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El control interno permite que una entidad ejecute sus operaciones de forma
eficiente, proteja sus recursos y presente información financiera oportuna y
confiable.
El control interno, de acuerdo con la Ley 87 de 1993, comprende el conjunto de
planes, métodos, principios, normas, procedimientos y mecanismos diseñados por
una empresa para promover la eficiencia en las operaciones, salvaguardar los
recursos de la entidad y verificar la veracidad de la información financiera y
administrativa. En resumen, su propósito es estimular la observancia de las
políticas y lograr el cumplimiento de los objetivos programados.
Elementos básicos del control interno
Un sistema de control interno efectivo debería abarcar por lo menos los siguientes
puntos:
d. Políticas para verificar que la idoneidad del personal sea proporcional a sus
responsabilidades.
Ejerce desde fuera del proceso en consideración, por ejemplo, las auditorias
tradicionales (financiera, legal, de gestión, física, entre otras). Su propósito es
asegurar la cohesión organizacional en el dominio donde tal proceso se realiza
con respecto a parámetros acordados previamente. Este tipo de control suele ser
esporádico, pero regular.
Que es el riesgo
Las auditorias son muy importantes debido a ellas las empresas saben el nivel de
rendimiento y las falencias también hace que las empresas estén regidas
conforme la ley lo establezca..
Es una ventaja llevar esas clases de control debido a que con ellas se minimizan
grandes riesgos contables a la hora de presentar nuestra información ante los
diferentes entes de control.