Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
Si con el libro Cuando las imágenes toman poner en funcionamiento su propio punto
posición. El ojo de la historia 1, Georges Didi- crítico y su campo de cognoscibilidad. En
Huberman expone el concepto de montaje tal sentido, Remontajes al tiempo padecido, se
como noción clave para comprender los pregunta por el papel que desempeñan las
signiicados estético-político desarrollado imágenes en la legibilidad de la historia. Es
por Bertol Brech en su Arbeitsjournal o esta inquietud la que atraviesa los dos textos
Diario de trabajo; y que de acuerdo con principales y los dos apéndices recopilados
el historiador francés, implicó “una toma en este segundo volumen de El ojo de la
de posición” por parte del escritor alemán historia.
respecto de los acontecimientos históricos
El primer texto, “Abrir los campos, cerrar
que se desarrollaron durante la segunda
los ojos: imagen, historia, legibilidad”, se
guerra mundial.2 Con el libro Remontajes al
centra en reconstruir los mecanismos y
tiempo padecido. El ojo de la historia 2, se nos
las condiciones de visibilidad y legibilidad
introduce en la imagen como documento,
de aquellas imágenes cinematográicas
como archivo, como memoria visual
que captaron el momento de apertura de
del desastre –campos de concentración,
los campos de concentración Nazi y su
guerras y violencia política- y, a partir
posterior montaje como discursos acerca
de ahí, se lleva a cabo una interpretación
del horror. Siguiendo los planteamientos
sobre aquellas imágenes –cinematográicas
teóricos de Walter Benjamin respecto de la
y fotográicas- que tienen el potencial de
legibilidad de la historia y su articulación
articularse como “imágenes dialécticas”;
como visibilidad concreta e inmanente;
esto es, como imágenes que son capaces de
Georges Didi-Huberman.Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Juan Pablo Silva Escobar,
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2, Julio 2017, 303-308
ISSN 0719-8213
DOI:http://dx.doi.org/10.23854/autoc.v0i2.21
303
Juan Pablo Silva Escobar, Georges Didi-Huberman.
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
Didi-Huberman propone que las imágenes Fuller. Para ello, fue necesario primero
que logran trascender como mera evidencia adentrarse en un proceso que permitiera
son aquellas construcciones visuales “temporalizar las imágenes que nos restan” (p.
que consiguen articularse como índice 30, cursivas en el original); con la inalidad
histórico; es decir, son imágenes que no sólo de abrir los campos bajo un mismo gesto,
conjugan un tiempo histórico determinado “de cerrar los ojos de los muertos (gesto ético
al cual pertenecen y que eventualmente especialmente necesario en la apertura de
pueden arrojar luz sobre el pasado; sino un campo) y de mantener los ojos abiertos
que al mismo tiempo exponen un régimen sobre los muertos (acto de conocimiento y
de historicidad, vale decir, maniiestan una vigilancia necesarios sesenta años después)”
suerte de relación social con el tiempo; que (p. 49, cursivas en el original). Para ello,
hace de la imagen un espacio simbólico Weiss convenció a Fuller que volviera no
en el que tiene lugar aquello que Walter sólo a revisitar el campo liberado –hoy
Benjamin llamó “dialéctica en reposo”. prácticamente destruido- sino también que
revisitara y confrontara sus recuerdos con
Para dar cuenta de la imagen como
las imágenes que había producido en 1945;
legibilidad de la historia, Didi-Huberman
de manera que son las imágenes las que
se focaliza primero en analizar las imágenes
interrogan la memoria de Fuller, son las
que, en 1945, Samuel Fuller ilmó durante
imágenes las que al ser remontadas abren
la liberación del campo de concentración
la posibilidad de una dialéctización, pues,
de Falkenau. Se sugiere que esas imágenes,
“son las imágenes mismas las que, a pesar de
en cuanto “documento en bruto” (p. 46),
su madurez, interrogan al testigo: al tomar
muestran el intento por humanizar el
la palabra él les devolverá la posibilidad de
desastre del exterminio Judío, puesto que
ser verdaderamente ‘miradas’, ‘leídas’, es
los soldados “al intentar abrir un campo,
decir ‘entendidas’” (p. 51); como un intento
abrieron en el horror un espacio y un tiempo
por articular lo que Fuller llamó “una breve
para la dignidad de los muertos” (p. 55,
lección de humanidad” (p. 56).
cursivas en el original). Una dignidad que
se expresa mediante el ritual funerario La lectura que Didi-Huberman hace de
organizado por las Fuerzas Aliadas, y estos dos momentos fílmicos en tanto
que fueron sutilmente registrada por el visibilidades que contribuyen en la
lente del soldado Fuller. Posteriormente, legibilidad de la historia en un momento
Didi-Huberman analiza el remontaje que de horror y destrucción de la condición
cuarenta años después realiza el cineasta humana, nos lleva a pensar acerca de
Emil Weiss, quien intenta volver visible y los procesos de cognición que acarrean
legible, dentro de un contexto actual, los determinadas construcciones visuales,
silenciosos veinticinco minutos que ilmó y como éstas contribuyen a evidenciar y
304
Juan Pablo Silva Escobar, Georges Didi-Huberman.
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
305
Juan Pablo Silva Escobar, Georges Didi-Huberman.
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
306
Juan Pablo Silva Escobar, Georges Didi-Huberman.
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
nazis-; el campo de Bram –mediatizado 209). Por otro lado, la obra de Boltanski se
por el lente de Centelles- exhibía una cierta articula como un trabajo desde/sobre la
“blandura de estado”, en la medida que el memoria, una suerte de desmenuzamiento
campo debía “albergar” es decir “proteger”, del tiempo a partir del cual se busca
salvaguardar, cuidar a los refugiados de la articular un discurso visual que procura
guerra civil española, y no comportarse conjugar un yo ficcionalizado. Un yo “que
como ese círculo de infierno, de miseria, a menudo parece hablar de él (…) cuando
de humillación y muerte que vemos en no hace, en realidad, sino hablar de los
la mayoría de las fotos. De ahí que las otros, es decir de nosotros, de todos nosotros,
imágenes de Centelles se articulan como desde ese ángulo finalmente impersonal
una mirada política que revela el punto de la especie humana confrontada con la
crítico en el que los refugiados son acogidos historia” (p. 210). Didi-Huberman sugiere
como rehenes, como reclusos despojados que en la obra de Boltanski se configura
de su condición política. La potencia visual como un montaje de las cosas pequeñas,
de estas fotografías de 1939 se localiza en intrascendentes –como su puesta en escena
el acto de desplazamiento desde donde de un montón de ropa usada- que gracias
el humillado mira al humillado y, con a un efecto de refracción cambia el sentido
ello, expone una imagen que pretende de esas cosas insignificantes, banales o
articular una legibilidad de la historia cotidianas, y las consagra bajo una forma
desde la experiencia padecida que, en reconocible de aura cultural. Un aura que
última instancia, “modifica la perspectiva trasciende la mimesis e instala el sentido
temporal que deviene [en] experiencia –mítico si se quiere- como una cuestión
adquirida, la de una experiencia susceptible que nos involucra a todos y todas. De este
a ser transmitida en el futuro” (p. 199). modo las instalaciones, las imágenes y el
video arte de Boltanski son siempre un
Finalmente, el libro se cierra con el apéndice
intento utópico por consagrar una obra
2 que lleva por título “Gran juguete mortal”.
al colectivo en donde el público “debería
Aquí se nos introduce en la obra del artista
sentirse individualmente reconocido,
visual Christian Boltanski quien a través de
concernido, mirado. No es el espectador
instalaciones conceptuales, fotografías y
que paga su entrada al Gran Palais el que
video arte nos interpela a pensar la imagen
debe ‘reconocer’ la obra, sino la obra
desde una ontología de lo semejante.
misma la que debe ‘reconocer’ a cada uno
“Toda su obra vacila entre la posibilidad
que la mira” (p. 209).
de una empatía y la imposibilidad del
solipsismo, la terrible compasión para con En suma, la invitación que nos hace
los otros y la no menos terrible soledad de Georges Didi-Huberman es a intentar
nuestra posición en la especie humana” (p. abrir los ojos ante la historia. Abrirlos a
307
Juan Pablo Silva Escobar, Georges Didi-Huberman.
Remontajes al tiempo padecido. El ojo de la historia 2. Buenos Aires. Editorial Biblos, 2015, 239 pp. Traducción: Marina Califano.
Autoctonía. Revista de Ciencias Sociales e Historia, Vol. I, N°2
308