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TEST GESTALTICO VISOMOTOR LAURETTA BENDER

El test guestáltico visomotor de Bender es fácil de aplicar, es fiable y permite valorar tanto
la madurez perceptiva del niño, así como su ajuste emocional y la presencia de posibles
alteraciones del desarrollo.
El test guestáltico visomotor de Bender se utiliza para evaluar el desarrollo de la
inteligencia infantil, así como posibles discapacidades o desórdenes cerebrales orgánicos.
Se parte de la idea de que atendiendo la función guestáltica visomotora se pueden analizar
procesos como la percepción, la motricidad fina, la memoria, conceptos temporales y
espaciales…
En este instrumento se parte de la idea de que la percepción visual depende del grado de
maduración del sistema nervioso central, así como de la estimulación que reciba el niño. De
este modo, valorando estas dimensiones, se puede apreciar también aspectos tan
importantes como el lenguaje, la memoria, la coordinación visomotora e incluso posibles
trastornos como el autismo. Veamos más datos a continuación.
“El organismo lo sabe todo. Nosotros sabemos muy poco.
La intuición es la inteligencia del organismo”.
-Fritz Perls-

Test guestáltico visomotor de Bender ¿cuál es su finalidad?


El test guestáltico visomotor de Bender es un instrumento clínico que consiste básicamente
en pedirle al niño que copie 9 figuras en un papel en blanco. Se le presenta unas tarjetas de
referencia y otras en blanco donde deberá dibujar con toda la precisión que le sea posible,
esos patrones visuales.
 Se parte además de la premisa de que, cumplidos los 11 años, todo niño con un
desarrollo madurativo normal, llevará a cabo una copia exacta. 
 La psicóloga E.M.Koppitz fue una de las personas que más profundizaron en el test
guestáltico visomotor de Bender. Tal y como nos explicó en sus trabajos, los
procesos que llevan a cabo los niños en esta prueba son múltiples. En primer lugar,
deben integrar el patrón estimular visual, para después intentar reproducirlo.
 En medio de este objetivo, el cerebro del niño debe llevar a cabo múltiples y
precisas tareas. Estas implican activar sistemas sensoriales aferentes y eferentes,
debe integrar esa figura, representarla mentalmente, recordarla, reproducirla con la
mano…
 De este modo, y según la doctora Koppitz, se pueden valorar hasta cinco aspectos:
madurez para el aprendizaje, problemas en la lectura, dificultades emocionales,
posibles lesiones cerebrales y deficiencias mentales.
¿Cómo se aplica el test guestáltico visomotor de Bender?
La prueba se aplica a niños entre 5 y 11 años. Asimismo, en el test guestáltico visomotor de
Bender, el psicólogo ofrece al niño 9 tarjetas blancas con un diseño en blanco y negro que
deberá copiar con toda la exactitud que le sea posible.
 Se le suele dar la siguiente instrucción: “Este es el primer dibujo para que lo
copies. Haz uno igual”.
 El niño no puede rotar las tarjetas. Debe copiar el dibujo en la misma posición en
que se entrega la tarjeta.
 El tiempo máximo para realizar cada copia son 5 minutos.
¿Cómo se evalúa?
El test guestáltico visomotor de Bender se evalúa siguiendo unas pautas muy concretas que
nos especificó la psicóloga E.M.Koppitz. Son las siguientes.
Categorías de corrección
Cada ítem se valorará entre cero o uno en base a si hay errores en la copia o si se considera
que la translación de la figura de referencia es exacta. Para ello se evalúan estas cuatro
categorías.
 Distorsión de la forma. Se aprecia si hay una desproporción considerable en
cuanto a la forma, si una figura es más grande que la otra, si está achatada,
deformada, etc.
 Rotación. Hay niños que son incapaces de copiar la misma posición de la figura
original. Algunos la trasladan con rotaciones de 45º o incluso más.
 Dificultades de integración. En este caso, puede ocurrir que el niño omita figuras,
puntos, secuencias, etc.
 Perseveración. A partir de los 5 años ya aparece la capacidad de perseverar en el
ser humano. En este caso, y en el test guestáltico visomotor de Bender, podemos
verlo en su esfuerzo o dejadez a la hora de copiar figuras espirales, ahí donde deben
atender tanto las rotaciones como los planos.

Aspectos emocionales e individuales


En esta prueba, al igual que en cualquier otra orientada a medir el nivel de maduración de
los niños, se tienen en cuenta diferentes detalles en cuanto a la ejecución. El primero, que
cada pequeño presenta un patrón madurativo propio. Los tiempos, los procesos y esos hitos
donde alcanzar una serie de competencias concretas son diferentes para cada niño.
Esto también se tiene en cuenta en el test de Bender. No obstante, Lauretta Bender, llevó a
cabo una profunda investigación donde crear una tabla evolutiva para resumir la capacidad
de reproducir las figuras de la prueba en cada tramo de edad. Así, estas son las que se
toman hoy como referencia y las cuales, siguen siendo fiables.
Por otro lado, y no menos interesante, E.M.Koppitz señaló que también pueden medirse
aspectos emocionales con esta prueba. Detalles como observar cómo algunos niños eligen
sustituir los dibujos de líneas onduladas por rayas o cómo optan por trazar figuras de gran
tamaño reflejaría cierta impulsividad u otros problemas que merecerían una evaluación
completa.
Estamos por tanto ante un instrumento que sigue vigente, que es útil y que puede darnos
datos interesantes.

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