La validez concurrente implica las medidas de relación entre las puntuaciones de
la prueba y el criterio, esto es posible cuando las puntuaciones se alcanzan casi al mismo tiempo que las medidas de criterio. Dicho tipo de validez, nos proporcionará una explicación acerca del nivel en que las calificaciones de la prueba son funcionales para posicionar a un sujeto, respecto a un criterio.
Al instaurar la validez de la inferencia de las valoraciones, la prueba brinda una
manera más rápida (y con menor costo) de proporcionar un diagnóstico o una iniciativa de clasificación, por lo anterior, las pruebas que cuenta con validez concurrente resultan ser más llamativas para aquellos usuarios que desean economizar costos y tiempo.
En ocasiones, para investigar la validez concurrente de una prueba específica, se
recurre a otra que será utilizada como un criterio de validación, ante esto, los investigadores deberán hacerse la pregunta ¿qué tan bien se compara la prueba A (prueba específica) con la prueba B (criterio de validación)? Hay que contemplar que, en este tipo de situaciones, la prueba A, sea una prueba nueva, o bien sea una prueba ya existente pero que se utilizará con una meta nueva y un poco diferente para lo que ya se usaba, por ejemplo ocuparla en otra población.
Un ejemplo en donde se muestra lo comentado anteriormente, es un estudio
donde se buscó conocer si el inventario de Beck junto con su revisión llamada Inventario de Beck II (los cuales son medidas de autorreporte, útiles para identificar los síntomas de depresión y el nivel de gravedad) que se ocupaban en adultos, podrían utilizarse para una población adolescente, además en la investigación se trató de ver si la prueba podía diferenciar con éxito a los adolescentes con depresión de aquellos que no padecían dicha enfermedad. Para el estudio, los diagnósticos suscitados a partir de la aplicación concurrente de un instrumento (validado previamente para la aplicación en adolescentes) se requirieron para la validación del criterio. Finalmente, se obtuvo como resultado que el Inventario de Beck podía utilizarse en adolescentes.