Arquidiócesis de Tuxtla

30 de enero de 2022
Comunicado
Mañana, 31 de enero, estaré cumpliendo 45 años de vida sacerdotal. Tengo vivo el recuerdo de aquel día de
1977 cuando fui ordenado sacerdote por pura bondad de Dios, que tuvo a bien elegirme para ponerme al
servicio de su pueblo. Los invito a que sigan orando por mí y conmigo; ayúdenme a darle gracias por este
inmerecido Don.

Día de la vida religiosa

Este próximo 2 de febrero, fiesta de la Presentación del Señor, se celebra la XXVI Jornada Mundial de la
vida religiosa, creada en 1997 por San Juan Pablo II. Esta es una jornada eclesial para celebrar el compromiso
de los religiosos, institutos seculares y las nuevas formas de vida consagrada. Cuando el Papa instituyó esta
Jornada comentó que el objetivo de ella es: “ayudar a toda la Iglesia a valorar cada vez más el testimonio de
quienes han elegido seguir a Cristo de cerca mediante la práctica de los consejos evangélicos y, al mismo
tiempo, quiere ser para las personas consagradas una ocasión propicia para renovar los propósitos y reavivar
los sentimientos que deben inspirar su entrega al Señor”.
Una de las características de la vida consagrada es que está siempre ha estado en las “nuevas fronteras” o
“periferias existenciales” que han ido surgiendo a lo largo de la historia. Así, vemos a las religiosas y
religiosos en las misiones, en las cárceles, en los colegios o centros de menores, con los migrantes o
refugiados, en los hospitales, entre los excluidos de la sociedad, etc. La vida religiosa está llamada a vivir la
pobreza, la castidad y la obediencia como semillas del Reino que crece en medio de la humanidad. Son un don
para la Iglesia y el mundo; yo agradezco todo los que hacen las comunidades de religiosas y de religiosos en
nuestra diócesis.

Día del seminario

También en este próximo mes de febrero estaremos celebrando el aniversario número 55 de nuestro
seminario diocesano, que fue erigido canónicamente el 12 de febrero de 1967. Por eso, cada año, el segundo
domingo de febrero celebramos el Día del Seminario. Realmente yo, como Arzobispo gozo, aún en medio del
sufrimiento que nos ha traído la pandemia, este día –que en el 2022 es el 13 de febrero–, porque experimento
con todo mi corazón el gran amor de nuestro pueblo al Seminario; es una verdadera fiesta de amistad desde la
fe, una fe que es compromiso de oración y también de solidaridad material para el buen sostenimiento de
nuestro Seminario.
Gracias, Arquidiócesis de Tuxtla por su amistad, cercanía, solidaridad y amor a nuestro Seminario; gracias
damos hasta el Cielo a Mons. JoséTrinidad Sepúlveda por sembrar, abonar y regar esta semilla del amor de
nuestro pueblo por su Seminario. Gracias a todo nuestro pueblo y que nadie nos robe nuestro gran amor al
Seminario.
Este Día del seminario serán ordenados 5 nuevos diáconos que son un regalo para nuestra Arquidiócesis,
y que encarnan el espíritu de Cristo servidor en medio de su pueblo. Para los jóvenes, y para todos en general,
son un signo de que la vida puede gastarse en pos de grandes ideales, como es el seguimiento de Cristo, para
ayudarle a hacer realidad su gran proyecto de amor: el Reino de Dios, desde valores que a mucha gente se le
han ido olvidado, como la entrega generosa a los más últimos, la caridad, el servicio desinteresado… Recemos
por estos 5 jóvenes que, por gratuidad de Dios, han sido elegidos para este sagrado don.
Además, los sigo exhortando a que no bajemos la guardia en cuanto a los cuidados que debemos tener
frente a la pandemia que parece no quiere alejarse. Ninguna precaución está por demás. Hagamos un
compromiso familiar de cuidarnos, tanto fuera como dentro de casa.

Unidos en oración y esperanza

Mons. Fabio Martínez Castilla
II Arzobispo de Tuxtla