La relación jurídico tributaria corresponde al derecho público independientemente
que tenga origen en los actos del derecho privado, constituye una institución autónoma y corresponde a la vinculación que se crea entre el Estado y los particulares contribuyentes o terceros como consecuencia del ejercicio del poder del Estado, de exigir el pago de los tributos. 1.5 Características de la relación jurídico tributaria La relación jurídico tributaria, tiene las siguientes características: • Consiste en un vínculo personal entre el Estado y los contribuyentes, cada uno en particular atendiendo a que se cumpla el hecho generador previsto en la ley y que ha efectuado cada una de las personas en el momento y lugar en que este se lleve a cabo.
La relación jurídico-tributaria en Guatemala
Dr. Edgar Mendoza La relación jurídico-tributaria tiene su fundamento en el principio de legalidad, siendo necesariamente el vínculo jurídico que se enerva entre el fisco como sujeto activo de la relación y el sujeto pasivo definido por la ley, de la cual se pueden derivar obligaciones materiales y formales. El Código Tributario Guatemalteco, contenido en el Decreto no. 6- 91 del Congreso y sus reformas, trae inmersa la relación jurídico- tributaria dentro de la definición de obligación tributaria, al establecer en el artículo 14 lo siguiente: “La obligación tributaria constituye un vínculo jurídico, de carácter personal, entre la Administración Tributaria y otros entes públicos acreedores del tributo y los sujetos pasivos de ella. Tiene por objeto la prestación de un tributo, surge al realizarse el presupuesto del hecho generador previsto en la ley y conserva su carácter personal a menos que su cumplimiento se asegure mediante garantía real o fiduciaria, sobre determinados bienes o con privilegios especiales. La obligación tributaria pertenece al derecho público y es exigible coactivamente.” Como complemento del artículo anterior, el Código Tributario en su artículo 15, establece la preeminencia de la obligación legal sobre la contractual, indicando entre otros aspectos, que todo convenio referente a materia tributaria que sea celebrado entre particulares no es oponible al fisco ni tiene eficacia para alterar la calidad del sujeto pasivo, salvo en los casos en que la ley expresamente los autorice o les reconozca efectos y sin perjuicio de la validez que pudiera tener entre las partes. Agrega dicho artículo, que los tributos cualquiera que sea su naturaleza, los recargos, los intereses y las multas, en materia tributaria, gozan del derecho general de privilegio sobre todos los bienes del deudor y tienen, aún en caso de quiebra o liquidación, prelación para el pago sobre los demás créditos. Sin embargo, existe una excepción a dicha regla que se refiere a los créditos hipotecarios y prendarios inscritos en el Registro General de la Propiedad, que hayan sido inscritos con anterioridad a la fecha en que se haya notificado al contribuyente la acción del sujeto activo de la obligación tributaria, así como los que se refieren los numerales 1º. y 2º. del artículo 392 del Código Procesal Civil y Mercantil.
En el mismo orden de ideas, el Código Tributario Guatemalteco en los artículos 16, 33 y
34, regula la ocurrencia de hechos y actos generadores con condición resolutoria y suspensiva, al establecer que la existencia de las obligaciones tributarias, no debe ser afectada por las circunstancias relativas a la validez jurídica de los hechos o actos realizados constitutivos del hecho generador o a la naturaleza del objeto perseguido por las partes al celebrar éstos, ni por los efectos que a ellos se les reconozca en otras normas legales, siempre que se produzcan efectivamente los resultados propios del presupuesto. La relación jurídico-tributaria tiene como objetivo principal el pago del impuesto por parte del sujeto pasivo, con la finalidad que el Estado pueda cumplir sus compromisos contenidos en nuestra Carta Magna. Como se puede apreciar, la relación jurídico- tributaria básicamente está compuesta por dos partes, a saber:
a) Hecho generador, que debe nacer a la vida jurídica a través de la realización del hecho material y,
b) Nacimiento de la obligación tributaria principal de contenido pecuniario, que tienen su
fundamento legal en los artículos 31 y 32 del Código Tributario Guatemalteco.
De conformidad con el artículo 18 del Código Tributario Guatemalteco en referencia, es
sujeto pasivo de la relación jurídico-tributaria cuando: a) Por mandato de ley es obligado al cumplimiento de las prestaciones tributarias en calidad de contribuyente y, b) Por mandato de ley se obliga a un tercero ajeno o responsable a efectuar el pago del tributo, por lo que aquí estamos frente a la figura del sustituto tributario.