Está en la página 1de 2

Actividad 3.

Procesos de liberación (Reflexión)

Al analizar y reflexionar el texto, de acuerdo a la siguiente pregunta ¿Qué papel


jugo la educación en los procesos de liberación con las mujeres raramuris?

Puedo comentar que por medio de la educación se apropiaron de los


conocimientos para reproducir su identidad cultural y asumiendo el papel histórico
para transformar las condiciones de marginación , logrando recuperar el papel
preponderante de la mujer que se basó en el empoderamiento económico que se
tradujo en el empoderamiento político en el que se recuperó el reconocimiento por
parte de la comunidad , volvieron a participar en la toma de decisiones y jugaron
un papel de liderazgo para superar la discriminación que se ejerce en las mujeres
pobres e indígenas , dando vida a nuestras estrategias de sobrevivencia frente a
la cultura patriarcal externa e interna que predomina en el país.

Las mujeres fueron los motores que generaron una resistencia pacífica por la
apropiación para una sobrevivencia étnica y cultural, las cuales transformaron
nuevos conocimientos y prácticas para iniciar un proceso de cambio en su
beneficio.

Cuando las mujeres no son parte activa de las luchas de las comunidades y son a
su vez doblemente marginada por ser mujeres indígenas el futuro de sus pueblos
resulta aún más incierto, no sólo porque son las reproductoras de la vida biológica,
cultural y social, sino porque son las más importantes contribuyentes en términos
políticos.

Puedo comentar  las mujeres rarámuri también son seres autónomos que
interpretan y responden activamente a su situación, pues hacen una valoración de
sus condiciones históricas de subordinación como mujeres, que ahora determinan
las relaciones interétnicas en la universidad, y ello me lleva a concebirlas como
feministas. Lo cual la autonomía, en esta circunstancia histórica concreta, se gana
poco a poco en una lucha continua que implica la demostración objetiva de sus
capacidades, habilidades, conocimientos, saberes y experiencias, no ante el ene-
migo ni ante quienes sí creemos en ellos, sino ante sí mismos(as).  No por ello
estas mujeres dejan de reflexionar acerca de su formación identitaria; ellas
encuentran la forma de levantar su voz para protestar en contra de aquellos
actores que no reconozcan su esfuerzo; es decir, seleccionan cuidadosamente
qué expectativas cumplir.

Referencias:

Frade, L. (1998). La autonomía de las mujeres Rarámuri de San Ignacio de


Arareko. Educación de adultos y desarrollo 50. Instituto de la Cooperación
Internacional de la Asociación Alemana para Educación de Adultos. Alemania. 

También podría gustarte