PEREZ DELGADO, Edgar Jhoan*

El constitucionalismo legal, al considerar que los derechos constitucionales son fundamentales,

y, que la tarea de la constitución consiste en encarnar la sustancia de los fundamentos de la
ley, desde mi parecer, se estaría limitando el verdadero alcance de una constitución al ser
totalmente egoísta a la aplicación y revisión de la norma, que en ocasiones tal actividad resulta
ser arbitraria e injusta, al no comprometerse con la protección de derechos que deberían ser
plasmados por el tribunal constitucional al momento de la revisión judicial.

Richard Bellamy, menciona que, para evitar la posibilidad de una ley parcial o injusta, las
declaraciones constitucionales de derechos aspiran a operar a la manera de una ley superior
que puede utilizarse para asegurar que las reglas son equitativas y que protegen aquellos
intereses vitales sin los cuales los seres humanos carecerían por completo de la capacidad de
obrar. Esta mención es totalmente correcta; pues, a raíz de ello si se da el caso donde las leyes
incumplan las reglas equitativas que dan protección los intereses vitales de cada persona,
estas pueden ser derogadas y reemplazadas por otras leyes que si proporcionen esa medida
de seguridad que garantice el libre desarrollo de cada ciudadano con el respeto de sus
creencias, costumbres y modo de vida, de tal forma que los objetivos perseguidos en favor de
todos se logren a cabalidad, y que esta modalidad de actuar de los individuos, también sea una
opción que las futuras generaciones puedan desplegar con total autonomía, la elección de su
propio modo de vida libre de limitaciones, pero eso sí, con una democracia que tenga por
objetivo alcanzar seguridad en la sociedad de manera equitativa.

En mención al control judicial, la constitución establece claramente normas que lo limitan, esto
quiere decir que, en razón a la tutela jurisdiccional efectiva, el debido proceso, nadie podrá ser
sentenciado por un mal actuar que no se encuentre establecido en los textos normativos, y es
por esto la importancia de tener presente a la pluralidad de instancias; pues, de esa forma se
permite ejercitar adecuadamente el control judicial, permitiendo que se protejan un sinfín de
derechos en procesos donde jueces con un grado mayor de especialidad, desempeñen su
función buscando garantizar la constitucionalidad en un sentido amplio de la interpretación,
siendo imparciales y justos: Esto sería lo ideal.

Sobre el punto donde, Richard Bellamy, menciona que, los mecanismos democráticos, para
garantizar los derechos y el Estado de derecho, teniendo como método las elecciones abiertas
entre partidos en competencia y toma de decisiones mediante la regla de la mayoría, resulta
preferible, estoy a favor; puesto que, la democracia asegura que los gobernantes traten a los
gobernados con igual consideración y respeto libre de la dominación arbitraria, ya que es
primordial que los procesos democráticos se ajusten a las exigencias de los individuos
mediante reformas electorales ,que al final no sean superadas por el poder de la minoría que
menoscaba los objetivos de la ciudadanía mayoritaria.