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El perecimiento debe tener lugar antes del fallecimiento del testador; o después, si
de todas maneras hubiere perecido, aunque el heredero encargado de entregarla
estuviere en mora de hacerlo. Porque si así no fuere y la cosa perece después de
la apertura de la sucesión, no tiene lugar la caducidad del legado ya que el
legatario se había convertido en propietario y por tanto soporta los riesgos (res
perit domine: la cosa perece para su dueño).
4) No uso del derecho de retracto: Dice el Art. 956 del C.C.: "...cuando el
testador haya vendido con pacto de retracto la cosa legada y se haya
rescatado en vida, el legado quedará subsistente. Si no la ha rescatado, el
legado valdrá únicamente respecto del derecho de rescate".
Hay nulidad en sentido estricto, cuando todo el testamento o una de sus cláusulas
carece de validez por faltarle un requisito esencial o por inobservancia de una
norma inderogable. Es nulo el testamento que no se hace por escrito o que siendo
escrito carece de las solemnidades prescritas por la Ley (Art. 882 C.C.).
La Revocación.
Clases de Revocación.
Según abarque la totalidad del testamento anterior, o sólo una parte de él, se
habla de revocación total o parcial (Art. 991 C.C.). Igualmente, se distinguen la
forma expresa y la tácita. Será expresa, cuando precisamente se señala la
voluntad de revocar la totalidad de las disposiciones testamentaria o una o más de
las cláusulas contenidas en el testamento . asimismo, será tacita, cuando el
documento es destruido voluntariamente dictado por el testador siendo uno nuevo
en cuyas disposiciones se contrarían todas o algunas de las anteriores, aunque no
se indique expresamente la voluntad de revocarlas.
Así mismo de estas formas voluntarias de revocación expresa o tácita puede tener
lugar de la Revocación testamentaria por el mandato de la ley, interpretado lo que
presume es la voluntad del testador. Así, lo señala el Art 951 del C.C cuando
expresa: “ Las disposiciones a título universal o particular hechas por quien al
tiempo de su testamento no tenía o ignora tener hijos o descendientes, aún
solamente concedidos, son revocables por la existencia o supervivencia de un hijo
descubierta aquella o verificada Rafa desojes de la muerte del testamento o en
otro testamento o en el otro posterior o anterior, no revocado ni siquiera
tácticamente, el caso de existencia o supervivencia de hijos o descendientes de
estos”
La Legitima.
Acuerdo con la ley sustantiva de Venezuela en el Art. 883 antes mencionado, los
herederos legitimarios, serían: los descendientes (Hijos), los ascendientes
(Padres) y su cónyuge sobrevivientes que no estén separado legalmente de
bienes.
Hijos: Los hijos tienen derecho, en concepto de legítima, a las dos terceras
partes del haber hereditario del padre y de la madre. Si alguno de los hijos
hubiera muerto antes, los descendientes de éste tienen el mismo derecho
que le hubiera correspondido a aquél.
Padres y Ascendientes: Por lo que respecta a la legítima de los padres y
ascendientes, el artículo 809 del Código Civil señala que constituye la
legítima de los padres o ascendientes la mitad del haber hereditario de los
hijos o descendientes. Como excepción a ésta regla, se establece que, si
los padres o ascendientes concurren con el cónyuge viudo, la cuantía de la
legítima de los mismos se verá reducida a un tercio de la herencia.
La legítima reservada a los padres se divide entre los dos por partes iguales,
en el caso de que uno de ellos haya muerto antes, corresponderá entera al que
viva.
Cónyuge: En cuanto a la legítima del cónyuge viudo, el artículo 834 del
Codigo Civil señala que el cónyuge viudo no separado judicialmente o de
hecho tendrá la condición de legitimario, y como tal, tendrá reconocido un
derecho de usufructo parcial sobre la herencia con independencia de la
concurrencia o no de descendientes o ascendientes.
Dicha circunstancia no afecta a la existencia del derecho en sí, sino que hará
variar el contenido del derecho en función de la cuota sobre la herencia
aplicable en cada caso.
El cónyuge viudo separado judicialmente o de hecho perderá su derecho al
usufructo viudal.
Si entre los cónyuges separados ha mediado reconciliación notificada al juzgado
que conoció de la separación, el sobreviviente conserva sus derechos. Por tanto,
el derecho del cónyuge viudo está condicionado al hecho de que el cónyuge que
lo alega no esté separado de hecho o por sentencia firme.
Por lo que respecta al cálculo de la legítima del cónyuge viudo hay que señalar
que varía en función de la concurrencia o no con descendientes o ascendientes:
La Participación.
Una primera aproximación a lo que significa la participación, sería la división de los
bienes de la herencia entre todos los sucesores, a quienes seles entrega bienes
en cancelación de su cuota hereditaria. Maffia nos dice de la participación que,
“por la obra de esta la cuota aritmética que cada uno de los herederos tiene sobre
la comunidad ha de traducirse materialmente en bienes determinados, sobre los
cuales adquieran derechos exclusivos”, mientras que Polacco refiere que se trata
de una ficción a la que califica como permuta.
La participación termina siendo la forma como concluye la comunidad hereditaria,
y por esta se dividen los bienes de la herencia a favor de cada uno de los
herederos, a quienes se les cancela su cuota entregándolas bienes en proporción
a dicha cuota.
Naturaleza Jurídica.
DECLARATIVA: La participación crea una situación jurídica diversa de la existencia durante la comunidad, que sustituye el
régimen jurídico de la indivisión por uno de propiedades distintas y determinadas. Pero no invalida la naturaleza declarativa
de la división de la herencia. Su causa justificadora (de la división) es la eliminación de la incerteza, como función
económico-jurídica. Solo luego de la participación, cada heredero adquiere derechos exclusivos sobre los bienes
considerados singularmente. Pero, no hay en la adjudicación la creación de un derecho distinto del que se justifica en la
cuenta del llamamiento hereditario. Asi mismo sobre la base de ese derecho la participación fija el contenido patrimonial de
la adquisición hereditaria a titulo singular. Antes de la partición, el contenido patrimonial era idéntico (está dado por la
cuenta del llamamiento), aun cuando fuese diversa la situación jurídica por depender de la indivisión y por recaer a titulo
universal, sobre una alícuota del patrimonio.
Art. 1068 C.C.: La partición procede aunque uno de los coherederos haya gozado
separadamente de una parte de la herencia a menos que haya habido una
posesión suficiente para la prescripción, cuando haya lugar a esta.
Efectos.
El efecto fundamental es que cada coheredero sea reputado sucesor exclusivo e
inmediato de todos los bienes que integran su cuota, desde el momento de la
apertura de la sucesión, lo que se conoce como el efecto declarativo de la
sucesión.