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LA PRESENCIA DE TRES LENGUAS EN EL CURRÍCULO: MULTILINGÜIS-

MO EN LOS CONTEXTOS CANADIENSE Y ESPAÑOL

DAVID LASAGABASTER*

RESUMEN. La confluencia de tres lenguas en el currículo se está convirtiendo en


algo cada vez más habitual en los sistemas educativos de casi todo el globo, ya que
a la presencia de la lengua mayoritaria se une la de la lengua minoritaria (ya sea
en forma de lengua propia en comunidades bilingües o en forma de la L1 del
alumnado inmigrante) y la cada vez más presente lengua extranjera. En este artí-
culo se pretende contrastar una serie de estudios que se han ocupado de este
campo de investigación en dos contextos que comparten características comunes
al tiempo que mantienen sus propias peculiaridades, como son el contexto cana-
diense y el español. Los resultados obtenidos indican que el grado de bilingüismo
ejerce una influencia definitiva en los resultados obtenidos en el aprendizaje de
la L3, al tiempo que se postula la alfabetización de la población inmigrante en su
L1 como medio para favorecer el aprendizaje de las lenguas oficiales de los países
de acogida. Las actitudes lingüísticas que surgen como resultado de esta coexis-
tencia de lenguas también son objeto de análisis.

ABSTRACT. The existence of three languages in the curriculum is something incre-


asingly common in practically every education system in the world, since to the
presence of the majority language two more are added: the minority language
(whether as a vernacular language, in the case of bilingual communities, or as the
L1 of immigrant children), and the increasingly present foreign language. The arti-
cle tries to compare several studies, which have dealt with this field of research in
two contexts that share common features but that at the same time have kept their
own peculiarities: the Canadian and the Spanish contexts. The results show that
the level of bilingualism has an undeniable influence on L3 learning outcomes,
whereas the teaching of basic literacy to the immigrant population in their L1 is
seen as the means to favour the learning of the receiving countries’ official langua-
ges. The linguistic attitudes that arise from this coexistence of languages are also
subject to analysis.

(*) Universidad del País Vasco – Euskal Herriko Unibertsitatea.

Revista de Educación, núm. 337 (2005), pp. 405-426.


Fecha de entrada: 10-11-2003 Fecha de aceptación: 28-06-2004 405
INTRODUCCIÓN El objetivo del presente artículo con-
sistiría en comparar los resultados que se
La presencia de tres lenguas en el currícu- han obtenido en dos contextos que, a
lo está pasando a ser algo muy habitual en pesar de compartir características comu-
muchas partes del planeta, hasta el punto nes, mantienen sus propias peculiarida-
de que el trilingüismo y la enseñanza tri- des, lo que nos permitirá tratar de llegar a
lingüe se están convirtiendo en un campo conclusiones sobre la presencia de varias
de investigación propio dentro de los lenguas en contacto en el ámbito escolar.
estudios de adquisición de segundas len- Para ello procederemos en primer lugar a
guas, tal y como queda patente en el
describir tanto el contexto canadiense
establecimiento y afianzamiento del Con-
como el español. Puesto que este último
greso Internacional (International Confe-
es más conocido para todos los lectores,
rence on Third Language Acquisition and
en esta introducción prestaremos una
Trilingualism) que con carácter bianual
mayor atención a Canadá.
trata este ámbito de investigación y en las
Canadá fue el primer país en el
cada vez más habituales publicaciones
mundo en tener una política oficial de
que se realizan en este campo (Cenoz y
Jessner, 2000; Hoffmann, 2000; o por multiculturalismo cuando en 1971 Pierre
citar algunas de las producidas en las Elliott Trudeau la estableció con el objeti-
comunidades autónomas bilingües espa- vo de crear las condiciones sociopolíticas
ñolas: Barnes, 2002; Cenoz, 1991; Lasaga- adecuadas para que todos los canadienses
baster, 2001a y 2001b; Muñoz, 2000; pudiesen participar en la vida pública del
Safont, 2003; Sagasta, 2003; Sanz, 2000). país (Breton, 2000; Harles, 1998). El
El interés que este campo despierta se gobierno a la sazón consideraba que una
debe fundamentalmente a dos razones. política multicultural era la más adecuada
Por un lado, a que, como resultado de las para asegurar la libertad cultural de los
crecientes corrientes migratorias, las canadienses en un país oficialmente bilin-
mejoras en los medios de transporte y de güe, lo que otorgaba reconocimiento ofi-
comunicación, y la globalización, el con- cial automáticamente a la composición
tacto de lenguas se está extendiendo a multicultural del país (Winter, 2001). La
pasos agigantados por todo lo largo y principal razón de esta política la encon-
ancho del planeta. Por otro, a que en él tramos en el hecho de que durante el últi-
confluyen una serie de características que mo siglo, Canadá se ha convertido en un
lo diferencian del aprendizaje de una L2, destino muy atractivo para emigrantes
a pesar de las muchas cuestiones que procedentes de los cinco continentes, a
guardan en común (Cenoz, 2003). La resultas de lo cual este país cuenta en la
principal diferencia estriba en que el actualidad con una de las poblaciones
aprendiz de una L3 tiene a su disposición más multirraciales del planeta. La finali-
un conocimiento del que carece el dad principal consiste por tanto en reco-
hablante monolingüe, lo que lleva al pri- nocer la realidad multicultural canadien-
mero a poder disfrutar de una serie de se por medio de la integración pero sin
estrategias de aprendizaje que ya ha de- asimilación, ya que esta última supondría
sarrollado por su condición de hablante la absorción total en otro grupo lingüísti-
bilingüe. Las dos lenguas que ya posee co y cultural y el abandono de la identi-
permiten al hablante bilingüe, al menos dad cultural propia. El rechazo a la asimi-
desde un punto de vista teórico, contar lación aparece ya en el informe de
con cierta ventaja cuando se trata de la Comisión Real sobre Bilingüismo y
afrontar el aprendizaje de la L3. Biculturalismo (Report of the Royal

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Commission on Bilingualism and Bicul- Llevada al extremo, se convierte así en
turalism) publicado en 1969 e implemen- una ideología integradora, la ideología
tado en forma de multiculturalismo como cana- diense por antonomasia (Harles,
política gubernamental oficial dos años 1998). Aunque pueda parecer irónico, la
más tarde por Trudeau. Esto hace que cohesión nacional se trata de lograr a tra-
Kymlicka (1998, pp. 2-3) defienda que vés de la autonomía social e institucional
Canadá es un líder mundial en tres de las de los distintos grupos étnicos. No obs-
áreas más importantes de las relaciones tante también es justo recordar que Que-
etnoculturales: la inmigración, la pobla- bec es la provincia donde menos apoyo
ción indígena y la acomodación de los recaba esta política, ya que muchos de sus
nacionalismos minoritarios. habitantes consideran que el origen de
Se puede hablar grosso modo de tres esta política se encuentra en el rechazo
contextos multiculturales principales y del gobierno Trudeau de Canadá como
claramente definidos: la población fran- un estado dual compuesto por la minoría
cófona que se estableció con determina- francófona y la mayoría anglófona. Para
ción en la provincia de Quebec (a pesar los defensores de esta idea esta política
de existir comunidades francófonas más o multicultural sólo trata de socavar el esta-
menos importantes por toda la extensa tus de la provincia francófona al presentar
geografía canadiense), la población angló- a sus habitantes únicamente como un
fona que hizo lo propio en el resto del grupo étnico más dentro del caleidoscó-
país y la población indígena, cuyas comu- pico mosaico canadiense. Harles (1998)
nidades llevan miles de años establecidas estima que la tensión existente entre las
en este contexto. Los dos primeros han dos comunidades europeas fundadoras
contado con reconocimiento oficial desde hace que Canadá no posea la homogenei-
la independencia del país, mientras que la dad cultural ni el consenso ideológico en
población indígena tan sólo ha logrado la el que se sustentan otros sistemas políti-
aquiescencia durante las tres últimas cos democráticos, lo que hace que el mul-
décadas. Por lo tanto nos encontramos ticulturalismo (y la idea de integración sin
ante un contexto sociolingüístico único asimilación inherente al mismo) se con-
en el que dos lenguas internacionales tan vierta en una alternativa viable en el
poderosas y arraigadas como el francés y deseo de consolidar la noción de identi-
el inglés comparten cooficialidad, a lo dad canadiense.
que se añade la presencia de un número En el contexto español la presencia
importante de otras minorías lingüísticas de tres lenguas en el currículo se circuns-
con una influyente representación a lo cribe básicamente a las comunidades
largo y ancho del país (históricamente autónomas que cuentan con lengua pro-
Canadá se ha caracterizado por ser un pia, ya que a la cooficialidad del español y
país receptor de grandes flujos migrato- la lengua minoritaria correspondiente, se
rios). añade la cada vez más temprana presencia
Esta política multicultural se ha apo- del inglés como lengua extranjera hege-
yado en el establecimiento de agencias mónica. A pesar de que la Unión Europea
burocráticas y en la provisión de fondos fomenta el aprendizaje de una segunda
públicos para promocionar la idea de que lengua extranjera, la realidad es que el
las minorías étnicas poseen la misma dig- número de alumnos que en el resto de
nidad y merecen un trato igualitario, en comunidades monolingües tiene contac-
un intento de lograr las condiciones ade- to con lo que sería su L3 es bastante redu-
cuadas para la integración nacional. cido. No obstante, poco a poco se va

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percibiendo un cambio de actitud y, sobre No se debe olvidar además que la
todo debido a la influencia que ejerce el política gubernamental ha favorecido el
marco europeo de colaboración, la nece- que se hayan podido realizar investigacio-
sidad del aprendizaje de una segunda len- nes de gran calidad y cantidad a través de
gua extranjera (que representaría la L3 en ayudas concedidas tanto por el gobierno
las comunidades autónomas monolin- central como por las autoridades educati-
gües y la L4 en las bilingües) se está crista- vas locales. Esto ha favorecido el que
lizando en su oferta en un número cre- Canadá ocupe hoy día un lugar puntero
ciente, aunque todavía reducido, de en la investigación sobre adquisición de
centros. segundas lenguas a través de los distintos
En las siguientes secciones trataremos y heterogéneos programas educativos
de revisar y analizar los resultados que implementados en su territorio. Además
hasta el momento se han obtenido tanto es importante recordar que, a diferencia
en el Estado español como en Canadá de su vecino estadounidense, la política
cuando se produce una situación escolar educativa tiene un mayor fundamento
de tres lenguas en contacto. Para ello cada empírico que emocional (Cummins,
uno de los dos contextos en comparación 2001).
aparecen divididos con relación a dos
cuestiones principales y que preocupan
por igual a todos los sectores inmersos en ESTUDIOS REALIZADOS EN CANADÁ
el proceso educativo, como son la compe-
tencia lingüística en la tercera lengua (L3) COMPETENCIA LINGÜÍSTICA
y las actitudes lingüísticas hacia las dife- EN LA TERCERA LENGUA
rentes lenguas en contacto. La referencia
al contexto canadiense es casi obligada, ya El contexto canadiense es de sobra cono-
que desde la década de los sesenta se han cido por sus investigaciones sobre los
puesto en marcha muchos proyectos a lo resultados obtenidos a través de los pro-
largo de toda su inmensa geografía para gramas de inmersión en francés para la
determinar las estrategias y medios de población anglófona. Estos estudios coin-
actuación más efectivos cuando se trata de ciden en apuntar que estos estudiantes
aprender una lengua extranjera, experi- adquieren una competencia mucho más
mentos educativos que han incluido alta de la L2, el francés, que aquellos
desde los programas de inmersión en alumnos que la estudian a través de los
francés para la población anglófona, hasta programas regulares donde sólo se
programas de inmersión en la lengua imparte como asignatura y donde no es
materna de alumnos provenientes de utilizada como lengua vehicular. Además
otros países, programas bilingües con len- su competencia en inglés (la L1) es equi-
guas como el ucraniano, e incluso progra- parable a la de los alumnos que cursan
mas trilingües en francés, inglés y hebreo sus estudios en inglés, mientras que sus
(a los que nos referiremos en la siguiente resultados en el resto de las asignaturas
sección) y cursos o bien integrados en el escolares no se ve afectado por el hecho
currículo o bien en horario extraescolar de que éstas sean impartidas en una L2
en más de 100 lenguas diferentes habladas (Genesee, 1987; Halsall, 1995; Lapkin,
por el altísimo porcentaje (alrededor del Swain y Shapson, 1990). Se han obtenido
50%) de alumnos inmigrantes de las prin- de modo consistente resultados coinci-
cipales ciudades tales como Montreal, dentes en este sentido, de tal manera que
Toronto y Vancouver (Gagne, 1997). los resultados de hace 25 años se han

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venido repitiendo en estudios más actua- En el primero de estos estudios (Bild
les (Turnbull, Lapkin y Hart, 2001). Sin y Swain, 1989) se procedió a comparar la
embargo, son menos conocidos sus estu- competencia en lengua francesa de 31
dios sobre el efecto que estos programas alumnos inmigrantes que cursaban sus
tienen en la población inmigrante o los estudios en los programas bilingües en
de los denominados programas trilin- francés e inglés anteriormente citados
gües. A estas dos cuestiones a las que nos con 16 alumnos de sus mismas caracterís-
vamos a referir en esta sección. ticas pero que estaban escolarizados en el
En primer lugar nos centraremos por programa regular donde la enseñanza se
tanto en los estudios en los que se ha ana- impartía en inglés. Los primeros supera-
lizado la influencia de la enseñanza de la ron con diferencias estadísticamente sig-
lengua propia (L1) de los alumnos inmi- nificativas a los segundos tanto en las
grantes en su aprendizaje del inglés y el pruebas orales como en las escritas. Ade-
francés como L2 y L3 en programas de más las autoras detectaron una correla-
inmersión. Aunque existen estudios ante- ción positiva y significativa entre el núme-
riores en los que ya se observa que los ro de años que los alumnos llevaban en
estudiantes inmigrantes obtenían buenos las clases de su L1 y los índices correspon-
resultados (véase Genesee, 1976; o dientes a su competencia en francés, de
Edwards, Doutriaux, McCarrey y Fu, manera que quienes mostraban una com-
1977), y puesto que éste no era el objeti- petencia académica más alta en su L1 eran
vo de dichas investigaciones (por lo que también los que mejores puntuaciones
no se controlaron variables tan decisivas obtenían en las pruebas de francés. Las
autoras partieron de la hipótesis de que
como el estatus socioeconómico), los pri-
los sujetos bilingües que tenían el italiano
meros dos estudios a los que haremos
como L1 obtendrían mejores resultados
referencia serán los realizados por Bild y
que los bilingües con una lengua no-
Swain (1989) y Swain y Lapkin (1991)
románica como L1, por cuestión de cerca-
(extendido en Swain, Lapkin, Rowen y
nía tipológica con el francés, hipótesis que
Hart, 1991), ambos completados en el
no se cumplió, ya que a pesar de que sus
área metropolitana de Toronto. En todas
resultados fueron superiores, no llegaron
las escuelas participantes en estas dos a ser estadísticamente significativos.
investigaciones se enseñaba francés como En el caso del estudio de Swain y Lap-
L2 (L3 para el alumnado inmigrante) kin (1991) participaron 300 estudiantes
durante 20 minutos diarios desde los 6 de 13 años que cursaban sus estudios en
hasta los 8 años, ofreciéndose a continua- un programa bilingüe en el que la mitad
ción la posibilidad de pasar a formar parte del currículo se impartía en inglés y la
de un programa bilingüe en el que el 50% otra mitad en francés. Las autoras compa-
del currículo se impartía en francés y el raron cuatro grupos diferentes con rela-
otro 50% en inglés y que abarcaba desde ción a su competencia en francés: (i) un
los 9 hasta los 13 años. Todos los alumnos primer grupo formado por aquellos alum-
inmigrados se encontraban escolarizados nos que no conocían otra lengua aparte
en esta opción. Asimismo contaban con la del inglés y el francés; (ii) un segundo
opción de recibir clases en sus respectivas compuesto por aquellos que tenían sólo
L1 (cuando éstas no eran ni francés ni competencia oral en otra lengua, su L1;
inglés) desde la guardería hasta los 13 (iii) en el tercero se englobaban quienes
años. estaban alfabetizados en su L1 pero que

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casi siempre únicamente hacían uso oral condiciones con respecto a sus pares
de la misma; (iv) en el cuarto estaban los (todos parten de cero en el aprendizaje
que hacían uso escrito de su L1. El primer de la L2, la lengua de inmersión), este fac-
grupo destacaba por tener un estatus tor de igualdad facilita su adaptación y
socioeconómico y cultural más alto que los progresión.
otros tres, entre quienes no se producían Siguiendo en esta misma línea, Dage-
diferencias con relación a estas variables. nais y Day (1998) hicieron un seguimien-
Los resultados reflejaron diferencias to de tres alumnos inmigrantes en las cla-
estadísticamente significativas a favor de ses de francés e inglés de un programa de
aquellos estudiantes inmigrantes que inmersión a través de la observación y
estaban alfabetizados en su L1 tanto en entrevistas, prestando también atención a
las pruebas escritas como orales de fran- la percepción que de éstos tenían sus pro-
cés. Llama la atención asimismo que no se fesores por medio de entrevistas. Los
observaran diferencias entre los alumnos docentes daban constancia de como el
cuya L1 era una lengua romance y quie- número de alumnos trilingües en sus cla-
nes no, en contra de lo que cabría esperar ses iba en continuo aumento, pasando de
al pertenecer el francés también a esta uno o dos por clase a representar casi la
familia lingüística y haber por tanto una mitad de la misma. Los profesores de las
proximidad tipológica. Swain y sus cole- tres escuelas analizadas mostraron su
gas concluyen por tanto que se produce total convencimiento sobre los cambios
una transferencia de conocimientos entre que está sufriendo la sociedad canadiense
las lenguas que conlleva una mayor facili- y sobre el futuro que se atisba con clases
dad para aprender lenguas adicionales. cada vez más heterogéneas también en
Otro estudio interesante realizado en los programas de inmersión (algo total-
un programa de inmersión es el de Taylor mente natural y habitual en los progra-
(1992), en el cual esta autora llevó a cabo mas regulares; no debemos olvidar que el
un seguimiento longitudinal de la evolu- 55% de la población canadiense no nació
ción lingüística de una alumna de origen en el país). Coincidían en señalar que los
y habla cantonera. La autora observó discentes estaban progresando adecuada-
como esta alumna se adaptaba de un mente, e incluso defendían que tomaban
modo muy positivo tanto desde un punto más riesgos y eran más hábiles a la hora
de vista psicológico, como académico y de servirse de estrategias de inferencia
sociocultural a un programa de inmersión que sus compañeros. Estos autores, sin
temprana total. Taylor destaca que las embargo, muestran de un modo muy
estrategias propias utilizadas por el profe- directo dos problemas en esta investiga-
sorado de inmersión, así como el uso de ción (algo, por otra parte, muy de agrade-
medios paralingüísticos (lenguaje corpo- cer). La primera cuestión es la relativa a
ral y entonación, por ejemplo) y la incor- que el permiso que se obtuvo de los
poración de hábitos rutinarios, suponían padres es muy posible que se debiera a
un apoyo extraordinario para la adapta- que éstos no estaban únicamente intere-
ción de esta alumna y le permitía sacar el sados en los resultados del estudio, sino
máximo beneficio a su experiencia educa- que también estaban convencidos de que
tiva y por lo tanto progresar exitosamente sus hijos estaban progresando adecuada-
en el programa. Taylor finaliza su artículo mente en la escuela, por lo que Dagenais
con la hipótesis de que, puesto que los y Day defienden la necesidad de estudios
niños trilingües que participan en progra- que cuenten con una muestra más nume-
mas de inmersión parten de las mismas rosa. El segundo problema radicaba en

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que la visión de los profesores de inmer- en lo que se ha venido en denominar pro-
sión también podría haber estado media- gramas de doble inmersión. En la provin-
tizada por su tradicional papel de defen- cia de Quebec existen dos sistemas educa-
sores de situaciones con una carga tivos paralelos, uno en el que la lengua de
política alta. Puesto que el seguimiento instrucción ha sido el inglés para los
tan sólo se realizó durante un curso esco- alumnos protestantes con el inglés como
lar, consideran que es más que probable L1 (en el que se incluía también a la
que este espacio de tiempo sea demasia- población judía), y otro en el que la len-
do breve y no deje lugar a posibles tensio- gua de instrucción es el francés dirigido a
nes y problemas que puedan surgir en un la población católica cuya L1 era el fran-
proyecto de carácter más longitudinal. Es cés. El sistema educativo partía de unos
por ello que concluyen indicando que se presupuestos en los que la cuestión reli-
precisa de estudios longitudinales que giosa tenía mucho más peso que la lin-
ayuden a paliar la falta de información güística, por lo que la posibilidad de cur-
sobre los retos y tareas a las que deberán sar en una u otra línea educativa venía
hacer frente estos estudiantes y sus profe- dictada por la religión practicada por el
sores. alumno. Así, los programas de enseñanza
Un año después (Dagenais y Day, en francés eran mucho más estrictos en
1999) estos mismos autores investigaron este sentido, por lo que todo aquel alum-
las prácticas lingüísticas de las familias de no que no compartiera esta religión era
estos tres alumnos partiendo de teorías inmediatamente remitido al sistema
socioculturales sobre el aprendizaje y las inglés, que era más flexible. Ésta es la
lenguas, constatando que las tres familias razón por la que la comunidad judía estu-
impulsaban el mantenimiento de la len- vo en un principio incluida en el sistema
gua familiar de muchas maneras con el inglés (a pesar de no compartir obvia-
objetivo de apuntalar la identidad cultural mente los principios religiosos de ésta).
de sus hijos y de mantener los lazos con Sin embargo, el debate surgió con las pri-
otros miembros de su comunidad. Desta- meras oleadas de inmigrantes proceden-
can los autores que, el hecho de que tes de países como Líbano, Haití, Zaire,
todos los progenitores hubiesen tenido Nigeria, etc., donde en muchas ocasiones
con anterioridad algún tipo de relación contaban con un alto nivel de francés.
con la lengua francesa o los programas Esta situación detonó la toma de posición
bilingües, podía haber contribuido a su por ejemplo del gobierno quebecois que
predisposición a matricular a sus hijos en decidió desde principios de los noventa
programas de inmersión. Los progenito- que toda la población inmigrante realiza-
res priorizaron las razones sociales y eco- ra sus estudios en la línea francesa, lo que
nómicas en su decisión. Todos estos facto- acabó por terminar con la división basada
res serían por tanto los responsables de la en parámetros religiosos, pero mante-
positiva imagen que los tres alumnos niendo la distinción lingüística.
mostraron sobre sí mismos en su calidad Sin embargo, antes de que todo esto
de hablantes trilingües y de sus gratifican- ocurriera, en la década de los sesenta se
tes experiencias en los programas de añadió la enseñanza del francés por
inmersión. medio de programas de inmersión dirigi-
Genesee (1998) describe una expe- dos a los alumnos anglófonos (Genesee,
riencia educativa multilingüe que tiene 1987), cuyos progenitores buscaban tanto
lugar en Montreal y donde la inmersión la integración de sus hijos en la región
lingüística se desarrolla en dos lenguas, francófona como la mejora vista desde un

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punto instrumental (mayores opciones utilizaron tests diseñados para medir su
de trabajo, etc.). Además, y tal y como competencia en inglés, francés, hebreo y
hemos podido comprobar en los tres matemáticas. Las pruebas de lengua eva-
estudios anteriores, la población inmi- luaron la comprensión lectora, la com-
grante en aumento también está pasando prensión oral y la producción oral de los
a integrarse cada vez en mayor número en alumnos. Los resultados fueron califica-
estos programas de inmersión. dos de muy positivos, puesto que no se
A este tipo de programas se añadieron apreciaron diferencias en francés con los
después programas de doble inmersión alumnos de inmersión únicamente en
en hebreo y francés dirigidos a la comuni- francés; esto es sin duda sorprendente, ya
dad judía que tenía el inglés como L1 y que la doble inmersión dedica menos
que vivía en barrios predominantemente tiempo al francés que los programas de
angloparlantes de la ciudad. La elección inmersión regulares. Sin embargo la
del hebreo se debió a razones obviamente escuela donde la doble inmersión era tar-
religiosas, culturales y económicas, mien- día sí que puntuó más bajo en las pruebas
tras que el francés destacaba por su pre- de francés, por lo que los beneficiados
ponderancia en la vida social, política y con respecto a esta lengua fueron los
económica diaria de esta provincia fran- alumnos de los programas de inmersión
cófona. Genesee da cuenta de la expe- doble temprana. Asimismo no se produje-
riencia realizada en tres escuelas, en dos ron diferencias con relación a la lengua
de las cuales el currículo hebreo se realiza inglesa, cuando se les comparó tanto con
en esta lengua (religión, cultura, historia los alumnos de inmersión en una lengua
y lengua), mientras que el francés es utili- como con quienes realizaban sus estudios
zado en matemáticas, ciencias sociales y en un programa regular donde el inglés
naturales. A esto se añade la presencia del era la lengua vehicular. En cuanto al
inglés como asignatura a partir del tercer hebreo, destaca que los alumnos de doble
curso de primaria. Éste es el denominado inmersión temprana superaron en sus
programa de inmersión doble temprana. resultados a los de la doble inmersión tar-
En la tercera escuela, las tres lenguas se día, lo que sugiere que el uso de la L1
utilizan en la instrucción desde el princi- durante los primeros cursos de la inmer-
pio, aumentándose la presencia del fran- sión puede interferir en el aprendizaje de
cés (al tiempo que disminuye la del una segunda lengua. Las pruebas de
inglés) a medida que se avanza en el siste- matemáticas demostraron que la inmer-
ma educativo. Este programa es conocido sión doble temprana (donde esta asigna-
como programa de inmersión doble tar- tura se enseñaba en francés) no impedía
día. Para la puesta en marcha de estos que se lograran los mismos resultados
programas la estancia de los alumnos en que los del grupo de inmersión doble tar-
el centro tuvo que extenderse hasta las 32 día (en el que se impartían en inglés, la
horas semanales, de manera que hubiera L1). Estos resultados vienen a coincidir
tiempo suficiente para hacer frente a las con los obtenidos en la inmersión sólo en
exigencias derivadas de un programa de francés cuando se la compara con los pro-
instrucción trilingüe. gramas regulares de enseñanza en inglés.
Se llevó a cabo un estudio longitudi- Genesee plantea la posibilidad de que
nal durante siete años de los resultados estos resultados se puedan explicar por
académicos obtenidos por estos alumnos el hecho de que los programas de doble
de doble inmersión, para lo que se inmersión requieren de un mayor

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esfuerzo lingüístico, lo que puede condu- contextos que podríamos considerar no
cir a la generación de estrategias genera- sólo pionero en el estudio de las actitudes
les de aprendizaje de lenguas que favorez- lingüísticas, sino que indudablemente
can su adquisición. Especialmente destaca por la palmaria cantidad y calidad
alentadores fueron las calificaciones de de estudios realizados en este campo, con
los alumnos de doble inmersión cuyo estudiosos y obras que se consideran clá-
programa no incluía el inglés (su L1) sicos en este campo (Bourhis, 1983;
durante los primeros cursos. Gardner, 1985; Gardner y Lambert,
1972).
En una sociedad bilingüe como Cana-
ACTITUDES LINGÜÍSTICAS dá, donde dos lenguas internacionales de
prestigio conviven en la actualidad en
Canadá representa un hito en el estudio relativa armonía, la presencia de una L3
de las actitudes lingüísticas, a diferencia como hemos visto viene representada por
de lo que ocurre en el resto del mundo la presencia en las escuelas de diversos
francófono y muy especialmente en Fran- grupos etnoculturales como resultado de
cia, donde el número de estudios que se la masiva inmigración que caracteriza
ocupan de esta cuestión es muy reducido principalmente a las grandes urbes. Por
(Lasagabaster, 2003). Dos podrían ser las su carácter multicultural, el estudio de las
razones principales de que esto sea así. relaciones entre los diferentes grupos se
Por un lado, el hecho de que nos encon- convierte en una tarea fundamental, para
tramos ante un país en el que dos lenguas lo que el análisis de las actitudes hacia el
de gran prestigio internacional como el multiculturalismo y el multilingüismo es
inglés y el francés conviven en un mismo un paso imprescindible. En esta sección
contexto con estatus oficial y con una daremos cuenta de dos estudios: en el
importante presencia, especialmente en caso del primero de ellos (Berry y Kalin,
el caso de la provincia de Quebec, en la 1995), porque se trata de un estudio a
que seis millones de habitantes son muy escala nacional y porque sus resultados
conscientes de que están rodeados por coinciden con los de los principales estu-
300 millones de anglófonos, por lo que dios realizados hasta entonces, y en el
nos encontramos ante una cultura nortea- caso del segundo (Mady, 2003), porque se
mericana única. Es importante recordar trata de la investigación más reciente a la
que en Quebec se encuentra el mayor que hemos tenido acceso y porque sus
número de hablantes nativos de francés, resultados hacen referencia a un progra-
naturalmente una vez exceptuado el Esta- ma regular de enseñanza obligatoria del
do francés. Por lo tanto no es ninguna francés (L3 para los alumnos inmigrados)
casualidad que la investigación sobre el y no a un programa de inmersión.
papel de las actitudes se iniciara en Cana- Berry y Kalin (1995) dan cuenta de
dá, ya que se trata de uno de los pocos una investigación realizada a escala nacio-
lugares en el mundo en el que la pobla- nal en la que las actitudes hacia el multi-
ción está dividida entre hablantes de dos culturalismo y los diferentes grupos étni-
lenguas internacionales y de prestigio, cos fueron objeto de estudio. Los
como son el inglés y el francés, lo que ha participantes fueron 3.325 adultos (mayo-
producido que la competencia entre res de 18 años), 1.500 de los cuales pro-
ambas lenguas haya sido feroz (Dörnyei, venían en partes alícuotas de las tres gran-
2001). Por otro lado, no se puede soslayar des urbes canadienses que amalgaman
que nos encontramos ante uno de los en su población el mayor número de

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alumnos inmigrantes: Montreal, Toronto apoyaban más decididamente el multicul-
y Vancouver. En general se constató que turalismo y denotaban menos niveles de
la actitud hacia diversos aspectos del mul- etnocentrismo que los ciudadanos francó-
ticulturalismo (tales como su presencia y fonos. No obstante resulta llamativo que
enseñanza en la escuela) eran en térmi- las personas de origen no-francófono que
nos generales positiva, al tiempo que las vivían en Quebec mostraran actitudes
medidas encaminadas a medir el grado de más positivas hacia el multiculturalismo
tolerancia también demostraron que éste (incluyendo las lenguas) que las no-fran-
era moderadamente alto. Por medio de cófonas que vivían fuera de esta provin-
análisis factorial se distinguieron cinco cia, lo que los autores del estudio achacan
escalas (actitudes hacia los programas a que, para esta parte de la población, el
multiculturales, canadianismo, tolerancia, multiculturalismo supone una protección
consecuencias del multiculturalismo e de su cultura e identidad en una región
ideología) y en todas ellas las puntuacio- donde la lengua y cultura francófonas son
nes medias superaron la puntuación teó- claramente dominantes.
rica que denotaba una actitud favorable. En cualquier caso, los autores estiman
Además todos los grupos étnicos engloba- que, a pesar de algunos rasgos de etno-
dos en el estudio mostraban una actitud centrismo más marcados entre ciertos
muy positiva y un gran apoyo hacia su sectores de la población canadiense, las
país (canadianismo), por lo que la identi- perspectivas de lograr una sociedad diver-
ficación con el país no se veía negativa- sa y tolerante en Canadá son buenas.
mente afectada por la aceptación de la Estos resultados vendrían a coincidir con
diversidad. Asimismo cabe destacar que los obtenidos en el primero de los gran-
las actitudes hacia los grupos de pobla- des estudios nacionales realizado en esta
ción inmigrantes variaban, de manera que dirección (Berry, Kalin y Taylor, 1977) y
los grupos de origen europeo eran eva- en los que le siguieron hasta principios
luados más favorablemente que los que de los noventa (para una revisión de
no tenían un origen europeo. En cual- todos estos estudios previos véase Kalin y
quier caso, el 70% se mostraba partidario Berry, 1994). En todos ellos se detectó
de una sociedad diversa, por sólo un 27% una actitud de apoyo hacia el multicultu-
que no se mostró tan favorable. ralismo, con índices de etnocentrismo y
Además, llama la atención que la prejuicio bajos, y en los que las actitudes
población encuestada que vivía en la pro- hacia los distintos grupos raciales y étni-
vincia francófona de Quebec se mostrara cos ha sido positiva (aunque con variacio-
menos positiva con respecto al multicul- nes dependiendo del origen francófono o
turalismo que quienes vivían fuera de esta anglófono/inmigrante de los encuesta-
provincia. Una de las interpretaciones dos).
más compartidas es que el multicultura- Un estudio muy reciente y centrado
lismo (y la inmigración) es observado en las actitudes hacia la L3 es el de Mady
como una amenaza para la lengua y cultu- (2003), en el que esta autora examina las
ra francesas (Berry, Kalin y Taylor, 1977; actitudes hacia el francés como asignatura
Berry y Kalin, 1995; Bolduc y Fortin, obligatoria entre alumnos inmigrados
1990; Bourish, 1987), lo que ayudaría a para quienes el inglés es la L2 (y por tanto
explicar estas diferencias según la región el francés la L3) y alumnos nacidos en
de residencia: Quebec versus resto del Canadá para quienes el francés es su L2.
país. Por el contrario, las personas de ori- El interés de este estudio radica asi-
gen anglófono o de otros grupos étnicos mismo en que, mientras en el contexto

414
canadiense son muchas las investigacio- nos. Para Mady la explicación se encuen-
nes que se han ocupado de los resultados tra en su experiencia de aprendizaje mul-
obtenidos en los programas de inmersión, tilingüe.
son muy escasos los que han analizado los
resultados que se producen en la ense-
ñanza del francés como asignatura (deno- ESTUDIOS REALIZADOS
minados core French programs), y menos EN EL ESTADO ESPAÑOL
aún los que analizan la población escolar
que tiene una L1 diferente del inglés o COMPETENCIA LINGÜÍSTICA
francés. EN LA TERCERA LENGUA
Los participantes fueron 101 alumnos
de entre 14 y 15 años de la provincia de
En el Estado español los estudios que se
Ontario que respondieron a un cuestio-
han ocupado de la adquisición de una L3
nario, de los cuales seis fueron también
entrevistados en profundidad. Todos los en Cataluña, el País Vasco o la Comunidad
miembros de la muestra estaban comple- Valenciana son escasos, y no tenemos
tando sus estudios en una escuela cuyos constancia de que hasta este momento se
estudiantes se englobaban en un perfil haya realizado estudio alguno en Galicia.
socioeconómico bajo. Los resultados Al tratarse de estudios que han sido com-
reflejaron que los alumnos inmigrantes pletados durante los últimos quince años,
mostraban una actitud más positiva y esta- coincidiendo con las últimas tendencias
ban más motivados para aprender francés favorecedoras del aprendizaje precoz,
que los nacidos en Canadá, resultando las todos ellos tienen como objeto de estu-
diferencias entre ambos grupos estadísti- dio la lengua inglesa, que es sin duda
camente significativas. Mady da dos razo- alguna la lengua extranjera preponderan-
nes principales para explicar estos resul- te en el sistema educativo español.
tados. En primer lugar, destaca que este En el País Vasco se han realizado hasta
grupo considera que tiene que hacer un este momento tres tesis doctorales
mayor esfuerzo para establecerse en el (Cenoz, 1991; Lasagabaster, 1998a; Sagas-
país, por lo que son más proclives a esfor- ta, 2000) con el objetivo de analizar la
zarse para lograr este objetivo que los que influencia del grado de bilingüismo y de
ya están establecidos en la sociedad los tres modelos lingüísticos existentes en
receptora. En segundo lugar, y como fac- el aprendizaje del inglés. En la Comuni-
tor explicativo de mayor peso fruto de los dad Autónoma Vasca (CAV) existen en la
análisis estadísticos realizados, sus res- actualidad tres modelos lingüísticos en
puestas más favorables a los ítems que los que los realizar los estudios preuniver-
medían la orientación integradora con la sitarios:
comunidad francófona las achaca la auto-
ra a sus vivencias anteriores, entre las que
destacaría sobremanera el hecho de • Modelo A: éste es un programa
hablar ya una L2. Esta experiencia previa regular en el que todas las asigna-
les concedería un mayor grado de con- turas se imparten en castellano
fianza y les ayudaría a sentirse más segu- excepto la asignatura de Lengua
ros durante el proceso de aprendizaje del Vasca y su Literatura, la cual cuenta
francés como L3, y esto a pesar de que su con una hora diaria de clase aproxi-
contacto con la población francófona era madamente. La L1 de los alumnos
menor que el de sus compañeros anglófo- es el castellano.

415
• Modelo B: éste es un programa de del inglés como L3 y apareció como una
inmersión temprana parcial en el variable significativa en todas las dimen-
que algo más de la mitad de las siones del rendimiento en inglés (prue-
asignaturas (70%) se imparten en bas que englobaban las cuatro destrezas
euskera y un 30% en castellano. En lingüísticas y un test de gramática y voca-
cualquier caso, se ha de considerar bulario).
que este modelo lingüístico es el Lasagabaster (1998a y 2000) contó
más heterogéneo y que la propor- con la participación de 252 alumnos de 5º
ción puede variar mucho de un y 8º de la antigua EGB, los cuales estaban
centro a otro. La L1 de los alumnos cursando sus estudios en los tres modelos
es el castellano. lingüísticos anteriormente descritos en la
• Modelo D: se trata de un programa ciudad de Vitoria-Gasteiz. Nuevamente
de inmersión temprana total en el los alumnos del modelo D fueron los más
que todas las asignaturas se impar- beneficiados por su bilingüismo y obtu-
ten en euskera excepto la clase de vieron los mejores resultados tanto en las
Lengua Española y su Literatura pruebas escritas como orales (las cuatro
(habitualmente una hora diaria de destrezas lingüísticas y pruebas de gramá-
clase). La L1 de los alumnos es bien tica y vocabulario). Las puntuaciones de
el euskera o el castellano. Cuando los alumnos del modelo D fueron signifi-
la L1 de los alumnos es el euskera cativamente más altas que las del modelo
se trata entonces de un programa A en 5º curso y que las de tanto el modelo
de mantenimiento (y no de inmer- A como el B en 8º, mientras que no se
sión obviamente, ya que el alumno apreciaron diferencias entre los modelos
no desconoce la lengua vehicular). A y B. Por lo tanto sólo aquellos estudian-
tes que lograron una alta capacitación lin-
En las tres tesis doctorales a las que güística en las dos lenguas oficiales (caste-
hacíamos referencia con anterioridad se llano y euskera), y por tanto quienes se
observó que son los alumnos que alcan- aproximaban a un bilingüismo equilibra-
zan un grado más alto de bilingüismo do, disfrutaban de ventajas al estudiar el
quienes obtienen los mejores resultados inglés como L3. Cuando hablamos de
en inglés. Cenoz (1991) comparó a 321 bilingües equilibrados nos referimos a
sujetos de los modelos A y D que estudia- aquellos alumnos que logran una alta
ban el antiguo COU durante el curso 1990- capacitación en las dos lenguas oficiales
91 en la provincia de Gipuzkoa. Esta auto- de la comunidad, ya sean éstas el euskera
ra observó que cuando el euskera era y el castellano (en la CAV), o el catalán y el
utilizado como lengua vehicular (modelo castellano (en Cataluña y Comunidad
D), los resultados eran superiores a los de Valenciana).
los alumnos que sólo la estudiaban como Sagasta (2001 y 2003) por su parte
asignatura (modelo A). Asimismo hubo ahondó en esta cuestión y por medio de
otra serie de variables indicadoras de pruebas escritas realizadas por 155 alum-
bilingüismo que resultaron influir positi- nos de los cuatro cursos de la ESO que
vamente en los resultados, tales como pertenecían al mismo centro escolar
que la L1 del alumno fuese el euskera o constató que el grado de bilingüismo
que la competencia de la madre en la len- ejercía un efecto significativo en la pro-
gua minoritaria fuese alta. Los análisis de ducción escrita. De esta manera los alum-
regresión mostraron que el bilingüismo era nos que habían desarrollado un nivel
un elemento relevante en la adquisición de bilingüismo más alto eran quienes

416
obtenían las puntuaciones más altas en Lasagabaster (2003) diseñó un estu-
las pruebas de escritura en inglés (una dio en el que se trataba de examinar las
carta de carácter formal y una receta de actitudes de 1.087 estudiantes de la Uni-
cocina de carácter informal). versidad del País Vasco-Euskal Herriko
Los mismos resultados se han logrado Unibertsitatea con respecto al euskera, el
en Cataluña, donde Sanz (2000) condujo castellano y el inglés, puesto que a pesar
una investigación en la que comparó el de que había varios estudios sobre las
aprendizaje del inglés por medio de tests actitudes hacia el bilingüismo, eran muy
de gramática y vocabulario. Los partici- escasos los que se ocupaban de las tres
pantes fueron 124 hablantes bilingües de lenguas en contacto en el contexto educa-
catalán y castellano a quienes se comparó tivo. Para ello se sirvió de un cuestionario
con 77 hablantes monolingües de fuera basado en el creado por Baker (1992). Tal
de Cataluña, observándose que los prime- y como se esperaba los estudiantes que
ros alcanzaron puntuaciones más altas en tenían el euskera o ambas lenguas (euske-
las pruebas de lengua inglesa. Safont ra y castellano) como L1 mostraron unas
(2003) presenta un estudio realizado en actitudes más positivas hacia el euskera
Castellón en el que las participantes fue- que los de lengua castellana, mientras
ron 160 estudiantes (todas ellas estudian- que en el caso del castellano los resulta-
tes universitarias), el 60% de las cuales dos fueron justamente los contrarios.
había seguido una educación monolin-
Resultados similares se obtuvieron en
güe, mientras que el 40% restante había
Cataluña en una encuesta sobre las actitu-
estudiado en un programa bilingüe. La
des lingüísticas del alumnado de la Uni-
principal novedad de este estudio radica
versidad de Barcelona (Vicerectorat de
en que la cuestión bajo estudio era la
Relacions Institucionals i Política Lingüís-
competencia pragmática en el aprendiza-
tica, 1998), la universidad más grande de
je de la L3, una cuestión que hasta el
momento ha recibido muy poca atención. esta comunidad autónoma. Con respecto
En este estudio se comprobó una vez más a las actitudes hacia el catalán se observó
la superioridad de la muestra bilingüe una clara influencia de la L1: los alumnos
sobre la monolingüe cuando se trataba de de L1=catalán eran muy favorables en un
evaluar lo apropiado de algunas estrate- 73,1% de los casos, los bilingües en un
gias pragmáticas. 46,4% y los de L1=castellano en un
28,5%. El grado de indiferencia ante la
lengua minoritaria resultó ser también
ACTITUDES LINGÜÍSTICAS bastante significativo: 5%, 13,4% y 24,4%,
respectivamente. Centrándonos de nuevo
Los estudios que se han ocupado en el en el estudio de Lasagabaster, hemos de
contexto español de las actitudes hacia decir que con respecto al inglés, y contra-
tres lenguas en contacto son muy escasos, riamente a la hipótesis de partida (ya que
recientes y se ocupan de analizar las acti- no se esperaban diferencias independien-
tudes hacia la lengua minoritaria, la len- temente de la lengua materna de los
gua mayoritaria y la lengua extranjera en alumnos), los alumnos con euskera como
comunidades con una lengua propia. En L1 explicitaron una actitud más negativa
esta sección nos ocuparemos de un estu- que los de castellano=L1, mientras los
dio muy reciente que ha tratado esta cues- alumnos con ambas lenguas como L1 se
tión y compararemos sus resultados con situaban a caballo de los dos grupos ante-
los obtenidos en Cataluña. riores. Estas diferencias intergrupales

417
contaron con significación estadística en CONCLUSIONES
todos y cada uno de los casos.
Estos resultados pueden tener una En este artículo se ha analizado tanto el
doble lectura. Por un lado, la actitud mos- aprendizaje de una L3 como las actitudes
trada por los alumnos que tienen el eus- lingüísticas hacia el multilingüismo en
kera como L1 se puede observar como un dos contextos diferentes (el español y el
deseo de proteger la lengua minoritaria canadiense), pero que comparten una
ante dos lenguas mayoritarias con un serie de características comunes. Es por
gran peso internacional (castellano e ello que es importante establecer clara-
inglés); se trataría de una actitud defensi- mente las diferentes lenguas a las que
va. Por otro lado, Lasagabaster también haremos referencia en esta sección de
señala que se puede hacer otra interpreta- conclusiones. En el contexto canadiense
ción de estos resultados, en concreto que la L1 es la lengua de la población inmi-
estos alumnos pudieran tener razón y que grante, para quienes las dos lenguas ofi-
las instituciones deberían hacer aún ciales del país (inglés y francés) represen-
mayores esfuerzos para asegurar la super- tan sus L2 y L3. La excepción la
vivencia y mejorar la situación sociolin- encontramos en los programas de doble
güística de la lengua minoritaria. Puesto inmersión, donde alumnado con inglés
que a los encuestados no se les preguntó como L1 estudian a través del francés y el
por su opinión sobre las ayudas institu- hebreo (L2 y L3). En el caso español, la L1
corresponde a las lenguas minoritarias
cionales, ni se ahondó en sus opiniones
(catalán, euskera, etc.), la L2 a la lengua
ante el cuestionario cerrado por medio de
mayoritaria (castellano) y la L3 a la lengua
una entrevista, esta cuestión quedó sin
extranjera (inglés). Asimismo, también se
respuesta. La mejora de las actitudes
abordará la cuestión de la población inmi-
hacia las dos lenguas oficiales debe con-
grante presente en los centros escolares
vertirse por tanto en una tarea prioritaria,
de las zonas bilingües del Estado, para
para lo que es necesario que los conteni- quienes su propia lengua representará
dos actitudinales pasen a jugar un papel naturalmente su L1, las dos lenguas ofi-
mucho más importante que el que han ciales de la comunidad en cuestión sus L2
desempeñado hasta ahora en el currículo. y L3, y finalmente la lengua extranjera
Las actitudes hacia la lengua extranjera sí supondrá su L4.
que podrían mejorar gracias a la enseñan- La principal conclusión que se puede
za temprana de la lengua extranjera desde extraer tras la revisión de los estudios
los cuatro años (una práctica casi univer- analizados en este artículo es que el bilin-
salizada hoy día en las escuelas de la CAV), güismo fomenta el aprendizaje de una
la cual podría tener un efecto positivo a la lengua adicional, algo que vendría a cons-
larga en las actitudes de aquellos alumnos tatar los resultados alcanzados en otros
más reacios ante el inglés. En cualquier muchos contextos aparte del canadiense
caso, este estudio demostró que el grado y el español (Brohy, 2001; Klein, 1995;
de competencia resultó ser la variable que Thomas, 1992). Una de las explicaciones
ejercía un mayor efecto en las actitudes más socorridas (Bild y Swain, 1989; Cum-
hacia las tres lenguas, por lo que el logro mins, 1993; Lasagabaster, 1998a y 1998b;
de una alta capacitación lingüística en cas- Sanz, 2000) para ilustrar estos resultados
tellano, euskera e inglés debe convertirse radica en que la exposición a dos lenguas
en el gran reto del sistema educativo contribuye a desarrollar una mayor con-
vasco. ciencia metalingüística, es decir, una

418
mayor capacidad de analizar la lengua de la L3 hace falta que concurran una
como objeto de reflexión en sí mismo serie de factores. En primer lugar se debe
(fruto de la comparación de dos sistemas tratar de un contexto de aprendizaje aditi-
lingüísticos diferentes). Esta doble expo- vo, en el que el aprendizaje de la L2 no
sición fomentaría la capacidad de prestar suponga un riesgo o la dejación de la len-
atención a las formas lingüísticas, lo que gua materna (a diferencia de lo que ocu-
redundaría en una mayor facilidad para rre en las situaciones de bilingüismo sus-
aprender una lengua adicional. A esta tractivo), porque es sólo en estos casos
cuestión se podría añadir una segunda, cuando se consigue que los alumnos ter-
que haría referencia a que el alumno que minen siendo bilingües equilibrados con
ha estudiado dos lenguas cuenta ya con una alta competencia en ambas lenguas.
una serie de estrategias de aprendizaje, a Estos resultados se han visto refrendados
las cuales recurre durante el aprendizaje en contextos tan dispares como el cana-
de la L3 (Lasagabaster, 1998a; Mady, diense, estadounidense, australiano o fin-
2003). El alumno que sólo conoce su L1, landés (Björklund y Lasagabaster, 2002;
sin embargo, carece de esta posibilidad, Cummins, 2001 y 2002). En nuestro con-
ya que no se ha visto en la necesidad (o texto esta tendencia también se ha obser-
no ha tenido tantas oportunidades) de vado en la CAV (Etxeberria, 1999; Lasaga-
reflexionar tan detenidamente sobre la baster, 1998a y 2001c), donde la clara
lengua. presencia del castellano como lengua
Además esta ventaja a la hora de mayoritaria posibilita que los alumnos de
aprender una L3 se ha observado tanto en los programas de inmersión en euskera
alumnos cuyas lenguas maternas eran no muestren desventaja lingüística alguna
tipológicamente cercanas a la lengua con respecto a los matriculados en el
meta, como en el caso de hablantes cuyas modelo castellano.
lenguas no pertenecían a la misma familia Estos resultados encuentran su justifi-
lingüística. En Canadá Bild y Swain cación teórica en dos teorías muy conoci-
(1989) y Swain y Lapkin (1991) observa- das en el ámbito de la educación bilingüe
ron que el aprendizaje de una L3 cuando y propuestas por Jim Cummins con el
ésta era una lengua romance no conlleva- objetivo de proporcionar un marco teóri-
ba ventajas significativas para los alumnos co para el estudio del desarrollo de las
que tenían el italiano como L1 al compa- relaciones entre el lenguaje y el funciona-
rar sus resultados con alumnos cuya L1 miento cognitivo en los sujetos bilingües.
no era una lengua romance. En el contex- La primera de ellas es la hipótesis del
to español los hablantes de catalán o de nivel umbral (Cummins, 1976 y 2002), la
euskera como L1 superaban a sus pares cual señala la existencia de un nivel de
monolingües a pesar de que la primera es competencia lingüística al que el sujeto
una lengua tipológicamente más cercana bilingüe debe acceder para que el bilin-
al inglés que la segunda (no se debe olvi- güismo comporte efectos positivos. Es
dar que el euskera es una de las pocas por ende preciso que el alumno logre
lenguas europeas que no proviene del alcanzar este nivel umbral para evitar los
indoeuropeo). Por lo tanto la cercanía posibles déficits cognitivos, lo que le per-
tipológica no parece ser un factor tan mitirá disfrutar de los aspectos potencial-
decisivo y determinante cuando se trata mente beneficiosos del bilingüismo. Si se
de aprender una L3. consigue alcanzar dicho nivel umbral se
Sin embargo, para que la educación podrá disfrutar de las ventajas de la expe-
bilingüe resulte en un aprendizaje exitoso riencia de aprendizaje bilingüe. Este nivel

419
de competencia variará dependiendo del realizados en Canadá parecen demostrar
estadio cognitivo en el que se encuentre que la promoción y enseñanza de la len-
el sujeto y de las demandas académicas de gua de los alumnos inmigrantes redunda
la etapa escolar. La segunda de estas hipó- en una mejor adaptación de este alumna-
tesis es la hipótesis de la interdependen- do al sistema educativo, ya que al desarro-
cia lingüística (Cummins, 1979 y 2002), la llar su L1, están desarrollando sus habili-
cual se centra en la relación de las dos dades lingüísticas no sólo en esa lengua,
lenguas del sujeto bilingüe. Cummins sino en su aprendizaje lingüístico y en su
sostiene que el desarrollo de la L2 está alfabetización en las otras lenguas (hipó-
estrechamente relacionado con el nivel tesis de la interdependencia), lo que pro-
de competencia del sujeto en su L1 antes duce claros beneficios en su escolariza-
de someterse a la exposición intensiva a la ción. Es importante destacar que en
L2. Por consiguiente, si el nivel del sujeto Canadá, siempre que un grupo de al
es alto en su L1 esto redundará positiva- menos 25 progenitores solicite que sus
mente en la L2; pero si por el contrario el hijos reciban educación en su L1 (inde-
nivel de la L1 es bajo o inadecuado a su pendientemente de qué lengua se trate),
estadio cognitivo, la consecuencia será la dirección del centro debe tratar de con-
que el sujeto se encontrará con dificulta- seguir que esta petición se vea cumplida,
des para alcanzar el nivel de competencia lo que naturalmente redunda en una
adecuado en la L2. Aunque aspectos mejor adaptación de este alumnado a la
superficiales como la pronunciación o la escuela.
fluidez están diáfanamente diferenciados, En el contexto canadiense no existe
existe una competencia cognitiva/acadé- una tendencia clara con respecto a que el
mica subyacente que es común a todos alumnado inmigrante se incluya en pro-
los idiomas y que permite la transferencia gramas de inmersión tardía (en los que la
de conocimientos de una lengua a otra. enseñanza a través de la L2 se posterga
En segundo lugar, y siguiendo con los hasta mediada la educación primaria) o
factores imprescindibles para lograr un de inmersión temprana (en los que la L2
aprendizaje efectivo de la L3, es preciso se utiliza como medio de instrucción
que este deseo de lograr una alta compe- desde el comienzo de la escolarización),
tencia en tres lenguas no se circunscriba a pero siguen existiendo diferencias entre
un número determinado de aulas donde este alumnado dependiendo de su esta-
se congrega una parte concreta del profe- tus socioeconómico, ya que cuanto más
sorado, sino que la totalidad del centro alto sea éste, más probabilidades (y por
educativo esté imbuido del mismo espíri- tanto mayor es el porcentaje) hay de que
tu y decidido a conseguir el éxito en este los progenitores de alumnos inmigrantes
aprendizaje trilingüe. Para ello todos los se animen a matricular a sus hijos en un
estamentos inmersos en la escuela (per- modelo de inmersión temprana (Lapkin y
sonal docente y administrativo, progeni- Swain, comunicación personal). Sin
tores, alumnado y administración) deben embargo, hay que recalcar que existen
mantener una línea de actuación homo- pocos estudios longitudinales que sin
génea y coherente que ayude a lograr los duda alguna facilitarían la obtención de
objetivos marcados en cada una de las conclusiones más definitivas. En cual-
lenguas presentes en el currículo (Dage- quier caso, la evidencia empírica con la
nais y Day, 1998 y 1999). que contamos en la actualidad nos permi-
En tercer lugar, y en relación con te apostar por la escolarización de los
el alumnado inmigrante, los estudios alumnos inmigrantes en los programas de

420
inmersión. Por ello las trabas con las que el modelo A, el único no bilingüe del sis-
habitualmente se encuentran los progeni- tema educativo vasco y que por tanto no
tores de alumnos inmigrantes cuando asegura una buena capacitación en euske-
desean matricular a sus hijos en progra- ra. La experiencia canadiense debe servir
mas de inmersión, por ejemplo en Cana- como ejemplo para impulsar la participa-
dá (Dagenais y Day, 1999) o en la CAV, ción de los alumnos inmigrantes en
debería ser superada por la motivación e modelos bilingües, ya que las investiga-
interés de los progenitores en que sus ciones demuestran lo viable de su incor-
hijos sigan una educación igualitaria y por poración. Además de este modo se consi-
tanto como la de otros sectores de la gue que este sector de la población no
población. quede automáticamente excluido de la
Uno de los principales argumentos posibilidad de conocer y comunicarse en
utilizado en contra de la participación del la lengua minoritaria. De lo contrario, la
alumnado inmigrante en los programas idea que se transmite es que los progra-
de inmersión al francés ha sido el de que mas de inmersión son adecuados para los
su competencia en inglés se vería afectada grupos mayoritarios, pero no así para los
negativamente. Sin embargo, excepto en minoritarios o de diferentes proceden-
Quebec, en el resto del país la preponde- cias, con lo que únicamente se fomentaría
rancia del inglés es absoluta y esto permi- una clara división social que nos llevaría a
te que estos alumnos cuenten con innu- la conclusión de que estos programas son
merables ocasiones para mantener aptos sólo para determinados grupos
interacciones en inglés, lo que paliaría sociales, cuando existe evidencia empírica
definitivamente ese posible déficit con- que indica lo contrario.
juntamente con la enseñanza de inglés Todos estos datos nos permiten con-
que reciben en la escuela (a pesar de no cluir que cuando se trata de un grupo
ser tan intensiva como en los programas mayoritario se puede prescindir de la
regulares). La investigación que encontra- enseñanza de la L1 durante los primeros
mos en Canadá con relación al alumnado cursos, pero que esto no debe ser así
inmigrante es algo que echamos en falta cuando la L1 es una lengua minoritaria
en el contexto español (a pesar de que el (euskera o catalán, o la L1 de los alumnos
número de estudios realizados en el con- inmigrantes) que no cuenta con un uso
texto canadiense tampoco es muy eleva- extendido fuera del contexto escolar. Esta
do), aunque bien es cierto que en los últi- cuestión es de gran interés para todas
mos tiempos este campo de investigación aquellas comunidades bilingües de nues-
está recabando la atención de un crecien- tro contexto que cuentan con una lengua
te número de investigadores. propia; de hecho, no se debe olvidar que
Por lo tanto, una conclusión aplicada aproximadamente el 34% de la población
a las comunidades autónomas bilingües española reside en comunidades en las
del Estado español sería que debe fomen- que existen dos lenguas oficiales (Turell,
tarse en la medida de lo posible la ense- 2001).
ñanza en la L1 de los alumnos inmigran- En relación con las actitudes lingüísti-
tes, pero al tiempo que se posibilita cas hemos de reseñar que en el estudio
también el acceso a las dos lenguas oficia- que revisábamos en el apartado Actitudes
les (que por tanto se convertirían en sus lingüísticas, Berry y Kalin (1995) desta-
L2 y L3). Desafortunadamente, por ejem- can que, de acuerdo con los resultados
plo en el caso de la CAV, la gran mayoría disponibles, las personas de origen fran-
de estos alumnos tiende a matricularse en cófono que residían en Quebec apoyaban

421
en menor grado la diversidad (lo que no de la población requiere del desarrollo de
quiere decir que no la aceptasen) y mos- currículos incluyentes que no partan de
traban un menor sentimiento en la escala una visión europeizante del mundo, sino
de canadianismo, pero que en cualquier que partan de un enfoque antirracista y
caso no obtuvieron puntuaciones más que fomenten la tolerancia (Coelho,
bajas en la escala de tolerancia. Por ende, 1998).
en los dos contextos en los que nos Las sociedades actuales, y la canadien-
hemos centrado, Quebec y la CAV, se se y la española naturalmente no son una
observa que los hablantes de la lengua excepción, precisan de ciudadanos multi-
minoritaria tienden a ser mas etnocéntri- lingües que sean capaces de desenvolver-
cos. Esta sensación de amenaza lingüísti- se con naturalidad en varias lenguas, no
ca-cultural hace que se desarrolle una sólo por cuestiones meramente económi-
actitud de protección de la lengua y cultu- cas, sino con la finalidad de fomentar la
ra en el caso de estas comunidades que cooperación y el entendimiento a escala
sienten inseguridad por la cercanía de internacional. Los resultados apuntan a
lenguas más internacionales y con mayor que el logro deseado de que nuestro sis-
número de hablantes. Por lo tanto, pues- tema educativo produzca hablantes trilin-
to que los estudios coinciden en señalar gües (al menos en el caso de las comuni-
que tanto la minoría francófona en Que- dades autónomas bilingües) es realizable,
bec como la vasca en la CAV son conscien- pero para ello hace falta que la lengua
tes de los beneficios que conlleva el bilin- minoritaria (ya sea una de las lenguas
güismo, la actitud de la que hacen gala cooficiales en el Estado español o la L1
sólo cabe tildarla de defensiva. El cambio del alumnado inmigrante) de los discen-
de este tipo de actitudes es una cuestión tes sea impulsada en la escuela, tal y
que entraña una enorme complejidad por como se ha observado en los datos proce-
todos los factores que afectan a las mis- dentes de las experiencias canadienses y
mas, por lo que la aportación de solucio- españolas. Este campo de investigación
nes no es en cualquier caso una tarea sen- debe pasar a ocupar un lugar preferente
cilla, pues tanto Quebec como la CAV en el ámbito investigador, puesto que la
destacan por ser entidades política y presencia de más de dos lenguas en con-
socialmente muy complejas. Lo que no tacto en las clases y en el bagaje lingüísti-
cabe la menor duda es de que es necesa- co de los alumnos se está convirtiendo en
rio que los contenidos actitudinales la regla general, mientras que el bilingüis-
pasen a ocupar una posición más reseña- mo (y ya no digamos el monolingüismo)
ble en el currículo y se les dedique mayor es la clara excepción.
tiempo en las horas de clase, ya que su No se debe olvidar en cualquier caso
consideración ante los contenidos proce- que no existe un modelo universal para
dimentales y sobre todo ante los concep- poner en práctica este tipo de programas
tuales es habitualmente bastante menor. bilingües a los que se añade el aprendizaje
Por otro lado, y teniendo en cuenta el de una lengua extranjera como L3, por lo
creciente número de alumnos que se que es preciso adoptar un enfoque flexible
incluye en nuestro sistema educativo pro- que tenga en cuenta las características del
veniente de otros países, es importante alumnado, los medios humanos, técnicos y
recalcar el papel de la escuela en el desa- materiales disponibles y el clima político y
rrollo de actitudes positivas hacia estos económico del contexto en el que se pre-
nuevos integrantes de nuestra sociedad. tende poner en marcha el programa (Cum-
La mejora en las actitudes hacia esta parte mins, 2001). La comparación con otros

422
contextos es muy valiosa y puede ayudar a Training): http://www.edu.gov.on.ca. Una
recabar información, pero no cabe ningu- fuente de referencias bibliográficas muy
na duda de que en cualquier caso es funda- rica se encuentra en la estupenda bi-
mental tener muy en cuenta las peculiari- blioteca del OISE de la Universidad de
dades de cada contexto. Toronto: http://www.oise.utoronto.ca.
Finalmente, una dirección que deben
consi- derar quienes deseen conocer más
AGRADECIMIENTOS sobre la cuestión del alumnado inmigran-
te, educación y tratamiento lingüístico es
Este artículo ha visto la luz gracias a la la siguiente:
concesión de una Beca de Investigación http://www.ceris.metropolis.net/fra
en Estudios Canadienses por parte del meset_e.html.
Ministerio de Asuntos Exteriores de Cana-
dá a su autor, a través del programa Cana- BAKER, C.: Language Attitudes. Clevedon,
dian Studies, Faculty Research Pro- Multilingual Matters, 1992.
gramm. Asimismo desearía hacer constar BARNES, J.: The Acquisition of Questions
mi agradecimiento a todo el personal del in English by a Trilingual Child. Tesis
Ontario Institute for Studies in Educa- doctoral sin publicar. Vitoria-Gasteiz,
tion (OISE) de la Universidad de Toronto, Universidad del País Vasco –Euskal
pero muy especialmente a Alister Cum- Herriko Unibertsitatea, 2002.
ming, Jim Cummins, Sharon Lapkin y BERRY, J. W.; KALIN, R.: «Multicultural and
Merrill Swain por su colaboración y dedi- ethnic attitudes in Canada: An over-
cación durante mi estancia en su institu- view of the 1991 national survey», en
ción, así como a Monica Heller, profesora Canadian Journal of Behavioural
perteneciente al Centre de Recherches en Science, 27 (1995), pp. 301-320.
education franco-ontarienne de esta BERRY, J. W.; KALIN, R.; TAYLOR, J.: Multi-
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Antes de pasar a enumerar las distintas Journal of Multilingual and Multicul-
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citadas en este artículo, procederemos a 255-274.
destacar algunos títulos que podrían ser- BJÖRKLUND, S.; LASAGABASTER , D.: «El
vir de guía tanto al lector no especializado aprendizaje de lenguas a través de los
como al interesado en profundizar en las programas de inmersión en Finlan-
cuestiones aquí tratadas: Coelho (1998), dia», en Infancia y Aprendizaje, 25
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Además todos aquellos interesados en nes sont-ils plus “xénophobes” que
esta temática pueden encontrar informa- les anglophones au Québec. Un analy-
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