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MATEO 6:25

NVI» Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su
cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que
la ropa?

RV: Por tanto, os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis
de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y
el cuerpo más que el vestido?

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DOS PREOCUPACIONES

 Acumular cosas
 Preocuparse por conseguir cosas

No se puede poner al dinero y a las cosas donde solo Dios puede estar.

¿Por qué preocuparse por las cosas de la vida? ¿Porque afanarse por cosas que puedas o
no puedas conseguir? O por cosas básicas como la comida, el vestido o por acumular
cosas que no son tan básicas.

La preocupación no lleva a nada, todos tenemos asuntos que resolver, cuentas por pagar,
necesitamos ropa, todos tenemos cosas por atender, pero lo que Jesús nos está diciendo
es que nosotros no nos podemos acercar a la vida y a los retos de la vida, de la manera en
que el mundo lo haría

Nuestra forma de ver la vida debe ser centrada en Dios, y no en nosotros, en las cosas de Dios y no
en las de la tierra.

I. NO SE AFANEN

Esta es nuestra primera reflexión en torno a la cual gira todo el resto de los versos de esta
subsección. No se afanen. Escuchen bien hermanos la voz de Dios y no sean rebeldes a su palabra,
él dice a sus discípulos, a sus seguidores, a los que creen en su nombre, a los que son parte del
pueblo escogido: “No se afanen”.

AFANAR:

 Dedicarse a un trabajo o una tarea con mucho empeño e interés.


 Hacer todo lo posible por conseguir una cosa.
A. No quiere decir sea descuidado
No significa que nunca debemos pensar en estas cosas que menciona el Señor, que no debemos
trabajar, que no debemos procurar nuestro bienestar y el de los demás, y tener una vida ociosa y
parásita que algunos han llamado “vivir por fe”, 2 Tes. 3:10.
Las mismas aves que Cristo usa como ejemplo de la providencia divina, enseñan que Dios provee el
sustento a sus criaturas, pero usa sus dones y capacidades para ello, las aves no se quedan en el nido
esperando que Dios les traiga la comida. Entonces, no se trata de una “espera pasiva en Dios sin
hacer nada”. El prometió la lluvia en su tiempo, pero hay que arar la tierra, hay que sembrar, cuidar
la siembra, y esperar la bendición de Dios a ese trabajo para disfrutar de su fruto en su tiempo (St.
5:7). No se afanen no quiere decir que seamos descuidados, que seamos negligentes en el
cumplimiento de nuestros deberes según el papel que nos corresponde en el lugar y posición que
Dios nos ha dado. Pero no se afanen,

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