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08 tendencias | LA TERCERA | Sábado 24 de agosto de 2019

N
ada más minimalista, pro-
bablemente, que vivir en el
Paraíso, donde no se nece- Adiós a las cosas

bienvenido
sitaba nada y no había con-
sumismo. Fue, en todo
caso, un malentendido de
consumo (el de una fruta) lo que trajo todos
los problemas posteriores, entre ellos la acu-
mulación de cosas: primero, el taparrabos
hecho de hojas de higuera para cubrir la des-
nudez; luego, el sueño de la cabaña primiti-
va propia como forma de refugio; después, el
auto (bueno, se tuvo que inventar primero la
rueda); y así hasta nuestros días de acopio de
más y más objetos por compradores tan vo-
races como incontenibles y que, sin embargo,
no son felices.
Ciertas corrientes minimalistas recientes,
tanto de inspiración oriental como occiden-
Vivir con menos, ¿puede ayudarnos a ser más felices?
tal o una mezcla de ambas, prometen alcan- Una serie de minimalistas -occidentales y orientales-
zar la felicidad por un método simple: redu- defienden la idea de que el desprendimiento y el orden
cir dramáticamente las pertenencias y, por tan-
to, las necesidades, en busca del orden del de las cosas podrían llevarnos al orden espiritual. Para
hogar o bien del sentido de la vida y, lo mejor eso, construyen listas con tareas concretas. Incluso, ven
de todo, de una manera también chic. Una for-
ma de volver al Paraíso. en estas ideas una forma de resistir el consumismo,
Siempre han existido tradiciones defenso- aunque no siempre de manera consistente.
ras del despojamiento y del ascetismo como
formas de alcanzar la plenitud o la sabiduría:
desde los filósofos cínicos griegos hasta las ór- POR PATRICIO TAPIA
denes monásticas medievales, pasando por el
budismo zen. Son corrientes “minimalistas”.
Durante todo el siglo XX, sin embargo, por mi-
nimalismo se entendió la condensación a lo
esencial, en arte o estilos de vida, pero funda-
mentalmente fue un movimiento estético de
reduccionismo inexorable en música, pintu-
ra, cine y, sobre todo, arquitectura.

Más o menos
“Menos es más”, el lema del diseño mini-
malista que impuso el arquitecto alemán Mies
van der Rohe durante la primera mitad del si-
glo XX, proponía la composición sencilla,
una belleza que nace del rechazo de todo lo que
no sea necesario. Después de la Segunda Gue-
rra Mundial, “menos es más” sugería cierta in-
comodidad ante la abundancia. La modera-
ción y la austeridad podían ser signos de re-
finamiento o que “la simplicidad es la máxima
sofisticación”, en frase atribuida a Leonardo
da Vinci. Esta idea de sobria elegancia influ-
yó mucho en Steve Jobs, el magnate informá-
tico y fundador de Apple, quien tiene un ines-
perado protagonismo en las nuevas corrien-
tes minimalistas.
Un enfoque crítico contra la banalización del
ascetismo ha escrito el arquitecto Pier Vitto-
rio Aureli -profesor en el Berlage Institute de
Rotterdam, la Architectural Association de
Londres y la Universidad de Yale- en un libri-
to (pequeño sólo de formato) titulado Menos
es suficiente: allí plantea sus dudas ante la ce-
lebración de la austeridad, especialmente en
tiempos complicados. Con la gran crisis finan-
ciera global de 2008, esa actitud fue defendi-
da con un tono moralista, presentando el fu-
turo como un lugar preocupante, en el que sólo
los sacrificios nos salvarán del apocalipsis
FOTO: KAY AMANO/ KONMARI MEDIA

económico. La perversión del ascetismo no es


sólo entenderlo como una falsa “austeridad”,
sino su comercialización como imagen, como
una forma de ideología.
Algo de razón parece tener Aureli con la im-
portancia de la crisis de 2008. Dos de los mi-
nimalistas más conocidos son Joshua Fields
Millburn y Ryan Nicodemus, amigos desde la
infancia, quienes muy jóvenes habían alcan-
zado el éxito. Pero no eran felices. En 2009, de- La japonesa Marie Kondo, gurú actual del minimalismo.
tendencias | LA TERCERA | Sábado 24 de agosto de 2019 09

minimalismo Menos es suficiente, de Pier


Vittorio Aureli. Editorial
GG/Contrapunto (2016). 80
págs. $ 10.800.

cidieron tomar el control de sus vidas con los Para ella, Dan-sha-ri es “conocerse uno madre Teresa de Calcuta, Gandhi, el filósofo
principios del minimalismo: dejaron atrás mismo a través del orden” y hay que empezar Diógenes de Sinope, Steve Jobs. Incluso sin-
sus carreras con buenos sueldos y prestigio y por ordenar nuestra cabeza. Colocar el eje de dica a este multimillonario como “el minima-
se deshicieron de la mayor parte de sus cosas. las prioridades en el yo y el eje temporal en el lista perfecto” y que su empresa, Apple, tiene
En 2010 crearon el sitio theminimalists.com, ahora, mediante tres acciones: eliminar, or- una conexión con los minimalistas japoneses,
en que contaban sus experiencias y en 2011 pu- denar, limpiar; especialmente eliminar. Con- pues muchos son entusiastas de sus produc-
blicaron el libro Minimalismo. sejos: si hay muchas opciones es más difícil de- tos y de Jobs, quien se consideraba budista.
Por su parte, el minimalista Fumio Sasaki, cidir; si se tira algo pensando en la persona que Como todo minimalista, Sasaki parece dis-
en Goodbye, things, cuenta que alrededor de la regaló, aconseja expresar el sentimiento en frutar de las listas, así que entrega 55 conse- La felicidad después del or-
2010 empezó a ponerse de moda cierta forma voz alta antes de tirarla: decir “lo siento” y “gra- jos para despedirte de tus cosas (sugiere ha- den, de Marie Kondo. Edito-
de minimalismo en Japón. Primero fue el mé- cias”; da también reglas para almacenar: má- cer fotos de los objetos que cuesta tirar por su rial Aguilar (2017). 320 págs.
todo Dan-sha-ri, de Hideko Yamashita, como ximo dos movimientos, abrir y sacar; guardar valor sentimental). Después entregará 15 con- $ 12.000.
el arte de ordenar y renunciar a las posesio- las cosas en vertical; la ropa, en vez de doblar- sejos más, repitiendo ideas, además de dar al-
nes. Luego, La magia del orden, de Marie la, enrollarla; comprar menos y mejor. gunas perlas de sabiduría: “Desechar cosas
Kondo, transformada en best-seller impulsan- La más célebre de las ordenadoras es Marie puede hacer que tengas menos, pero nunca te
do la idea del orden como camino hacia el bie- Kondo, autora de La magia del orden y de La hará menos persona”. Y, al final, 12 cosas que
nestar e incluso la dicha, en La felicidad des- felicidad después del orden. Su lema es “con- han cambiado desde que es minimalista: ha
pués del orden. serva solo lo que te haga feliz y despréndete de ganado tiempo, tiene más libertad, está más
lo demás”. “Pocas cosas me interesan aparte sano y delgado (afirma que los minimalistas
Las lecciones de ordenar”, declara y afirma que “la vida sólo son esbeltos) y más seguro.
En Minimalismo, Millburn y Nicodemus re- empieza verdaderamente después de poner or-
fieren cómo pasaron desde la idea del “sueño den en la casa”. Para deshacerse de las cosas, Despojamiento
americano”, con mucho trabajo y muchas hay que seguir un orden correcto: ropa, libros, No deja de ser curioso que la inspiración para
deudas, a dedicarse a sus pasiones. Se cono- papeles, komono (artículos varios) y objetos muchos minimalistas japoneses venga de Ste-
cen desde niños, crecieron pobres, en fami- de valor sentimental. Se pueden enfrentar di- ve Jobs, quien decía basarse en el budismo zen. Dan-sha-ri: ordena tu vida,
lias disfuncionales. Cuentan de sus trabajos en lemas de clasificación (un cortaplumas, ¿ob- Si éste es una vía de despojamiento y no de acu- de Hideko Yamashita . Edi-
los que ascendieron rápidamente. No eran jeto de escritorio o artesanía?) y tomar deci- mulación (de conocimientos, de cosas), para torial Paidós (2016). 240
felices. Decidieron identificar sus “anclas”: siones erradas: se deshizo de un martillo y aho- Jobs no era incompatible con el acopio de di- págs. $ 14.900.
casa e hipotecas, relaciones poco sanas, deu- ra usa una sartén para clavar. Tiene “cuatro nero. En una famosa fotografía de 1982, ya mi-
das y cuentas importantes, más otras meno- principios del almacenamiento”, entre ellos, llonario, aparece en el salón de su casa, sin ape-
res. Se contentaban con caprichos efímeros y doblar la ropa y hacerlo en posición vertical. nas muebles, entre ellos un tocadiscos. Lo
costosos: más deudas y más estrés. Había que Entrega una “enciclopedia del orden”, con ins- menciona en su libro Pier Vittorio Aureli cuan-
liberarse de todo eso. Dejaron sus trabajos y trucciones y dibujos sobre cómo doblar los dis- do comenta un raro proyecto de Hannes Me-
eliminaron lo que tenían en exceso. Ahora son tintos tipos de ropa, consejos para hacer una yer de 1924, donde diseña el mobiliario míni-
felices (y sonríen en la portada del libro). maleta u ordenar libros o papeles (cuya regla mo necesario de una habitación, aparecien-
Conocieron a otros minimalistas y descu- básica es deshacerse de todo), así como obje- do también un gramófono.
brieron los cinco valores que permiten vivir tos de valor sentimental: tomar fotos de algu- Aureli repasa algunos momentos de interés
una vida con sentido: salud, relaciones per- nos antes de botarlos y dar las gracias. en la historia de los lugares con ideales ascé-
sonales, pasiones, crecimiento personal y En Goodbye, things, Fumio Sasaki, indica ticos: va de la vida monástica y su relación con
ayudar a los demás. Así, en el libro figuran con- ya desde el principio su objetivo: “cómo en- la estructura de los edificios que la alberga-
sejos sobre alimentos que evitar, reducir e in- contrar la felicidad con el arte de lo esencial”. ron, hasta el tratadista del Renacimiento Se- Goodbye, things, de Fumio
corporar (con marcas a veces), ejercicios y sus Es un editor que decidió vivir un estilo de vida bastiano Serlio, quien por primera vez se en- Sasaki. Editorial Roca (2017).
rutinas, las horas de sueño, etc. En cuanto a minimalista. Su departamento de una habi- frentó al diseño de las viviendas de personas 270 págs. $ 12.000.
las relaciones personales, evalúan las pasadas tación es tan austero que parece vacío. Dice pobres. Se detiene en sujetos tan distintos
y actuales, enumeran (al parecer a los mini- que a veces se siente como un monje zen. Tiró como Walter Benjamin o Charles Baudelaire.
malistas les gustan mucho las listas) los ocho o regaló casi todo e intenta escapar del mun- Para él, el gran peligro del ascetismo es su es-
elementos de las grandes relaciones (amor, do consumista. Sin embargo, nos informa tetización. El ejemplo más reconocible es la ar-
confianza, sinceridad, etc., etc.; el más com- que usa un colchón plegable marca Iris Ohya- quitectura del británico John Pawson, quien
plejo es la comprensión, que a su vez tiene cua- ma (“uno de los productos imprescindibles en- reconoce influencias monásticas y japone-
tro etapas: tolerar, aceptar, etc.). Para medir el tre los minimalistas japoneses”) y guarda sus sas, en busca de la simplicidad extrema. Pa-
éxito en cada valor, señalan, hay una ecuación documentos en una cartera marca AbrAsus y wson diseñó el departamento de Bruce Chat-
simple: éxito = felicidad + mejora constante. tiene un computador Mac Book Air, en el que win, la tienda de Calvin Klein en Nueva York
Los japoneses han sido particularmente re- ve películas, escucha música y lee libros. Se- o un monasterio cisterciense en la República
ceptivos a la idea de vincular el orden y el des- ñala los casos de otros adalides del minima- Checa. Uno de los monjes de este monasterio
prendimiento material a la felicidad. El mé- lismo en Japón: uno que tiene “algunos de los reveló que el encargo fue después de que otro
todo de Hideko Yamashita, Dan-sha-ri (acró- aparatos tecnológicos más vanguardistas”; monje visitara la tienda Calvin Klein: “¿No ten-
nimo sacado del yoga), enseña a deshacernos otro viaja por el mundo acompañado de su dríamos un monasterio maravilloso si susti-
de todo aquello que no es útil y no nos hace computador, su filtro de agua, su cartera de tuimos la moda por Dios?”. Serían, según Minimalismo, de Joshua
felices: desde la ropa que nos sobra a la rela- viaje, su saco de dormir y su navaja (de todos Aureli, minimalismo y ascetismo como cari- Fields Millburn y Ryan Nico-
ción amorosa que arrastramos. “Al poner or- indica su marca y especificaciones). Curiosa caturas. El legado de sus prácticas como una demus. Editorial Kairós
den en los trastos de la casa, ponemos también forma de vida despojada y no consumista. moda y ya no una forma de cambiar la vida con ( 2018). 162 págs. $ 20.000.
orden en los trastos del corazón”, señala. Sasaki señala ejemplos de minimalistas: la la esperanza de vivir con menos, y mejor. T

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