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En aves al igual que en otras especies, la necropsia hace parte integral de la medicina clínica.
Esta se realiza con la finalidad de determinar la causa de enfermedad y muerte de un animal,
confirmar un diagnóstico clínico o identificar la etiología de una enfermedad por medio de la
toma de muestras complementarias. Siempre es indispensable tener en cuenta las diferencias
anatómicas y biológicas de cada especie.
Externo e interno
En este documento se describen los procedimientos a llevar a cabo, antes durante y posterior
a un examen de necropsia. Inicialmente la preparación para la necropsia, seguido por el
procedimiento del examen externo e interno, mencionando algunas características anatómicas
y las lesiones asociadas a patologías en los diferentes órganos y sistemas.
Historia clínica
El equipo necesario para la realización de una necropsia aviar depende del peso del animal,
que puede ser de pocos gramos hasta varios kilos como en las rátidas [10]. El instrumental
básico de trabajo esta compuesto por tijeras rectas y curvas, pinzas con y sin garra, tijeras de
podar, en el caso de pequeñas aves puede ser usado instrumental oftálmico y una lupa como
ayuda para la observación de lesiones macroscópicas e identificación de tejidos para el
muestreo [10]. Para las especies de rátidas, es necesario un cuchillo y un costótomo grande. Se
debe tener en cuenta que todo el material debe estar limpio y desinfectado. Adicionalmente,
para la toma de muestras complementarias para análisis de microbiología, virología,
parasitología y toxicología, se requiere de un equipo de disección estéril, hisopos estériles,
bolsas plásticas estériles, tubos para muestras de sangre con y sin anticoagulante, jeringas para
toma de líquidos de cavidades, láminas portaobjetos y cubreobjetos para citologías o
extendidos sanguíneos [1, 10]. Finalmente, un marcador indeleble para la identificación de las
muestras tomadas y una cámara fotográfica para registrar todos los hallazgos macroscópicos.
En la mayoría de los casos la muestra remitida para necropsia es el cadáver completo; sin
embargo, en los casos en los cuales el animal aún se encuentra vivo se realizan procedimientos
de eutanasia que por el bienestar animal no permitan que haya sufrimiento prolongado. En
estos casos es recomendable la administración de dióxido de carbono, sobredosis de anestesia
inhalada, administración de barbitúricos intravenosos o electrocución Algunos de estos
métodos pueden producir cambios tisulares, como hipoxia inducida por el dióxido de carbono
(que puede terminar en una actividad motora involuntaria, con subsecuentes golpes que
pueden ser interpretados como traumas durante la necropsia) o eritrolisis, edema y cambios
tisulares coagulativos, especialmente en el pulmón (que pueden ser causados por la inyección
intravenosa de soluciones caústicas) [8, 10]. Como se mencionó anteriormente, el cadáver
debe ser remitido lo más pronto posible a necropsia con el fin de evitar la autolisis o
descomposición postmortem. En las aves, la alta temperatura corporal favorece una autolisis
rápida (usualmente una temperatura de 40°C rectal en muchos individuos adultos), además,
otros factores como la conservación de la temperatura por el plumaje de recubrimiento, el uso
de lámparas de calefacción o incubadoras en el caso de neonatos o pacientes enfermos,
también permiten una rápida descomposición del cadáver [10]. La autolisis puede ser
retardada, remojando el ave con agua jabonosa fría, introduciendo el cadáver en una bolsa y
mantenerlo en refrigeración mientras se realiza la necropsia, o usando hielo en una nevera de
icopor para su transporte al sitio de necropsia, evitando el contacto directo del cadáver con el
hielo. Un cadáver para necropsia, nunca debe congelarse, ponerse en contacto directo con
hielo o hielo seco durante su trasporte, ya que el congelamiento del cadáver o de las partes
que queden en contacto directo con el hielo, produce cambios artefactuales en los tejidos para
su análisis histopatológico, tales como lisis celular y destrucción de la arquitectura de los
tejidos, lo cual ocurre como resultado de la formación de cristales de hielo, impidiendo el
análisis histopatológico
Examen Externo La identificación del cadáver debe basarse en los datos de la historia
clínica EMPEZAMOS CON la inspección de la piel, las uniones mucocutáneas, el plumaje,
el pico, las extremidades y las uñas. La piel se examina en busca de acumulación de
escamas o costras, QUE PUEDEN SER asociadas a dermatitis de origen bacteriano, El
plumaje se examina, buscando cambios en las plumas como pérdida, deformidad, cambios
de color o fracturas,. Además, se debe revisar la presencia de piojos o ácaros por medio de
un raspado [1, 10]. En EL CASO Del pico y las uñas, se revisa la existencia de
deformidades, fisuras o fracturas. EN Todos los orificios corporales (ojos, meato auditivo
externo, senos nasales, cavidad oral y cloaca) se examinan en busca de descargas, exudados
respiratorios u oculares, diarrea, masas, cuerpos extraños, úlceras y placas. Durante el
examen externo se toman hisopos conjuntivales, cloacales o traqueales para cultivos
microbiológicos o estudios virológicos. En el caso de neonatos se sugiere revisar que el
ombligo este limpio y que no este inflamado
Otra diapositiva
Una vez hecho esto lo que vamos hacer es que a la cavidad
celomica se exponga por medio de una incisión a través de la
musculatura pectoral a nivel del borde ventral del esternón,
hacia los extremos laterales,
Entonces esta incisión se continúara craneodorsalmente por las
uniones costocondrales, exponiendo la cavidad torácica y los sacos
aéreos.
Podemos decir que Los sacos aéreos normales son membranas
delgadas y traslúcidas, en caso de observarse engrosamiento,
opacidad, cambios de coloración, fluidos o exudados, estos
cambios están relacionados con procesos infecciosos y se deben
muestrear para análisis microbiológico
Entonces para esa parte lo que Se remueve la placa esternal
cortando las costillas y se observan los órganos de las cavidades
toraco-abdominales in situ, en búsqueda de lo que son los
fluidos exudados, la fibrina dentro de las cavidades y anomalías
anatómicas o posicionales. En la cavidad celómica normalmente
se encuentra una pequeña cantidad de grasa, alrededor de la
cloaca y en el surco coronario; asi que también lo que podemos
decir es que un exceso de grasa indica obesidad eso que
obviamente todos deberíamos saber y un aspecto gelatinoso
traslucido y atrófico indica inanición [10].
En El saco pericárdico debe ser transparente y con poco fluido,
sobre todo con una coloración blanquecina donde esto va a
indicar gota visceral por depósito de uratos. Hemorragias
petequiales pericárdicas, se asocian a procesos septicémicos o
agónicos [10].