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SAN JUAN BOSCO

De: Ricardo A. Cerrón S.

¿Quieres hacer una cosa buena? Ve con la juventud,


¿Quieres hacer una cosa divina? Educa a la juventud
 Tu pobreza no fue grito de injuria sino de libertad
y amor a los jóvenes.

Como un cordero con fina arista bajaste de la cordillera


Hacia el joven lleno de bordes filosos
Porque tu espíritu estaba para ganar batallas en bravas alturas.

Donde tu cuerpo dejaron huellas duras


en el sol de fuego, en el soplo de las tormentas locas,
en mordidas de lobos y en las rocas más duras.
 
1815, emergió la luz en Murialdo (I Becchi), Castelnuovo de Asti.
Juan Bosco nacía rodeado de la montaña,
donde fluían los ríos de Navissano y Bardella.
Asi como de él, que emanaría un torrente de amabilidad y sonrisa.

Margarita, la madre, que con amor infinito,


Protegió su pobreza con manto de fe cristiana.

Lacqua, Calosso y Cafasso


tallaron tu espíritu indomable,
y cual titán te elevaste al infinito.
Tu sueño de los 9 años fue profético,
y hallaste los mil caminos
para hallar en la juventud la alegría en su corazón.

1835, 25 de octubre
Tu vestición clerical fue en el Sagrado templo de Castelnuovo
Donde enfermaste gravemente, pero tú, te erguiste cual gladiador.

1841
Es ordenado sacerdote, en el templo de la Inmaculada Concepción de Turín,
fue el más hermoso día de su vida.
y el sol brillaba por este nuevo despertar,
porque su corazón labraba su cercanía a su creador.

Amabilidad es columna sólida de tu sistema


San Felipe Neri, Francisco de Sales fueron tus paradigmas.
Y un 08 de diciembre de 1841 empezó tu obra,
y Bartolomé Garelli rezó bajo la atenta mirada
de la Inmaculada Concepción de María.

12 de abril de 1846,
Nace el oratorio San Francisco de Sales,
en un pequeño cobertizo de Pinardi,
preludio de tu gran legado universal, (Hijas de María Auxiliadora)
al son de la risa, del juego, del bullicio y la alegría
Con caridad teologal y pastoral
visitaste cárceles, hospitales, barrios pobres
Supo ganarse el corazón de los jóvenes con alegría
Tus buenas noches, alejaban las soledades,
los arios riscos y las tempestades.

1848.
Pusiste el pecho ante las adversidades,
incomprendido por el clero,
abandonado por la Marquesa Barolo,
te calumniaron, que era peligroso, que era demente,
que era cómplice de los malhechores, dijeron
y los dejó a todos ellos en su montaña con sus hoscos pensares.
Cumpliéndose así el sueño de las rosas y espinas que tuvo en 1847.

Venciste fatigas y peligros,


ya que cuanto más faltan los apoyos humanos,
tanto más Dios pone lo suyo.

1853
Tus talleres, al lado de Mamá Margarita,
sirvieron para contemplar estrellas de esperanzas en el firmamento

1859.
Bajo tu mirada compasiva en el oratorio,
reflejo de tu gran amor
Diste nacimiento a la congregación salesiana
Para dar fin a la ignominia vida, al yugo innoble,
Y destruir los grilletes que aprisionan a nuestra juventud.

1872.
En el vuelo sutil te contagias de auroras,
seguistes escalando montañas y
fundaste con María Mazzarello tus hijas auxiliadoras.

1888.
Una voz ene l cielo te llamó, cerraste los ojos.
Después de tu muerte siguió tu obra magnanima
dejaste a santos y sucesores en el camino
Domingo Savio
Miguel Rúa
Magone
Dominga Mazzarello
Bartolome garelli
Padre Cagliero

Tu Juan Bosco gran confesor de jóvenes


Enseñaste a tomar el escudo de la fe para combatir las insidias del demonio

Su luz perdura por los siglos


"Caminad con los pies en la tierra, pero con el corazón en el cielo”
“Padre y Maestro de la espiritualidad juvenil”
TUS DOSCIENTOS AÑOS SAN JUAN BOSCO

De: Ricardo A. Cerrón S.

¿Quieres hacer una cosa buena? Ve con la juventud,


¿Quieres hacer una cosa divina? Educa a la juventud
 Tu pobreza no fue grito de injuria sino de libertad
y amor a los jóvenes.

Como un cordero con fina arista bajaste de la cordillera


hacia el joven lleno de bordes filosos
porque tu espíritu estaba para ganar batallas en bravas alturas.

Donde tu cuerpo dejó huellas duras


en el sol de fuego, en el soplo de las tormentas locas,
en mordidas de lobos y en las rocas más duras.
 
1815, emergió la luz en Murialdo (I Becchi), Castelnuovo de Asti.
Juan Bosco nacía rodeado de la montaña,
donde fluían los ríos de Navissano y Bardella.
así como de él, que emanaría un torrente de amabilidad y sonrisa.

Margarita, la madre, que con amor infinito,


protegió su pobreza con manto de fe cristiana.

Lacqua, Calosso y Cafasso


tallaron tu espíritu indomable,
y cual titán te elevaste al infinito,
tu sueño de los 9 años fue profético,
y hallaste los mil caminos
para hallar en la juventud la alegría en su corazón.

Tu vestición clerical fue en el Sagrado templo de Castelnuovo


donde enfermaste gravemente, pero tú, te erguiste cual gladiador.

1841
Es ordenado sacerdote, en el templo de la Inmaculada Concepción de Turín,
fue el más hermoso día de su vida.
y el sol brillaba por este nuevo despertar,
porque su corazón labraba su cercanía a su creador.

Amabilidad es columna sólida de tu sistema


San Felipe Neri, Francisco de Sales fueron tus paradigmas.
Y es así que un 08 de diciembre empezó tu obra,
y Bartolomé Garelli rezó bajo la atenta mirada
de la Inmaculada Concepción de María.

12 de abril de 1846,
Nace el oratorio San Francisco de Sales,
en un pequeño cobertizo de Pinardi,
preludio de tu gran legado universal,
al son de la risa, del juego, del bullicio y la alegría
Con caridad teologal y pastoral
visitaste cárceles, hospitales, barrios pobres
Supo ganarse el corazón de los jóvenes con alegría
Tus buenas noches, alejaban las soledades,
los arios riscos y las tempestades.

Pusiste el pecho ante las adversidades,


incomprendido por el clero,
abandonado por la Marquesa Barolo, te calumniaron,
que era peligroso, que era demente,
que era cómplice de los malhechores, dijeron
y los dejó a todos ellos en su montaña con sus hoscos pensares,
cumpliéndose así el sueño de las rosas y espinas.

Venciste fatigas y peligros,


ya que cuanto más faltan los apoyos humanos,
tanto más Dios pone lo suyo.

Tus talleres, al lado de Mamá Margarita,


sirvieron para contemplar estrellas de esperanzas en el firmamento

1859.
Bajo tu mirada compasiva en el oratorio,
reflejo de tu gran amor
diste nacimiento a la congregación salesiana
para dar fin a la ignominia vida, al yugo innoble,
Y destruir los grilletes que aprisionan a nuestra juventud.

1872.
En el vuelo sutil te contagiaste de auroras,
seguistes escalando montañas y
fundaste con María Mazzarello tus hijas auxiliadoras.

Al final de tu caminar terrenal


una voz en e l cielo te llamó, cerraste los ojos,
después de tu muerte siguió tu obra magnánima
dejaste a santos y sucesores en el camino
Domingo Savio
Miguel Rúa
Magone
Dominga Mazzarello
Bartolome garelli
Padre Cagliero

Tu, Juan Bosco gran confesor de jóvenes


enseñaste a tomar el escudo de la fe para combatir las insidias del demonio.

Tu luz perdurará por los siglos


"Caminad con los pies en la tierra, pero con el corazón en el cielo”
“Padre y Maestro de la espiritualidad juvenil”.
Bajó de los picachos a la llanura un día;

allá dejó el rebaño, la choza, la jauría,

los agrios vericuetos, las claras soledades

dominio de las águilas y de las tempestades.

Arriba dejó todo cuanto su vida era,

y con un dulce sueño dentro del alma fiera,

vino a la tierra baja, a tierra misteriosa

que miraba de lo alto como una vaga cosa

que no le era dado conocer hasta cuando

bajase por la amada, que le estaba esperando.

¡ La amada, la hembra llena de suavidad, aquella

que él miraba en las noches temblar en cada estrella,

a la que luego en sueños como una luz veía,

y que en el sol brillaba al despertar el día,

aquella en que pensaba sin tregua año tras año,

viendo cómo, en los riscos se ayuntaba el rebaño,

y cómo en el silencio del monte adormecido,


las águilas buscaban el calor de su nido ¡

Y así vibrante bajo las pieles de su sayo,

su ser, quizás engendró de una cumbre y un rayo,

ingenuo y primitivo, enamorado y fuerte,

el pastor bajó un día de cara hacia la suerte.

¡ Y ahí , en la tierra baja, en la tierra del amo,

Manelic halló cruda decepción al reclamo

de un amor que él quería nuevo, fértil y suyo,

¡suyo no más! Alegre como un temprano arrullo

de tórtola, como eco de canción un cariño

como un regazo donde durmiese como un niño ¡

¡ Y supo que ahí, lejos de los hoscos rediles

que dejó en la montaña, los hombres eran viles,

más viles y traidores que las malas serpientes

que abajo se arrastraban lo mismo que las gentes!

¡ Y supo que su amo, el amo que le daba

la mujer que allá arriba como un cielo soñaba,

era más vil que todos y que también mentía,


y que era como un lobo que robaba y huía ¡

Supo algo más horrible: la mujer de su sueño

era del amo. El amo era el único dueño

de todo: de la tierra, del amor, de la vida ¡...

El era sólo un siervo, la bestia encarnecida,

una cosa... un pedazo de carne esclavizada,

sin derechos, sin honra, sin amor y sin nada!

Y entonces, entre el asco de toda la mentira,

de toda la cruel beja del mundo sintió ira,

ira trágica noble de león provocado

que se ha dormido libre y despierta enjaulado.

Y oyó que de él reían como de simple y bobo,

¡ De él que igual que un hombre estrangulaba a un lobo

¡ Ya no pudo más ¡ Un día se alzó contra el tirano

y le arrancó la vida. ¡ Con su plebeya mano

se hizo justicia el siervo... ¡

Todos enmudecieron

Ante el soberbio triunfo y estupefactos vieron

cómo el pastor hirsuto, labraba bestia huraña,

¡ Con su mujer en brazos se volvió a su montaña ¡


 

¡ Oh, Manelic ¡ ¡ Oh plebe que vive sin conciencia

de tu vida oproviosa, que arrastras la existencia

dócil al yugo innoble, que adormeces tu alma

de hierro, en el marasmo de ignominiosa calma ¡

¡ Oh Manelic, oh carne santa y pura del pueblo, carne abierta

bajo el golpe del látigo infamador; despierta ¡

Cuando entre la impudicia de los hombres te sientas,

cuando en tu pecho el odio desate sus tormentas,

cuando todo te nieguen y te insulten el orgullo,

levántate y exige que te den lo que es tuyo ¡

Levántate. ¡ Tú eres la fuerza y el derecho ¡

Si te estrujan la vida, si te infaman el lecho,

si te pagan la honra con mezquino mendrugo.

No envilezcas de miedo soportando al verdugo ¡

¡ No lamas como un perro la mano que te ata ¡

haz pedazos los grillos, y si te asedian, ¡¡ Mata ¡!

No temas nada y hiere, porque Dios es tu amigo

y por tu brazo a veces desciende su castigo.


¡ Que la soberbia aleve halle tu brazo alerta,

que a veces es justicia que la sangre se hierta ¡

¡ Oh Manelic ¡ ¡ Oh plebe que vives en la altura ¡

Ven a la tierra baja, desciende a la llanura,

y cuando aquí te arranquen en miserable robo

Tu ilusión, que tus manos estrangulen al lobo ¡

¡ Que lo fulmine el rayo que vibra en tus entrañas,

y después, con lo tuyo, regresa a tus montañas ¡.

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