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Boletín Criminológico Director: Per Stangeland

Coordinadora: Mª José Garrido de los Santos


Publicado por la Sección de Málaga del IAIC
Facultad de Derecho, Universidad de Málaga
Campus de Teatinos, 29071 MALAGA
Tel: (95) 213 23 25 - Fax: (95) 213 22 42
Depósito legal: MA 857/1996 ISSN:1137-2427
Internet: Http:/ / emn.derecho.uma.es/crimi/
En este boletín se presenta un resumen de parte de la tesis doctoral que con el título «La relación entre malos
tratos demésticos y homicidios entre parejas. Tratamiento criminológico» fue defendida por Anabel Cerezo Domín-
guez, en la Universidad de Málaga el 15 de octubre de 1998. El trabajo será objeto de una próxima publicación en
donde se pondrán a disposición de los interesados todos los abundantes y variados resultados obtenidos. Ahora se
trata, simplemente, de dar una rápida referencia de un conjunto de datos sobre los homicidios entre parejas cuya
relevancia aconseja ponerlos cuanto antes de manifiesto.
El problema de la violencia en la pareja nos indigna, y la opinión pública reclama medidas. Sin embargo, estas
medidas deben basarse en conocimientos ciertos sobre el asunto que se quiere arreglar. Amenazas graves o malos
tratos repetidos fueron denunciados a la policía, en el año 1996, en 16.375 casos. En el mismo año ocurrieron 114
homicidios entre parejas. ¿Quiénes de todos los que denuncian malos tratos están en situación de verdadero peligro
para su propia vida? ¿Qué tipo de medidas pueden dar protección eficaz a una mujer cuyo marido le amenaza de
muerte? El análisis de las circunstancias de los homicidios ocurridos nos ayuda a diseñar medidas para prevenir
tragedias similares en el futuro.

El homicidio en la pareja Autora:


Ana Isabel Cerezo Dominguez
El poder de difusión que deten- su vez en un aspecto concreto de
tan los medios de comunicación ha este grave problema social: el ho- tos domésticos y este tipo de ho-
ayudado a dar a conocer a la so- micidio entre parejas, término que micidios.
ciedad las situaciones de angustia comprende a aquellos homicidios Con este fin se ha procedido a
y temor en las que viven determi- que tienen lugar entre personas realizar un estudio empírico que
nadas mujeres que sufren malos que mantenían o habían manteni- permitiese verificar la hipótesis
tratos domésticos. Este hecho está do antes de la comisión del delito relativa a que la mayor parte de
ocasionando un gran debate nacio- una relación de tipo afectivo- los homicidios que tienen lugar
nal sobre el problema y, principal- sexual durante un cierto período de entre parejas son el último episo-
mente, sobre la forma en que se tiempo. dio de una historia anterior de ma-
pueden evitar los casos de violen- El pincipal objetivo del trabajo los tratos domésticos. Es decir,
cia doméstica. ha consistido en demostrar la re- que, en una proporción considera-
El trabajo realizado se basa a lación existente entre los malos tra- ble, las víctimas de homicidios ha-
brán sido, a su vez, víctimas de vio-
Figura 1. Indice de homicidios en función de lencia doméstica.
la relación entre agresor y víctima. Se ha comprobado estadística-
mente que los homicidios entre
Málaga 1984-1994 (N=432) parejas constituyen algo más de la
mitad de los perpetrados entre fa-
Parejas miliares y el 12% del total de ho-
heterosexuale micidios (Figura 1).
Amigos o
conocido 12% Aunque la víctima de un delito
33% Padres e hijo de homicidio causado por su pare-
6% ja puede ser tanto la mujer como
Otros familiar el hombre, es una realidad esta-
6% dística en el presente estudio que
la mujer es la víctima más común
Entre en estos casos (87% de mujeres
homosexuale Desconocido víctimas conyugales frente al 13%
2% Vecino 17% de hombres). Se puede afirmar
4% Sin determin que las mujeres fueron 6 veces
20%

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Metodología abundando más en los hombres que
La metodología empleada ha consistido en la recopilación y análisis de en las mujeres homicidas.
todos los homicidios ocurridos en la provincia malagueña y en Melilla
durante los años 1984 a 1994: un total de 432 casos.
Los principales factores de
El método utilizado para su recopilación ha consistido en el análisis de riesgo que presentan estas pa-
documentos. Si bien las estadísticas oficiales, principalmente las proceden- rejas son los siguientes:
tes de la instancia policial, son fiables y válidas, no han servido por si solas 1. De los homicidios entre parejas
para la elaboración del estudio dada la escasa información que aportan que componen la muestra del es-
sobre estos delitos. De ahí que me haya decantado por la utilización adicio- tudio, se ha podido constatar que
nal de otro tipo de fuentes de información tales como los archivos policia- en un 64% uno de los miembros
les, documentos judiciales y noticias periodísticas. Concretamente, se han de la pareja (normalmente la vícti-
recogido datos procedentes de los informes policiales del Grupo de Homici- ma) venía sufriendo, desde un
dios adscrito al Departamento de Policía Judicial de la Comisaría Provincial tiempo anterior al suceso letal,
de Málaga, de las sentencias y sumarios judiciales localizados en la Audien- malos tratos físicos o psíquicos de
cia Provincial de esta capital y de las noticias procedentes de un periódico
de ámbito local. forma habitual. Los malos tratos
La muestra general abarca aquellos delitos calificados jurídicamente como físicos fueron más comunes que
homicidios, asesinatos, parricidios e infanticidios, tanto consumados como los psíquicos. De ahí que se puede
intentados. La submuestra de homicidios entre parejas, compuesta por 53 afirmar que la presencia de malos
casos, comprende a las parejas de derecho y a las de hecho, así como a tratos habituales en la pareja es un
aquellas que, aún no conviviendo juntas, mantienen una relación afectiva, factor de riesgo indicativo de la
como novios o amantes. También incluye los homicidios ocasionados entre posibilidad de que esa violencia
personas que habían mantenido, con anterioridad al hecho delictivo, una desemboque en un delito de homi-
relación afectivo-sexual, quedando excluidos de la submuestra los supues- cidio. (Figura 2).
tos de relaciones sexuales esporádicas así como aquellos de carácter homo- 2. El 50% de las parejas objeto de
sexual.
El análisis de los homicidios ha sido de carácter tanto cuantitativo como
estudio se encontraban separadas
cualitativo. El propósito del análisis cuantitativo ha consistido en contabi- o la víctima había anunciado al
lizar la incidencia de estos delitos y conocer determinadas variables tales agresor en alguna ocasión su pro-
como el sexo del homicida y de la víctima, la zona o área geográfica donde se pósito de abandonarle. En casi la
cometió el delito, el lugar de comisión, la época del año, el día de la semana mitad de los casos de ruptura de
y la hora del día, el arma empleada, el suicidio posterior del agresor y la la relación habían transcurrido
espontaneidad o premeditación de la acción homicida. A través del estudio menos de seis meses entre la se-
cualitativo se han podido dilucidar los factores de riesgo de las parejas que paración y el homicidio, siendo el
se ven envueltas en un homicidio así como las causas que han motivado la tiempo medio de 9,24 meses. Este
comisión de este delito. dato permite aseverar que la se-
paración está asociada con un in-
más propensas que los hombres a la media de puñaladas propinadas cremento del riesgo de comisión
ser víctimas de homicidios por su a las víctimas. de un delito de homicidio.
pareja. Es un rasgo propio de este tipo Otros factores de riesgo re-
La mayor parte de los homici- de homicidios el hecho de que el lacionados con los autores de
dios entre parejas tienen lugar en ofensor se suicide, o intente suici- homicidios entre parejas coinci-
el domicilio de ambos miembros darse sin conseguirlo, justo des- den con los tradicionalmente se-
(49%), siendo el dormitorio de ma- pués de haber terminado con la ñalados en otros estudios respec-
trimonio la habitación de la casa vida de su pareja o en un momen- to a los maltratadores:
donde con mayor frecuencia se to posterior, cuando es detenido o 1. La edad que tienen las perso-
cometen estos delitos (50%), se- cuando es ingresado en prisión. nas que suelen cometer estos de-
guido de otras habitaciones como Así, de 16 casos de la muestra litos oscila entre los treinta y cua-
la cocina (16%) o el salón (5%). general de homicidas que se ha- renta años de edad, presentando
La mayoría de los homicidios bían suicidado tras la comisión del un mayor riesgo las víctimas que
entre parejas tuvieron lugar duran- hecho delictivo, 10 (62,5%) tuvie- tienen entre veinte y treinta años.
te las vacaciones de Navidad, Se- ron lugar entre parejas. Todos los
mana Santa o verano y durante las casos, excepto uno, pertenecían a 2. En más de la mitad de los casos
horas del almuerzo, no habiéndo- hombres suicidas que convivían de los que se obtuvo información
se encontrado un criterio unifor- con sus parejas y que utilizaron un el homicida era adicto al alcohol,
me para determinar el día de la arma de fuego para matarlas y a las drogas o a ambas sustancias.
semana en el que éstos se produ- para posteriormente acabar con Concretamente, el alcohol apare-
cen con más frecuencia. sus vidas. ce como la sustancia más común-
El arma blanca fue la más em- La mayor parte de estos suce- mente consumida por estas perso-
pleada en estos casos (58,5%), sos tuvieron lugar en el transcurso nas.
destacando estos sucesos especial- de una riña o discusión (54,7%),
mente por su brutalidad y sadis- aunque los casos premeditados 3. La mayor parte de los homici-
mo, como se constata al calcular también fueron frecuentes (34%), das y víctimas pertenecen a la cla-

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se social trabajadora. Todo pare-
ce indicar que las personas con
pocos recursos económicos tienen
Figura 2. Indice de homicidios entre
un estilo de vida y unos valores función de la existencia de violencia
sociales distintos a los de las per- entre ellos. Málaga 1984-1994 (N=
sonas de clases acomodadas, lo
que les lleva a responder a sus pro-
blemas con actos violentos e irre- Malos tra Sin violen
flexivos. psíquico habitua
21% 17%
4. Estas personas suelen presen-
tar determinados trastornos de la
personalidad derivados en parte de
antecedentes de familias de origen
rotas por diferentes motivos: se-
paraciones o fallecimiento. La au- Malos tra
Sin determ
sencia durante la infancia de la fi- físicos
gura de la madre o del padre, en 19%
43%
forma de carencia materna afec-
tiva, rechazos parentales eviden-
tes o figuras parentales inadecua-
das, impide al sujeto lograr una sea porque se pone en entredicho probado que se trataba de celos
personalidad madura. Los rasgos su autoridad y virilidad a través de infundados, de celotipias.
de personalidad más comunes que la supuesta infidelidad de su espo- Hay otros supuestos en los que
presentan son la desconfianza ha- sa. Estas personas sienten cómo el homicidio no es más que una
cia los demás, la suspicacia, la hi- han perdido un objeto de su pro- forma extrema de la violencia físi-
pervigilancia e hipersensibilidad y piedad, algo que les pertenecía y ca que habitualmente ejerce el
la preocupación enfermiza por la les daba su categoría e identidad agresor sobre la víctima. En un
fidelidad de la pareja. como seres sociales. momento dado y por circunstan-
A partir de esta descripción glo- cias difíciles de precisar, siendo
5. Las personas que atentan con- bal, y en función de los motivos éstas usualmente situacionales, el
tra la vida de sus parejas tienen que llevan al hombre a cometer un hombre violento se excede en la
pocos antecedentes penales, lo que conyugicidio, se ha procedido a violencia comúnmente empleada.
lleva a afirmar que la mayor peli- realizar diversas descripciones si- El motivo desencadenante de
grosidad criminal del agresor no es tuacionales orientadas cada una de la acción homicida en el caso del
un factor que añada un mayor ries- ellas en el motivo predominante, hombre desatendido se concreta
go de muerte a la víctima de un diferenciándose así entre el hom- en el incumplimiento de los debe-
homicidio entre parejas. bre abandonado, el hombre celo- res conyugales por parte de su
En relación a las causas que so, el hombre violento, el hombre esposa. El agresor atenta contra
motivan la comisión de estos desatendido, el hombre insultado y la vida de su pareja porque ésta
delitos, se han encontrado diferen- el hombre que padece una enfer- descuida lo que él considera de-
cias en torno al sexo del homicida. medad mental. ben ser sus obligaciones como
Si bien tradicionalmente se ha par- La idea del honor juega, en el mujer, esposa y madre.
tido del carácter pasional de los caso del hombre al que su pare- El hombre insultado es aquel
conyugicidios, en base a la idea de ja ha abandonado, un papel muy que atenta contra la vida de su
que éstos son cometidos por un importante en la decisión de aten- pareja en un momento de inesta-
marido que ha de lavar con san- tar contra la vida de ésta. En es- bilidad emocional ante los insultos
gre la honra mancillada por una tos casos, el homicida está defen- e injurias que ésta le profiere. En
esposa infiel, la realidad encontra- diendo su honra, su imagen como estos casos, el homicidio viene pre-
da, sin embargo, es más variada. persona que ha sido abandonada cedido por un atentado al honor
La mayor parte de los delitos y humillada. unido a la puesta en entredicho de
de homicidio entre parejas perpe- El factor que desencadena la la autoridad del marido, que no to-
trados por hombres se producen a acción homicida en el hombre ce- lera que su pareja le insulte y hu-
causa del sentimiento insuperable loso suele ser la sospecha de que mille.
en el autor de pérdida de algo que su pareja mantiene relaciones con Por último, en algunos casos,
le pertenece. Ello hace que la mo- otra persona, situación que el ho- la enfermedad mental del homi-
tivación gire en torno al abandono micida no puede superar ni sopor- cida ha sido el factor que ha des-
de la víctima o a los celos. Estos tar, ya que se pone en duda su po- encadenado el homicidio.
hombres ven cómo su poder coti- der matrimonial a través de la infi- Las mujeres, en cambio, sue-
diano les es arrebatado, sea por- delidad de su esposa. En la mayor len atentar contra la vida de sus
que su pareja se separa de ellos, parte de las ocasiones se ha com- parejas como defensa ante un ata-

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que inicial de éstas o ante situa- llevaban conviviendo con sus agre- anonimato que presentan, pueden
ciones de total desesperación y sores más de 22 años. ser lugares apropiados para pro-
desemparo. La mayoría han sido Todo ello parece indicar que a tegerlas durante el período de tiem-
previamente víctimas de maltrato mayor tiempo de permanencia con po de riesgo. La protección poli-
por sus parejas. Así, después de el maltratador, mayor probabilidad cial, en este sentido, resultará tam-
sufrir durante varios años com- existe de que éste atente contra la bién imprescindible. Nada impide,
portamientos abusivos, ven en el vida de su pareja, una vez que ésta por otro lado, que el Estado prote-
homicidio la única salida posible a decide abandonarle. A este grupo ja a las víctimas en riesgo de modo
su interminable padecimiento. En de riesgo es al que, entiendo, hay similar a como lo hace con deter-
esas circunstancias, en las que que proteger en mayor medida. A minados testigos de causas crimi-
perciben cómo el comportamiento mi entender esto sólo se logrará a nales, a través de cambios de iden-
violento de sus parejas está total- través de la reducción en la medi- tidad y domicilio. Al mismo tiem-
mente fuera de control y temen por da de lo posible de la exposición al po, y para los casos de las muje-
su propia vida y/o por la de sus hi- riesgo, es decir, de evitar el en- res que se niegan a abandonar su
jos, atentan contra sus maltratado- cuentro entre el agresor y la vícti- domicilio, se deben llevar a cabo
res. ma potencial, sobre todo durante campañas de divulgación preven-
De nada sirve este exhaustivo los primeros meses que siguen a tivas de homicidios entre
examen sino logra informar sobre la separación. parejas,con el ob-jeto de advertir
futuras políticas de prevención. Básicamente dos pueden ser a tales mujeres maltratadas del
Con razón, los recientemente apro- las medidas alternativas que el peligro que corren sus vidas y, por
bados Planes contra la violencia Estado puede adoptar para conse- lo tanto,de las medidas de auto-
doméstica incluyen propuestas ten- guir este objetivo: incidir en la li- protección que deben tomar.
dentes a erradicar la comisión de bertad ambulatoria del agresor Propongo algunas, tales como
homicidios conyugales a través de mediante su inocuización o prote- asegurar el domicilio frente a po-
la prevencion de futuros casos de ger a la víctima. sibles incursiones de su pareja
malos tratos domésticos. Pero, en La primera de éstas se logra (cambiando las cerraduras, aña-
mi opinión, esto no es suficiente. mediante el ingreso en prisión pre- diendo más cerrojos, poniendo re-
Las medidas estratégicas a adop- ventiva del agresor, siendo ésta jas en las ventanas o aleccionan-
tar para reducir el índice de homi- una medida cautelar cuya puesta do a los hijos para que no dejen
cidios entre parejas no sólo pue- en práctica entraña notables difi- entrar al padre en la casa); poner
den consistir en la toma de deci- cultades desde el punto de vista fuera de alcance cuchillos u otros
siones que persigan prevenir futu- legal. objetos inciso-punzantes; tener a
ros sucesos de malos tratos do- Otra solución menos problemá- mano teléfonos de urgencia, espe-
mésticos. Desde mi punto de vis- tica es la facultad que se le otorga cialmente el de la policía o el de
ta, resultaría más apropiada la al juez para imponer como medida algún familiar o amigo; tener pla-
adopción de medidas específicas cautelar el alejamiento del agresor nificada una vía de escape del do-
de prevención tendentes a salva- de los lugares donde habitualmen- micilio y una bolsa preparada con
guardar la vida de las mujeres que te se encuentra la víctima. Pero todos los documentos y objetos
presentan determinados factores ella no es eficaz en determinados necesarios; o contar a los vecinos
de riesgo de ser víctimas de un casos. Nada tiene que perder la su situación para que éstos estén
delito de conyugicidio. persona que, habiendo tomado la pendientes de cualquier suceso
Según el estudio llevado a cabo, resolución de acabar con la vida anormal y avisen a la policía.
las personas que presentan un de su pareja, incumple esta prohi- En suma, pese a que estamos
mayor riesgo de ser víctimas de bición. De ahí que esta medida de viviendo actualmente un importante
un homicidio por parte de sus pa- protección, que se está proponien- cambio social en relación al pro-
rejas son aquellas mujeres que lle- do como la panacea, no sea eficaz blema de la violencia doméstica,
van casadas más de 12 años, han en determinados casos. de tal modo que se están adoptan-
recibido malos tratos físicos habi- En mi opinión, conseguir que la do, desde diferentes ámbitos, so-
tuales y amenazas de muerte por víctima no sea mortalmente agre- luciones prácticas que ponen de
parte de sus parejas, han abando- dida se logra incidiendo sobre la relieve que éste ha dejado de ser
nado a su agresor y llevan separa- protección de las víctimas, en es- un problema de carácter privado,
das de hecho menos de nueve pecial asegurándose de que su el futuro inmediato no se divisa
meses. Se ha podido comprobar pareja desconozca su paradero. La esperanzador. El origen del proble-
que, dentro de este grupo, existe adopción de determinadas medidas ma, enraizado en la propia estruc-
uno de alto riesgo, en el cual los de carácter socio-asistencial, poli- tura de nuestra sociedad, no per-
predictores coincidieron en todos cial o judicial en este sentido po- mite atisbar una solución rápida y
los casos. Se trata de aquellas drían contribuir a proteger a la víc- fácil, en cuanto requiere una evo-
mujeres que, encontrándose sepa- tima potencial de este tipo de su- lución de las concepciones socia-
radas y habiendo sufrido malos tra- cesos. les que están en la base del pro-
tos físicos y amenazas de muerte, Las Casas de acogida, dado el blema.

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