para la
buena suerte. Los Israelitas trataron de hacer esto en una batalla contra sus enemigos. A
pesar de Dios decirles lo contrario, salieron a la guerra, llevando con ellos el arca del pacto, que contenía los diez
mandamientos. Pensaban que estas tablas les traerían buena suerte. Pero con Dios no se juega. El les dejó ser
conquistados para enseñarles a no tratarlo como si fuera un ídolo pagano. (Juan 8:32)