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EL MERCADER DE VENECIA

La película es una adaptación de un clásico de uno de los autores mas


reconocidos de la historia, William shakespeare, dramaturgo y poeta de origen
inglés.La trama general está dividida en cinco actos, durante los cuales se va
desarrollando todo un drama alrededor de los personajes principales. Es una
película en el cual están mezclados varios puntos importantes como lo son el valor
de la enemistad, el amor, la confianza, pero también podemos ver venganza, odio,
injusticia y revancha. El mercader de Venecia es una obra literaria escrita por
William Shakespeare entre los años 1596 - 1598. De inicio es necesario
mencionar que dentro de la obra, existe una relación jurídica literaria, en primer
lugar por los personajes tanto principales como secundarios (shylock, antonio,,
basanio, porcia, salanio, graciano, selerio, nerissa, jessica, entre otros)En segunda
instancia el lugar donde se desarrolla la obra, Venecia que es una ciudad llena de
mercaderes su honorable tribunal; y en tercer lugar, está el nivel socioeconómico
que caracterizan a los personajes de dicha obra, el cual la mayoría de estos, es un
gran prestigio económico. El mercader de Venecia es el trasfondo legal de la obra.
Tanto el comienzo de la trama – la celebración de un contrato – el debate jurídico
en un tribunal sobre la validez no de ese contrato y esto permite analizar analizar
la obra desde el punto de vista jurídico y practicar el uso de alguna instituciones
legales, más allá de la ficción. La historia se centra en un acontecimiento decisivo:
el deseo de Bassanio de conquistar y contraer matrimonio con una bella y rica
heredera de Porcia de Belmonte, pero para poder lograr su cometido tiene que
pedir dinero prestado a su mejor amigo El Mercader Antonio, Famoso por hacer
prestamos sin cobrar intereses. A consecuencia de que este comerciante tuviese
invertida la totalidad de su fortuna en el mar, varios de sus barcos con destinos
diferentes no puede hacer ese préstamo a su amigo, pero le propone ser deudor
de un usurero, Shylock, un odiado judío avaro y cruel quien había sido humillado
en varias ocasiones por Antonio, pero que accede hacer el préstamo a Bassanio,
sin cobrar intereses y con la única condición que en caso de incumplimiento del
contrato de los tres meses acordados para cubrir el pago, el reclamaría una libra
de carne del lugar que estipule a su antojo del cuerpo de Antonio, este último
accede confiado en que podría pagar la deuda incluso un mes antes de lo
acordado, y así es como van ante un notario para sellar el contrato.

Después de haber firmado dicho contrato, bassanio ofrece un banquete en donde


es invitado el usurero Shylock, y es durante dicha cena donde otro de sus amigos
lorenzo aprovecha que el judío se encuentra fuera de casa, para robar a la hija del
usurero, Jessica, una bella joven que se avergüenza de tener un padre tan avaro,
por lo cual huye con lorenzo llevándose consigo lotes de joyas y de dinero para
poder emprender su escape. Al descubrí esto enfurece y se llena más de odio,
trascurre los tres meses acordados para cancelar la deuda y Antonio no tiene
forma de devolver el mutuo ya que todas sus riquezas se encuentran invertida en
su barcos y mercancía, y faltando poco para cumplirse el plazo de pago, Antonio
tiene una gran pérdida económica, perdida que le impide de volver el mutuo.
como lo había dicho anteriormente, Shylock se encuentre muy enfurecido por lo
ocurrido con su hija, y con el complimiento del pago de la deuda, Shylock
encuentra la ocasión perfecta para eliminar a Antonio, quien era su enemigo, y
solicita ante el Dux de Venecia la ejecución de la cláusula penal y Antonio es
encarcelado.

Bassanio parte rumbo a Belmonte, con el claro objetivo de conquistar a Porcia,


quien aparte de ser muy bella también posee una gran herencia de su padre junto
con la condición de casarse únicamente con el hombre que logre descubrir una
foto de ella de uno de los tres cofres que dejo su padre, uno de oro, uno de plata y
otro de plomo. Muchos príncipes y jóvenes habían fracasado en tal intento, hasta
que llego bassanio, el fiel enamorado de porcia no se dejó llevar por los materiales
preciosos de los cofres de oro y plata, sino que eligió el cofre de plomo, donde
pudo descubrir la foto de su amada porcia y por consiguiente la aprobación para
poder hacerla su esposa y disfrutar juntos de su amor y riqueza.

Por otro lado, Nerissa quien fungía como doncella de porcia, también habría
descubierto su amor por Graciano, amigo de bassanio y es asi como deciden que
se casarían al mismo tiempo. Al contraer nupcias, ambas damas obsequian como
prueba de su amor un anillo a sus esposos, haciéndolos prometer que nunca se lo
quitarían, regalarían o venderían, puesto que significaría el fin de su amor
prometido.

Reunidos celebrando sus bodas, bassanio con porcia, Graciano y nerissa, reciben
la visita de lorenzo con Jessica, quienes llevaban una carta de Antonio a bassanio,
en la cual se entera de las malas noticias, de los fracasos y naufragios de las
expediciones de su amigo y comenta que el Judío esta en planes de hacer pagar
su pago ya que Antonio ha quedado en banca rota y no tiene como cubrir el
préstamo, aunque Shylock no esta dispuesto a recibir ni veinte veces lo que le
presto con el fin de cobrar venganza y persigue día y noche a dux de Venecia para
que se le haga justicia.

Porcia enterada de la situación ofrece toda su ayuda económica a su esposo


bassanio, a sabiendas por el mismo que su mejor amigo Antonio lo ayudo para
poder ir a conquistarla a ella, y es así como le dice a su amado que parta a
Venecia arreglar sus asuntos, y que ella y nerissa estarían esperándolos como si
fuesen viudas por sus amados.
Bassanio quien se encuentra con su esposa, porcia; en casa de esta, es
informado por medio de una carta lo que está ocurriendo en Venecia con su mejor
amigo, Antonio, le informan que Shylock ha solicitado que se le cancele la fianza
por incumplimiento del acuerdo realizado entre ello y pide que se le cumpla la
única clausula existente, la entrega de la libra de carne cortada por el mismo y
escoge que esta sea del pecho, cerca del corazón, su intención principal es
asesinarlo. Por otro lado, su esposa sigue buscando la forma de ayudar a Antonio.
cuando Bassanio llega al juicio solicita pagar la deuda y duplicar el valor pero el
judío se niega a aceptar el dinero y exige el pago de su fianza, sin importarle las
suplicas de todos, el solo piensa en venganza y en eliminar a el mercader, el Dux
trata de interferir a favor de Antonio, pero este está obligado a respetar el pacto
firmado por los dos hombres, este no puede negar el curso de la ley porque si los
privilegios que los extranjeros tiene en Venecia no se respetaran se pondría en
duda la justicia del estado, cuando están en pleno juicio se corre la voz un joven
abogado especializado en resolver casos difíciles ha llegado a Venecia, y
entonces se presenta ante el tribunal como una especie de amicus curiae, el joven
abogado se trata de porcia quien se tuvo que disfrazar de hombre para poder
intervenir en el caso ya que las mujeres no se les permitía ejercer la abogacía ya
en el tribunal, porcia analiza el caso y lo expone de la forma más imparcial posible,
porcia hace un pedido de mercy, aunque Shylock no quiere otra cosa diferente a la
ejecución del pagare.

al darse cuenta de que su solicitud de clemencia no fue respondida de la forma


que ella deseaba, comienza por admitir la extrita legalidad del reclamo efectuado
por el judío, lo que causa en el una reacción positiva. viendo así al joven abogado
como un juez, justo y sabio. Y cuando finalmente parcia dictamina que puede
llevarse a cabo la ejecución del contrato, este se dispone a matar a Antonio y en el
mismo instante el joven abogado le recuerda que el documento lo autoriza a
cobrarse estrictamente una libra de carne. pero sin derramar un gota de sangre. le
aclara que esas son las palabras textuales del pagare. por ende, en el caso de
que derrame una sola gota de sangre. incumplirá en el acuerdo pactado, y como
consecuencia todas las propiedades y bienes de shylock sean confiscados a favor
del estado.

En consecuencia, para Antonio no es solo un hombre, es un deudor, y no un


deudor cualquiera. No nos debe extrañar la facilidad con la que contrae su
extraordinario compromiso de una libra de carne. Es un negociante, un armador,
habituado a asumir diariamente los riesgos más graves. Podemos admirar, sin
embargo, la altiva indiferencia con la cual, una vez producida su ruina y luego que
ha comprendido la inflexibilidad de su adversario, marcha hacia la ejecución. A su
criterio, la clave del personaje parece estar en algunos versos de la escena del
juicio donde se felicita de escapar por medio de la muerte al destino ordinario de
los deudores arruinados, que después de haber perdido su fortuna deben todavía
arrastrar una vida de miseria. Y agrega Carbonnier (1974): “si no viviera en una
época que condena categóricamente el suicidio, sin ninguna duda Antonio se
hubiera destruido; pertenece a la raza de los deudores que elige no sobrevivir a su
ruina”. (p. 289).

En fin, el problema que nos plantea El Mercader de Venecia, es de una enorme


complejidad. Tenemos en primer lugar, la consideración de un conjunto de
principios relativos al cumplimiento mismo del contrato, como manifestación de la
voluntad de las partes -como veremos más adelante-; en segundo término, la
misma consideración de la demanda del acreedor, como ejercicio abusivo del
derecho de crédito; un tercer aspecto, como ya lo hemos expuesto más arriba, el
juego de una idea rectora en materia de interpretación contractual, que es el
principio de buena fe; en cuarto lugar, la olvidada regla del equilibrio en las
prestaciones o el equilibrio de intereses, norma de interpretación ésta que obliga a
considerar los contratos, en caso de duda, a favor de la mayor reciprocidad de
intereses.

De todas maneras, y aunque no podemos pasar por alto que nos encontramos
frente a una obra literaria de carácter dramático, en donde los caracteres humanos
y las situaciones generadas por las diferentes personalidades de sus
protagonistas se exageran para lograr determinados efectos y estados de ánimo
en el lector, Shakespeare maneja con gran destreza el uso de tecnicismos
jurídicos que normalmente no están al alcance de una persona común. Sin
embargo, se ha podido establecer que la relación de nuestro autor con el universo
jurídico es todo menos accidental. En efecto, los críticos a menudo han señalado
su espíritu jurídico, su capacidad para pesar cuidadosamente los pro y los contra
de cada uno de los puntos que aborda. Y cuando, llegado a la madurez, solicitó y
obtuvo el derecho a un blasón, eligió una divisa elocuente: “no sin derecho” Por
consiguiente, no nos encontramos frente a un improvisado en materia jurídica, y
por ello, salvando las distancias, el Mercader de Venecia se nos parece como un
caso de aplicación de la doctrina de la inflexibilidad y absoluta necesidad del
cumplimiento del contrato. En efecto, la amistad revela la esencia societaria del
hombre, lo cual la vuelve analógica con la justicia ya que es indudable que
sociedad y justicia se encuentran causalmente implicadas: no es posible la
existencia de una sociedad sin justicia, pero ella solo puede existir en una
comunidad, lo que nos revela un caso patente de involución de causas, como
apreciaba Tello. Entonces, amistad y justicia integran toda relación intersubjetiva.
Únicamente la participación en una misma comunidad hace necesario que ellas se
encuentren presentes, pues las mismas participan de la índole societaria de su
sujeto. Nos encontramos, pues, en el centro mismo del Derecho.

Sin duda, esta es la lección más importante que nos deja nuestra obra, a la que
bien podríamos subtitular: Una meditación acerca de la justicia. Porque ese es el
efecto que El Mercader de Venecia produce una y otra vez en el lector:
eventualmente, la justicia en el cumplimiento del pacto; ciertamente, la nulidad de
la extraña cláusula exigida por Shylock (¡no leamos el drama, sin embargo, a la luz
de una teoría jurídica de las nulidades!); la justicia ínsita en el cumplimiento de la
ley de Venecia y, eventualmente, también, la consideración acerca de la justicia o
injusticia de la solución de Porcia al hard case planteado en la obra. Todo este
conjunto de situaciones y suscitaciones creadas por la trama magistral de
Shakespeare no se hubieran producido sin un mínimo de amistad existente entre
los personajes del drama y máximamente, la que hay entre Antonio y Bassanio,
que lleva a que el primero prácticamente se inmole con tal de lograr el bienestar
de su amigo, aceptando la firma del contrato fatal cuya ejecución lleva a la
descripción de la escena judicial que se transforma en el meollo de la obra. Y es
que, así como la injusticia hace imposible la amistad, la amistad hace innecesaria
la justicia, aunque cuando la amistad falla hay que recurrir al fallo de la justicia.
Debe señalarse también, desde luego, el interés del Dux en solucionar
amigablemente el problema, aunque ello se motive en el resguardo de la
seguridad jurídica que ha de imperar en el estado de Venecia. Por ende, la
amistad ha de ser un constitutivo esencial en la relación entre el ciudadano y la
ley. Consecuentemente -creemos nosotros- en la interpretación que deba hacer el
jurista de las normas legales. Ello supone que el intérprete no deba situarse en
una posición sobre los ciudadanos, sino entre ellos. Y ello es lo contrario de
considerar al Juez como un superhombre que puede, no solo resolver conflictos
sino incluso legislar y gobernar.

En ese caso no estaríamos en el plano de una relación de amistad, por la sencilla


razón de que no hay equivalencia posible entre el ciudadano común y el
magistrado judicial. Mas modernamente, por ejemplo, el neoconstitucionalismo
lleva fatalmente a romper esta especie de igualdad que en definitiva aleja a los
individuos de la ley y el Derecho.

MIGUEL HOYOS RIVERO

KAROLAY PEREZ CORREA

ANGELA MARIA LOPEZ VERGARA

JULIO OLEA ARROYAVE

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