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Hábitos saludables en adolescentes de 12 a 14 años

Esta etapa está marcada por muchos cambios físicos, mentales, emocionales y sociales. Al inicio
de la pubertad se presentan cambios hormonales. En la mayoría de los varones, comienza a
aparecer el vello púbico y facial, y su voz se vuelve más grave. En las niñas, aparece el vello
púbico, les crecen los senos y les llega la menstruación. Estos cambios y la manera en que los
demás los perciben podrían ser factores de preocupación para ellos. También es un periodo en el
cual los adolescentes podrían enfrentarse a la presión que ejercen sus amigos para que consuman
alcohol, tabaco y drogas, o para que tengan relaciones sexuales. Otros desafíos de esta etapa
pueden ser los trastornos de la alimentación, la depresión y los problemas familiares. A esta
edad, los adolescentes toman más decisiones por su cuenta en relación con sus amigos, los
deportes, los estudios y la escuela. Se vuelven más independientes, con personalidad e intereses
propios, aunque los padres todavía son muy importantes.

La OMS señala la importancia de promover en los adolescentes el bienestar psicológico. Para


ello, en su camino será preciso protegerlos de “experiencias adversas y factores de riesgo que
puedan afectar a su capacidad para desarrollar todo su potencial es esencial tanto para su
bienestar durante la adolescencia como para su salud física y mental en la edad adulta”.

También existen hábitos emocionales que contribuyen a fomentar el bienestar mental, y que se
pueden inculcar desde edades tempranas.

Entre ellos, se encuentran rutinas de sueño saludables; hacer ejercicio con regularidad;
desarrollar habilidades para mantener relaciones interpersonales, hacer frente a situaciones
difíciles y resolver problemas; y aprender a gestionar las emociones. Además, es de gran
importancia que puedan tener un entorno favorable en la familia, la escuela y su comunidad en
general.
Algunos aspectos en el desarrollo de los adolescentes de 12 a 14 años

Cambios emocionales y sociales

Los jóvenes a esta edad podrían:

 Preocuparse más por su imagen física, la manera en que se ven y la ropa.


 Enfocarse en sí mismos; pasar por periodos de muchas expectativas y falta de confianza.
 Tener más cambios de humor.
 Interesarse y dejarse influir más por los chicos de su edad.
 Demostrar menos afecto hacia los padres; puede que en ocasiones se muestren groseros o
con mal genio.
 Sentirse estresados debido al trabajo escolar más exigente.
 Presentar problemas alimentarios.
 Sentir mucha tristeza o depresión, que pueden afectar su rendimiento escolar y hacer que
consuman alcohol y drogas, tengan relaciones sexuales sin protección y enfrenten otros
problemas.

Razonamiento y aprendizaje

Los jóvenes a esta edad:

 Hacen razonamientos más complejos.


 Verbalizan mejor sus sentimientos.
 Desarrollan una noción más clara de lo correcto y lo incorrecto.
Consejos de crianza positiva de los hijos

Estas son algunas cosas que usted, como padre, puede hacer para ayudar a su hijo en esta etapa:

 Sea honesto y directo con su hijo cuando le hable de temas delicados como las drogas, el
alcohol, el hábito de fumar y las relaciones sexuales.
 Conozca a los amigos de su hijo.
 Muestre interés en las actividades escolares de su hijo.
 Ayúdelo a tomar decisiones saludables y, a su vez, anímelo a tomar sus propias
decisiones.
 Respete las opiniones de su hijo, y tenga en cuenta sus ideas y sentimientos. Es
importante que sepa que usted lo escucha.
 Cuando surjan conflictos, sea claro en cuanto a metas y expectativas (como obtener
buenas calificaciones, mantener las cosas limpias y mostrar respeto), pero deje que su
hijo le diga cómo se propone alcanzar las metas (como cuándo y dónde va a estudiar o
limpiar).

La seguridad de los hijos es lo primero

Usted tiene un papel importante en la seguridad de su hijo, sin importar la edad que tenga. Estos
son algunos consejos para ayudar a proteger a su hijo:

 Asegúrese de que su hijo sepa la importancia de usar el cinturón de seguridad. Los


accidentes automovilísticos son la principal causa de muerte entre adolescentes de 12 a
14 años de edad.
 Aliente a su hijo a usar un casco para andar en bicicleta, en patineta o en patines; al andar
en motocicleta, trineo o un vehículo todoterreno; o para practicar deportes de contacto.
Las lesiones provocadas por el deporte y otras actividades son comunes.
 Hable con su hijo sobre el peligro de las drogas, el alcohol, el cigarrillo y el contacto
sexual sin protección. Pregúntele qué sabe y qué piensa sobre estos temas, y comparta
con él sus ideas y sentimientos. Escuche lo que tiene que decir, y responda a sus
preguntas de manera honesta y directa.
 Hable con su hijo sobre la importancia de tener amigos a quienes les interesen las
actividades positivas. Anímelo a evitar a los pares que lo presionen a tomar decisiones
peligrosas.
 Esté al tanto de dónde está su hijo y si habrá adultos presentes en ese lugar. Pónganse de
acuerdo sobre cuándo lo debe llamar, dónde puede encontrarlo y a qué hora espera que
regrese a su casa.
 Establezca reglas claras para cuando su hijo esté solo en casa. Háblele de temas como
traer a sus amigos a la casa, cómo manejar situaciones peligrosas (emergencias,
incendios, drogas, relaciones sexuales, etc.), de sus tareas escolares y de las tareas
domésticas que puede realizar.

Cuerpos saludables

 Aliente a su hijo adolescente a que realice actividad física. Puede entrar en un equipo o
practicar un deporte individual. Las tareas domésticas como cortar el césped, sacar el
perro a pasear y lavar el automóvil también sirven para que se mantenga activo.
 La hora de la comida es muy importante para las familias. Comer juntos en familia ayuda
a los adolescentes a tomar mejores decisiones en cuanto a los alimentos que consumen,
promueve un peso saludable y permite el diálogo entre los miembros de la familia.
 Limite el tiempo que su hijo pasa frente a pantallas a no más de 1 o 2 horas al día de
programas adecuados, ya sea en casa, en la escuela o en los centros para cuidado después
de la escuela.
 Asegúrese que su hijo duerma la cantidad recomendada cada noche. Adolescentes de 13 a
18 años: de 8 a 10 horas cada 24 horas.

Recomendaciones para el hábito de la alimentación saludable

 Proporcionar información al adolescentes sobre sobre sus necesidades, animándoles a


tener

interés sobre su salud.


 Anime a los jóvenes a beber agua frecuentemente
 Use menos salsas, grasas y azúcares
 Controle el tamaño de las raciones
 Involucre a sus hijos en la selección y preparación de alimentos. Tomar en cuenta sus
sugerencias en relación a la alimentación de casa.
 Deben existir horarios de comida familiar con interacción entre todos
 No comprar alimentos que no quieren que su hijo coma
 En la preparación de los alimentos trate de hornear o asar antes que freír. Use aceites
vegetales sobre todo de oliva virgen extra
 Sea coherente con sus recomendaciones verbales. Coman todos lo mismo.

Recomendaciones para hábitos de sueño

Consejos preventivos en la etapa adolescente dirigidos a las familias

• Tener información acerca de los cambios en la adolescencia, especialmente sobre el


retraso fisiológico del inicio del sueño, las mayores necesidades de dormir y las
alteraciones que producen en el sueño el uso de móviles, Internet, etc. inmediatamente
antes de acostarse.
• Explicar y enseñar a reconocer los signos de déficit de sueño: irritabilidad-difícil
despertar, recuperación durante el fin de semana...
• Recomendar el establecimiento de un diálogo familiar sobre el sueño y su importancia.
Sensibilizar acerca de la importancia del sueño.
• Favorecer un ambiente propicio al final de la tarde.
• Resaltar la importancia del ejemplo de hábitos por parte de los padres.
Dirigidos al propio adolescente

• Recomendar la realización de horarios regulares. ¡Incluso los fines de semana!


• Exposición a luz intensa por la mañana. Les ayuda a adelantar la fase de sueño.
• Favorecer las actividades estimulantes en horas con tendencia al sueño diurno.
• Evitar las actividades de alerta (estudio, videojuego...) una hora antes de dormir.
• Evitar el consumo de sustancias estimulantes que prolongan el estado de vigilia, como el
café, cigarrillos, bebidas alcohólicas, bebidas colas entre otras
• Regularidad en los horarios de las comidas
• Desaconsejar dormirse con la TV puesta (disminuye la profundidad del sueño). No
colocar la TV en la habitación.
Recomendaciones de actividad física, sedentarismo y tiempo de pantalla para menores de 5
a 17 años:

• Realizar al menos 60 minutos (1 hora) al día de actividad física moderada a vigorosa;


estos 60 minutos pueden alcanzarse también sumando periodos más cortos a lo largo del
día.
• Incluir, al menos 3 días a la semana, actividades de intensidad vigorosa
• Actividades de fortalecimiento muscular y de mejora de la masa ósea que incluyan
grandes grupos musculares.
Reducir los periodos sedentarios prolongados:

• Limitar el tiempo frente a la televisión u otras pantallas (móviles, videojuegos,


ordenadores, etc.) con fines recreativos a un máximo de 2 horas al día.
• Minimizar el tiempo de transporte motorizado (en coche, en autobús, en metro) y
fomentar el transporte activo, recorriendo a pie o en bici, al menos parte del camino.
• Fomentar las actividades al aire libre.

Referencias

Aibar, P. (sf) Hábitos saludables en la adolescencia. Recuperado de:


http://www.codajic.org/sites/www.codajic.org/files/Habitos%20Saludables%20en%20la
%20adolescencia.%20Patricia%20Castillo.%20Per%C3%BA%20pdf.pdf

Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (2021) Desarrollo infantil. Consejos de


crianza positiva. Adolescentes jóvenes (12 a 14 años). Recuperado de:
https://www.cdc.gov/ncbddd/spanish/childdevelopment/positiveparenting/
adolescence.html

México Social (2020) La salud mental en los adolescentes. Recuperado de:


https://www.mexicosocial.org/la-salud-mental-en-los-adolescentes/

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