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Del Humanismo Al Posthumanismo: ¿Qué Futuro para La Pedagogía?
Del Humanismo Al Posthumanismo: ¿Qué Futuro para La Pedagogía?
TITULO
A finales del siglo pasado las neurociencias cognitivas, gracias a las tecnologías de imagen cerebral,
abrieron nuevas vías a la investigación de los procesos cognitivos, abrieron un abismo entre la
dimensiones.
En los mismos años, el neurobiólogo Antonio Damasio señaló el error del dualismo cartesiano,
cartesiana entre "res extensa" y "res cogitans", Descartes consideraba que el cuerpo (y por tanto la
mente) estaba dividido del pensamiento y creía que la lógica excluía nuestras emociones, mientras
que detrás de cada manifestación de la emoción entran en juego sistemas reguladores de naturaleza
somática, llamados "marcadores somáticos", que entran en contacto con nuestra esfera cognitiva 2.
y social, lo que nos permite comprender muy bien la relación entre el cerebro y el desarrollo de la
conciencia. La mente humana está en continua interacción con el cuerpo condicionada por el
entorno físico y social. Por el contrario, Spinoza comprendió la diferencia entre emoción y
sentimiento, dándose cuenta de que existe un dispositivo funcional a través del cual los seres vivos
"conatus" 3explica que el hombre es empuje, deseo, fuerza, voluntad de satisfacer todo con el
sometidos todos los seres vivos y que garantizan la estabilidad del organismo.
culturalista encuentra una deriva biologista entre finales del siglo XX y principios del XXI en la
transición de las ciencias humanas a la neurociencia cognitiva como base del desarrollo que absorbe
casi toda la educación clásica, marcando el paso del humanismo al posthumanismo. En este punto
nos preguntamos cuál es el destino del hombre y de la educación. Si parva licet, la respuesta no está
describe como salida, en una perspectiva dialéctica y nunca estática, la pedagogía no puede ignorar
consolidadas por la práctica cotidiana, a costa de tropezar con la disonancia cognitiva en la relación
con un mundo en perpetuo cambio, que exige procesos adecuados y un método basado en la
cientificidad de la experiencia. Sería impensable, hoy en día, entrar en cuestiones pedagógicas sin
los resultados procedentes del campo neurocientífico. En particular, las investigaciones sobre el
cerebro, que aspiran a reescribir la historia de los procesos cognitivos y emocionales, han abierto un
diálogo entre el campo de la neurociencia y las humanidades, tendiendo "puentes" 6entre disciplinas
biología se ven bajo una nueva luz, hecha de entrelazamientos y vínculos mutuos, en la que el
interpretan con la ayuda de nuevas síntesis conceptuales, gracias a la contribución de los estudios
4
Damasio A.R., En busca de Spinoza, Adelphi, Milán, 2003.
5
Santoianni F., Teorías emergentes en el ámbito bioeducativo, RTH - Research Trends in Humanities. Educación y
filosofía , 2018
6
Bruer, J. T., Education and the Brain: A Bridge Too Far, Educational Reasearcher, 1997.
2
Cambi sostiene que "la pedagogía tiene una relación exquisitamente dialéctica con la neurociencia:
riesgo de que esta última se imponga, instando a la pedagogía a tener una actitud crítica con
científica a la pedagogía, siempre que ésta no se deje fagocitar manteniendo el control sobre su
En el diálogo entre disciplinas es la pedagogía la que tiene que liderar la neurociencia en el campo
proponer hipótesis sobre los correlatos neuronales, es decir, el conjunto mínimo de eventos y
mecanismos neuronales suficientes para una determinada percepción consciente. Sólo después de
relacionar una experiencia cognitiva con una actividad neuronal determinada, ésta se hace
inteligible como correlato neuronal y, por tanto, utilizable como indicador para investigaciones
posteriores. La pedagogía tiene, por tanto, una visión de conjunto y puede realizar estudios que
relacionen las prácticas educativas con las modificaciones de la estructura y el funcionamiento del
cerebro, en una perspectiva colaborativa, en la que los resultados de los estudios sobre el cerebro
serán utilizables para la práctica educativa, evitando el riesgo, sin embargo, de caer en
"neuromitos"9. Para lograr este objetivo, el estudio neurocientífico del aprendizaje debe convertirse
en investigación de campo, es decir, debe tener lugar directamente en el entorno de aprendizaje para
alcanzar una perspectiva compartida sobre la relación entre la mente y el cerebro. Este es un paso
fundamental para que una disciplina humanística, que se ocupa de los aspectos mentales, la
pedagogía, y una disciplina científica, que investiga los aspectos cerebrales, la neurobiología,
puedan colaborar haciendo converger sus resultados, superando así las restricciones recíprocas.
Dado que las investigaciones neurocientíficas se han trasladado al campo típico de las ciencias de la
educación, éstas necesitan a su vez adoptar un marco conceptual congruente con la neurociencia.
7
Cambi F, Neurociencia y pedagogía: ¿qué relación? Estudios sobre la Educación/Jornada Abierta de Educación, 2011
8
Cambi, op cit
9
Los neuromitos consisten en las interpretaciones arbitrarias y forzadas de los resultados de la investigación
neurocientífica. Dan lugar a prácticas educativas que no se basan en pruebas científicas sobre el cerebro, pero que se
consideran erróneamente como tales. Geake J, Neuromythologies in education, Educational Research, 2008.
3
Eric R. Kandel, Premio Nobel de Medicina en 2000, demuestra el concepto de "neuroplasticidad 10"
a nivel experimental, afirmando que el aprendizaje puede activar genes que pueden modificar la
Los genes ayudan a determinar la estructura de las interconexiones entre las neuronas y su
funcionamiento, ejerciendo una importante influencia en la actividad mental. Sin embargo, las
alteraciones genéticas no pueden explicar por sí solas todas las diferencias individuales presentes en
los seres humanos. Por lo tanto, la interacción con el entorno social desempeña un papel importante.
naturaleza de la relación entre la pedagogía y la biología, objeto de estudio de lo que ella denomina
comunicación, en definitiva, a los procesos educativos” 13. Según esta interpretación, pasamos del
concepto tradicional de educación al de educabilidad, que perdura a lo largo de la vida del sujeto, y
que presupone una relación espacio-temporal ininterrumpida entre el sujeto que aprende y el
entorno. Esta relación perdura, de hecho, en el tiempo y está influenciada por la forma en que los
entornos de aprendizaje modifican el sistema cognitivo del individuo. Lo que resulta fundamental
aprendizaje, sino cómo se gestionan estas posibilidades a nivel personal, teniendo en cuenta
también las variables experienciales y sociales que interactúan con el desarrollo del aprendizaje. La
formación se vuelve "flexible", se basa en criterios y procedimientos variables. "si los resultados de
10
Kandel ER., Schwartz JH., Jessell TM., (1994). Principios de la neurociencia, tr. It. Editorial Ambrosiana, Milán
11
Ibid
12
Frauenfelder, E., La prospettiva educativa tra biologia e cultura, Liguori Editore, Napoli, 1983
13
Ibid
4
la formación están relacionados con una pluralidad de aspectos, la formación debe introducir la
hipotética como variable de los procesos educativos. Por lo tanto, ya no es educación, sino
capacidad del cerebro para reaccionar de forma adaptativa, plástica, al entorno, alterando sus
estructuras y modificando así el comportamiento y las facultades cognitivas. "La plasticidad a nivel
molecular se caracteriza por un mayor uso de aquellos componentes bioquímicos que aseguran la
cognitivo a lo largo del tiempo, gracias a ese proceso de maduración que le acompaña a lo largo de
su vida y que se define como educabilidad. Los estímulos ambientales tienen un papel fundamental
descuidar la constitución de entornos articulados, en los que están presentes las acciones de los
estímulos. Hay asì una conciliación entre los aspectos humanistas y posthumanistas en el concepto
dimensión propiamente humana y no descarta la base genética, sino que es su guía e intérprete. Sin
la interpretación de la mente, ¿de qué serviría una imagen del funcionamiento del cerebro? La
función del Sujeto, del hombre, sigue siendo fundamental en las ciencias relativas al hombre. Hoy,
para defender lo que queda del humanismo y de la disciplina afín definida como pedagogía, es
necesario dar un horizonte de sentido gracias a la importancia atribuida a la educabilidad, para hacer
que el "humanismo" no se convierta en un " término hueco, que se emplea sobre todo como
14
Santoianni F., Teorías emergentes en el ámbito bioeducativo, RTH - Research Trends in Humanities. Educación y
filosofía , 2018
15
Frauenfelder E,¿Por qué una relación entre pedagogía y biología? ,RTH - Tendencias de la Investigación en
Humanidades. Educación y filosofía , 2018
16
de Cózar Escalante, J.M., El Antropoceno: tecnología, naturaleza y condición humana, Catarata 2019
5
Bibliografía
Bruer, J. T., Education and the Brain: A Bridge Too Far, Educational Reasearcher, 1997.
Educación, 2011
2019
Frauenfelder, E., La prospettiva educativa tra biologia e cultura, Liguori Editore, Napoli, 1983
Frauenfelder E,¿Por qué una relación entre pedagogía y biología? ,RTH - Tendencias de la
Kandel ER., Schwartz JH., Jessell TM., (1994). Principios de la neurociencia, tr. It. Editorial
Ambrosiana, Milán
Santoianni F., Teorías emergentes en el ámbito bioeducativo, RTH - Research Trends in Humanities.