Will artificial Intelligence ever catch-up with Human Intelligence?

La inteligencia artificial hace referencia a los sistemas o máquinas que, imitando la

inteligencia humana, son empleados para realizar tareas que comúnmente habían sido
desarrolladas por los seres humanos. Además, por medio de la recolección constante de
información pueden mejorar su funcionamiento con respecto a la realización de dichas
tareas. En los últimos años este tipo de inteligencia ha tenido una mayor acogida en la
sociedad, por lo que es más común percibirla en nuestra vida diaria. De manera casi
automatizada, por medio de la inteligencia artificial se realizan tareas que antes eran
realizadas por las personas. De forma progresiva, se ha introducido cada vez más en nuestra
vida cotidiana; en el hogar, en el trabajo y los espacios sociales. Su presencia está
transformando la manera en la que nos comunicamos, trabajamos, convivimos, nos
transportamos, entre otras cosas. Es en virtud de este cambio que surge la siguiente
pregunta: ¿podría la inteligencia artificial superar a la inteligencia humana?

La posibilidad de que las máquinas quiten el trabajo a los seres humanos no es un tema
novedoso, pero suena más fuerte que nunca podrá reemplazar a la inteligencia humana.
Aunque la inteligencia artificial haga cada vez más fácil el día a día, y el ser humano tema a
ser reemplazado por maquinas eficientes, no todas las funciones realizadas por las personas
pueden ser robotizadas. Cuando se trata de puestos de trabajo o actividades que requieran
ciertas habilidades como el liderazgo, la creatividad, la iniciativa o a la resolución de
problemas, la inteligencia artificial no podrá ser competencia, ni mucho menos reemplazo.
A pesar de ello, la robótica trae consigo diferentes ventajas en el diario vivir.

La inteligencia artificial puede causar impactos tanto positivos como negativos dentro de la
sociedad. En lo que conlleva a lo positivo se puede hallar un aporte en la ayuda a tareas
complejas. Un ejemplo actual es que, a causa de la pandemia, las personas realizan todo
tipo de citas, consultas, quejas o reclamos a las diferentes empresas por medio de llamadas
telefónicas o correos electrónicos, estas debido a la demanda atienden o responden por
medio de contestadoras automáticas que en la mayoría de los casos logran ser eficaces en lo
requerido. La tecnología facilita de igual forma en muchas tareas tanto en empresas, como a
actividades cotidianas.
Los seres humanos no serán reemplazados en sus tareas y labores, pero si apoyados por la
inteligencia artificial. En el caso de las empresas, la anterior mencionada funcionará como
apoyo, donde mejore y aumente la capacidad de las compañías y de los trabajadores. La
tecnología puede mejorar procesos de comunicación o personalización en diferentes
actividades, para ofrecer productos o servicios adecuados y eficaces para las personas. A
pesar de ello también trae consigo ciertas desventajas como el coste elevado de la inversión
para la implementación y mantenimiento de la inteligencia artificial; además del
carecimiento de sentimientos, valores y perspectiva, aunque sean altamente eficaz no
contara con criterio que direccione en la toma de decisiones.

Es por ello, que la inteligencia artificial no podrá reemplazar en una totalidad a los seres
humanos, pero si podrá ser utilizada como fuerte herramienta que les facilite la vida
cotidiana y laboral; esta superación o reemplazo no se daría en tanto pudieran
definitivamente realizar las mismas labores, inclusive mejoradas, si no en tanto pudieran
incorporar las características morales y éticas en la toma de decisiones que se necesita
dentro la realización de tareas realizadas por el ser humano, el cual tiene la capacidad de ser
racional, y su naturaleza le permite utilizar la razón para evaluar y estudiar cual es la mejor
manera o forma de alcanzar un objetivo determinado.