Paz, Justicia e Instituciones Sólidas, reflexión de un joven mexicano.

Aproximadamente un año atrás, me encontraba como cualquier joven disfrutando en las calles de mi ciudad, caminaba
por uno de los barrios más icónicos de la Ciudad de México, “La Roma”. Parecía un día normal, sin embargo, a lo lejos se
escucharon unos ruidos que nunca había presenciado en mi vida, estos, provenían de un arma de fuego, el resultado,
una persona muerta afuera de su lugar de trabajo, ese día que parecía uno más, no lo fue.

Desde ese momento, solamente pude pensar que quizá fui testigo algo inédito, algo que jamás le desearía a alguien
vivir, nunca pude estar tan equivocado. El año pasado, fue el más violento del que se tenga registro en la historia
moderna de mi país, más de 25,000 personas perdieron la vida en contra de su voluntad, ante una violencia que no
cesa, debido a una guerra que nadie quiso y nadie pidió.

De nuevo pensé que quizá mi país enfrentaba una realidad, que solo a muy pocos les toca vivir, que esta violencia, esta
injusticia y falta de paz eran un reflejo exclusivo en la sociedad mexicana, de nuevo nunca pude estar más equivocado.
En el mundo, y principalmente países de América Latina, África Subsahariana y Asia mueren entre 5 y 7 personas por
cada 100 000 habitantes por homicidios dolosos.

Actualmente, 8 de cada 10 niños entre 1 y 14 años han sufrido algún tipo de agresión psicológica o castigo físico. La
violencia sexual, en un estudio realizado a más de 35 países muestra que una mujer corre el riesgo a ser violada hasta en
un 16% antes de cumplir los 18 años de edad. Más del 30% de la población carcelaria en el mundo no tiene un acceso
claro a la justicia impidiendo que dichos procesos sean justos y transparentes.

Más del 18% de las empresas a nivel mundial, han informado que han recibido algún tipo de soborno por parte de los
gobiernos. En más de 1 a 7 gobiernos a nivel mundial se desvía más del 15% del presupuesto nacional. Solamente el 37%
de los países en el mundo tiene instituciones nacionales independientes de derechos humanos.

Efectivamente los números no mienten, el mundo afrenta una grave crisis de paz y de injusticia. Las instituciones nos
han fallado, han sido rebasadas por las crudas realidades que superan su capacidad de operación.

Sin embargo, solo existe un poder más fuerte que las instituciones corruptas, la violencia, el crimen y la injusticia, no me
refiero a ningún gobierno, dependencia militar o algún organismo internacional, el verdadero poder de cambio está en
las personas como tú y como yo.

Sí, efectivamente, en personas como tú y como yo, personas que exijan vivir con el más mínimo decoro. Personas que
presionen para que esta realidad cambie, partiendo de mi realidad para poder cambiar el entorno el que habito. La
sociedad civil es el único motor verdadero, palpable y honesto que permite cambiar las injusticias de ese planeta.

Se nos ha olvidado que nosotros creamos a las instituciones, su razón de existir es para generar un bien en nosotros y no
en beneficio de ellas y de los hombres que abusan de las mismas.

Solamente con coraje, valor, gallardía, podremos enfrentar a esta realidad poco alentadora, hombres, sociedad civil,
Estados, y organismos internacionales debemos unirnos, es labor de todos nosotros alcanzar un objetivo primordial para
el ser humano, vivir en paz y en armonía tal y como decía Mahatma Gandhi “no hay camino para la paz, la paz es el
camino.”

INSTRUCCIONES:

EL ALUMNO DEBERÁ EXPRESAR SU OPINIÓN SOBRE ESTE TEXTO EN FORMA ESCRITA UTILIZANDO COMO MÍNIMO 250
PALABRAS SIN CONTAR SIGNOS DE EXCLAMACIÓN, INTERROGACIÓN Y PUNTUACIÓN EN LA PARTE ANVERSA A ESTA
HOJA.