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TRANSFUSIÓN, UTILIDAD Y PROCEDIMIENTO

La terapia transfusional, uno de los mayores logros de la medicina moderna, ha permitido


disminuir la mortalidad y prolongar y mejorar la calidad de vida de muchas personas con
diferentes trastornos. Su práctica sigue siendo un problema, ya que no existe un verdadero
consenso acerca de sus indicaciones. Se ha demostrado que el uso de guías en la práctica
transfusional disminuye el número de unidades transfundidas, favorece la transfusión del
componente más apropiado y mejora el servicio al paciente.

La transfusión de sangre es un procedimiento médico que consiste en hacer pasar sangre o


alguno de sus derivados de un donante a un receptor para reponer el volumen sanguíneo,
mejorar la hemoglobina y la capacidad de transporte de oxígeno y otras sustancias, corregir los
niveles séricos de proteínas o para compensar un déficit de los componentes de la sangre. La
transfusión de sangre está indicada para el tratamiento de pacientes que, en un momento
determinado, presentan una carencia de componentes sanguíneos que no puede ser sustituida
por otras alternativas.

Mediante la donación de sangre se pretende cubrir las necesidades de transfusión que


necesitan las personas enfermas. La donación es realizada principalmente por voluntarios o
familiares de los enfermos. Los países desarrollados suelen contar con un sistema que controla
las donaciones a través de los bancos de sangre. La sangre se extrae por medio de una punción
en el brazo y se trata para impedir su coagulación, posteriormente la sangre se separa en sus
componentes principales, plasma, plaquetas y glóbulos rojos. La sangre de los donantes es
posteriormente analizada, pasando un exhaustivo control que incluye numerosas pruebas para
detectar los principales virus que puede contener la sangre, como: pruebas para la detección
de anticuerpos irregulares, pruebas de serología infecciosa, pruebas para medir el nivel de
transaminasas y prueba del NAT.

La sangre es un bien escaso y no exento de riesgos. Por lo que sólo debe ser utilizada cuando
sea estrictamente necesaria. Escaso por el bajo número de donantes, por el aumento
constante de las necesidades de la medicina actual y por no disponer de un producto
alternativo. No exento de riesgos, porque a pesar de seleccionar minuciosamente a los
donantes, ser la donación un acto no retribuido y la mejora de las técnicas de detección de
agentes infecciosos, todavía persiste la posibilidad de transmitir infecciones y producir otros
efectos indeseables. Por ello hay que recordar que TODA TRANSFUSIÓN QUE NO ESTÁ
INDICADA ESTÁ CONTRAINDICADA.

La transfusión tiene aspectos legales, éticos, médicos y sociales peculiares, y debe estar basada
en el principio de máxima seguridad para el receptor. Por ello, antes de indicar un
hemoderivado hay que considerar los siguientes puntos:

1. Antes de indicar una transfusión los médicos debe considerar otras alternativas más seguras
antes de indicar la transfusión.

2. Es necesario el consentimiento informado previo del paciente, salvo situaciones de urgencia


vital.
3. Deben seguirse las recomendaciones de los expertos, como las de la “Guía sobre la
transfusión” elaborada por la Sociedad Española de Transfusión Sanguínea, actualizada de
forma periódica.

4. Ha de ser un tratamiento personalizado según la edad, la enfermedad de base, la


sintomatología, los datos analíticos y la reversibilidad del cuadro.

5. Se ha de seleccionar el producto idóneo y la dosis mínima para corregir los síntomas del
receptor.

6. Tras indicar la transfusión, es imprescindible que el Banco disponga de una muestra de


sangre del paciente correctamente etiquetada para realizar el grupo ABO y Rh(D), así como
para realizar las pruebas pretransfusionales preceptivas si se van a transfundir hematíes.

7. El protocolo de transfusión establecido por el Comité de Transfusión del centro ha de ser


conocido y seguido de forma estricta.

8. Antes de iniciar la transfusión la persona que transfunde verificará la correcta identificación


del receptor y del producto a transfundir.

9. Toda transfusión debe hacerse a través de un sistema con filtro de, al menos, 170 μm. No
debe mezclarse con ninguna solución a excepción de suero fisiológico sin aditivos. La
transfusión se iniciará muy lentamente y, tras comprobar que no se produce ninguna reacción,
se aumentará el ritmo de infusión.

10. El paciente debe estar supervisado durante la transfusión y, en caso de cualquier reacción
adversa debe seguirse el protocolo establecido.

11. En la historia clínica debe quedar constancia documental del tipo e identificación del
producto o productos transfundidos.

Los países desarrollados someten cada unidad de sangre donada a pruebas de laboratorio para
detectar la presencia de múltiples tipos de virus y bacterias como el VIH/SIDA, las hepatitis B y
C o la sífilis. Así, al realizar una transfusión sanguínea en los Estados Unidos, la American
Medical Association dijo en 2004 que la probabilidad de que una unidad de sangre sea
portadora de virus o bacterias es inferior a una entre 1,9 millones en el caso del VIH e inferior a
una entre un millón en el caso de la hepatitis C. En contraste, en 2008, la Organización Mundial
de la Salud reveló que en 31 países en desarrollo y con economías en transición no se
realizaban, en todas las unidades de sangre donada, pruebas para detectar la presencia de
virus o bacterias responsables de enfermedades infecciosas. Según informe del sitio oficial de
Cruz Roja/Media Luna Roja, del año 2007, las transfusiones de sangre contaminada ponen
vidas en peligro, porque pueden contagiar al receptor el VIH o los microorganismos
responsables de la hepatitis B, la hepatitis C, la sífilis, la enfermedad de Chagas, la malaria y
otras infecciones. La sangre contaminada por cualquiera de estos agentes patógenos no puede
ser transfundida y debe desecharse, lo que supone unos costes económicos adicionales. Estas
cuestiones son especialmente preocupantes en los países con escasez de sangre.
En el mundo, hasta cuatro millones de personas se han infectado con el VIH/SIDA por la
transfusión de sangre contaminada. La prevalencia de los agentes responsables de la hepatitis
B, la hepatitis C y la sífilis en la sangre donada sigue siendo inaceptablemente alta en muchos
países en desarrollo; la prevalencia de Trypanosoma cruzi (responsable de la enfermedad de
Chagas) en la sangre donada es un problema importante en algunos países de América del Sur
y América Central.

Muchos países carecen de políticas, procedimientos o recursos para garantizar la seguridad de


la sangre, sobre todo en zonas de África, Europa Oriental, Asia Central y Asia Meridional y Sur
Oriental, que se enfrentan a la pandemia de VIH/SIDA ya que son los que tienen la mayor
prevalencia de infecciones transmisibles por la sangre.

RIESGOS DE TRANSFUSION

A los donantes de sangre se les hace muchas preguntas acerca de su salud, su


comportamiento, y su historial de viaje para asegurar que el suministro de sangre es tan
seguro como se pueda. Tan solo las personas que pasan el sondeo pueden donar. La sangre
donada se analiza de acuerdo con las pautas nacionales. Si hay alguna duda sobre la fiabilidad
y seguridad de la sangre, se tira. Sin embargo sigue habiendo una pequeña posibilidad de que
algo pase inadvertido en el proceso de investigación. Para ver esto de manera objetiva,
miremos las posibilidades de contraer una enfermedad de una transfusión sanguínea:

 VIH: 1 de cada 2 millones de casos


 Hepatitis C: 1 en 1 millón de casos
 Hepatitis B: 1 en 137,000 casos

RIESGOS Y REACCIONES ADICIONALES DE LAS TRANSFUSIONES:

 Una reacción alérgica severa


 Un error humano
 Una contaminación bacteriológica
 Lesiones Agudas de los Pulmones Relacionadas con la Transfusión (una reacción
inmune que afecta a los pulmones de la persona)
 Fiebre, escalofríos, sarpullidos
 Una disminución temporal de la capacidad de luchar contra infecciones
Sobrecarga de líquidos

Estas reacciones pueden ser leves o severas. La mayoría de las reacciones leves no son
mortales cuando se tratan con rapidez. Las reacciones severas a las transfusiones pueden ser
mortales.

Las alternativas disponibles y cómo de bien funcionen dependerán de tu situación. Si necesitas


una transfusión, a veces se pueden usar medicamentos para ayudar a tu cuerpo a producir tu
propia sangre. Algunos medicamentos también se pueden usar para prevenir o controlar las
hemorragias. Si la pérdida de sangre es demasiado grande, o si estas en una situación que
puede ser potencialmente mortal, estas alternativas puede que no funcionen lo
suficientemente rápido como para ayudarte. En estos casos, no hay ninguna otra opción
excepto la de recibir una transfusión. Tienes derecho a rechazar la transfusión de sangre que
tu médico haya encargado. Debes de estar al corriente de los riesgos y consecuencias de no
aceptar una transfusión de sangre. Como paciente, tienes la responsabilidad de hablar con tu
médico sobre esto antes de tomar una decisión. Muy a menudo, los riesgos que con lleva el no
recibir una transfusión incluyen la muerte o incapacidad permanente.

El personal de salud, tomará tu presión sanguínea, tu pulso, y tu temperatura antes de que


comience la transfusión. La sangre se dará de forma intravenosa. Habrá dos enfermeras a tu
lado que controlarán la sangre antes de comenzar la transfusión. Una enfermera tomará tu
presión, pulso, y temperatura después de que la transfusión lleve funcionando durante 15
minutos, y más tarde de nuevo cuando se haya terminado la transfusión. La transfusión durará
entre 1 a 3 horas. Puede tardar un poco más, o incluso menos tiempo dependiendo de que
componente de sangre estés recibiendo.

Durante una transfusión puede ocurrir una reacción, desde un día después de la transfusión
hasta incluso varios meses después de la transfusión. Tu enfermera te vigilará de cerca para
localizar cualquier reacción. Si ocurre una reacción, se parará la transfusión.

HEMOCOMPONENTES

WEBGRAFIA

 http:// www.scielosp.org/
pdf/rpsp/ v13n2-3/15737.pdf
 http:// www.pisa.com.mx/
publicidad/ portal/enfermeria/
manual/ 4_1_6.htm
 http://www.clevelandclinic.org/health/shic/html/s14755.asp

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