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Los días pasan agobiando al joven criminal con delirio de persecución y pesadillas.
Su conciencia vigilante se subleva y no lo deja en paz. La policía lo cita por ciertas
dudas que tiene con su persona con relación al crimen de la vieja usurera y,
cuando le mencionan el crimen Raskolnikov se desmaya. Se agrava la salud del
joven Raskolnikov y sufre de insomnio por la intensa tensión nerviosa que padece.
El joven se comporta como un loco y pierde los papeles con suma facilidad. El solo
se va delatando por su actitud sospechosa. El cree que ya todos sospechan de su
persona. En todas partes ve como alucinado un dedo acusador. Raskolnikov vive
abandonado a su suerte, su amigo del alma Rasumikin, lo reconforta y le cambia
los andrajos por ropa nueva.
En los momentos mas difíciles, Sonia Marmeladora , siempre lo esta visitando por
que lo ama.
En una visita cuando Raskolnikov se sorprende al verla Sonia Marmeladora le dice:
vine a saber como te encuentras y el le responde: Sonia siempre te has portado
muy bien conmigo, no lo merezco y ella le dice que no diga eso por que se siente a
gusto con tu compañía. Y el así mismo se dice, pobre Sonia, es tan buena. Se que
me ama pero yo nada puedo ofrecerle.
En la cafetería se encuentra con Zamertoff, con quien habla sobre el crimen que se
cometio con la usurera. Zamertoff queda intrigado con la conducta de Raskolnikov
y se dice a si mismo: muy extrano su comportamiento, me dio la impresion de
estar asustado y por eso esa actitud, se lo contare al inspector de policia.
Se despidieron y el joven raskolnikov estuvo por la calle vagando horas y horas sin
rumbo fijo, sin dejar de pensar en el crimen que cometio, y cuando regresaba a su
casa se encontró con su amigo Dimitri y ambos fueron a su casa. Alla los esperaba
su madre Pulquerria y su hija Dunia.
Genero: Narrativo.
Especie: Novela Psicológica.
Personajes:
Rodino Raskolnikov (joven estudiante de derecho).
Aliovna Ivanovna (Anciana Usurera).
Pulkeria Raskolnikov (Madre de Rodino).
Dunia Romanovich (Hermana de Rodino).
Porfiri Petrovich (Inspector).
Svidiragoilov (Antiguo jefe de Dunia, a quien pretende).
Sonia (Joven que se prostituye para ayudar a su madrastra).
Catalina (Madrastra de sonia).
Marmeladov (Padre de Sonia).
Tema Principal:
La desmitificación de “La teoría del superhombre”.
Secundario:
Descripción de una conducta criminal y del sentimiento de culpabilidad
íntimamente humano.
INTRODUCCIÓN
La materia prima del escritor es su propia vida, sin bien la frase nos puede sonar hecha, resulta
cierta en casos como el de Dostoievsky, Moscú 1821-1881. Es la época de los zares, del imperio
ruso que gracias a Pedro el Grande, había salido de su aislamiento para incorporarse a la Europa
reformista. Los enciclopedistas franceses, eran la lectura obligada de las juventudes rusas con
hambre de cambiar las estructuras feudalistas, que mantenían a la inmensa mayoría de la
población sumida en la miseria y la desesperación. Sin embargo la reforma francesa devino en una
revolución que costó la vida al Rey Sol y a su séquito. Catalina la Grande, temiendo una suerte
similar en su vasto imperio, implantó un régimen autocrático. Cuando Dostoievsky habría cumplido
cuatro años, Rusia era gobernada por el zar Nicolás I quien había descubierto una conspiración en
su contra. La situación interna del país se había vuelto insostenible. El zar respondió con censura y
represión. A partir de ahí, y con la consecuente sucesión de zares que negaban el avance al
pueblo ruso, el caldo de cultivo que antecede a los cambios sociales se expandía por todos los
territorios del país. Crimen y Castigo, fue madurada por su autor, durante su cautiverio en Siberia.
Dostoievsky fue acusado de conspirador y cumplió condena en las remotas tierras de castigo del
zar. La primera parte se publicó en el Mensajero Ruso en 1866. El extremo realismo conseguido
por Dostoievsky en su descripción social, pero sobre todo interna, sino es que íntima de los
personajes, sólo lo pudo reproducir luego de experimentar en carne propia la más radical pobreza.
La novela nos cuenta un crimen. Un crimen cometido por un joven y su subsecuente lucha interna
con sus emociones y delirios. La madre y hermana del asesino, tan pobres o más que él, se
debaten entre la duda y la desesperación.
Un dudoso pretendiente de la hija, y su antiguo patrón, conformaran una acción física dentro de la
novela sin perder un ápice de su contenido psicológico. Los hechos se muestran sin ningún tipo de
enjuiciamiento. El autor deja ser a los personajes pues sabe que la credibilidad se logra con la
honestidad. El flujo de conciencia de Raskolnikov a lo largo de la novela, es una prueba de ello.
RESUMEN
Primera parte, capítulo I
Raskolnikov acude con una vieja usurera, de nombre Aliona Ivanovna, a empeñar las únicas
prendas de valor que posee. La anciana, envilecida por la codicia presta una pequeña cantidad de
rublos -pues se cobra por adelantado los intereses- y despide al joven quien tiene que aceptar el
miserable trato. En el camino, Raskolnikov piensa en el lugar donde guardará el dinero. Una
taberna se cruza por su camino y decide entrar y beber una cerveza.
Capítulo II
Capítulo IV
Raskolnikov se había resuelto a no permitir esa boda pues, además de no haberlo consultado, algo
misterioso y digno de desconfiarse, había leído “entre líneas” en las frases de su madre. Durante el
camino, Raskolnikov defiende a una muchacha ebria, y le da dinero a un policía para que la lleve a
su casa. El camino lo dirige hacía la casa de su amigo Razumikhin a quien no obstante, ha fingido
no verlo para no entablar conversación con él.
Capítulo V
Raskolnikov hace cuentas del dinero mandado por su madre y se percata que una considerable
suma, la ha regalado. Desvía su camino y entra a un bosque donde duerme en la hierba. Sueña
con su padre y una yegua que es golpeada salvajemente por varios hombres. El niño Raskolnikov
se precipita a ayudar a la yegua pero es detenido por su padre. Raskolnikov despierta bañado en
sudor. Raskolnikov duda de sus planes; la vieja usurera duerme tranquila, tal vez no por mucho
tiempo. Raskolnikov sale a la calle y se topa con Isabel, la joven hermana de la vieja. La casualidad
se presta y escucha que la vieja Aliona se encontrará completamente sola a determinadas horas.
Capítulo VI
Raskolnikov no cree en casualidades sino en “signos del destino”, se pregunta el trasfondo que
implica el haber salido de su casa y escuchar precisamente las horas ideales para realizar su plan.
En otra taberna escucha la mala fama de doña Aliona y sobre todo la despótica forma con la que
trata a su propia hermana Isabel. En suma, Aliona Ivanovna era una arpía cuya muerte era
deseada por más de alguno por su avaricia y crueldad. Raskolnikov regresa a su casa y duerme en
su sillón desecho. A la mañana siguiente es despertado por la criada quien es corrida por el
inquilino. Consigue un hacha de una obra cercana y dirige sus pasos a casa de Aliona.
Capítulo VII
Aliona Ivanovna es asesinada por Raskolnikov. De inmediato coge algunos prendedores y una
bolsa. Busca la llave que resguarda el dinero. Escucha ruidos. Entra Isabel quien perpleja
contempla la escena. Raskolnikov, sorprendido por lo inesperado, reacciona y la mata. Limpia el
hacha. El sonido de unos hombres que tocan a la puerta lo alerta. Al no obtener respuesta se
marchan sospechando algo. Raskolnikov toma lo robado, baja unas escaleras y entra aun cuarto
vacío que está siendo pintado. Escucha a los hombres y al portero subir y aprovecha para huir.
Nadie lo vio salir y nadie lo vio dejar el hacha donde fue encontrada. Raskolnikov llega a su cuarto
y se deja caer al sillón.
Segunda parte, capítulo I
Raskolnikov despierta abruptamente. Reacomoda una y otra y otra vez las prendas robadas al
tiempo que sospecha, que la locura se ha instalado en su ser. Se contradice en sus pensamientos
hasta que alguien llama a la puerta. Anastasia le trae un citatorio. El citatorio, es ordinario pero
Raskolnikov experimenta una extrema paranoia que lo hace dudar sobre su asistencia. Al retirase
la sirvienta, Raskolnikov advierte que se trata de una demanda emprendida por su casera por
pagos no efectuados. Finalmente asiste, y haciendo gala de un extremo cinismo, se enfrenta al
comisario de policía. Al resolver el asunto de la casera, escucha las primeras investigaciones sobre
los asesinatos de la anciana usurera y su joven hermana. Siente deseos de confesarlo todo, pero
se calla. De regreso a su casa, el presentimiento de que se ha traicionado con sus palabras lo
invade.
Capítulo II
Raskolnikov llega a su minúsculo cuarto convencido de que las investigaciones han iniciado y
seguramente ya llegaron hasta su domicilio. Todo lo encuentra tal y como lo dejó. Incluido las
prendas robadas. ¿Dónde guardarlas? La inseguridad le ordena cambiar constantemente de
solución. Finalmente decide esconder lo robado para usarlo tiempo después. Hecho lo anterior,
Raskolnikov deambula por las calles. Sus pasos lo llevan de nuevo a la casa de su amigo
Razumikhin. Entra y a los pocos minutos se despide. Razumikhin lo invita a quedarse más tiempo y
calmar un poco su ansiedad. Raskolnikov se va sin hacer caso de su amigo y pensando que nada
ni nadie existe y cosas por el estilo. Una vez en la calle, una señora le ofrece una limosna;
entonces, se percata de su miserable aspecto. Se pone enfrente de unos caballos que tiraban un
carruaje, vaga sin rumbo todo el día y regresa a su casa a dormir profundamente. Las pesadillas lo
despiertan y vuelve a despertar de un mal sueño.
Capítulo III
Los delirios acompañaron a Raskolnikov durante su sueño. Al despertar encuentra a Anastasia,
Razumikhin, y un empleado de gobierno que le trae dinero en correspondencia a una solicitud
hecha por su madre. Raskolnikov duda en firmar y es persuadido por Razumikhin. La criada y el
amigo le reclaman el terrible descuido en el cual se encontraba. Razumikhin le pide que no se
preocupe tanto y le avisa que intercederá por él con la casera, luego, aprovechando otro sueño de
Raskolnikov, Razumikhin, le compra ropa y le da el dinero restante. La visita del medico los
interrumpe.
Capítulo VI
Capítulo V
Pedro Petrovich Lujin, majestuoso y un tanto soberbio pregunta por Raskolnikov. Raskolnikov se
presenta y trata con ironía y desdén al prometido de su hermana. Lujin trata de mantener un buen
ambiente que no existe y se extraña del frío recibimiento del muchacho. Sin desanimarse, Lujin les
platica de sus planes y que se aloja en un departamento compartido con su amigo Andrés
Semionovich sin embargo sus intentos fueron en vano. Zossimov y Razumikhin continuaron
platicando de los asesinatos y Raskolnikov se mantuvo lejano y agresivo. Finalmente, Lujin es
corrido por Raskolnikov.
Capítulo VI
Cuando estuvo de nuevo solo, Raskolnikov se marcha de nuevo a la calle con el dinero que había
recibido. Se interna por las calles y por la noche se mete a una taberna. Ahí se encuentra con un
amigo de Razumikhin y ambos hablan sobre los asesinatos. De manera irónica, Raskolnikov le
“confiesa” el lugar donde escondió el dinero. Al salir se encuentra con Razumikhin, sin embargo,
Raskolnikov, presa de sus contradicciones, lo corre de su lado. Todos coinciden en los continuos
delirios de Raskolnikov. Éste por su parte, visitó el lugar del crimen. Ahí encontró a unos
trabajadores. Raskolnikov pregunta por las manchas de sangre y muestra una actitud sospechosa.
Los trabajadores lo echan y Raskolnikov se encuentra vagando de nuevo hasta que un grito le
llama la atención.
Capítulo VII
Tercera parte, capítulo I
Capítulo II
A la mañana siguiente, Razumikhin amaneció crudo y arrepentido de varias cosas que había dicho
por su avanzado estado de ebriedad. Raskolnikov duerme. Al visitar a Dunia y a su madre y ser
recibido como todo un héroe se reconforta su ego. Razumikhin reconoce que su pobreza es
evidente. La madre le enseña a su salvador, una carta de Pedro Petrovich en la cual se disculpa
por no haberlas ido a recoger y les informa la indignante forma en que Raskolnikov lo echo,
además de presenciar como daba el dinero a una mujer de dudosa reputación, –se refiere a
Catalina, esposa de Marmeladov cuando murió- que con tantos sacrificios le mandaba. La madre
rompía en llantos. Dunia propone visitar a Raskolnikov y cuenta la noticia de la muerte de Marta
Pretovna (La señora que la corrió de su casa pues creía que sostenía idilio con su esposo y que
después redimió públicamente) Cuando llegaron encontraron al médico atendiéndolo.
Capítulo III
Raskolnikov se sentía mucho mejor. El medico le sugiere –aprovechando su lucidez- que piense en
su rehabilitación. Una reconciliación familiar sucede, Raskolnikov le pide perdón a su madre por
haber regalado el dinero que le envió y platica lo sucedido. La noticia de la muerte de Marta
Pretovna resurge y se comenta que su esposo Aracadio Svidigrailov la golpeó la noche que murió.
Raskolnikov se irrita y surge otra discusión familiar. La madre enseña la carta de Lujin a
Raskolnikov y éste sospecha más de aquel personaje radicalizando su postura. Lujin no es un
abogado, es un farsante. Mañana habrá una reunión familiar a la que asistirá Lujin; Raskolnikov y
Razumikhin –invitado por Dunia-.
Capítulo IV
Capítulo V
El juez Porfirio Petrovich los recibe con gusto y cuestiona –siempre con agudeza, siempre certero-
a Raskolnikov. Para Raskolnikov no hay duda: Porfirio Petrovich sospecha de él considerando que
el mismo Petrovich conservaba un artículo de su reciente época de estudiante, donde Raskolnikov
cuestionaba la moral del asesino con respecto a personas indeseadas y la misión que algunos
llevan acuestas. Porfirio es sagaz y platica con doble sentido con Raskolnikov. Se despiden y
Porfirio lo cita para mañana y ver el asunto de las prendas.
Capítulo VI
Raskolnikov se despide de Razumikhin y le jura sentirse bien. En su cuarto duerme un poco bajo el
cuidado de Anastasia. Las pesadillas se vuelven a presentar. Al despertar, un hombre que no
conocía lo miraba con atención.
Cuarta parte, capítulo I
Capítulo II
Capítulo III
La familia platica sobre las ofertas de Arcadio. La madre se alegra del dinero dejado por la señora
Petrovna. Todos temen sin embargo, con la llegada de Arcadio. Durante la platica, Razumikhin
ofrece empezar un negocio de ediciones con ese dinero y parte que pedirá prestado. Los ojos de
Dunia brillan ante la propuesta. Raskolnikov siente contrariados sus emociones y parte de ahí ante
la sorpresa de todos. Razumikhin lo sigue a pesar de que Raskolnikov lo trata con extrema
agresividad. Le pide que no lo siga y entonces, con una penetrante mirada, Razumikhin comprende
que su amigo está implicado de alguna manera en los asesinatos. Razumikhin regresa con la
madre y hermana y las calma diciendo que lo mejor para Raskolnikov en estos momentos, es estar
solo.
Capítulo IV
Capítulo V
Raskolnikov regresa con Porfirio Petrovich para el asunto de sus prendas. Porfirio Petrovich lo
recibe y platica con Raskolnikov sobre su pasado de estudiante. Raskolnikov se convence de que
Porfirio sospecha de él y le extraña su extrema amabilidad. Se exaspera y le exige que lo
interrogue si es preciso. Porfirio contesta siempre con sarcasmo y risas. Su ambiguo discurso
desconcierta y desarma a Raskolnikov sobre todo por qué sabe que visitó el lugar del crimen y
preguntó sobre las manchas de sangre. Porfirio no considera sospechoso –de momento a
Raskolnikov- y lo invita con su habitual ironía a retirarse.
Capítulo VI
Una inesperada visita interrumpe la entrevista. EL pintor sospechoso de haber matado a las
mujeres entra de pronto declarándose culpable. Porfirio se muestra nervioso y hace sacar al
enloquecido obrero. Despide a Raskolnikov que se va convencido, de que fue torturado para
hacerlo confesar.
Quinta parte, capítulo I
Pedro Petrovich compartía la casa con Andrés Semionovich Lebeziatnikov quien tiempo atrás
consideró a Pedro en la más alta estima. Pedro meditaba en el error que consistió en alquilar
aquella pocilga para alojar a novia y suegra. Su intención de encontrar una esposa que lo viera
como su eterno salvador se desvanecía pero no se rindió. Andrés era otro invitado más a la comida
que Catalina Ivanovna ofrecía en honor a su recién fallecido esposo. De igual forma Pedro estaba
invitado. Andrés interrumpe sus pensamientos y ambos platican sobre la comida a la que ninguno
piensa asistir. Los otrora amigos, se habían terminado por enemistarse en secreto. Andrés se
acercaba más a ideas progresistas –pseudo revolucionarias- que irritaban el carácter burgués de
Pedro. Se habla de Sonia, pues es amiga de Andrés, y Pedro se interesa en hablar con ella.
Andrés va por Sonia quien turbada responde las preguntas de Pedro. Petrovich se muestra cortés
y pide disculpas por no acudir al funeral. Promete ayudarlas y le obsequia a la joven diez rublos y
pide guardar su nombre en secreto.
Capítulo II
Catalina Ivanova destinó parte del dinero dado por Raskolnikov en enterrar a su esposo y en ésta
comida de despedida. Su avanzada tuberculosis le hacía vomitar sangre constantemente y los
complejos y turbaciones, tornaron en agudos delirios. Su obsesión por un inventado pasado
aristocrático se hizo más presente que nunca. Catalina hablaba durante los preparativos, de los
ilustres personajes que acudirían, sin embargo, los pordioseros y borrachos fueron los primeros en
llegar. Raskolnikov llegó y se disculpó por no llegar al entierro. Catalina y Sonia lo reciben con
gusto. La locura hacía estragos en la imaginación de Catalina quien pronto comenzó a pelar con la
casera y algunos invitados. Sonia llega y dice que Lujin no llegará. Catalina pelea en medio de
borrachos cuando de repente, Pedro Petrovich Lujin llega de improviso.
Capítulo III
Catalina la recibe como a un viejo conocido –era la segunda vez que se veían- Lujin la mira con
frialdad y acusa a Sonia de haberse robado cien rublos de su casa. La joven se asusta de la
afirmación y niega el hecho. Lujin se mantiene firme. Catalina defiende a su hijastra y dice que su
hija es incapaz de robar. Catalina esculca por ella misma las bolsas de su blusa y saca un papelito
que arroja a la cara de Lujin. Lujin toma el papelito, lo extiende y enseña un billete de cien rublos.
Una sorpresa generalizada invadió el lugar. Catalina defendía con más frenesí a Sonia quien por
su parte continuaba muda de la sorpresa. Raskolnikov se había echó a un lado, y contemplaba en
silencio el avance de los hechos. Catalina se deshacía en llanto y sufrimiento; la pus de su boca le
brotaba al gritar. Lujin la tranquiliza y dice que no procederá en contra de alguien que movido por el
hambre roba. En eso, otro inesperado invitado llega: Andrés Semionovich quien desmiente a Lujin
diciendo que el mismo vió cuando, de forma por completo imperceptible, introducía el billete en el
vestido de la joven. Lujin trata de defenderse pero no pudo con el peso de la verdad. Su plan de
reinvindicarse ante los ojos de Raskolnikov y recuperar a Sonia, se fue por completo. Lujin huye del
lugar. Sonia regresa a su casa aturdida, seguida por Raskolnikov.
Capítulo IV
Raskolnikov encuentra llorando a Sonia. Su sarcasmo se mezcla con su lado más humano. Sonia
no entiende los discursos de Raskolnikov. El muchacho se vierte en la crueldad y le recuerda que
hoy le diría quien había matado a su amiga Isabel. Sonia se pasma de la confesión e invita a
Raskolnikov a que busque la expiación. Andrés Semionovich toca la puerta de repente.
Capítulo V
Catalina Ivanovna se había refugiado finalmente en la locura. Andrés le dice a Sonia que su madre
estaba incontrolable. Sonia sale en su encuentro. Raskolnikov, turbado por su confesión, regresa
sin notarlo a su casa. Pensaba en el por qué hacer sufrir a Sonia cuando recibe la visita de Dunia.
La hermana pide disculpas por su inesperada visita, y cuenta a su hermano que Razumikhin le ha
contado todo. Raskolnikov palidece. Dunia continua y dice que pronto será aclarado todo y será
absuelto de toda sospecha. (desde luego el amigo no le contó todo) Raskolnikov se limita a decir
que Razumikhin es un buen hombre. Dunia se retira angustiada. Raskolnikov sale a la calle y es
alcanzado por Andrés quien llega diciendo que Catalina ha perdido por completo la razón. Caminan
a un puente donde, Catalina obligaba a sus hijos a bailar mientras ella tocaba un balde como
percusión. Catalina decía a la gente que su familia de pasado aristocrático había sido engañada.
Sonia veía estupefacta la escena y pide ayuda para llevarla a su casa. En casa de Sonia muere
Catalina Ivanovna, entre los curiosos que habían llegado se encontraba Arcadio Svidrigailov quien
se presta a ayudar a la joven en desgracia. Raskolnikov se extraña de la gentileza de Aracadio y
éste le contesta con una frase pronunciada por Raskolnikov en esa misma habitación y que lo
implicaba directamente con los asesinatos. Raskolnikov se sorprende. Aracadio le cuenta vivir
precisamente al lado de Sonia y que recién escuchó una conversación muy interesante.
Sexta parte, capítulo I
A partir de ese instante, Raskolnikov tiene miedo por Aracadio que sin embargo, ayudó
efectivamente a Sonia y mandó a los niños a casas de huérfanos. Raskolnikov recibe en su casa a
Razumikhin quien le pide visitar a su madre pues ha enfermado. Además Razumikhin cuenta que
Porfirio Petrovich le dijo que ya tenían al asesino confeso de la usurera y su hermana. Antes de
despedirse, Razumikhin le cuenta que Dunia recibió una carta que la turbó mucho. Raskolnikov
sólo se limitó a decir que era un buen hombre. De nuevo solo, Raskolnikov piensa en Porfirio
Petrovich que le dio suficientes pruebas como para que sospechara de él. Al salir de su casa
resuelto a “resolverlo todo” se topa nada menos que con el propio juez Porfirio Petrovich.
Capítulo II
Raskolnikov lo invita a pasar pues el juez manifestó su deseo de visitarlo. Porfirio le habla de su
pasión por la psicología y de todos los cabos sueltos que unió desde que tomó el caso de las
mujeres asesinadas. Las sospechas que pudo haber guardado se habían disuelto pues tenía a una
persona confesa. El doble discurso de Porfirio confunde a Raskolnikov. Una acusación indirecta se
escucha durante todo su discurso. Al final remata diciendo que esa persona no pudo haber matado
a esas mujeres. Enseguida afirma que “el asesino es usted Rodion Romanovich”. Porfirio aprecia
en realidad a Raskolnikov y le sugiere que se entregue y que por su parte no procederá, por lo
pronto, en su contra. Raskolnikov ni lo niega ni lo afirma. Los hombres discuten sin hablar de
manera clara. Ambos se enfrascan en una serie de cuestionamientos y afirmaciones. Porfirio se
despide amablemente y le pide a Raskolnikov que piense en todas las ventajas que gozaría si él
mismo se entrega. Porfirio parte dejando a Raskolnikov más confundido que nunca.
Capítulo III
Raskolnikov descarta que Arcadio le haya denunciado pues sabe bien que otros planes tiene.
Deambula por la ciudad sumido en sus reflexiones y encuentra a Arcadio en una taberna. Ambos
se evitan al principio. Raskolnikov acude al llamado de Arcadio. Su platica es evasiva al principio
hasta que Raskolnikov le advierte que si intenta algo contra Dunia lo matara. Arcadio no pierde su
ironía y le recuerda a su interlocutor que se casará en breve. Hablan sobre Marta Pretovna, y la
chica que se suicido. Arcadio se deslinda a medio camino entre el cinismo y la burla. Raskolnikov
se sorprende de la inteligencia y pragmatismo de Aracadio.
Capítulo IV
Más adelante, Arcadio platica de Dunia. El libertino de Aracadio le narra sus secretos y habla de
los intentos de Dunia –cuando trabajaba para él- de llevarlo por el camino correcto pues el mismo
Arcadio reconoce que las mujeres en general, son su debilidad. Su próxima boda con una joven de
16 años lo entusiasma. Raskolnikov repara que se encuentra frente al hombre que
desinteresadamente, ayudo a Sonia y a sus hermanastros.
Capítulo V
Arcadio se despide y Raskolnikov sospecha que trama algo contra Dunia y se decide a seguirlo.
Luego abandona su empresa al ser engañado por Aracadio. Arcadio tenía una cita con Dunia y la
lleva a su casa. La joven acudió pues Arcadio le escribió sobre un secreto que ahí confesaría. Al
llegar a casa, Aracadio le confiesa a Dunia que su hermano Raskolnikov es el asesino de la
usurera. Dunia no lo cree. Aracadio le dice que no se preocupe y que puede conseguirle un
pasaporte a Raskolnikov y sacarlo del país. Dunia no lo cree. Arcadio le enseña el lugar donde
escuchó la platica fatal y presa del frenesí y del deseo se abalanza sobre Dunia. La joven saca un
revolver –mismo que es reconocido por Aracadio pues Dunia se lo llevó la noche que murió Marta-
y luego lo acusa de haber matado a su esposa. Arcadio se acerca. Dunia dispara. Aracadio se
acerca más. Dunia tira el arma pues se sabe capaz de matarle. Aracadio le pregunta si lo ama al
no obtener respuesta la deja ir. La pistola del suelo es recogida por Aracadio quien apresurado sale
a la calle.
Capítulo VI
Luego de vagar, Aracadio regresa a su casa y visita a Sonia, le da más dinero para sus
hermanastros y se despide pidiendo que no se preocupe. Después visitó a la familia de su novia y
dijo que por razones oficiales tenia que salir de San Petersburgo. En un hotel de mala muerte,
sueña con una suicida. En la madrugada, frente a un soldado, Aracadio Svidrigailov saca una
pistola y dispara en su sien.
Capítulo VII
Capítulo VIII
Sonia recibe a Raskolnikov. No acepta su despedida y sigue a Raskolnikov quien entra a la policía.
Ahí se entera del suicidio de Aracadio. Raskolnikov sale y vuelve a entrar. Finalmente, Raskolnikov
confiesa haber asesinado a Aliona Ivanovna y a su hermana Isabel
Epílogo I
La madre enfermó desde el inicio del proceso y fantaseaba con frecuencia de que su hijo era muy
poderoso y que por eso se encontraba lejos. Dunia y Razumikhin se casaron y ambos junto con
Sonia, visitaron a Raskolnikov. La muerte de Pulkeria fue sabida por Raskolnikov tiempo después a
pesar de que Sonia –quien lo había seguido hasta Siberia- se escribía con frecuencia con ellos.
II
Raskolnikov se había sumido en la más profunda indiferencia. Todo le importaba poco o nada. Las
frecuentes visitas de Sonia eran lo único que lo reconfortaba. Sin embargo, al tener la joven que
trabajar, comenzó a reducir sus visitas. Raskolnikov resiente su ausencia. Una tarde que tuvo que
trabajar al aire libre, la encontró de frente a él. Sonia le tomó las manos y Raskolnikov lloró por
esos siete años que todavía tendrían que transcurrir. Pero alguien lo estaría esperando. A partir de
la mañana siguiente, Raskolnikov no volvería a ser el mismo.
PERSONAJES
Rodion Raskolnikov. 24 años, estudiante de derecho que tuvo que dejar la escuela debido a la
extrema pobreza que padecía. Raskolnikov es un pensador nato. Inteligente pero oscuro. En el
fondo cree ser un predestinado. Sólo tiene que conseguir dinero para seguir adelante. No hay
manera de tener el suficiente sino matando a la persona indicada, es decir, a la no deseada. El
hambre y la falta de perspectivas acabarán por enfermar a Raskolnikov. Su mejor amigo lo
encuentra: taciturno, sombrío, orgulloso, altanero, suspicaz e hipocondríaco.
Pedro Petrovich Lujin. Pretendiente de Dunia. Burgués obsesionado con encontrar a una mujer
que lo vea como su máximo salvador. Urdirá un plan para convencer a Raskolnikov –principal
opositor- de que es el mejor partido de su hermana.
Sonia. Hija de Marmeladov quien se volvió a casar con Catalina y sus pequeños hijos. La
sorpresiva muerte de su padre la pone en contacto con Raskolnikov. Le teme y por alguna razón le
quiere. Sonia es una prostituta que amará, a pesar de todo, a aquella persona.