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Universidad de Baja California

DOCTORADO EN PSICOLOGÍA
Afectaciones psicosociales y Cognición social en el
trastorno de desarrollo intelectual leve.

ASIGNATURA
METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN
CIENTIFICA
NOMBRE DEL ALUMNO
EMILSE ROJAS MARIN
NOMBRE DEL CATEDRÁTICO
Dr. José Alfredo Alcaraz Gómez
Bogotá D.C, Colombia; noviembre 30 de 2020.
¿Cómo se relaciona las afectaciones psicosociales y la cognición social en infantes con
trastorno del desarrollo intelectual?

2. Planteamiento del problema.


En Colombia la población con trastorno del desarrollo intelectual ha tomado una mayor
importancia desde el ámbito legal y social, como lo establece la ley estatutaria 1618 de 2013
sobre las disposiciones para garantizar el pleno ejercicio de los derechos de las personas con
discapacidad (Congreso de la república de Colombia, 2013). Por este motivo, son necesarias las
investigaciones relacionadas con las dimensiones físicas, conductuales, cognitivas y
psicosociales de las personas con trastorno del desarrollo intelectual, que proporcionen nuevos
programas de atención, evaluación e intervención.
Según Valera y Osorio los factores psicosociales pueden determinar el desarrollo
intelectual en estudiantes dependiendo como se desenvuelvan, por eso es importante identificar
cuales factores son positivos para su promoción y cuales son negativos para su mitigación y
prevención (2014). De lo anterior se puede deducir que las afectaciones psicosociales en
ámbitos educativos sí pueden influir en el desarrollo intelectual de los niños y adolescentes.
Así mismo, Almenara, García, Novalbos, Merello, Abellán y García argumentan que en
personas con discapacidad intelectual existe una relación entre más factores psicosociales estén
afectados hay mayor probabilidad de presentar problemas de comportamiento y síntomas
psicopatológicos siendo los más relacionados el bajo grado de escolaridad de los padres y
formas de acoso en entornos escolares y laborales (1999).
La cognición social es el procesamiento de la información de las relaciones y entorno
social por medio de procesos psicológicos como la percepción, atención, memoria, funciones
ejecutivas entre otros para codificar y comprender la realidad social (Beer & Oschner, 2006).
Según lo anterior, se necesita de un procesamiento cognitivo para entender la dimensión social
con otros individuos.
En un estudio realizado en población con síndrome Down se destaca que las dimensiones
cognitivas de la cognición social se ven disminuidas significativamente, es decir, que la
capacidad para comprender los estados emocionales y relaciones con otros puede ser más
difícil que para personas sin este síndrome, lo que resalta que los factores biológicos y
ambientales pueden influir en la cognición social (Cebula, Moore & Wishart, 2010).
En otro estudio, las capacidades de competencia social, habilidades sociales,
discapacidad intelectual y desarrollo socioeducativo, aseritividad, habilidades interpersonales,
conducta adaptativa, habilidades adaptativas conceptuales, prácticas y sociales se ven
comprometidas en niños y niñas con discapacidad intelectual (García, 2011).
Por otro lado, el Trastorno del desarrollo intelectual o incapacidad intelectual implica
limitaciones que comienzan en el desarrollo en el funcionamiento intelectual y comportamiento
adaptativo que pueden variar de leve, moderado a grave (American Psychiatric Association,
2013). Es decir que afecta dimensiones conceptuales, lingüísticas, psicosociales y prácticas.

Estudios como el de Govela advierte que personas con TDI pueden ver vulnerados su
desarrollo social por factores como discriminación, estigmatización, exclusión que acentúan su
bajo desempeño en habilidades sociales, uso de la comunidad y autodirección (2013). Por lo
anterior, se puede inferir que los fenómenos anteriormente mencionados pueden acentuar aún
más las limitaciones cognitivas para comprender la complejidad psicosocial en ámbitos
familiares, sociales, educativos y personales.

Las investigaciones sugieren una investigación que permita comprender el funcionamiento


de la cognición social desde procesos psicológicos básicos hasta sociales en personas con
trastorno del desarrollo intelectual moderado agregando así valor teórico al campo de la
psicología social, educativa y clínica, a su vez, los resultados permitirán generar mayor
consciencia en los entornos educativos, familiares y sociales sobre sus implicaciones en el
desarrollo social de personas con estas limitaciones en el neurodesarrollo, por consiguiente,
aumentaran las utilidades practicas para el manejo e inclusión en estas áreas. Por otro lado,
permitiría generalizar los resultados del contexto bogotano a contextos latino-américos al
comprender las variables aportando valor metodológico.
Por lo tanto, la investigación pretende responder y dar respuesta a personas, familias e
instituciones de carácter social la siguiente pregunta ¿Cómo se relaciona las afectaciones
psicosociales y la cognición social en infantes con trastorno del desarrollo intelectual moderado?
Buscando la relación entre dos variables 1) Afectaciones psicosociales en personas con
trastorno del desarrollo intelectual y, 2). Cognición social en personas con trastorno del
desarrollo intelectual. De esta forma entender qué relación tienen, cómo se relacionan y
determinar cuáles son los factores psicosociales que más afectan cognición social para poder
orientar procesos psicológicos y sociales al desarrollo o compensación de habilidades
neurocognitivas para el procesamiento de la información social en infantes con TDI.
Por estas razones, (legales, psicológicas, sociales, cognitivas y comportamentales), la
realización de este estudio buscaría responder las siguientes preguntas: 1) ¿Cuál es el perfil
cognitivo de un grupo de niños con Trastorno del desarrollo intelectual en la ciudad de Bogotá,
Colombia?; 2) ¿Los niños con TDI presentan dificultades en procesos específicos relacionados
con la Cognición Social al ser evaluados con las prueba de Evaluación Neuropsicológica infantil
(ENI) Batería de las Funciones Ejecutivas y Lóbulos Frontales (BANFE 2) y la Escala de
Inteligencia Wechsler para niños V , usando criterios psicométricos y valores normativos para
medir su desempeño?: 3) ¿los infantes con afectaciones psicosociales presentan diferencias
grupales estadísticamente significativas frente a niños que no presentan estas afectaciones al
comparar su desempeño según las variables asociadas a la cognición social?; por ultimo, 4)
¿existe una correlación entre la exposición a las afectaciones psicosociales (en años) y el
desempeño en pruebas neuropsicológicas y clínicas que corresponden a un desempeño
inferior?

3. Objetivo general de la investigación.


El objetivo principal de la investigación es caracterizar el perfil neuro-cognitivo y cognición social
de un grupo de niños con Trastorno del desarrollo Intelectual Leve y Moderado con Afectaciones
psicosociales por mínimo de un año.

4. Objetivos específicos de la investigación.


Se plantean 3 objetivos específicos para este estudio.
1. Investigar si los pacientes evaluados tienen dificultades en procesos específicos de
cognición social al ser expuestos a afectaciones psicosociales al evaluarlos por
pruebas neuropsicológicas de ENI, WISC 5, BANBE 2, SADS, cuestionario de
afectaciones psicosociales, cognición social y TOM. Entrevista a familiares y
pacientes.
2. Explorar si los pacientes presentan diferencias intergrupales significativas al dividir la
muestra en subgrupos definidos por: la presencia de afectaciones psicosociales
durante por lo menos el ultimo años, tipo de afectación (socio-económica, escolar,
familiar o personal) y discapacidad leve.
3. Indagar si las variables de duración de afectación psicosocial (en años, frecuencia e
intensidad) presentan una asociación significativa con las puntaciones de las pruebas
neuropsicológicas y de coeficiente intelectual, empleando una correlación de
Spearman.

5. Hipótesis de investigación.
H1 Los infantes con trastorno del desarrollo intelectual leve que han sido expuestos a altos
niveles de afectación psicosocial tienen un menor rendimiento neurocognitivo y de cognición
social comparado al grupo control.
H0 Los infantes con trastorno del desarrollo intelectual leve que han sido expuestos a altos
niveles de afectación psicosocial no tienen un menor rendimiento neurocognitivo y de cognición
social comparado al grupo control.

6. Justificación de la investigación.
En el área de la neuropsicología, el Trastorno del Desarrollo Intelectual ha sido un eje
fundamental en la investigación clínica y básica. El TDI en poblaciones infanto-juveniles requiere
de un enfoque interdisciplinario para su atención, dadas las necesidades de entender y
correlacionar las variables del neurodesarrollo comportamental, cognitivo, aprendizaje,
desempeño escolar y relaciones con pares y mayores. En Colombia los estudios sobre el TDI
bajo nombres como Discapacidad Intelectual (ICBF, 2010). Y las evaluaciones neuropsicológicas
en centros especializados y en la red de salud a estos pacientes, no se ha investigado el alcance
de las afectaciones psicosociales en las áreas académicas, familiares, personales, y relacionales
(sociales) en la cognición social en esta población durante su ciclo de vida. En está
investigación, los niños seleccionados e incluidos tienen un coeficiente intelectual igual o menor
a 80, por lo que se profundiza en las dificultades cognitivas que impliquen una trayectoria de
desarrollo intelectual limítrofe o con discapacidad intelectual. De igual forma, se toma en cuenta
otros aspectos relevantes como son eventos de índole psicosocial con afectación dimensiones
socio-económico, escolares (grado de escolaridad, años escolares perdidos, bullying) familiares
(violencia intrafamiliar, negligencia, sobreprotección o abandono), Personales (Autoconcepto,
Autoeficacia y Autoestima) por más de un año. Se indagará si tiene efectos sobre el perfil
neurocognitivo de los pacientes y desempeño en su cognición social (interpretar, analizar,
recordar y manipular información social: conducta social propia y grupal). Por último, la
investigación permitirá aportar a la academia colombiana y latinoamericana en la divulgación de
sus resultados y análisis, contribuyendo en parte al conocimiento de las dificultades en la
cognición social de niños con TDI en contextos de afectación psicosocial.

7. Alcances y limitaciones.
7.1 El alcance de la investigación es de tipo cuantitativa, correlacional, transversal y
comparativa, dado que se pretende asociar variables de afectaciones psicosociales con el
rendimiento neurocognitivo y de cognición social por medio de un patrón predecible para un
grupo de niños con TDI.
Se busca estudiar una muestra selecciona por conveniencia no probabilística que este
escolarizada perteneciente al centro de servicios psicológicos Dreams And Brain.
7.2. Las limitaciones de la investigación se centran en el la edad de los participantes que han de
estar en un rango entre 8 a 11 años, de la ciudad de Bogotá que cuenten con TDI, 10 de ellos
con antecedentes de afectación psicosocial y 10 sin antecedentes de afectación no psicosocial.
Una limitación importante a considerar son variables no controlables que puede llevar a
correlaciones espurias, por esta razón se hace confirmación y falsación con entrevista a
familiares.
8. Marco Teórico
8.1. Fundamentos teóricos para la propuesta de investigación.
Definición de las variables conceptuales, temáticas y teóricas centrales para la propuesta
de investigación sobre el Trastorno del Desarrollo Intelectual, las esferas psicosociales,
neurocognitivas y cognición social en el grupo a estudiar.
8.1.1. Modelos psicológicos de los factores, riegos y afectaciones psicosociales en
infancia media.
Los factores psicosociales que influyen en el desarrollo emocional infantojuvenil, según
Cano, Pérez y Hernández (2015), son la resiliencia, autoestima, relaciones sociales, vínculo
afectivo y sentido de pertenencia, siendo los más importantes la autoestima y el vínculo afectivo
con padres y/o educadores, de lo anterior se puede inferir que para un buen desarrollo
psicosocial es necesario desarrollar y mantener ciertos atributos psicológicos, conductuales,
sociales, cognitivos y emocionales que nos permita un correcto funcionamiento en nuestra vida
cotidiana y que actuaran como factores protectores ante situaciones adversas o negativas.

Esta visión está en concordancia con la teoría de del apego de Jonh Bowlby (1977) quien
plantea un modelo psicológico del apego como vínculo emocional que se tipifica en tres
principales, seguro: se tiene la confianza en la disposición, comprensión y ayuda en los padres o
figura de cuidado ante situaciones adversas, evitativo: presenta comportamientos evitativos y
ansiosos ante los padres o figuras de cuidado que con figurar extrañas, y resistente-ambivalente:
el infante no tiene la certeza que la figura parental esté disponible o preparada para responder
reaccionando con colera, rechazo al contacto e interacción, buscando en seguida el contacto
cuando se siente inseguro, Finalmente se registra un cuarto tipo introducido por Main y Salomón
(1986). Este es de carácter caótico, indiscriminado y cambiante, manteniendo vínculos con
figuras paternales y extrañas de manera superficial. (Gago, 2014). Es decir, desde las primeras
etapas del ciclo de vida se forman apegos que configuran la percepción social y que, a su vez,
según el grado de valencia del apego se desarrolla conductas relacionadas a un ajuste
psicosocial positivo o negativo.

La Alianza para la Protección y la Prevención del Riesgo Psicosocial en Niños, Niñas y


Adolescentes define los riesgos psicosociales como:
El conjunto de circunstancias, hechos y factores personales, familiares o sociales,
relacionados con una problemática determinada (abandono, maltrato, violencia, baja
escolaridad, explotación económica, vínculos familiares precarios, necesidades básicas
insatisfechas, entre otros) que aumentan la probabilidad de que un sujeto inicie o se
mantenga en situaciones críticas que afectan a su desarrollo integral (deserción escolar,
bajo desempeño académico, timidez o agresividad, entre otros), o que sea víctima o autor
de la violencia u otras situaciones mencionadas afectando sus derechos esenciales (p.12,
2012).
Por lo tanto, un riesgo psicosocial se constituye principalmente de factores externos al
individuo como lo es la configuración y dinámica familiar, contextos escolares y económicos

Desfavorables, y factores psicosociales propios del desarrollo del individuo como son sus
objetivos, intereses y necesidades básicas que pueden ver afectadas.

Bajo esta línea, los efectos psicológicos y sociales de la pobreza en Colombia establecen
condiciones de desventajas económicas, familiares, sociales, escolares, entre otras, que
conlleva a procesos de exclusión social, angustia y malestar. Especialmente en el ámbito
psicológico proliferan sentimientos de confusión, humillación y vergüenza, hay presencia de
desesperanza, estados de embotamiento, sumisión y mayores niveles de estrés. Los efectos
sociales de la pobreza son la exclusión social, violencia, la población infanto-juvenil no presenta
oportunidades de transformación social y desarrollo social, se pierde la oportunidad de educarse
y tener una infancia digna. La pobreza efectúa escenarios de muerte y decremento poblacional,
así como dinámicas de control y poder social (Camacho, 2019). En consecuencia, el factor
económico es un precipitante y detonante de gran sensibilidad para la expresión de los riesgos
psicosociales pues es transversal a las áreas individuales, sociales y escolares pues limita y
somete a estrés constante a las personas, familias y comunidades condicionando bajo
deprivación del funcionamiento normativo de sistemas biológicos y psicológicos.

El ambiente educativo también puede representar un conjunto de riesgos psicosociales,


entre estos se encuentran la deserción escolar que provoca baja autoestima, insatisfacción
personal, depresión, dificultades de adaptación contextual, se encuentra que las entidades
educativas mantienen altas exigencias generando procesos de ansiedad, estrés académico, falta
de espacios para la recreación, agotamiento y baja autoeficacia, así como tensión y adversidad
hacía situaciones escolares (Espinosa, Guzmán, Arguello, Fula y Garavito, 2016). Es decir, una
de las consecuencias de los riesgos psicosociales es la deserción escolar afectando la
percepción y valía que tiene la persona, generando síntomas de displacer, tristeza y fallos para
la adaptación.

El acoso escolar o Bullying es otro riesgo psicosocial en el ámbito educativo, es un


comportamiento sistemático entre pares a nivel verbal, psicológico, físico y/o social con el fin de
lastimar a otra persona, Uno de los principales factores psicosociales generadores del
aprendizaje de la violencia escolar en los estudiantes son por medio de estructuras familiares
disfuncionales, amigos, y entornos como el barrio y escuela, siendo el más destacado el ámbito
familiar. Se afecta la percepción escolar al considerarse como un sitio inseguro. Las formas de
violencia de mayor prevalencia son con sobrenombres, violencia física, perdida y hurto de útiles
escolares, entre otros, afectando los procesos de aprendizaje y desarrollo afectivo (Galvis y
Orjuela, 2018). La influencia del acoso escolar, es común en América Latina y el Caribe con una
prevalencia alrededor del 32 por ciento, (Unesco, 2019).

Por otro lado, los factores psicosociales en la violencia intrafamiliar, por lo general, son la
incomprensión familiar, alcoholismo, celos, agresión física, psicológica, verbal y económica, así
como la crítica y humillación. Siendo la más alta el maltrato físico. (Palencia y Herrera, 2017).
Esto aclara que la violencia intrafamiliar en sus comportamientos más típicos, especialmente el
maltrato físico puede formar una de las bases principales para el riesgo psicosocial.
En general la percepción social de infantes victimas de estas modalidades de riesgo y
efectos psicosociales está alterada, como se aprecia en el estudio de Muñiz, Jiménez, Ferrer,
González y Muñoz a 147 niños víctimas de violencia doméstica, destacando que el 56.7%
reflejan formas directas de castigo físico sobre ellos mismos aplicando castigos, agresividad y
regaños, el 7.4% manifiestan discusiones familiares, el 15% muestra sensaciones de injusticia y
el restante presenta problemas de comunicación con padres, baja autoestima, rechazo familiar,
además de mostrar estos comportamientos con grupo de pares (1996), esto confirma que las
conductas aprendidas de violencia se pueden generalizar en la socialización con pares y alterar
dinámicas de personalidad.

8.1.2. Modelos psicológicos de los factores, riegos y afectaciones psicosociales en


infancia media con Trastorno de Desarrollo Intelectual y discapacidad cognitiva.
En conjunción con lo anterior, en los estudiantes con necesidades educativas especiales
o algún tipo de discapacidad el impacto del bullying es mayor e impacta directamente en has
habilidades de aprendizaje, generando comportamientos como evitación y ausentismo escolar,
bajas calificaciones, inhabilidad para concentrarse, perdida de interés en el logro académico
(National prevention bullying center, 2012).
Las necesidades de relaciones sociales de niños y niñas con discapacidad intelectual en
las familias son la percepción de exclusión, por lo que los padres tienen la necesidad de poder
integrar a los hijos a actividades sociales cotidianas en el colegio y fuera de este, que las
instituciones desarrollen estrategias para enfrentar situaciones negativas, manejo de emociones
y resolución de conflictos, también se demuestra que los infantes con TDI pueden presentar
comportamientos agresivos que dificultan la interacción y relación con sus pares (Cabrera,
Lizarazo y Medina, 2016).
Entre los efectos psicosociales del maltrato infantil y adolescente encontramos efectos en
el desarrollo físico: lesiones abdominales, toráxicas, cerebrales, moretones, hinchazón,
quemaduras, escaldaduras, lesiones del sistema nervioso central, fracturas, desgarros y
abrasiones, lesiones oculares y discapacidad irreversible y/o transitoria. A su vez, además
consecuencias sexuales: pproblemas de salud reproductiva, disfunción sexual, enfermedades de
transmisión sexual, como la infección por el VIH y el SIDA, embarazos no deseados. Y
Consecuencias psicológicas como el abuso de alcohol y otras drogas. disminución de la
capacidad cognoscitiva, comportamientos delictivos, violentos y de otros tipos que implican
riesgos. depresión y ansiedad, retraso del desarrollo, trastornos de la alimentación y el sueño,
sentimientos de vergüenza y culpa, hiperactividad, incapacidad para relacionarse, desempeño
escolar deficiente. Falta de autoestima. Trastorno postraumático por estrés. Trastornos
psicosomáticos. Comportamiento suicida y daño autoinfligido. Cambios en su sistema de
valores. Desconfianza (entorno social). Cambios en su personalidad (irritabilidad,
dependencia etc.) (Junco, 2014).
Estas condiciones establecen relaciones probabilísticas y causales entre la las
afectaciones psicosociales económicas, familiares y educativas-sociales en personas con
discapacidad cognitiva, siendo las más resaltantes para esta investigación los cambios de
percepción, comportamientos y evitación de tipo social y personal.

8.2. Características neurocognitivas en el trastorno de desarrollo intelectual.

El trastorno de desarrollo intelectual antes conocido como Retardo mental o discapacidad


intelectual tiene comorbilidad con otros trastornos del neurodesarrollo como el Trastorno del
Espectro Autista, Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad y Trastornos del Lenguaje.

8.2.1. La etiología del Trastorno del Desarrollo Intelectual.

Si bien el trastorno de desarrollo intelectual o discapacidad intelectual no tiene un


consenso especifico y determinante sobre las causas para su manifestación se han encontrado y
evidenciado una serie de variables y factores que facilitan su manifestación, Según Ke y Liu,
La etiología de la DI es heterogénea. Como consecuencia del progreso en el cuidado
prenatal, lesiones, infecciones y toxinas son causas menos frecuentes. Por el contrario,
los factores genéticos se han vuelto predominantes. En el 40% de los casos no es posible
identificar una causa específica, especialmente en la DI leve. Las influencias ambientales
(p.e., desnutrición, la deprivación emocional y social, como en orfanatos mal gestionados)
pueden también causar o empeorar la DI (p.2, 2017).
Según el DSM IV y IV – TR, las causas de este fenómeno son hereditarias en
aproximadamente un 5%, alteraciones en el desarrollo embrionario con un 30% que pueden ser
de índole cromosómicas o ambientales como el consumo de alcohol, perinatales, problemas
durante el embarazo y al momento del parto en un 10%, puede ser por mal nutrición fetal,
prematuridad, hipoxia, infecciones virales, bacterianas, traumatismos entre otros. Posnatales:

Enfermedades adquiridas, en la primera infancia y niñez como encefalitis, meningitis,


traumatismos con un 5%. (Pérez, 2013). Entonces, se puede delimitar que las principales causas
del trastorno del desarrollo intelectual pueden ser genéticas, nutricionales, ambientales, físicas
antes, durante y después del embarazo y psicológicas al tener comorbilidad con otros trastornos
del neurodesarrollo.

8.2.3. Perfil cognitivo en personas con Trastorno del Desarrollo Intelectual.


Uno de los criterios más empleados para establecer discapacidad intelectual es obtener
un coeficiente intelectual igual o menor a 75 puntos. Sin embargo, según el DSM V, se debe
cumplir una serie de criterios para que el diagnóstico sea verás.
DSM V (2015). Ilustración criterios diagnósticos del Trastorno del Desarrollo intelectual. Recuerdo de DSM –
V.
Desde la perspectiva neuropsicológica, las funciones ejecutivas tienen una menor
puntación tanto en las funcione frías: Monitoreo, inhibición, secuenciación, updating,
planificación, flexibilidad cognitiva, memoria de trabajo, control atencional, Feedback,
razonamiento, categorización, iniciación y formación de conceptos, así como de las
cálidas como lo son la toma de decisiones, control de impulsos, feedback emocional,
estrategias de cooperación, empatía, teoría de la mente y administración de refuerzos en
la discapacidad intelectual (Rodríguez, López, García y Rubio, 2011).

8.3. Cognición social.


Según Sánchez, Tirapú y Adrover la cognición social es “un sistema de
procesamiento de información que se nutre de múltiples funciones más básicas para dar
como resultado la conducta social” (p.5, 2012). Por otro lado, Labbé, Ciampi, Vanegas,
Uribe y Cárcamo, conceptualizan la cognición social como la integración de procesos que
permiten la interacción entre sujetos de la misma especie (p.366, 2019). que se relacionan
con la percepción social que permite la existencia de la Teoría de la Mente generando
empatía y como productos observables la conducta social. De esta forma, la cognición
social, según Gonzáles y Ruíz “estudia los fenómenos sociales empleando elementos de
la psicología básica y experimental. Sus objetos de estudio incluyen las relaciones
interpersonales y la formación y el tratamiento de conceptos y actitudes” (p.253,2015).
8.3.1. Modelos generales, teóricos y conceptuales de la cognición social.
8.3.2. Cognición social en trastornos del neurodesarrollo.
Existe alteraciones en los procesos cognitivos básicos y superiores en los
trastornos del neurodesarrollo, la cognición social requiere de un funcionamiento
adecuado de los procesos cognitivos para su integración, por ende, la cognición social en
trastornos del neurodesarrollo se puede ver afectada.
Por ejemplo, según Ruggieri afirma que en personas con Trastorno del Espectro
Autista son ejes centrales las dificultades en la socialización y el lenguaje, esta deficiencia
es una demarcación de bajo rendimiento en la cognición social y que a su vez está es
causa de la baja empatía que las personas con autismo pueden desarrollar (2013). A su
vez, el desarrollo de la cognición social en personas con Trastorno por Déficit de Atención
e Hiperactividad, según Yánez, presentan problemas de interacción social atribuidos a
deficiencias de cognición social, presentan problemas en el reconocimiento de caras,
expresiones faciales de miedo, tristeza, felicidad y enojo y problemas en la Teoría de la
mente de referencia social de registro de emociones básicas, metra representaciones y
juicios complejos (2019).
De igual forma para Roqueta y Serrano, en niños y niñas con Trastorno Específico de
Lenguaje, especialmente en el Trastorno Pragmático del lenguaje les cuesta poder encontrar las
reglas que se manejan en los distintos entornos sociales, al dificultar inferir primicias y leer el
lenguaje no verbal y conductas de los demás (2009). En general, se puede inferir que en la
mayoría de casos con trastornos del neurodesarrollo existe la comorbilidad de TDI y deficiencias
de cognición social, que a su vez se pueden ver acentuadas por factores de riesgo psicosocial
que impida la correcta percepción de las situaciones y desarrollo de habilidades sociales.

Diseño Metodológico
Diseño de investigación.
Este trabajo se rige por una metodología mixta, predominantemente cuantitativa, descriptiva
comparativa y correlacional, está compuesto por dos fases. Con el fin de relacionar la posible incidencia
de los riesgos psicosociales en el funcionamiento de la cognición social en niños con Trastornos del
Desarrollo Intelectual.
El primero es un estudio de caso y controles de niños y jóvenes entre 8 a 11 años con Trastorno
del Desarrollo Intelectual para confirmar que cumplan con los criterios de selección de la investigación,
con un mínimo de 20 sujetos que también se le aplicará una entrevista a sus padres para analizar la
tipología de riesgos psicosocial (Bullying y maltrato intrafamiliar) que han vivenciado.
La segunda fase consiste en la aplicación de pruebas psicométricas y neuropsicológicas para la
medición de los constructos, identificar posibles relaciones y apoyar o contrastar las hipótesis de
investigación.
Las unidades de análisis incluyen tres grupos: 1) grupo experimental de niños con TDI expuestos
a Bullying y maltrato intrafamiliar significativos, 2) grupo control de niños con TDI sin o con baja
exposición a bullying y maltrato intrafamiliar.

Población y muestra.
Para este estudio se capta una población de estudio del centro neuropsicológico infanto juvenil
Dreams and Brain de Bogotá, Colombia de una muestra representativa de grupo experimental con un
total de 20 sujetos de ambos sexos que cumpla con los criterios de selección y unidades de estudio que
son estar en un rango de edades entre 8 a 11 años, con Trastorno del Desarrollo IntelectuaL leve
diagnosticado, escolarizado, de nacionalidad colombiana y que haya vivenciado riesgos psicosociales
significativos. Para el grupo control se precisan las mismas condiciones a excepción de haber vivenciado
riesgos psicosociales significativos. El tipo de muestreo es no probabilístico por conveniencia.

Los criterios de exclusión son que el niño consuma medicamentos que alteren su capacidad de
respuesta, niños institucionalizados o que no sean colombianos.

Instrumentos.
Para medir el riesgo psicosocial se aplicará la prueba: Listado de síntomas pediátricos para
Colombia LSP-Col que determina el riesgo psicosocial para conductas de depresión, ansiedad, trastornos
de conducta y TDAH.
Para medir los riesgos psicosociales en ambientes escolares (bullying) se utilizara el Cuestionario
de Caracterización de Víctimas y Bullying, compuesto por 15 ítems, que mide 3 dimensiones: agresión
física, Agresión verbal y agresión psicológica. Validada en Colombia por la Universidad Catolica de
Colombia.
Para medir el coeficiente intelectual actual se aplicará la escala de inteligencia de Weschler WISC
- V., que mide los índices primarios de la inteligencia y funcionamiento intelectual con el propósito de
corroborar el diagnóstico de TDI.
Para medir la cognición social, dadas las características cognoscitivas y limitaciones lingüísticas
que se pueda tener, se aplicará el Test de la mirada de Baron-Cohen.

Técnicas y métodos.
Variable independiente.
La variable independiente 1 se constituye de los índices de respuesta de riesgo psicosocial
(Bullying - maltrato infantil).
La variable independiente 2 se constituye del resultado de Coeficiente Intelectual General para el
diagnóstico de TDI leve.
La variable dependiente se constituye de los índices de respuesta de cognición social, se espera
que esté en función inversamente proporcional de la VI.
Variables sociodemográficas.

Variables Naturaleza Nivel de Fuente de


medición información.

Edad Cuantitativa Razón Secundaria.

Sexo Cualitativa Nominal Secundaria

Padre o cuidador con quien convive el infante. Cualitativa Nominal Secundaria.

Grado de escolaridad. Cualitativa Ordinal Secundaria.

Variables psicosociales y cognitivas.

Variables Naturaleza Nivel de Fuente de


medición información.

Rendimiento académico (ha perdido años Cualitativa Nominal Primaria.


escolares).

Índice Riesgo psicosocial (maltrato infantil). Cuantitativa Discreta Primaria.

Índice Riesgo Psicosocial (Bullying) Cuantitativa Discreta Primaria.

Índice Coeficiente intelectual Cuantitativa Discreta Primaria.

Nivel TDI Cualitativa Ordinal Secundaria.

Índice Cognición Social. Cuantitativa Discreta Primaria.

Entrevista a padres Cualitativa Nominal Secundaria.

Definiciones conceptuales.

Variable Definición conceptual.

Riesgo psicosocial Según UNICEF son las acciones u omisiones con la intención de hacer un
(maltrato infantil) daño inmediato a la persona agredida. La persona agresora concibe el daño
como el fin principal de su agresión. Crea un síndrome en la víctima que
sobrevive, conocido como síndrome del maltrato infantil. Se conocen tres
formas principales de maltrato infantil: físico, emocional o psicológico y por
negligencia o abandono. Esas formas de maltrato producen lesiones físicas y
emocionales indelebles, muerte o cualquier daño severo (2016, p16).

Riesgo psicosocial Según UNIFEC Es una forma de discriminación de unos estudiantes hacia
(bullying) otro u otros por sus características o su forma de vida: orien - tación sexual,
identidad de género, naciona - lidad, situación migratoria, etnia, sexo, con -
dición socioeconómica, condición de salud, discapacidad, creencias
religiosas, opiniones, prácticas basadas en estigmas sociales, em - barazo,
entre otras (2015, p4).

TDI Los trastornos del desarrollo intelectual (TDI) son un grupo de alteraciones
del desarrollo caracterizadas por una notable limitación de las funciones
cognitivas, trastornos del aprendizaje y de las habilidades y conductas
adaptativas (Lazcano, Allen, Magaña, Eudave, Minoletti, & Salvador, 2013, p1).

Cognición social Según NeuroUP La cognición social es el conjunto de procesos cognitivos


y emocionales mediante los cuales interpretamos, analizamos,
recordamos y empleamos la información sobre el mundo social. Hace
referencia a cómo pensamos acerca de nosotros mismos, de los demás y
su comportamiento y de las relaciones sociales, y cómo damos sentido a
toda esa información y emitimos comportamientos en base a ella.
(2020,p1).

Procesamiento de datos.

Se plantea realizar por cada fase un estudio que permita alcanzar los objetivos de
investigación. Inicialmente se realiza una descripción de las distribuciones porcentuales y
tendencias de medida central de la población estudiada y variables sociodemográficas.
Posteriormente se realiza un estudio descriptivo, comparativo y correlacional para analizar
las diferencias estadísticamente significativas entre el grupo control y experimental. El análisis
comparativo se realiza por la conformación de grupos no apareados, los estudios de variables
categóricas utilizara el método de chi-cuadrado y en datos numéricos de T-student.
El análisis estadístico y de correlación se realiza mediante el programa estadístico de
software SPSS.
Referencias bibliográficas.

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