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OBLIGACIONES

CONTENIDO I
I LA OBLIGACIÓN EN EL DERECHO II MODALIDADES DE LA OBLIGACIÓN III
OBLIGACIONES NATURALES IV PRINCIPALES FUENTES DEL DERECHO DE LAS
OBLIGACIONES V EL CONTRATO VI TEORÍA DE LA IMPREVISIÓN VII
DECLARACIÓN UNILATERAL DE LA VOLUNTAD VIII ENRIQUECIMIENTO
ILEGÍTIMO Y EL PAGO DE LO INDEBIDO IX GESTIÓN DE NEGOCIOS AJENOS X
HECHOS ILÍCITOS XI EL USO ABUSIVO DEL DERECHO

CONTENIDO II
XII OBLIGACIONES ESPECIALES XIII EN ATENCIÓN A LOS SUJETOS XIV EN
CONSIDERACIÓN AL OBJETO XV EL PAGO COMO OBJETO PRINCIPAL DE LAS
OBLIGACIONES XVI IMPUTACIÓN DEL PAGO XVII PRESUNCIÓN DE PAGO
XVIII OFRECIMIENTO DE PAGO Y CONSIGNACIÓN

CONTENIDO III
XIX EFECTOS DEL INCUMPLIMIENTO DE LAS OBLIGACIONES XX DERECHOS DE
LA VÍCTIMA DE UN HECHO ILÍCITO XXI CUMPLIMIENTO FORZOSO DE LA
OBLIGACIÓN CONVENCIONAL XXII EMBARGO, REMATE Y ADJUDICACIÓN
XXIII ACCIÓN OBLICUA XXIV ACCIÓN PAULIANA XXV ACCIÓN CONTRA LA
SIMULACIÓN XXVI SANEAMIENTO POR EVICCIÓN XXVII SANEAMIENTO POR
VICIOS OCULTOS XXVIII RESOLUCIÓN DE LAS OBLIGACIONES, RECISIÓN Y
FACULTAD DE RETENCIÓN XXIX PAGO DE DAÑOS Y PERJUICIOS XXX
RESPONSABILIDAD XXXI CONSECUENCIAS DE LA RESPONSABILIDAD XXXII
EXCLUYENTES DE RESPONSABILIDAD XXXIII TEORÍA DE LOS RIESGOS

CONTENIDO IV
XXXIV PRINCIPALES FORMAS DE TRANSMISIÓN DE LAS OBLIGACIONES XXXV
PRINCIPALES FORMAS DE MODIFICACIÓN DE LAS OBLIGACIONES XXXVI
CAUSAS DE EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES
CONTENIDO I
CAPÍTULO I
LA OBLIGACIÓN EN EL DERECHO

NOCIÓN: El Emperador Justiniano, definió la obligación como “Obligatio


est iuris vinculum, quo necessitate adstringimur alicaius solvendae rei
secundum nostrae civitatis iura”, es decir, “la obligación es un vínculo
jurídico que nos constriñe en la necesidad de pagar alguna cosa
conforme a las leyes de nuestra ciudad”.

CONCEPTO: Englobando todos los elementos de la obligación, podemos


definirla como la relación jurídica en virtud de la cual, un sujeto llamado
deudor, queda vinculado jurídicamente con otro, llamado acreedor, para
realizar en favor de éste una conducta que puede consistir en un dar,
hacer, no hacer o tolerar.

ESPECIES DE OBLIGACIÓN: Doctrinalmente podemos dividirlas en las


siguientes:

a) De dar: en aquellas en las que se transmiten derechos reales, de uso


o tenencia, sobre cosas determinadas o determinables.
b) De hacer: implican la prestación de un servicio, la realización de una
obra, en un tiempo y modo determinado.
c) Alternativas: en las que el deudor puede elegir entre dos o más
objetos prestacionales.
d) Facultativas: en las que existe una obligación accesoria sujeta a otra
principal; si se pierde la obligación principal sin culpa del deudor, se
extingue la obligación accesoria.
e) Divisibles: cuando la prestación puede cumplirse en partes.
f) Indivisibles: cuando por la propia naturaleza de la obligación, esta
no puede ser cumplida en partes.
ELEMENTOS DE LA OBLIGACIÓN: La relación jurídica se compone de tres
elementos:

1. Sujetos: Son las personas que participan en ella:

a) El acreedor: es el sujeto activo de la relación jurídica y es quien


tiene la facultad de exigir el cumplimiento. Posee un derecho
personal sobre el deudor.

b) El deudor: es el sujeto pasivo. Tiene la carga de cumplir con la


prestación convenida en favor del acreedor.

Puede haber pluralidad de acreedores, en cuyo caso cualquiera


puede exigir el cumplimiento de la obligación.
Existiendo pluralidad de deudores, cada uno queda obligado a
cumplir la obligación o la parte que le corresponda.
En el caso de la obligación mancomunada, cada acreedor sólo
puede exigir del deudor la parte que le corresponde y cada
deudor, igualmente, sólo debe pagar la parte que le
corresponde.
Mancomunidad = fragmentación de la deuda.

En la obligación solidaria, cuando es activa, cualquiera de los


acreedores puede reclamar la deuda en su totalidad y debe
responder a los demás por la parte que les corresponda. Cuando
se da la solidaridad pasiva, todos los deudores están obligados a
cumplir íntegramente la obligación.

2. Relación Jurídica: Es el vínculo que se establece entre los sujetos de


la obligación y en virtud del cual, el acreedor queda facultado para
exigir el cumplimiento de la prestación al deudor; y el deudor, queda
obligado a cumplir con la prestación en favor del primero.

3. Objeto: es la prestación debida o la deuda. Aquello que debe


darse, hacerse, abstenerse de hacer o tolerar y debe ser
jurídicamente posible.
CAPÍTULO II
MODALIDADES DE LA OBLIGACIÓN

NOCIÓN: Son los hechos que alteran o modifican la obligación mediante


la imposición de condiciones, términos, modos o cargas.
CONDICIÓN: Es la modalidad que afecta la existencia de la obligación,
por la sujeción a un acontecimiento futuro de realización incierta. Del
hecho de que se actualice esa condición, depende el nacimiento o
extinción de la obligación. Puede ser:

a) Suspensiva: cuando de su realización depende el nacimiento de la


obligación. La obligación se encuentra “suspendida” hasta en tanto
se dé la condición.

b) Resolutoria: cuando de su realización se deriva la extinción de la


obligación, restableciendo la situación jurídica anterior a su
nacimiento. La obligación se “resuelve” hasta que se dé la
condición. Mientras la condición no se actualice, la obligación
persiste.

TÉRMINO O PLAZO: Es un acontecimiento futuro de realización cierta (un


día que eventualmente va a llegar) que suspende o extingue los efectos
de una obligación. Afecta la exigibilidad de la obligación, en el sentido de
que ésta tiene vida jurídica, pero sus efectos pueden estar diferidos o con
fecha de extinción. Puede ser:

a) Plazo suspensivo: acontecimiento futuro de realización cierta y


necesaria para que surta efectos la obligación o el acto jurídico.
Mientras no llegue el día, la obligación existe pero no es exigible.

b) Plazo extintivo: acontecimiento futuro de realización cierta y


necesaria que extingue los efectos de una obligación o acto jurídico.
La obligación existe y es exigible durante todo el periodo de tiempo
que medie desde su nacimiento hasta la fecha del término extintivo.
Llegada esa fecha, se extingue la obligación y deja de ser exigible.
MODO O CARGA: Cuando una de las partes impone una prestación a la
otra, generando un derecho sujeto a gravamen. No afecta la existencia,
exigibilidad o naturaleza de la relación jurídica.

CAPÍTULO III
OBLIGACIONES NATURALES
NOCIÓN: Además de las obligaciones jurídicas o civiles, existen las morales
y las naturales. Las morales son intrínsecas a la persona, porque no
dependen de una autoridad ni de la presión social, sino que es la propia
persona la que, con base en sus valores, impone la razón sobre la voluntad.
Las obligaciones naturales, son las que carecen de fuerza coercitiva
exterior para exigir su cumplimiento. Es lícita pero no judicialmente exigible.

CAPÍTULO IV
PRINCIPALES FUENTES DEL DERECHO DE LAS OBLIGACIONES
NOCIÓN: Son aquellos hechos o actos jurídicos a partir de los cuales surge
la obligación, dejando a dos personas en situación de deudor y acreedor.
Para que nazca la obligación, los hechos necesariamente deben
actualizar supuestos previstos en la ley.
Conforme a la ley y a la doctrina, podemos identificar diversos hechos y
actos jurídicos que, dada su relevancia para el derecho, generan
obligaciones. Éstos son:
1. El contrato
2. La declaración unilateral de la voluntad
3. El enriquecimiento ilegítimo y el pago de lo indebido
4. La gestión de negocios
5. Los hechos ilícitos
6. El riesgo creado
CAPÍTULO V
EL CONTRATO
CONCEPTO: Es un acto jurídico bilateral que se constituye por el acuerdo
de voluntades de dos o más personas y que produce ciertas
consecuencias jurídicas, que pueden consistir en crear o transmitir
derechos y obligaciones.
EL CONVENIO: Conforme a la legislación civil, debe entenderse al
convenio como el género y al contrato como la especie. El convenio, es el
acto jurídico bilateral que crea, modifica, transfiere o extingue derechos y
obligaciones. El contrato, por su parte, es aquél que únicamente crea o
transmite derechos y obligaciones.

CAPÍTULO VI
TEORÍA DE LA IMPREVISIÓN
NOCIÓN: Consiste en la consecuencia del problema que se presenta
cuando las condiciones económicas de un contrato se alteran
sustancialmente y motivan el incumplimiento de la obligación o la
necesidad de revisar las condiciones económicas pactadas, por no prever
la alteración de las condiciones económicas que quedan fuera del
alcance de los contratantes y consecuentemente buscar el equilibrio de
las contraprestaciones recurriendo a los Tribunales, en razón del cambio en
las condiciones económicas, que ha ocasionado que las
contraprestaciones se vuelvan en exceso onerosas para alguna de las
partes.

Se da en los contratos conmutativos y de tracto sucesivo y busca modificar


los términos del contrato para evitar perjudicar a las partes, o bien, darle
terminación sin responsabilidad.
CAPÍTULO VII
DECLARACIÓN UNILATERAL DE LA VOLUNTAD
CONCEPTO: Es una fuente genérica de obligaciones que consiste en la
exteriorización de la voluntad sancionada por la ley. Implica para su autor
la necesidad jurídica de conservarse en aptitud de cumplir,
voluntariamente, una prestación en favor de una persona, determinada o
determinable. Toda persona con capacidad legal, puede obligarse por su
simple declaración de voluntad, siempre y cuando sea con un objeto lícito.
El Código Civil Federal, reconoce las siguientes:
a) Oferta al público: se hace dirigida a toda persona que pueda tener
conocimiento de ella, expresando los elementos de una prestación
que se ofrezca cumplir, con el ánimo de satisfacerla, si fuera el caso.

b) Promesa de recompensa: cuando la persona se compromete


alguna prestación en favor de quien llene determinada condición o
desempeñe cierto servicio, mediante anuncios u ofrecimientos
hechos al público, contrayendo la obligación de cumplir lo
prometido.

c) Estipulación en favor de terceros: al momento de celebrarse un


contrato, el estipulante declara a cargo del promitente cierta
obligación que deberá llevar a cabo en favor de un tercero. El
estipulante es quien tiene interés de que el promitente se obligue en
favor de un tercero; el promitente, es quien emite su voluntad,
obligándose en favor de un tercero, y; el tercero, es la persona ajena
al contrato que resulta beneficiado de la promesa.

d) Títulos civiles a la orden o al portador: el que expide el documento,


se obliga a disponer en beneficio de otro una prestación, por la
simple declaración que realice en el mismo. Puede incluso ser a
persona indeterminada –al portador.
CAPÍTULO VIII
ENRIQUECIMIENTO ILEGÍTIMO Y EL PAGO DE LO INDEBIDO

ENRIQUECIMIENTO ILEGÍTIMO: Deriva de un hecho voluntario lícito, cuando


aquel que sin justa causa se enriquece en perjuicio de otro, quedando
obligado a indemnizarlo en su empobrecimiento en la medida que él se ha
enriquecido. Consiste en el hecho de que no existe una causa que
legalmente justifique l disminución de un patrimonio y el aumento de otro.

PAGO DE LO INDEBIDO: cuando no habiendo relación jurídica entre dos


personas, una de ellas entrega una cosa a la otra con el propósito de
cumplir con una obligación inexistente, generándose un enriquecimiento
ilegal, en razón de que el que recibe el pago obtiene una ganancia en
perjuicio de quien paga y no tiene que hacerlo.

CAPÍTULO IX
GESTIÓN DE NEGOCIOS AJENOS

CONCEPTO: Se da cuando una persona interviene de manera voluntaria,


sin tener mandato ni obligaciones en los negocios de otra persona que
está ausente o impedida para atenderlos, con la finalidad de evitar que le
sean causados perjuicios o para que obtenga beneficios. El que sin
mandato o sin estar obligado a ello se encarga de un asunto de otro,
debe obrar conforme a los intereses del dueño del negocio.

OBLIGACIONES DE LOS SUJETOS: el gestor, que es quien obra por voluntad


propia en favor de otro, sin mandato, queda obligado en favor del
beneficiario, a desempeñar su encargo con toda la diligencia posible,
como si se tratara de un negocio en beneficio propio, conforme a los
intereses del dueño, avisar al dueño, rendir cuentas sobre su gestión, y si el
dueño no está conforme con lo realizado, regresar las cosas al estado en
que se encontraban antes de su gestión e indemnizar al dueño por los
daños y perjuicios que haya podido causar. El dueño, por su parte, queda
obligado a pagar los gastos hechos por el gestor, siempre y cuando se
haya gestionado útilmente el negocio, y responder de las obligaciones
contraídas por el gestor por su administración.

CAPÍTULO X
HECHOS ILÍCITOS

NOCIÓN: Hecho ilícito es toda conducta realizada por una persona y que
sea contraria a la ley o las buenas costumbres. Acarrea como
consecuencia la obligación de reparar el daño. Existen hechos ilícitos en
materia penal, en cuyo caso, si el ilícito se encuentra contemplado en la
ley penal, será sancionado por ésta. En caso de que el hecho
contravenga una disposición de carácter civil, entonces ésta será la que
determine la sanción, consistente en una indemnización por el daño
causado.

En consecuencia, se genera una responsabilidad (obligación), que puede


ser civil, penal, o ambas, y que constriñe al causante del daño a repararlo.

RESPONSABILIDAD CIVIL OBJETIVA O RIESGO CREADO: es una fuente de las


obligaciones, en virtud de la cual aquel que hace uso de mecanismos,
instrumentos, aparatos o substancias peligrosas por sí mismos, por la
velocidad que desarrollen, por su naturaleza explosiva o inflamable, por la
energía de la corriente eléctrica que conduzcan, o por otras causas
análogas, está obligada a responder del daño que causen aunque no
obre ilícitamente, a no ser que demuestre que ese daño se produjo por
culpa o negligencia inexcusable de la víctima.
CAPÍTULO XI
EL USO ABUSIVO DEL DERECHO

NOCIÓN: Cuando al ejercer un derecho se cause daño a otro, se genera


la obligación de indemnizarlo si se demuestra que el derecho sólo se
ejercitó a fin de causar un daño, sin utilidad para el titular del derecho. El
ejercicio de un derecho no puede ser ilimitado, por lo que todo derecho
tiene un límite y cuando el derecho se ejerce más allá de ese límite,
abusivamente y sin utilidad, entonces hay abuso del derecho.

Asimismo, la ley establece que no es lícito ejercitar el derecho de


propiedad de manera que su ejercicio no dé otro resultado que causar
perjuicios a un tercero, sin utilidad para el propietario.

Se diferencian los actos ilegales, que son aquellos que se ejecutan


violando la ley; los actos culpables, que se realizan dentro de la ley pero en
contravención a su intención y finalidad; y los actos excesivos, que se
ejercitan dentro de la ley pero ocasionando daños a terceros por los
riesgos.

CONTENIDO II
CAPÍTULO XII
OBLIGACIONES ESPECIALES

NOCIÓN: Existen ciertas obligaciones que, en virtud de la forma en la que


puede darse su cumplimiento, se clasifican atendiendo a la pluralidad de
los sujetos que intervienen en ella, o bien, en consideración al objeto con el
cual se debe de cumplir para considerar que fue satisfecha plenamente.
CAPÍTULO XIII
EN ATENCIÓN A LOS SUJETOS

NOCIÓN: En razón de la cantidad de sujetos que intervengan de manera


activa o pasiva dentro de la obligación, se clasifican en:

a) Mancomunadas: se da cuando existe más de un sujeto que puede


cumplir o exigir el cumplimiento de la obligación.

En caso de haber pluralidad de acreedores, cualquiera de ellos


puede exigir el cumplimiento de la obligación hasta por la parte que
le pertenece.

En caso de existir pluralidad de deudores, cada uno queda obligado


a cumplir la obligación en la parte que le corresponda.

Mancomunidad = fragmentación de la deuda.

b) Solidarias: existe pluralidad de sujetos activos (acreedores) o pasivos


(deudores):

En caso de pluralidad activa, cualquiera de los acreedores puede


reclamar el pago de la deuda y responderá a los demás acreedores
por la parte que a ellos les corresponda.

Habiendo solidaridad pasiva, cada uno de los deudores queda


obligado a cumplir íntegramente con la obligación, por lo que el
acreedor es libre de elegir a cuál de ellos se la exigirá.

c) Indivisibles: son aquellas en las que las prestaciones no pueden ser


cumplidas sino por entero, es decir, no son susceptibles de ser
divididas entre acreedores y deudores, a causa de los caracteres
naturales o convencionales de su objeto.

d) Disyuntivas: son las obligaciones pluripersonales en las que, existiendo


varios acreedores, sólo uno tendrá el derecho de recibir la
prestación; y en caso de existir varios deudores, sólo uno estará
obligado a cumplir con la prestación. En consecuencia, la pluralidad
de sujetos obligados, se reduce a uno solo, ya que los demás lo
están en carácter alternativo (uno u otro).

CAPÍTULO XIV
EN CONSIDERACIÓN AL OBJETO

NOCIÓN: Atendiendo al objeto de las obligaciones, es decir, la prestación


con la que deben ser cumplidas, pueden clasificarse de la siguiente
manera:

a) Obligaciones conjuntivas: Implica una pluralidad de objetos


contenidos en la prestación. Para cumplir con la prestación, el
deudor debe cumplir con la entrega de cada uno de ellos y la
obligación no se extinguirá hasta que se haya cumplido con cada
uno de los objetos. Es decir, la obligación recae sobre varios objetos
y por lo tanto el deudor debe realizar acumulativamente varias
prestaciones para liberarse de la obligación.

b) Obligaciones alternativas: en las que existen varios objetos sobre los


cuales el deudor se obliga a cumplir determinada prestación,
liberándose al cumplir solamente con una de ellas. El deudor tiene la
alternativa de dar o hacer la cosa “a”, o bien, dar o hacer la cosa
“b”, y en ambos casos se tendrá por cumplida su obligación.

c) Obligaciones facultativas: aquellas en las que la obligación tiene un


solo objeto, pero se le otorga expresamente al deudor la facultad de
cumplir con su obligación mediante la ejecución de una prestación
distinta. La obligación tiene un sólo objeto, pero el deudor puede
optar por realizar otra prestación.
CAPÍTULO XV
EL PAGO COMO OBJETO PRINCIPAL DE LAS OBLIGACIONES

NOCIÓN: El pago es el modo natural de extinguir una obligación por el


cumplimiento de lo debido, pudiendo consistir en un dar, prestar o hacer.
Su realización extingue el vínculo obligacional.
Se considera el objeto principal de las obligaciones, en razón de que las
partes se obligan precisamente con el objeto de que se realice el pago.
PRINCIPIO DE IDENTIDAD: la prestación que se realiza para pagar, debe ser
exacta y fielmente la prestación debida.

PRINCIPIO DE INDIVISIBILIDAD: salvo pacto en contrario, las obligaciones


deben cumplirse por entero y en una sola exhibición.
PRINCIPIO DE INTEGRIDAD: en caso de que se trate de una prestación que
deba ser cumplida en varias etapas, o bien, de varias prestaciones que se
hayan pactado en conjunto de manera acumulativa, la obligación sólo se
tendrá por cumplida hasta que se haya ejecutado la última etapa o se
haya cumplido la última prestación.

CONSECUENCIAS DEL PAGO:


• Ejecución de la prestación
• Extinción de la obligación
• Satisfacción del acreedor
• Liberación del deudor
El pago puede darse mediante:
• La entrega de una cantidad líquida en dinero.
• Entregando una cosa.
• Prestando un servicio.
• Observando una abstención.
Puede ser realizado por:
• El deudor o su legítimo representante.
• Un tercero con interés jurídico en el cumplimiento de una obligación.
• Un tercero sin interés jurídico con consentimiento del deudor.
• Un tercero ignorándolo el deudor (gestión de negocios).
• Un tercero aún en contra de la voluntad del deudor.
Si no se establece lugar de pago, lo será el domicilio del deudor.

CAPÍTULO XVI
IMPUTACIÓN DEL PAGO

NOCIÓN: El que tuviere varias deudas de una misma especie a favor de un


solo acreedor, podrá declarar al tiempo de hacer el pago a cuál de ellas
debe aplicarse.

Es decir, cuando una persona tenga varias deudas con el mismo acreedor,
y todas sean de la misma especie y todas estén vencidas y sean exigibles,
el deudor tiene la facultad de decidir a cuál deuda se acumula el pago.
La ley establece limitaciones al respecto, como en el caso de los intereses.
En este caso, mientras éstos no se encuentren liquidados, el pago no podrá
ser acumulado al capital.
Si el deudor acepta un recibo por parte del acreedor, en el que se aplica
el pago a un concepto y después pretende reclamar, no podrá hacerlo
salvo que exista alguna causa de nulidad.
Si no se especifica la imputación del pago, se aplicará a la deuda más
onerosa. Si todas son de igual naturaleza y gravamen, se imputará a todas
a prorrata.
CAPÍTULO XVII
PRESUNCIÓN DE PAGO

NOCIÓN: Se entiende por presunción aquel efecto jurídico dispuesto por la


ley que consiste en considerar como producido un hecho sin que conste su
realidad, atendiendo al análisis de las circunstancias que se presentan en
el caso concreto, de las cuales es posible deducir su existencia aunque no
esté manifestada en el exterior. Así, el legislador dispone en qué casos se
tendrá el pago como existente y nacido en el derecho, aunque no se
haya producido.

Las circunstancias en las que se encuentre la obligación, determinarán si es


posible que el pago se presuma en favor del deudor, siendo en la mayoría
de los casos, una causa imputable al acreedor, por falta de diligencia.

Hay presunción de pago:


• Si el deudor posee el título de crédito.
• El pago del capital, presume el pago de los intereses.
• El pago del último abono, presume el pago de los anteriores abonos.

CAPÍTULO XVIII

OFRECIMIENTO DE PAGO Y CONSIGNACIÓN

NOCIÓN: Ofrecimiento de pago es el acto jurídico mediante el cual el


deudor manifiesta a su acreedor que es su voluntad cumplir con su
obligación. En ese caso, le requiere para que de su aceptación y la
prestación pueda realizarse en su favor.

CONSIGNACIÓN DEL PAGO: En este caso, igualmente el deudor manifiesta


su voluntad de cumplir con la prestación, pero lo hace mediante la
exhibición del objeto que se debe, dejándolo a disposición del acreedor. Si
éste acepta, se produce el pago y consecuentemente se extingue la
obligación; si no lo acepta, no podrá alegar incumplimiento y el deudor
deja de considerarse moroso. La consignación del pago no es posible
tratándose de las prestaciones de hacer.

Produce un efecto en perjuicio del deudor, en razón de que implica el


reconocimiento de la deuda y por lo tanto, de la mora y de sus
consecuencias, como los intereses.

CONTENIDO III
CAPÍTULO XIX
EFECTOS DEL INCUMPLIMIENTO DE LAS OBLIGACIONES

NOCIÓN: EL incumplimiento de la obligación consiste en la abstención por


parte del deudor de cumplir con la prestación a la que se obligó con el
acreedor, que hace exigible su cumplimiento a través de los Tribunales, y
susceptible de hacerse efectiva sobre su patrimonio, a través de la
ejecución forzosa.
Las obligaciones deben ser cumplidas en el tiempo y modos establecidos
por las partes; de lo contrario, el acreedor puede exigir el cumplimiento
forzoso o la resolución de la misma, además de generarse ciertas
facultades a su favor para poder obtener el pago.

CAPÍTULO XX
DERECHOS DE LA VÍCTIMA DE UN HECHO ILÍCITO

NOCIÓN: Al momento en que el deudor deja de cumplir con su prestación,


el acreedor que ha sido víctima del incumplimiento, puede negarse
también a cumplir las prestaciones que él asumió, mientras la otra parte no
cumpla las que le corresponden. En caso de que el acreedor tenga una
cosa propiedad del deudor y éste se niegue al pago, el primero puede
ejercer el derecho de retención sobre la cosa hasta en tanto no sea
pagado el precio del trabajo efectuado.

CAPÍTULO XXI
CUMPLIMIENTO FORZOSO DE LA OBLIGACIÓN CONVENCIONAL

NOCIÓN: El cumplimiento de la obligación puede darse de manera


voluntaria o forzosa. Se considera voluntaria, cuando el obligado cumple
espontáneamente con la prestación. Es forzosa cuando su cumplimiento se
da a consecuencia de la utilización de los medios legales, aun en contra
de la voluntad del deudor, en razón de que se encuentra protegida por la
coercibilidad que le brinda la ley.

Es la posibilidad eventual de poner en movimiento a la autoridad


jurisdiccional para lograr el respeto de la norma de derecho y su
acatamiento por la fuerza, previa sentencia judicial que considere los
puntos de vista opuestos de las partes.

El cumplimiento forzado puede obtenerse en naturaleza, cuando el


acreedor recibe el objeto mismo de la obligación del deudor (una suma
de dinero o una cosa determinada). O bien, en el caso de que no sea
posible lograr el cumplimiento del objeto mismo de la obligación, como en
el caso de una prestación de hacer en la que el deudor oponga
resistencia, el acreedor recibirá el cumplimiento por equivalente, en cuyo
caso recibirá una indemnización que sea suficiente para compensar el
objeto de la obligación incumplida, que por lo general será una cantidad
en dinero.
CAPÍTULO XXII
EMBARGO, REMATE Y ADJUDICACIÓN

NOCIÓN: Una vez que el deudor ha dejado de cumplir con su obligación,


el acreedor se encuentra facultado para exigir su cumplimiento a través
de los medios legales, es decir, mediante la interposición de una demanda
en la que reclame el cumplimiento de las prestaciones convenidas. La ley
dispone que el deudor responde del cumplimiento de sus obligaciones con
todos sus bienes, excepto los que la propia ley protege como
inembargables, como el patrimonio familiar, los muebles de uso cotidiano,
los instrumentos y maquinaria de su actividad económica, derechos de uso
y habitación, sueldos y salarios, etcétera.

PROCESO DE EJECUCIÓN: A petición de la parte interesada, el órgano


jurisdiccional competente, resolverá la controversia planteada. En caso de
que el acreedor obtenga sentencia definitiva a su favor, el Juez
concederá un plazo razonable para que el deudor, ahora condenado, dé
cumplimiento voluntario a su obligación, en los términos de la sentencia.

En caso de que el deudor no cumpliera aun así con la condena, se inicia el


procedimiento de ejecución que tiene por objeto asegurar el
cumplimiento.

En ese caso, se procederá al embargo, que es la simple retención de los


bienes propiedad del deudor cuyo valor sea suficiente para que, siendo
liquidados, sirvan para pagar al acreedor. Se da mediante mandato
judicial, privando al deudor de la tenencia y administración de los bienes.

Una vez que se ha llevado a cabo el embargo de los bienes, se procede al


remate, en el cual se lleva a cabo un avalúo de los mismos, para pasarlos
a subasta pública, en donde serán pagados por un tercero para ser
adjudicados, o bien, tomados por el acreedor como pago. En esa etapa,
se da la adjudicación de los bienes, que consiste en la atribución como
propia a determinada persona de una cosa mueble o inmueble, como
consecuencia de la subasta, logrando resarcir al acreedor por el
incumplimiento del deudor.

CAPÍTULO XXIII
ACCIÓN OBLICUA

NOCIÓN: Es una institución protectora del acreedor, que le permite


apremiar al deudor moroso para que atienda sus propios negocios jurídico,
ejerza sus acciones y haga valer sus derechos en vías de que mejore su
fortuna y adquiera nuevos activos. En caso de que el deudor asuma una
actitud pasiva y se abstenga de ejercitar sus derechos, dejándolos
caducar o prescribir, sus acreedores pueden sustituirlo y hacer valer por él
esas facultades. Se denomina oblicua, por oposición a la acción directa,
que es de la que dispone el acreedor contra su deudor. Así, el acreedor
alcanza al deudor de su deudor.

El acreedor sustituye a su deudor frente a sus deudores para el cobro de


sus créditos pero es un requisito indispensable que éstos consten en título
ejecutivo. Una vez que el deudor sea pagado por su deudor, el acreedor
puede ejercer el embargo sobre ellos.

CAPÍTULO XXIV
ACCIÓN PAULIANA

NOCIÓN: Es la acción con la que cuenta el acreedor para poder solicitar


la nulidad de los actos de su deudor que resulten en su perjuicio, si de estos
resulta la insolvencia del deudor y el crédito del deudor es anterior a dichos
actos.

Es decir, si el acreedor se percata de que su deudor está realizando actos


que lo colocarán en un estado de insolvencia tal que resultan en su
perjuicio porque le impiden cumplir con las obligaciones que tiene para
con él, y si dichas obligaciones son anteriores a esos actos, el acreedor
puede solicitar la nulidad de los mismos, a efecto de que el deudor
conserve su patrimonio y poderse cobrar del mismo.

La acción pauliana se interpone contra actos positivos del deudor,


tendientes a colocarlo en insolvencia; y la acción oblicua procede contra
la inactividad del deudor para mantenerse insolvente.

CAPÍTULO XXV
ACCIÓN CONTRA LA SIMULACIÓN

NOCIÓN: La simulación se da cuando las partes realizan una declaración


de la voluntad que está en discordancia con su verdadero ánimo, dando
un negocio aparente del que no desean las consecuencias, con el fin de
engañar a un acreedor. En ese caso, la acción contra la simulación tiene
por objeto descubrir dichos actos ficticios o inexistentes y tiene por objeto
la declaración de la inexistencia del acto para atacarlo por completo.

CAPÍTULO XXVI
SANEAMIENTO POR EVICCIÓN

NOCIÓN: Evicción es el hecho de perder el adquirente y recuperar el


dueño, en virtud de su derecho de dominio a la enajenación que al
primero servía de título, la cosa que éste se encontraba poseyendo. El
saneamiento es la obligación que impone al que hizo la enajenación, de
devolver al adquirente el precio de la cosa enajenada. El saneamiento es
consecuencia de la evicción que sufra el adquirente.

El saneamiento por evicción, es la obligación que se le impone al


enajenante, mediante sentencia judicial, por la pérdida sufrida por del
adquirente, causada por un mejor derecho que pertenecía a un tercero.
CAPÍTULO XXVII
SANEAMIENTO POR VICIOS OCULTOS

NOCIÓN: Los vicios ocultos son los defectos internos que tiene una cosa y
que en el momento de su compraventa no fueron reconocidos por el
comprador, por no poder ser distinguidos a simple vista. Sólo operan en los
contratos conmutativos, es decir, en los que desde el principio se conoce
con exactitud el objeto sobre el que recae la obligación. Deben ser
anteriores a la enajenación y ser ocultados para que puedan ser
considerados como tales.

Dichos vicios impiden o disminuyen el uso propio de la cosa, tanto que, de


haberlos conocido al momento de la compra, el comprador no hubiera
adquirido la cosa o hubiera pagado menos por ella. Ello faculta al
adquirente para demandar una indemnización, en caso de existir mala fe
por parte del vendedor.

CAPÍTULO XXVIII
RESOLUCIÓN DE LAS OBLIGACIONES, RECISIÓN Y FACULTAD DE RETENCIÓN

NOCIÓN: La resolución es la forma de dejar sin efectos un contrato a


causa de su incumplimiento por alguna de las partes. Se da en los
contratos bilaterales en el momento en el que uno de los obligados deja
de cumplir con su obligación, entonces su incumplimiento faculta a su
contraparte para solicitar al órgano jurisdiccional que declare dejar sin
efectos el contrato, trayendo consigo como consecuencia principal la
cesación de los efectos del contrato para ambas partes y algunas cargas
adicionales para la parte que ha incumplido.

RESCISIÓN: Es la facultad de resolver las obligaciones recíprocas en el caso


de que uno de los obligados no cumpliere con la obligación, en cuyo caso
el perjudicado podrá escoger entre exigir el cumplimiento forzoso del
contrato o la resolución de la obligación, además del resarcimiento de
daños y perjuicios en ambos casos. Tiene como presupuestos:

1. Sólo pueden rescindirse las obligaciones válidas.


2. Sólo se da en las relaciones contractuales que generen obligaciones
recíprocas.
3. Debe existir interdependencia de las prestaciones recíprocas que
son objeto de las obligaciones correlativas.
4. Es necesario que un contratante haya cumplido con su obligación, o
que su cumplimiento esté supeditado al de la obligación correlativa.
5. ES necesario el incumplimiento del otro contratante.
6. Sólo se da en las obligaciones que tienen como fuente un contrato.

Constituye un modo de privar de efectos a un contrato bilateral válido,


mediante la extinción de las obligaciones provenientes de dicho contrato
que se vuelve ineficaz, en virtud de acontecimientos posteriores a su
otorgamiento, como el incumplimiento de las obligaciones que generó.

FACULTAD DE RETENCIÓN: Es el derecho que el ordenamiento jurídico


otorga a los acreedores en cierto tipo de relaciones jurídicas, para retener
una cosa que tiene en su poder, en virtud de una obligación que le une
con el deudor, hasta que éste cumpla con la prestación que le
corresponde o pague lo debido en relación a la cosa. Mientras uno de los
contratantes no cumpla con la devolución de aquello en que en virtud de
la declaración de nulidad del contrato está obligado, no puede ser
compelido el otro a que cumpla por su parte. En el caso de la
compraventa, el vendedor no está obligado a entregar la cosa vendida,
hasta en tanto el comprador no pague el precio, salvo que se haya
estipulado un plazo para el pago y se encuentre vigente.
CAPÍTULO XXIX
PAGO DE DAÑOS Y PERJUICIOS

NOCIÓN: Cuando una persona causa a otra un daño, ya sea


intencionalmente, por descuido o negligencia, o bien por el empleo de
alguna cosa o aparato, maquinaria o instrumento, es responsable de las
consecuencias dañosas que la víctima ha sufrido. Se dice que una persona
es civilmente responsable, cuando alguien está obligado a reparar el daño
material o moral que otro ha sufrido. La reparación del daño tiende
primordialmente a colocar a la persona lesionada en la situación que
disfrutaba antes de que se produjera el hecho lesivo. Por lo tanto, la norma
jurídica ordena que aquella situación que fue perturbada, sea restablecida
mediante la restitución si el daño se produjo por sustracción o despojo de
un bien o por medio de la reparación de la cosa si ha sido destruida o ha
desaparecido. Sólo cuando la reparación o la restitución no son posibles o
cuando se trata de una lesión corporal o moral (el daño moral no es
reparable propiamente), la obligación se cubre por medio del pago de
una indemnización en numerario, con el que se satisface el daño material
o moral causado a la víctima. Ya no se trata entonces de restituir o de
reparar, sino de resarcir a través de una indemnización en numerario con el
que se satisface el daño material o moral causado a la víctima. En
cualquiera de estos casos, se trata, sin embargo, de la responsabilidad civil.
La reparación del daño debe consistir a elección del ofendido en el
restablecimiento de la situación anterior, cuando ello sea posible, o en el
pago de daños y perjuicios.

La noción de responsabilidad civil impone al responsable no sólo el deber


de restituir o de reparar, sino además la obligación de indemnizar que
surge no sólo por el hecho del incumplimiento de un contrato, sino también
como consecuencia de todo daño que se cause por hechos ilícitos (culpa
o dolo), por riesgo creado, que comprende la responsabilidad aquiliana o
extracontractual.

Daño es la pérdida o menoscabo sufrido a causa del incumplimiento de


una obligación.
Perjuicio, es la privación de cualquier ganancia lícita que debiera haberse
obtenido con el cumplimiento de esa obligación.

Los daños y perjuicios deben ser consecuencia inmediata y directa de la


falta de cumplimiento de la obligación, ya sea que se hayan causado o
que necesariamente deban causarse.

CAPÍTULO XXX
RESPONSABILIDAD

NOCIÓN: La responsabilidad civil contractual se genera a partir del


incumplimiento de la obligación y trae como consecuencia la posibilidad
de solicitar la ejecución forzada.

El que estuviera obligado a prestar un hecho y dejare de hacerlo o no lo


prestare conforme a lo convenido, será responsable de los daños y
perjuicios que cause a su acreedor. Si se trata de una obligación a plazo,
la responsabilidad comienza desde el vencimiento del mismo. Si la
obligación no depende de un plazo, el acreedor debe interpelar al deudor
y podrá exigir el cumplimiento de la obligación de dar después de
transcurridos treinta días.

RESPONSABILIDAD EXTRACONTRACTUAL O DELICTUAL: No nace de un


contrato, sino de la comisión de un delito (con dolo) o cuasidelito (por
culpa)
CAPÍTULO XXXI
CONSECUENCIAS DE LA RESPONSABILIDAD

NOCIÓN: Al incumplir con la obligación y se acredita que existe


responsabilidad por parte del deudor, éste deberá reparar el daño
pecuniario que se causa por el incumplimiento. Asimismo, el acreedor
ahora se encuentra facultado para ejercitar la acción en contra del
deudor por su incumplimiento y, posteriormente, la ejecución forzosa.
INDEMNIZACIÓN MORATORIA: Se da cuando el acreedor demanda el
cumplimiento de la obligación, más el pago de los daños y perjuicios por
concepto de mora, es decir, los que se le han causado por el retraso en el
pago.
INDEMNIZACIÓN COMPENSATORIA: Es compensatoria cuando el acreedor
reclama el pago de los daños y perjuicios causados por el definitivo
incumplimiento de la obligación. No se reclama el cumplimiento, sino que
se indemnice al acreedor por los daños que se le causaron al no recibir el
pago.
EJECUCIÓN FORZOSA: Es la forma de obtener las indemnizaciones a que
haya lugar, mediante la excitación de la maquinaria judicial, a efecto de
obtener la sentencia que condene al demandado al pago de manera
coercitiva y, ante su resistencia, poder embargarle bienes que sean
suficientes para pagar su deuda.

CAPÍTULO XXXII
EXCLUYENTES DE RESPONSABILIDAD

NOCIÓN: Son las circunstancias bajo las cuales el deudor se libra de la


obligación sin adquirir una responsabilidad por ello, ya sea porque así se
convino desde el principio o por la imposibilidad de cumplir, bajo el
principio de que nadie está obligado a lo imposible, cuando se dan
hechos inevitables ajenos a la voluntad del deudor, que le impiden
absolutamente la ejecución de la prestación:
I. Cláusula de no responsabilidad: consiste en el convenio que
hacen las partes para que, en caso de producirse algún daño
para alguno de ellos, no se generará la obligación de ser
indemnizado por el causante del hecho perjudicial. En este caso,
de común acuerdo las partes se excluyen de la obligación de la
reparación del daño.

II. Culpa grave de la víctima: se da cuando el daño que sufre la


víctima, fue causado por su torpe proceder o por una
negligencia inexcusable, tanto que no había manera en que el
que causa el daño hubiera podido evitarlo. En este caso, la
propia víctima se colocó en la situación que le produje el daño
con la intervención del sujeto activo y es su propia negligencia la
que excluye la responsabilidad de éste.

III. Caso fortuito: es el acontecimiento natural inevitable, previsible o


imprevisible, pero que impide en forma absoluta el cumplimiento
de la obligación. La situación es ajena a la voluntad del deudor y
en ningún caso estaba en sus manos impedir el daño, por lo que
se le excluye de responsabilidad. Ejemplo: terremoto.

IV. Fuerza mayor: es el hecho del hombre, previsible o no, que


inevitablemente impide en forma absoluta el cumplimiento de la
obligación. Igualmente, existe una imposibilidad por parte del
deudor de evitar el daño, esta vez ocasionado por la intervención
del hombre, pero es suficiente para que se le excluya de
responsabilidad. Ejemplo: guerra, orden de la autoridad.
CAPÍTULO XXXIII
TEORÍA DE LOS RIESGOS

NOCIÓN: Existe riesgo en la cosa y riesgo en el contrato.

PÉRDIDA DE LA COSA: La pérdida total de la cosa puede darse:


• Cuando se destruye materialmente. Ej.: se quema la cosa.
• Cuando queda fuera del comercio. Ej.: la cosa es expropiada.
• Cuando no se tiene conocimiento de su paradero, o conociéndolo
existe una imposibilidad de recuperarla. Ej.: la cosa se extravía.

RIESGO DEL CONTRATO: Consiste en que, si una de las obligaciones se


extingue por una causa fortuita que haga imposible su ejecución, la otra
obligación debe quedar también extinguida por el principio de
reciprocidad.
No tiene que ver con la teoría del riesgo creado.
Se da por la imposibilidad de cumplir, bajo el principio de que nadie está
obligado a lo imposible. Cuando se dan hechos inevitables ajenos a la
voluntad del deudor, que le impiden absolutamente la ejecución de la
prestación. El deudor se libera de la obligación que se incumpla por
causas ajenas a él, que pueden ser:

a) Caso fortuito: es el acontecimiento natural inevitable, previsible o


imprevisible, pero que impide en forma absoluta el cumplimiento de
la obligación. Ejemplo: terremoto.

b) Fuerza mayor: es el hecho del hombre, previsible o no, que


inevitablemente impide en forma absoluta el cumplimiento de la
obligación. Ejemplo: guerra, orden de la autoridad.
CONTENIDO IV
CAPÍTULO XXXIV
PRINCIPALES FORMAS DE TRANSMISIÓN DE LAS OBLIGACIONES

NOCIÓN: Mientras la obligación se encuentre vigente, puede estar sujeta a


diversas titularidades, tanto activas como pasivas. De este modo, puede
ser transmitida de un acreedor a otro o de un deudor a otro, en cuanto a
los derechos y obligaciones que a su carácter le competen. Podemos
clasificar las formas de transmisión en las siguientes:

I. Cesión de derechos: El Código Civil Federal, establece que habrá


cesión de derechos cuando el acreedor transfiere a otro los que
tenga contra su deudor. Para ceder sus derechos de cobro, el
acreedor no necesita autorización del deudor; caso contrario que
en el de la cesión de deudas, en donde sí se requiere del
consentimiento expreso del acreedor.

Constituye un acto jurídico contractual, en virtud del cual el


acreedor, a quien se le denominará cedente, transmite los
derechos que tiene respecto de su deudor, a un tercero, que se
denominará cesionario. Su efecto consiste en cambiar la persona
del acreedor sin que la obligación deje de ser la misma. Persiste el
crédito, el objeto y el deudor, pero que ahora deberá cumplir la
obligación al cesionario.

Los derechos hereditarios pueden transmitirse de esta forma,


siempre que el autor de la sucesión ya haya fallecido.

II. Subrogación: es el acto de sustituir o poner una persona o cosa


en el lugar de otra. Se dice que hay una subrogación real,
cuando el objeto de sustitución es una cosa; y subrogación
personal, cuando lo es una persona.

Sus elementos personales son i) el subrogante, que es el acreedor


original; ii) el subrogado, que es la persona que le paga y, en
consecuencia, sustituye al acreedor; y iii) el deudor.
Al sustituir al acreedor original, el subrogado adquiere la misma
posición jurídica que el primero, es decir, adquiere el mismo
derecho, las mismas garantías y en su caso, los mismos privilegios
que el subrogante. Siempre presupone el pago del acreedor
original.

Puede realizarse mediante acuerdo de voluntades entre el


acreedor subrogado y el tercero subrogado, o bien, por ministerio
de ley y sin necesidad de declaración alguna de los interesados,
en los siguientes casos:

a) Cuando el que es acreedor paga a otro acreedor preferente.


b) Cuando el que paga tiene interés jurídico en el cumplimiento
de la obligación.
c) Cuando un heredero paga con sus bienes propios alguna
deuda de la herencia.
d) Cuando el que adquiere un inmueble paga a un acreedor
que tiene sobre él un crédito hipotecario anterior a la
adquisición.

III. Asunción de deudas: es un acto jurídico contractual en virtud del


cual, un deudor, al que se le denomina cedente, transmite la
deuda que tiene frente a su acreedor ya sea expresa o
tácitamente y con el consentimiento de éste, a un tercero
llamado transmisionario.

El efecto general de esta figura jurídica es que permite el cambio


de la persona del deudor, sin que la obligación se extinga o deje
de ser la misma, y subsiste el mismo derecho personal con el
mismo objeto e igual acreedor; lo único que cambia es la
persona del deudor.

IV. Gestión de negocios ajenos: Se da cuando una persona


interviene de manera voluntaria, sin tener mandato ni
obligaciones en los negocios de otra persona que está ausente o
impedida para atenderlos, con la finalidad de evitar que le sean
causados perjuicios o para que obtenga beneficios. El que sin
mandato o sin estar obligado a ello se encarga de un asunto de
otro, debe obrar conforme a los intereses del dueño del negocio.
Se dice que se transmiten las obligaciones, toda vez que el
tercero sin mandato, debe actuar con toda la diligencia
necesaria como si se tratara de un deber propio, asumiendo
incluso la responsabilidad en caso de causar daños y perjuicios.

El gestor, que es quien obra por voluntad propia en favor de otro,


sin mandato, queda obligado en favor del beneficiario, que es el
dueño del negocio, a desempeñar su encargo con toda la
diligencia posible, como si se tratara de un negocio en beneficio
propio, conforme a los intereses del dueño, avisar al dueño, rendir
cuentas sobre su gestión, y si el dueño no está conforme con lo
realizado, regresar las cosas al estado en que se encontraban
antes de su gestión e indemnizar al dueño por los daños y
perjuicios que haya podido causar. El dueño, por su parte, queda
obligado a pagar los gastos hechos por el gestor, siempre y
cuando se haya gestionado útilmente el negocio, y responder de
las obligaciones contraídas por el gestor por su administración.

CAPÍTULO XXXV
PRINCIPALES FORMAS DE MODIFICACIÓN DE LAS OBLIGACIONES

NOCIÓN: La modificación de los contratos es posible por la alteración


extraordinaria de las circunstancias, acudiendo principalmente a la
cláusula “rebus sic stantibus”, la cual tiene lugar cuando las partes
estipulan un contrato de cierta duración en el tiempo y se considera de
manera tácita que las partes pactan teniendo en cuenta las
circunstancias existentes en el momento de la estipulación o las que se
puedan presentar normalmente, pero se presentan eventos imprevistos y
extraordinarios que no fueron previsibles, por lo que se hace necesaria la
alteración del clausulado del acuerdo para que recupere su equilibrio
inicial.

I. Modificación de cláusulas esenciales de las obligaciones: son las


que resultan necesarias y suficientes para la constitución del acto
jurídico y la falta de una de ellas es suficiente para afectar la
existencia del contrato. Son equivalentes a los elementos de
existencia del acto jurídico, por lo que no pueden ser excluidas.
II. Modificación de cláusulas naturales de las obligaciones: son las
que pueden ser suplidas o complementadas por la ley. La ley
considera implícitas en los contratos y por lo tanto, no es
necesaria la voluntad de las partes para que tengan lugar o se
consideren existentes, pero sí lo es para su modificación o
exclusión. Es decir, si las partes no las plasman en el contrato, se
entiende que se sujetan a ellas, pero si desean excluir sus efectos
o modificarlos, deben hacerlo expresamente.

III. Modificación de cláusulas accidentales de las obligaciones:


dependen meramente de la voluntad de las partes, por lo que
son las que establecen su voluntad respecto de la forma en la
que se deberá llevar a cabo la obligación. Adquieren la misma
importancia que las esenciales porque reflejan la verdadera
voluntad de los contratantes.

CAPÍTULO XXXVI
CAUSAS DE EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES

NOCIÓN: Existen diversas formas de extinción de las obligaciones y pueden


clasificarse en cuanto a sus efectos:
I) Aquellas en las que el acreedor no queda satisfecho:
a) Remisión de la deuda: es la renuncia del acreedor a sus
derechos para exigir el cumplimiento de la obligación; es el
perdón de la deuda hecho voluntariamente por el acreedor.
b) Pérdida de la cosa: es el perecimiento de la cosa cuando se
encuentra en poder del deudor. Opera como extintiva de la
obligación de devolverla, si el deudor no es responsable de la
pérdida, en virtud del principio que establece que “las cosas
perecen y fructifican para su dueño”.
c) Prescripción: la prescripción negativa o extintiva es la
circunstancia de que el acreedor no haga valer sus derechos
o exija el cumplimiento de la obligación dentro del término
que la ley señala para el caso.

II) Aquellas en las que se ataca el propio acto que las generó y por
lo tanto, las extingue:
a) Nulidad: es cuando se ataca la validez de un acto jurídico y se
obtiene la declaración de la nulidad del mismo, de manera
que el mismo deja de producir sus efectos –al ser nulo- y se
extinguen las obligaciones del deudor emanadas del mismo.
b) Resolución: es la forma de dejar sin efectos un contrato a
causa de su incumplimiento por alguna de las partes.
c) Rescisión: es el acto mediante el cual por voluntad de las
partes o por disposición de la ley, a causa del incumplimiento
de las obligaciones por una de las partes, en una relación
jurídica bilateral. Causa la obligación al deudor de pagar lo
que haya recibido, su valor equivalente o una indemnización.
d) Revocación: es el acto por el cual se priva de efectos a los
actos jurídicos unilaterales o a título gratuito, haciendo cesar
las obligaciones que de los mismos deriven con la
particularidad de que sólo opera para el futuro, pues los
efectos de las obligaciones que ya se han producido,
subsisten.

III) Aquellas en las que el acreedor queda satisfecho:

a) Pago: es el cumplimiento efectivo de la obligación, la realización de


la prestación mediante la entrega de la cosa o la realización del
hacer.
b) Dación en pago: consiste en que el deudor, con el consentimiento
del acreedor, entregue en pago una cosa distinta de aquella que
era debida.
c) Novación: es un contrato por el cual las partes interesadas en un
contrato anterior, alteran éste substancialmente, sustituyendo la
obligación primigenia por una nueva. La primera se extingue.
Siempre debe hacerse constar expresamente de manera formal.
d) Compensación: Se da cuando dos personas tienen, a la vez, el
carácter de deudor y acreedor, recíprocamente, y se compensan
hasta por la cantidad de la deuda menor. Requiere que la
obligación tenga por objeto una cosa fungible y que sea exigible.
e) Confusión: es la circunstancia de que se reúnan en una misma
persona las calidades de acreedor y de deudor.
f) Término extintivo: es el acontecimiento futuro de realización cierta y
en cuyo cumplimiento se extingue automáticamente la obligació
BIBLIOGRAFÍA BÁSICA

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