UNIVERSIDAD DEL CAUCA

Métodos Cualitativos I
*Efrén, Bolaños.

LA MÚSICA Y SUS SIAMESES PERDIDOS

Como dos hermanos siameses divididos en el tiempo,

pero unidos en la mezcla de frecuencias,
adheridos a vibraciones y colores.
Apaciguados entre cuerdas y sonidos.

Es el canto de un joven y un viejo chocados en el tiempo.

Transgredidos en lenguajes,
Suministrados de perspectivas y medios
Dos empíricos que “sienten no conocen”

Que cantan entre la gente, entre pasos sordos,

Instaurados en los puentes resonantes,
Habitando las comidas de medio día
Interpretes sin rostro; voces de todos lados.
(Divagación propia)

ELEMENTOS DE CONTEXTO
Por el modo en que hemos presenciado que se habita la calle desde la música,
nos percatamos de cómo se desenvuelven muchas vidas, que pasan el largo de las
noches y las tardes interpretando en plazoletas, parques, puentes, bares, y un largo etc.
en lugares que todos concurrimos y donde ellos habitan. En ese sentido, el cantante de
Bogotá no difiere del cantante de Popayán en tanto que vive en sus constantes puestas
en escena, y por ello el lugar solo es un telón más que acompaña la puesta en escena,
por qué el intérprete callejero es incluso el mismo que estuvo ayer en Bogotá; que
estuvo hoy en Cali y que mañana estará en Popayán. En ese sentido, son nómadas que
practican su pasión en cada lugar que visitan y en cada evento que acompañan. Dando
importancia a la calidad del sentimiento en la interpretación y no a la falsa perfección de
lo "sublime".
 Ahora bien, los géneros musicales y las interpretaciones de música nacional han
padecido un eclipse perpetuo en esta población, donde las canciones extranjeras
permean la calle ya desde los años 80 se muto del bambuco nacional a nuevos géneros
de moda. En los últimos, años cómo sabemos se han basado en un cambio estructural
en el modo de consumir y crear. En ese sentido, el músico callejero es también músico
de redes sociales, participante de programas o viajero infatigable.
LOGOS
El material expuesto aquí se construyó entre Bogotá y Popayán. En búsqueda de
realizar la exposición de tres historias de vida alrededor de la música. En ese sentido, se
preguntó sobre las primeras experiencias que se tuvieron con el canto y con los primeros
instrumentos que conoció cada persona. También sobre cómo desde esos momentos se
ha forjado un camino transversal entre sus vidas y la música en lo particular y
contextual de cada uno.
En cuanto a los personajes tenemos, por un lado, a un hombre anciano cuya
relación con la música partió desde los 9 años y desde allí empezó a relacionarse con la
interpretación y el canto. En ese sentido, esta persona de ahora 68 años vivió en una
época en que su relación con la música partía de la interacción con la radio o la vitrola,
(como menciona en el video) y la interpretación de las canciones que se aprendía.
Además, es pertinente remarcar que sus géneros de interés son armoniosos con su
tiempo, ya que gusta de géneros como el Tango, las baladas y otros símiles. Por último,
su aprendizaje alrededor de la interpretación no está ligado a la academia, y no ha sido
necesario, ya que formó parte de distintas agrupaciones y como independiente sin
problemas, lo cual significa que ha podido ejercer su pasión aparte de su profesión de
Biólogo. Él ha vivido en Cali y Popayán donde construyó y construye su objetivo de
transmitir a otros su pasión por la música.
En cuanto al joven, su relación con la música también surgió a los 9 años de
edad de un modo deliberado pero que luego transformó la música en un compañero de
vida. Ordenando toda su identidad en clave de la música. Donde sus objetivos son a
futuro con la música como proyecto, donde pueda formar una universidad de música y
un centro de aprendizaje emocional y espiritual. El nació en Cali y vive en Bogotá,
aunque se encuentra actualmente viviendo con sus abuelos en Popayán.
Ahora bien, podemos identificar como desde diferentes lugares espaciales y
temporales dichos personajes se relacionan transversalmente por la interpretación
musical. En ese sentido, hay modos de vida que acoplan a su desarrollo una
composición dispuesta a la significación de la vida “en términos de energía, frecuencia
y vibración.” Como dice uno; O en términos de cómo la música da un sentido o un
modo de vida, “viajando a través del tiempo y transportándose al pasado, al presente y
al futuro, también.” Como dijo otro. Además, dos de las historias fueron grabadas en
simultáneo ya que “por azares de la vida” como dicen, termine reunido con dos de los
músicos en un mismo lugar. Dos músicos disímiles tanto en sus edades como en sus
modos de interpretación e influencias musicales, pero que, sin embargo, comparten una
ferviente forma de referirse a los sentimientos que se despiertan con ciertas canciones o
también como, las propias canciones transportan a momentos o lugares pasados, re-
habitables al ser interpretadas sus tonadas.
 Por otro lado, he de resaltar la relación que tienen estas personas con la
exposición de su música a otros. Y es que, por un lado, uno de ellos se dedica a viajar
con la música por diferentes sitios para enseñar sus interpretaciones en distintos lugares
físicos. Otro, se expone en las redes sociales y YouTube además de: puentes, bares, y
calles. Y el más anciano, se presenta en programas como La voz senior, aparte del
esporádico evento o la interpretación callejera. En ese sentido, las divergencias de
exposición y trayectorias en estos tres personajes se establecen desde parámetros
completamente disímiles y en ese sentido sus músicas se inscriben a un tiempo, con el
anciano participando en La voz senior y alguna vez en la radio, con el joven
exponiéndose en redes sociales, y el intermedio viajando, conociendo y dándose a
conocer en lugares puramente físicos. Sin embargo, en sus diferencias cada uno ve en la
calle un espacio de encuentro y aprendizaje.