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de los procesos de desarrollo en el niño, como los estados infantiles predominantes, sus emociones
y temperamentos y el desarrollo de apego con quienes los cuidan, así como sus reacciones a los
extraños y a la separación de aquellos con quienes están apegados. Es importante mostrar que el
niño no se desarrolla en un sólo ámbito, pues el desarrollo es integral, y sólo para su estudio se
encuentra dividido, porque sea cual sea la actividad que realiza el niño, se están desarrollando
todas sus capacidades, pues se asocian unas con otras, ya que están estrechamente relacionadas.
como del contexto social y cultural. Tanto los genes de los padres influirán en el desarrollo del
niño, haciéndolo más hábil en ciertas actividades, es una capacidad innata que se trae consigo
contexto en que se encuentran; y el medio ambiente es aquel medio en el que se lleva a cabo el
desarrollo del niño y donde se adquieren nuevas capacidades, este bien puede ser impuesto por los
como por aspectos ambientales, el problema fundamental es conocer cómo se relacionan los unos
con los otros” (Palacios, 1995). La herencia y el ambiente se complementan, para que el niño
ESTADOS INFANTILES
menciona que existen seis estados por los cuales el bebé pasa varias veces al día. Dos son estados
y posiblemente lo despierte. Durante este sueño ligero, también puede ver los movimientos
rápidos de sus ojos por debajo de sus párpados cerrados. Él alternará entre estos dos estados de
sueño, pasando por cada uno de ellos a determinada hora. Algunas veces saldrá de estos estados
ojos se harán hacia atrás bajo sus párpados y posiblemente se estire, bostece o levante sus brazos
y piernas.
En el estado cuatro una vez que se despierta, pasará a uno de los tres estados
restantes. Puede ser que se despierte, esté feliz y alerta pero relativamente sin movimiento.
Se encuentra en el estado cinco cuando él bebé, puede estar alerta, feliz y muy
activo.
TEMPERAMENTO INFANTIL
Las características que forman el temperamento en los niños son innatas, suelen tener un
gran componente genético, se manifiestan ya desde los primeros días/semanas, y cambian muy
poco con el tiempo. Aunque el temperamento sí que se modula y se matiza con las experiencias,
manera en que las ven y abordan los padres, influyen mucho en que la conducta del niño se
adapte al entorno o choque con él, y también en que el niño las vea como buenas o malas. Por
ejemplo, un niño muy activo e inquieto, encajará bien en una familia donde los padres son
también muy activos; pero chocará bastante si los padres tienden a ser más tranquilos y poco
activos.
TIPOS DE TEMPERAMENTOS
nuestro “estilo” personal y está presente en nosotros desde que nacemos. Existen tres tipos de
Los niños de temperamento fácil son, por lo general, niños contentos, activos, desde el
clasificaron como “difíciles” a los niños con ritmos biológicos irregulares, respuestas
ejemplo, en forma de irritabilidad o de llanto; no obstante, también suelen mostrar de forma más
marcada las emociones positivas. Los niños de adaptación lenta son generalmente observadores,
y tranquilos, y pueden necesitar más tiempo para adaptarse a situaciones nuevas. Los niños con
temperamentos activos tienen rutinas variadas (por ejemplo, para comer y dormir) y tienden a
EMOCIONES INFANTILES
El niño es capaz de reconocer emociones positivas o negativas desde los primeros meses
de vida. Las emociones infantiles son mucho más ricas de lo que los niños son capaces de
expresar, saben discriminar las emociones, antes de ser capaces de nombrarlas. Los niños muy
pequeños manifiestan empatía respecto a las emociones de otros, que se pueden detectar en
edades tempranas, de uno a los tres años son emociones básicas: alegría, tristeza, ira (enfado) y
miedo.
Las funciones de las emociones pueden situarse en dos niveles; la sensibilidad emocional
y la respuesta emocional, siendo éstas últimas, las que guían y organizan la conducta, jugando un
papel crucial en la infancia cómo señales comunicativas. Hay que tener en cuenta que tenemos
dos mentes, una que piensa y otra que siente (Goleman, 1995).
Cuando los niños aprenden y dominan las habilidades sociales y emocionales, esto les
ayuda no solo en la escuela, sino también en todos los aspectos vitales, si los padres y los hijos
practican y emplean estas habilidades en casa, los efectos son doblemente beneficiosos (Lantieri,
2009).
acentuada, con los ruidos fuertes casi invariablemente suscitan una marcada reacción desde el
mismo momento del nacimiento. Por ejemplo, un golpe de martillo sobre una barra de acero,
acelerada con pronunciados cambios vasomotores, cierre repentino del ojo, apretar de los puños,
fruncir de los labios. El otro estímulo que provoca la reacción de miedo es la pérdida de la base
factible de observar desde el nacimiento, pero con mayor facilidad entre los 10 y 15 días. Si con
delicadeza se les sujeta la cabeza con las manos, los brazos adosados a lo largo del cuerpo, y se
les mantiene las piernas estrechamente unidas, la conducta de ira empieza a manifestarse. Hasta
hoy no han sido catalogados en forma completa los elementos de la respuesta no aprendida de la
ira. Empero, algunos de éstos son de fácil observación: la rigidez de todo el cuerpo, los
acariciar la piel, las cosquillas, el mecimiento suave, el coqueteo de la barbilla. Esta respuesta es
particularmente provocada con mayor facilidad por la estimulación de aquellas zonas que -a falta
de un término más apropiado-, podemos llamar erógenas: tetillas, labios y órganos sexuales".
emocionales del niño son muy sencillas y escasos los estímulos que las suscitan, según hace
observar él mismo. Pero, ciertamente -argumenta Watson- estamos aún lejos de poder concluir.
niño o la niña y su madre o padre. “Hay ciertas maneras de establecer un vínculo que favorezca
el desarrollo emocional del recién nacido: estar presente y cubrir las necesidades que el niño
El vínculo afectivo le enseña al bebé el primer modelo a seguir para entablar relaciones
protección: es el primer paso para generar el vínculo madre hijo con el bebé. Si bien es cierto que
después del nacimiento. Cuando el bebé nace ya conoce a su madre, la ha oído hablar durante
La teoría del apego es la teoría que describe la dinámica de largo plazo de las relaciones
entre los seres humanos. Su principio más importante declara que un recién nacido necesita
desarrollar una relación con al menos un cuidador principal para que su desarrollo social y
La fase de apego se presenta entre los seis u ocho meses, dependiendo de cuando culmine
la fase de formación y tiene una duración aproximada de dos años. Es a partir de esta etapa que
se forma un verdadero vínculo de apego. La muestra más clara de esto es que, cuando el niño es
Asimismo, es en esta etapa que puede notarse un rechazo físico por parte del niño ante
los desconocidos, quienes puede identificar como amenazas. Es por esto que durante el
desarrollo de esta etapa las acciones del infante están orientadas a obtener la atención de su
Para concluir puedo mencionar que estudiar el desarrollo del niño nos ha llevado a
conocer las diversas etapas de su crecimiento y a la vez aprendimos que factores son los que más
influyen para que se desempeñen mejor en los diversos entornos. Es importante destacar que la
vida del ser humano se va formando poco a poco en los primeros años de vida y que éstos serán
los que definan nuestra personalidad, actitudes y quienes somos en el futuro. Se debe tener
paciencia y atención constante a los pequeños para que se les garanticé una buena formación, así
también pudimos conocer situaciones de riesgo a las que todavía hoy en día los niños se
enfrentan como la pobreza extrema, la migración, la violencia, etc., somos personas pensantes