ASALTO A WAYLAND MANOR
* (Ark Future Tech) es una tapadera del propio presidente. El
OPERACIONES
5 Resulta extraño pero las imágenes de las cámaras no arrojan
El equipo plantea su nuevo camino mientras trata de resolver el caso de
desvío de fondos de Industrias Wayland a Zumbatsa. Pero tendrán que
dejarlo de lado cuando alguien asalte la Mansión Wayland.
Época: La actualidad.
Protagonistas: El equipo del Centinela.
EL JUEGO DE ROL
Antagonistas: Asaltantes desconocidos.
Escenarios: la Base del Centinela (71), Wayland Manor (101).
ESCENA 1: PUESTA EN COMÚN
Semanas atrás, Fedora consiguió desencriptar el contenido
de un archivo que recuperaron del ordenador de Stephen
Blacc, secretario del presidente de Zumbatsa. Contrastar toda
la información del archivo era un trabajo duro y, sobre todo,
dilatado en el tiempo. Es por ello que Fedora dejó un terminal
de la base trabajando exclusivamente en ello.
Tras varias semanas, el proceso ha terminado y el ordenador
arroja los resultados en una de las pantallas. La joven hacker
lo estudia detenidamente y recoge las conclusiones en un
informe que presenta al grupo durante una de las reuniones
que Sanders instauró tras los sucesos que ha vivido el equipo.
El actual líder del equipo quiere que todos se relacionen entre
ellos, que hablen y no dejen que los sentimientos vayan
haciendo mella, y las reuniones es la forma que ha planteado
para llevarlo a cabo.
Fedora es clara: Industrias Wayland ha suministrado
1 tecnología y fondos a Zumbatsa, ya que la empresa del país
Sentinel #773
objetivo sigue sin estar claro pero ahora el equipo tiene un
objetivo: averiguar todo lo posible sobre Ark Future Tech y
descubrir para qué han destinado el dinero y la tecnología de
la empresa.
ESCENA 2: ASALTADOS
Ark Future Tech tiene una filial en el centro de Betlam. Allí la
empresa ha alquilado una de las plantas en uno de los
edificios de Finger Park District. Estudiando el edificio, el
equipo decide que la seguridad puede ser fácilmente
superable si entran desde la azotea. Pero mientras elaboran
el plan de asalto, la alarma instalada en la Mansión Wayland
se dispara. Alguien está tratando de acceder a la base.
El equipo se pone inmediatamente en marcha y mientras
Bates se viste el traje del Centinela ayudado por Mark,
Fedora, y Sanders revisan las cámaras de seguridad de la
Mansión. Allan por su parte, prepara junto a Brenda y Wallace
el equipamiento de la furgoneta.
ninguna prueba de la existencia de asaltantes en la Mansión.
Y Fedora hace la pregunta que todos temen: ¿acaso quien
haya accedido al edificio, conoce la existencia de las
cámaras? De ser así, deben darse prisa. Únicamente el
cambio de códigos que Sanders introdujo en la seguridad de
la base y de la Mansión ha impedido que quienquiera que
esté allí, ha podido acceder aún a la base original.
ESCENA 3: UNA VOZ CONOCIDA
La furgoneta llega hasta las inmediaciones de la Mansión
Wayland. Allan encamina el vehículo hacia la entrada secreta a la
base mientras Bates salta la verja y corre en dirección al edificio
principal. Aprovechando la cobertura que ofrece la noche,
Sanders ha dispuesto un asalto en dos frentes: Allan y Brenda
accederán en la furgoneta por el túnel que comunica con la base
subterránea mientras Bates asaltará la Mansión buscando a los
intrusos. La coordinación es clave en el plan.
La furgoneta accede sin problemas a la base, Bates por su parte
encuentra la puerta principal de la Mansión abierta aunque no
forzada. Aquello le hace extrañar y comunica su hallazgo a la
base pero la comunicación parece cortada, solo detecta estática.
Los sensores del casco comienzan a dar fallos a la vez y Bates
queda completamente ciego, teniendo que retirarse el
equipamiento para poder moverse por la Mansión. Desde la
base, la comunicación ha quedado cortada con Bates y han
dejado de recibir imágenes. Preocupado, Sanders comunica con
Allan y le pone al corriente de la situación; necesita que él y
Brenda revisen la Mansión para averiguar qué ha pasado con
Bates. En la base podrán encontrar equipo para llevar a cabo la
misión pero les avisa que deberán estar atentos a cualquier
peligro, ya que no tienen idea de qué pueden encontrarse.
En la Mansión, Bates sigue buscando a quien haya accedido. Se
mueve con sigilo, conocedor de cada rincón del edificio por lo que
no le resulta difícil situarse en lugares seguros. Pero se
sorprende cuando tras él una voz conocida le saluda:
<< Christopher, me alegro de volver a verte.>>