Está en la página 1de 10

10 libros para el metro

Ofrecemos una lista de libros que por su tamaño, su temática u


otros motivos son perfectos para el metro, esa biblioteca móvil y
vital

Fernando Ariza
19/03/2022 Actualizada 13:39
FacebookTwitterWhatsappEnviar por Email

Volvemos al metro, el más urbano y práctico de los transportes públicos.


El metro se llena de ciudadanos como la sangre corre por nuestras
venas. El metro es, además, uno de los no-lugares donde más se lee.
Es una biblioteca móvil y vital, síntoma de la energía de una ciudad y
de la afición cultural de sus habitantes. Ofrecemos aquí una lista de
libros que por su tamaño, su temática u otros motivos nos parecen
apropiados para la lectura itinerante.

1. Cuentos breves y extraordinarios


Probablemente la primera antología de microrrelatos, cuando aún ni
tenían ese nombre. Gracias a la enigmática erudición de los dos
escritores argentinos logramos tener en un único volumen textos de todas
las culturas y épocas. Tienen en común que son tan breves que pueden
terminarse mientras se espera el tren y luego nos dejará varios minutos
de reflexión si nos toca aguantar de pie en hora punta.
«Cuentos breves y extraordinarios» de Adolfo Bioy Casares y Jorge Luis BorgesLosada, 157 págs.

2. Novela de ajedrez
Zweig tiene numerosas novelitas pequeñas solo en tamaño. Ideales para
cargar en el bolsillo de la chaqueta o el bolso sin que nuestra espalda se
resienta. Las ediciones de Acantilado son además elegantísimas. Para
empezar, propongo La novela del ajedrez. En menos de cien páginas
contemplamos el intento de disolución del alma por parte de los nazis, y
la salvación gracias al juego y la memoria. También servirá para decir
que es mucho mejor que la película.
«Novela de ajedrez» de Stefan ZweigAcantilado, 96 págs.

3. De qué hablamos cuando hablamos de


amor
El máximo representante del realismo sucio americano y uno de los
grandes narradores breves americanos, el continente que ha dado
mejores cuentistas. Carver descubrió con este libro su inimitable
capacidad expresiva. Un libro escueto y minimal gracias a la labor de su
editor, que lo adelgazó hasta dejar las vidas que describe en los huesos.
Pura narrativa esencial.
«De qué hablamos cuando hablamos de amor» de Raymond CarverAnagrama, 160 págs.

4. Las armas secretas


De esta colección esencial de relatos cortazarianos destaca es El
perseguidor, germen de su obra magna Rayuela y quicio de toda su obra.
El protagonista es un reflejo del músico de jazz Charlie Parker que
pierde su saxofón en el metro de París y a la vez descubre cómo en sus
vagones el tiempo se dilata y se contrae a su antojo. Un magnífico
ejemplo de cómo descubrir las quiebras de la realidad en lo más
cotidiano.
«Las armas secretas» de Julio CortázarCátedra, 216 páginas.

5. Las ciudades invisibles


Un libro delicadísimo y elegante. Cada capítulo es la descripción de una
de las cientos de ciudades imaginarias que Marco Polo visitó hasta llegar
a Mongolia. Kublai Khan escucha embelesado. El libro está formado por
textos intensos y breves, algunos de un párrafo, pero con una belleza
formal que nos hará olvidad la oscuridad y cierta suciedad del
suburbano.

«Las ciudades invisibles» de Italo CalvinoSiruela, 172 págs.

6. Azul...
No es fácil encontrar misceláneas contemporáneas y Azul… es una de las
más bellas. En un único libro encontramos poemas, relatos,
microficciones, aforismos… de página a página, Darío nos cambia el
formato de su pluma, aunque no así la calidad, el estilo y el tono:
ambientes cortesanos, riqueza lingüística, emoción y fantasía. Imposible
el aburrimiento.

«Azul...» de Rubén DaríoEdaf, 208 págs.

7. Las cien mejores poesías de la lengua


castellana
Uno de los bestseller de la poesía. Un poema exige unos segundos de
atención y varios minutos de reflexión. No hay nada más apropiado para
el metro. Y qué mejor modo que adentrarse en el mundo de la lírica
acompañado de un gran poeta y filólogo. Este libro es uno de los grandes
tesoros de nuestra cultura, comparable al Museo del Prado en valor pero
infinitamente más barato.

«Las cien mejores poesías de la lengua castellana» de Luis Alberto de Cuenca (ed.)Renacimiento,
432 págs.

8. El Principito
Aunque parezca un topicazo indigno de esta lista, es uno de los relatos
más intensos y sencillos que se han escrito. Probablemente los grandes y
serios intelectuales despreciaran por infantil (¡tiene ilustraciones!), por
demasiado emotivo, por haberlo leído con doce años. Todo esto y más se
puede decir, pero si algún lector no lo ha leído que vaya rápidamente a la
librería. Si lo envuelve en papel de periódico puede pasar por el último
ensayo de Byung-Chul Han.

«El Principito» de Antoine de Saint-ExupérySalamandra, 96 págs.

9. Tokio blues
Los personajes de Murakami van mucho en transporte público.
Habitualmente están solos y miran por la ventana un paisaje
deshumanizado y muchas veces lluvioso. Tal vez nuestros trayectos no
sean tan melancólicos, pero su lectura nos puede sacar del frenesí de la
hora punta. Recomiendo Tokio Blues por ser menos salvaje que el resto
de sus novelas y más ligera de páginas.

«Tokio blues» de Haruki MurakamiTusquets, 384 págs.

10. Don Quijote de la Mancha


No nos hemos vuelto locos. Recomendamos El Quijote para el transporte
público, pero no en papel, sino en audiolibro. Piénsese que durante
generaciones nuestra obra más universal solo se escuchó, porque la leían
en voz alta los pocos que sabían. Además, el español antiguo tiene más
de grafía que de fonética, por lo que escuchado puede ser una gran
experiencia. Hay numerosas versiones gratuitas en Internet (en pódcast,
colgadas de instituciones, recuperadas en páginas personales…), y
cualquier teléfono las puede reproducir.
«Don Quijote de la Mancha» en audiolibro

También podría gustarte