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El que madruga dios lo ayuda, pues con esa frase convincente despertó mis ansias por visitar un nuevo

punto turístico. Estamos hablando del distrito de Pachacamac.


Ubicado a 35 minutos al Sur de Lima, este distrito es una buena opción para conocer más del Perú.
Pachacamac se caracteriza por tener un clima templado como máximo 28° y mínimo 14°, por ello se debe
llevar ropa ligera y no olvidar una chompa por el cambio de clima. Salir a un nuevo lugar no es una cosa
de todos los días por ello lo indispensable siempre es la movilidad que me trasladará, son unas Cousters
de color blanco con rayas marrones que se identifican con un letrero que dice San Bartolo, Punta
hermosa, playas que se encuentran durante el recorrido, es ese el carro que se debo tomar para que me
lleve a ese destino
Estos carros uno lo puede tomar en la vía expresa de Javier Prado o en Evitamiento, al precio de S/. 3.00
por persona. Dentro del carro, vamos viendo el recorrido para llegar a nuestro destino, cruzamos algunos
distritos, me alberga un sentimiento de dejar afuera  todas las preocupaciones y me encadena esa
emoción de conocer un  nuevo lugar.
Pasamos un peaje que nos da la bienvenida al valle de Lurín, no tendré que bajarme aquí pues si quiero
conocer un nuevo destino es mejor aprender de su historia, de la época prehispánica del Dios Sol, del
Dios Pachacamac y de sus antiguos dioses.
Llegando ya al distrito de pachacamac me entusiasmo por las ganas de recorrer el Museo de Sitio, un
establecimiento que alberga la historia del Perú, sus expresiones gráficas como son los mantos, 
cerámicas y el Santuario del valle Sagrado de Pachacamac; nombrando algunos templos por ejemplo:
Templo de la Luna, Templo de Pachacamac, Urpi Huac entre otros.
Ya en las afueras del Museo, tomamos un carro con destino a la plaza de armas de Pachacámac, el costo
es S/.1.00 por persona, para ello cruzamos Lurin, su río, los diferentes restaurantes que ofrecen
chicharrones a los visitantes que transitan en carros propios u otros.
Ya llegando al cruce que nos sitúa en Pachacamac, vemos que en el camino también se observan
diferentes restaurantes invitando al visitante al degustar de los platos. Por fin  llegamos al centro en donde
encontramos una plaza de armas la cual se encuentra a los pobladores descansando en las sombras de
unos frondosos árboles, así como el comercio ambulatorio que  ofrece los dulce

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