¡Feliz navidad! – ¿Qué logramos, qué no logramos y qué queremos lograr ahora?

El plan del enemigo II ¡Advertencia! (Continuación)

Romanos 12:2
2
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y
perfecta.

3 objetivos: alejarnos de Dios, desviarnos de su propósito y dividirnos. (ENGAÑAR)

1 Juan 2:17
17
Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para
siempre.

2 Pedro 3:9
9
El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente
para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al
arrepentimiento.

Ejemplo I: Satanás te dice: Tú eres lo que tú quieres ser.

Ejemplo II:
Ejemplo III: Satanás quiere que te conformes como miembro para que no seas discípulo.

Cabeza del hogar.

Satanás te hace creer que tú puedes ser lo que tú sientes ser

La diferencia entre un discípulo y un simple miembro de iglesia

El miembro suele esperar panes y peces; el discípulo es pescador.

El miembro lucha por crecer; el discípulo por reproducirse.
El miembro se gana; el discípulo se hace.
El miembro gusta del halago; el discípulo del servicio y del sacrificio vivo.
El miembro entrega parte de sus ganancias; el discípulo entrega su vida.
El miembro puede caer en la rutina; el discípulo es un revolucionario.
El miembro espera que le asignen tareas; el discípulo es solícito en tomar responsabilidad.
Uno murmura y reclama sus derechos; el otro obedece y se niega a sí mismo.
El miembro es condicionado por las circunstancias; el discípulo aprovecha para ejercitar su fe.
El miembro reclama que le visiten; el discípulo visita.
El miembro vale para sumar; el discípulo para multiplicar.
Hacer miembro de un discípulo es poner cepo al que anda en el camino, hacer discípulo a un
miembro es dar alas a la evangelización.
Los discípulos de la iglesia primitiva trastornaron al mundo; los miembros del siglo XXI están
siendo trastornados por el mundo.
Los miembros suelen ser fuertes como soldados de trinchera; los discípulos son soldados
invasores.
El miembro cuida de las estacas de su tienda; el discípulo ensancha el sitio de su cabaña.
El miembro hace hábito; el discípulo rompe los moldes.
El miembro sueña con la iglesia ideal, el discípulo se entrega para lograr la iglesia real.
La meta del miembro es llegar al cielo; la meta del discípulo es ganar almas para el cielo.
El miembro maduro se hace discípulo; el discípulo maduro asume los ministerios.
El miembro es «ojalá», y el discípulo «¡Heme aquí!»
Una historia política:
Un día mientras caminaba por la calle un alto dirigente de un importante partido político es
trágicamente atropellado por un camión, su alma llega al paraíso y se encuentra en la
entrada a un ángel que le recibe. “Bienvenido al paraíso” dice el ángel; veras, muy raramente
un alto político ha llegado aquí y no estamos seguros de que hacer contigo. Así que, lo que
haremos será hacerte pasar un día en el infierno y otro día en el paraíso y luego podrás
elegir dónde vas a pasar la eternidad.

Con esto en Ángel acompaña al político a un ascensor, baja, baja y baja hasta llegar al
infierno, las puertas se abren y se encuentra justo en medio de un hermoso verde campo de
golf, a lo lejos se ve un club de pie delante de él, están todos sus amigos políticos que
habían trabajado con él, todos vestidos con elegantes trajes y muy contentos, corren a
saludarlo, lo abrazan y recuerdan los buenos tiempos en los que se enriquecían a costa del
pueblo y de todos los actos de corrupción que realizaban, juegan un agradable partido de
golf y luego por la noche cenan juntos con langostas, caviar y finos vinos, comparten la
noche con hermosísimas y liberales jovencitas, se encuentran también al diablo, que de
hecho, es un tipo muy simpático y que se divierte mucho contando chistes y bailando, se
está divirtiendo tanto que antes de que se dé cuenta es ya la hora de irse, el ascensor sube,
sube y sube y se reabre la puerta del paraíso donde el Ángel lo está esperando, ahora es el
momento de pasar el tiempo en el paraíso.

Así que, el político en cuestión pasa las 24 horas sucesivamente pasando de nube en nube,
tocando el arpa, orando y cantando alabanzas, las 24 horas ya han pasado y el ángel va a
buscarlo.

Ahora debes elegir adónde vas a pasar tu eternidad. Bueno, el paraíso ha sido precioso, pero
creo que he estado mejor en el infierno. Así que el Ángel lo acompaña de nuevo hasta el
ascensor, cuando la puerta se abre se encuentra en medio de una tierra desierta cubierta de
desperdicios, ve a todos sus amigos vestidos con trapos sucios recogiendo desperdicios y
metiéndolos en una bolsa negra, el diablo lo alcanza y le pone un brazo en el cuello, no
entiendo balbucea el político, ayer estuve aquí y habían lindas chicas, un hermoso campo de
golf y un club y comimos langostas y caviar, bailamos y nos divertimos muchísimo, ahora
todo lo que hay es un terreno desértico lleno de porquería y mis amigos parecen unos
miserables. El diablo lo mira, sonríe y le dice: ayer estábamos en campaña, hoy ya votaste
por nosotros.
Satanás te engaña tal como lo hace un político corrupto a la gente que vota por él.