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EE.UU. tenia un ojo encima sobre Allende desde mucho antes que ganara las elecciones del
4 de septiembre de 1970, ya que, Salvador Allende venía hace mucho tiempo presentándose
como candidato a la presidencia de la República, primero en 1952, luego en 1958, por
tercera vez en 1964 y finalmente en 1970, a lo cual las acciones de Estados Unidos fueron
en aumento luego de la victoria.
Según el historiador Sergio Grez, “EE.UU. comenzó a mover sus piezas en concomitancia
con la extrema derecha chilena”, esfuerzos que mas tarde se sumarían los partidos de
derecha y sectores de la Democracia Cristiana, que se oponían al gobierno de la Unidad
Popular.
De acuerdo con Eduardo Contreras, diputado comunista 1973, el golpe se fraguó con activa
participación de sectores civiles, tal como medios de comunicación, como el diario El
Mercurio; el gremio de camioneros y de grupos “Ultra, fascistoides, como Patria y
Libertad, cuyo jefe es nada menos que decano de una Universidad ahora, Don Pablo
Rodríguez Grez, que fue una persona que huyó del país y tiene una enorme
responsabilidad en la preparación del golpe”.
Salvador Allende intentó un dialogo con el partido Demócrata Cristiano, cuando percibió la
gravedad de la situación. Se reunió con Patricio Aylwin y el Cardenal Raúl Silva
Henríquez, pero las conversaciones no llevaron a nada. “Se entrevistó en un par de
oportunidades personalmente con Aylwin, pero ante la intransigencia de la DC, y de
Aylwin particularmente, que tiene una responsabilidad muy grande, se rindió a la
evidencia de la inminencia del golpe de Estado, Como una maniobra desesperada para
evitar este desenlace trágico, se decidió llamar al previecito, cuestión que ocurriría el
mismo 11 de septiembre o al día siguiente, como una madrea de dirimir el conflicto
institucional”, dice el historiador Sergio Grez.
Una vez que el personal abandona el lugar, en su mayoría mujeres y las dos hijas del
mandatario, Salvador Allende dirige sus últimas palabras al país por Radio Magallanes,
asegurando, tal como se lo indicado a los golpistas, que no se rendiría.
“El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni
acribillar, pero tampoco puede humillarse. Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y
su destino, Superarán otros hombres este momento gris y amargo en el que la traición
pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo
se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una
sociedad mejor. ¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores! Estas son mis
últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano, tengo la certeza
de que, por lo menos, será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la
traición.” Declaró Allende, a sabiendas que le depararía en las próximas horas.
Mientras los bomberos intentaban apagar el fuego sobre la Casa de Gobierno, Carvajal le
informó a Pinochet sobre la muerte de Allende. En ingles, le asegura que se suicidó. Aun
así, esta versión ha sido cuestionada a lo largo de los años, el doctor Patricio Guijón dice
haber presenciado cuando el presidente se disparó en la barbilla gritando “Allende no se
rinde, milicos de ######.”
Tras la derrota de Allende los lideres del golpe de Estado organizaron una junta de
gobierno conformada por Augusto Pinochet, comandante en jefe del Ejército; César
Mendoza Durán, director general de Carabineros; José Toribio Merino, comandante en jefe
de la Armada; y Gustavo Leigh Guzmán, comandante en jefe de la Fuerza Aérea. Dicha
junta asumió las funciones ejecutivas y legislativas del Estado. Gobernarían mediante
bandos militares y decretos ley.
Según el periodista Manuel Salazar, Chile vivió esas horas totalmente polarizado y casi
nadie sabia lo que realmente sucedería en los próximos años: “Una mitad del país estaba
sufriendo y la otra mitad estaba celebrando lo que ocurría. Hay entrevistas y diarios
donde se sacaron botellas de champagne, mientras en otros medios llegaban los militares,
allanaban, detenían y llevaban a la gente a torturar. Fueron muy pocas las personas que,
siendo opositoras de la UP, comprendieron lo que estaba ocurriendo, qué iba a pasar en
los años y meses posteriores”, dice.
Y de esta forma se iniciaban los casi 17 años de la dictadura militar liderada por la codicia
de poder, liderada por el general Augusto Pinochet, donde violó los derechos humanos,
estableció un modelo económico neoliberal y el quiebre de 50 años de institucionalidad
democrática en Chile.
Bibliografía:
http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-92134.html
https://ahoraliberacionca.wordpress.com/2012/09/17/derechos-humanos-y-pueblo-
mapuche-cronica-de-un-genocidio-silencioso-11-de-septiembre-cronica-de-un-
golpe-militar/
https://www.txalaparta.eus/es/noticias/ultimo-discurso-antes-de-suicidarse-del-
presidente-chileno-salvador-allende
http://www.psuv.org.ve/temas/noticias/42-anos-golpe-fascista-contra-allende/
#.YXbbeh1Byds
https://es.slideshare.net/monicaherrera1964/cronologa-del-11-de-septiembre-de-
1973
https://www.ciperchile.cl/2016/04/19/patricio-aylwin-y-las-heridas-de-1973/
https://www.youtube.com/watch?v=9ndRctOYLVY