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Desglose Casos Enarm La Salle
Desglose Casos Enarm La Salle
Curso de Extensión
Universitaria para la Preparación del Examen Nacional para Aspirantes a
Residencias Médicas.
Se trata de femenino de 72 años ingresa al servicio de urgencias por deterioro progresivo del
estado de alerta. Al interrogatorio dirigido, su hija refiere que hace una semana presentó
durante 3 días fiebre, rinorrea y tos productiva; su médico particular le indicó antibióticos con
lo que cedió la fiebre, pero después de 2 días presentó astenia, adinamia, hiporexia y
posteriormente desorientación y somnolencia. Como antecedentes refiere diagnóstico de
problema tiroideo no especificado que recibió tratamiento por 3 meses. Exploración física: T°
35°, FC:56x’, TA: 140/100, peso aproximado: 80 kg, somnolencia, responde al estímulo
doloros con sonidos guturales, palidez, edema palpebral, en cuello tiroides pequeña
aumentada de consistencia, piel gruesa y seca, hiporreflexia generalizada, edema duro de
miembros inferiores.
a) solicitar TC de cráneo b)
solicitar perfil tiroideo c)
realizar ecocardiograma d)
solicitar química sanguínea
a) diuréticos y digitálicos b)
antihipertensivos y beta bloqueadores c)
hormonas tiroideas a dosis altas d)
insulina y líquidos intravenosos
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
1. Vivek Mathew, Raiz Ahmad Misgar, Sujoy Ghosh, Pradip Mukhopadhyay, Pradip
Roychowdhury, Kaushik Pandit, et al. Myxedema Coma: A New Look into an Old
Crisis. Journal of Thyroid Research [serie en Internet]. 2011 [citado 12 de noviembre
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Myers Adler S, Wartofsky L. Myxedema Coma. En: Van den Berghe G. editor.
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Werner's & Ingbar. The thyroid. 8th ed. Philadelphia: Lippincott Willians & Wilkins;
2000. p. 843-7.
Caso clínico
12a
Se trata de masculino de 2 años y medio de edad, quien es llevado al servicio de urgencias por
presentar fiebre de 38.9 oC, escalofrío, tos irritativa cianosante y emetizante y datos de
dificultad respiratoria manifestados por tiraje intercostal bajo, refiere la madre que el menor
presenta rechazo a la vía oral. A su exploración física se corrobora la fiebre, se encuentra con
FC de 108 por minuto, FR de 60 por minuto, palidez +, mucosa oral seca, tiraje intercostal bajo
y a la auscultación estertores crepitantes y sibilancias en región basal de ambos hemotórax:
El manejo inicial en éste tipo de pacientes es de sostén y estará basado en control térmico por
medios físicos, hidratación adecuada. Si fuese necesario en el caso de deshidratación e
intolerancia a la vía oral se requerirá de fluidoterapia intravenosa (niños con vómitos frecuentes
o rechazo del alimento, signos de dificultad respiratoria que impiden o dificultan la
alimentación). Es importante evitar la obstrucción nasal, por lo que se realizarán lavados
nasales con suero fisiológico. La oxigenoterapia es la medida prioritaria del tratamiento para
mantener la saturación de oxígeno por encima del 95%.
PX : AC Monoclonales
DIAGNÓSTICO ANALÍTICO
Paramyxovirus
Un serotipo, 2 subgrupos : A o 1 / B o 2
Epidemias anuales 3 – 5 meses ( Inv. **)
Inc: 4 – 5 días / Excreción viral larga
Reinfecciones comunes
Bronquiolitis 50 % ( 6 s – 6 m )
Neumonías 25 % Hosp 1 % / Mort 1 %
Dx : IF I-D ( S 61 – 93 % / E 88 – 94 % )
Otros : PCR / ELISA
3.- Posterior al manejo inicial, solicita radiografía de tórax para corroborar su diagnóstico. Los
hallazgos más probables son:
DIAGNÓSTICO RADIOLÓGÍCO
La radiografía de tórax debe ser realizada en niños con infección aguda no complicada en el tracto
respiratorio bajo. La radiología es un examen fundamental para el diagnóstico de neumonía pero
“No hay datos radiológicos específicos que permitan establecer una etiología concreta”.
CRITERIOS DIAGNOSTICOS
ETIOLOGÍA Hay que tener en cuenta que la edad es el mejor predictor de la etiología. En < de 5
años, la taquipnea, y los signos de trabajo respiratorio como tiraje, retracciones o aleteo nasal,
junto a una saturación de O2< 93%, constituyen los datos de mayor rentabilidad diagnóstica.
5.- Dentro de los paraclínicos examen más adecuado para corroborar su diagnóstico es:
• En caso de sospecha de neumonía por C. trachomatis (< 6 meses, curso subagudo, afebril)
solicitar inmunofluoresencia (IFA) para la misma en muestra de orofarínge
• En caso de sospecha de neumonía de etiología viral (VSR, adenovirus), solicitar
aspirado nasofaríngeo para IFA
• En caso de sospecha de neumonía por M. pneumoniae o C. pneumoniae, solicitar
aspirado orofaríngeo para IFI y sueros pareados (IgG e IgM) para diagnóstico serológico
• En casos de sospecha de neumonía por M. pneumoniae , solicitar además,
• crioaglutininas (VPP 17%)
• En caso de derrame pleural: citoquímico, tinción de gram, coaglutinación y cultivo de
líquido pleural (aislamiento: 30-35%)
• En caso de neumonía de curso subagudo, o ambiente microbiológico que haga
sospechar infección tuberculosa, solicitar PPD y lavado gástrico para BAAR
• El cultivo de esputo o muestras orofaríngeas, no tiene validez, por lo que, no debe
solicitarse
DIAGNÓSTICO MICROBIOLÓGICO
6.- Una vez diagnosticado al paciente, el manejo más adecuado en el menor es:
a) Manejo ambulatorio con amoxacilina a 70 mg/Kg/día por 14 días b) Manejo ambulatorio con
eritromicina 40 mgkgdía por 10 a 14 días c) Manejo ambulatorio con azitromicina 10 mg/kg/día 3
días d) Manejo hospitalario sin antibiótico, con reemplazo de líquidos y oxígeno
suplementario
Se trata de paciente femenino de 25 años de edad, acude al hospital por presentar cefalea
hemicraniana izquierda de 48 horas de evolución, que se incrementa con la actividad física, de
intensidad 7/10 en la escala visual análoga, de tipo pulsátil, acompañada de fotofobia, fonofobia,
náusea y vómito. Quince minutos previos a la aparición de la cefalea, la paciente presentaba
parestesias en el miembro torácico izquierdo y hemicara ipsilateral además de teicopsias. La
cefalea no la despertaba y disminuía durante el sueño. Refiere varios episodios en el transcurso del
año. Niega síntomas autonómicos acompañantes. A la exploración física no se detectan signos de
focalización. El resto de la exploración física y neurológica normales. Refiere sólo tratamiento con
paracetamol 500mg. v.o. cada 8 hrs.
Introducción
La migraña es una patología neurológica extremadamente común que puede ser subdividida en
diferentes formas de acuerdo a los síntomas individuales. Las dos formas más importantes son la
migraña con aura (MA) y la sin aura o migraña común (MC). La prevalencia de la migraña en
general varía significativamente y es aún materia de controversia.
La MA representa el 10-20% de todos los casos de migrañas, siendo ligeramente más frecuente en
mujeres (1,5:1, mujer: hombre). El diagnóstico y la clasificación correcta de los tipos de cefalea han
sido difíciles de realizar, lo que ha dificultado la implementación de estudios epidemiológicos y
genéticos reproducibles. La introducción de criterios
diagnósticos por la Sociedad Internacional de Cefalea (IHS) (4) ha permitido una estandarización de
los diagnósticos clínicos. La diferenciación clínica correcta entre MA y MC es de especial
importancia pues estudios de flujo cerebral y contenido plaquetario de serotonina sugieren que
ambas patologías tienen mecanismos fisiopatológicos diferentes.
Los estudios de las bases genéticas de la MA sugieren la existencia de una agregación familiar,
aunque la falta de acuciosidad y los diferentes criterios diagnósticos usados en los estudios han
llevado a diferencias significativas en la estimación del componente genético de la misma.
Problemas tales como cuestionarios de validez incierta o la falta de discriminación entre la MA y la
MC en los estudios iniciales han determinado que la estimación real de las bases genéticas de
estas dos patologías sean muy variables.
Migraña sin aura A. Al menos 5 ataques que cumplan los criterios B-D B. Cefalea que
dura de 4 a 72 horas (sin tratamiento o insuficientemente tratado) C. Cefalea que reúna
dos de las siguientes características: Localización unilateral Característica pulsátil De
moderada a severa intensidad del dolor Empeora por o causando evitar la actividad física
habitual (por ej. caminar o subir escaleras) D. Durante la cefalea ocurra uno de los
siguientes: Náuseas y/o vómitos. Fotofobia o fonofobia. E. No atribuida a otra
enfermedad
Migraña con aura A. Al menos 2 ataques que cumplan con el criterio B B. Migraña con aura
que cumplan con los criterios B-C para alguna de las subformas (migraña con aura típica,
cefalea no migrañosa con aura típica, cefalea sin aura típica, migraña hemipléjica familiar,
migraña hemipléjica esporádica, o migraña tipo basilar) C. No atribuida a otra enfermedad
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Una vez establecido el diagnóstico de migraña debe aplicarse el tratamiento adecuado. Aunque la
situación más frecuente en urgencias es el enfermo que consulta con cefalea ya instaurada, a
continuación comentamos las diferentes posibilidades terapéuticas en todas las fases de la migraña.
Existen múltiples fármacos que pueden ser utilizados. En general, hay que indicar que los AINEs,
narcóticos y ergóticos solo son claramente efectivos en la fase inicial de la migraña, resultando
generalmente ineficaces una vez establecida la fase de cefalea (a diferencia de los triptanes). El
tratamiento se debe iniciar lo antes posible, ya que es inútil aguantar el dolor. Las premisas
fundamentales a tener en cuenta son: 1. Utilizar dosis óptimas desde el principio del tratamiento. 2.
Si no obtenemos la respuesta adecuada en 1 ó 2 horas, después de una dosis óptima, añadir otro
fármaco de otro grupo terapéutico. 3. Consideramos "ineficaz un fármaco" después de haber
fracasado en tres crisis, siempre que se haya utilizado a las dosis correctas y óptimas. Por ello no
está indicado seguir tomándolo a la espera de un efecto no obtenido con antelación. 4. La ineficacia
de un fármaco en un paciente no implica que otro del mismo grupo terapéutico no pueda ser de
utilidad para dicho paciente. 5. Debemos evitar combinaciones a dosis fijas y con poder
subanalgésico de fármacos.
Hoy día solo dos fármacos deben ser considerados de primera línea en el tratamiento de la
migraña: en migrañas leves AINEs (solos o asociados a antieméticos antagonistas de la dopamina)
y en migrañas moderadas o graves triptanes. Hay que preguntar al paciente sobre su experiencia
con diferentes fármacos para utilizar esta información en el tratamiento que se va a instaurar. Como
norma general, se puede mantener combinaciones de analgésicos con otros preparados o bien
productos ergóticos en aquellos pacientes que presenten crisis de migraña con poca frecuencia y
observen buena respuesta clínica a estos fármacos.
Triptanes El uso de triptanes se considera hoy como el tratamiento de elección debido tanto a su
selectividad de acción como a su eficacia y tolerabilidad. La introducción de sumatriptan, cabeza de
serie de estos agentes, ha sido seguida por otros entre los que zolmitriptan, rizatriptan, naratriptan y
almotriptan. Los triptanes se comportan como fármacos específicos y selectivos en el tratamiento
sintomático de las crisis de migraña.
1- Welch KMA. Drug therapy of migraine. N Eng J Med 1993;329:1476-83. 2- Pascual J, Combarros
O, Leno C, Polo JM, Reboll M, Berciano J. Distribución por diagnósticos del dolor de cabeza como
motivo de consulta neurológica. Med Clin (Barc) 1995;104: 161-4. 3- Pascual J. Migraña:
diagnóstico y tratamiento. Med Clin (Barc) 2001;116: 550-5. 4- Headache Classification Committee
of the International Headache Society. Classification and diagnostic criteria of headache disorders,
cranial neuralgias and facial pain. Cephalalgia 1988;8 (supl 7):1-96. 5- Pascual J. Diagnóstico y
diagnóstico diferencial. En Pascual J, Migraña. Barcelona. Masson,2001;75-88. 6- Gronseth GS,
Greenberg MK. The utility of the electroencephalogram in the evaluation of patients presenting with
headache: a review of the literature. Neurology 1995;45:1263- 7. 7- Raskin NH, Peroutka SJ.
Headache, including migraine and cluster headache. En Braunwald E, Fauci AS, Kasper DL, Hauser
SL, Longo DL, Jamenson JL Harrison ́s Principles of Internal Medicine. 15a ed. New York. McGraw-
Hill, 2001;70-9. 8- Nestvold K, Kloster R, Partinen M, Sulkava R. Treatment of acute migraine atack:
naproxen and placebo compared. Cephalalgia 1985;5: 115-9. 9- Kloster R, Nestvold K, Vilming ST.
A double-blind study of ibuprofen versus placebo in the treatment of acute migraine attacks.
Cephalalgia 1992;12: 169-71. 10- Tfelt-Hansen P, Henry P, Mulder LJ, Scheldewaert RG, Schenen
J, Chazot G. The effectiveness of combined oral lysine acetylsalicylate and metoclopramide
compared with oral sumatriptan for migraine. Lancet 1995; 346:923-6. 11- Meyler WJ. Side effects
of ergotamine. Cephalalgia 1996;16:5-10. 12- Tfelt-Hansen P, Saxena PR, Dahlof C, Pascual J,
Lainez M, Henry P et al. Ergotamine in the acute treatment of migraine. A review and European
consensus. Brain 2000;123:9-18.
3.-Establecido el diagnóstico, una complicación potencial de esta entidad es:
a) Hemorragia subaracnoidea. b)
Herniación uncal. c) Infarto del
lóbulo occipital. d) Status
epilepticus.
Complicaciones de la migraña
Status migrañoso
Infarto migrañoso
Se entiende por infarto migrañoso la persistencia completa o parcial de alguno de los síntomas del
aura migrañosa después de más de una semana. También se entiende por infarto migrañoso,
persistan o no los síntomas, si se confirma por técnicas de neuroimagen la presencia de infarto
cerebral
Los estudios epidemiológicos indican que el padecer migraña, especialmente migraña con aura, es
un factor predisponente para sufrir infarto cerebral, lo mismo, aunque no con igual magnitud que
otros factores como el tabaquismo o la hipertensión arterial. En estos casos la patogenia del infarto
es la aterotrombosis igual que la de la mayoría de la población. La importancia de la migraña como
factor de riesgo de ictus isquémico es, probablemente, solo, significativa en el grupo de mujeres
jóvenes.
El verdadero infarto migrañoso que es el que precede a una crisis de migraña y solo se presenta en
un aproximado 30% de los infartos que se observan en pacientes jóvenes.
Se establece el diagnóstico solo cuando en pacientes sin otros riesgos de padecimiento vascular, el
aura con déficit (hemianopsia, hipoestesia, disfasia),se prolonga más de 7 días o es permanente y
se corrobora con estudios de TAC-RM.
La localización parieto-occipital de infarto migrañoso es la más frecuente (es el territorio de
localización más afectado en el aura).
Si nos ceñimos exclusivamente al infarto inducido por la migraña su definición exige que se
cumplan los siguientes criterios:
— La crisis actual es típica pero los síntomas neurológicos del aura no revierten completamente en
un plazo de 7 días o bien se detecta un área de infarto isquémico en la exploración por
neuroimagen.
Aunque es mucho más frecuente en la migraña con aura, se han descrito también casos en el
transcurso de ataques típicos de migraña sin aura 17, 19.
Epidemiología
La prevalencia de infarto migrañoso en adultos jóvenes con isquemia cerebral focal oscila entre el
4-20%. Esta variabilidad probablemente venga condicionada por la metodología, fundamentalmente
por los criterios de inclusión y en particular por la edad. Aunque es evidente que la edad no puede
ser considerada un criterio de exclusión en lo que respecta a la potencial relación migraña-infarto,
en la realización de estudios es importante establecer un límite superior de inclusión en los 40 años,
pues a partir de ahí la incidencia de la ateromatosis como factor de riesgo vascular se incrementa
significativamente. Dada la prevalencia de migraña con aura de casi el 1% en este subgrupo, el
riesgo de que un paciente migrañoso desarrolle una complicación isquémica durante una crisis de
migraña es casi cuatro veces más que el de otro adulto joven (80 por 100.000 habitantes/año) 20. Si
tenemos en cuenta todas las edades, el infarto migrañoso constituye la causa etiológica aislada de
infarto cerebral en el 0,7% de los casos 21.
Fisiopatología
El infarto migrañoso es una complicación que surge en el desarrollo de una crisis de migraña, más
concretamente del aura migrañosa. Las manifestaciones visuales en el aura de la migraña se han
relacionado con una reducción significativa del flujo sanguíneo cerebral en la corteza visual. En
ocasiones, después de episodios repetidos de migraña, algunos pacientes pueden presentar
alteraciones permanentes del campo visual. Es posible, por tanto, que reducciones repetidas del
flujo sanguíneo cerebral durante la migraña puedan originar una lesión irreversible en algunas
neuronas más sensibles, aunque este hecho no ha podido ser demostrado por técnicas de
neuroimagen.
La caída del flujo sanguíneo local puede alcanzar en muchos casos, en determinadas zonas del
parénquima encefálico, niveles mantenidos de isquemia, incluso por debajo del umbral en particular
en áreas posteriores. Además, la hipoperfusión parece durar más que los síntomas focales y la
hipoperfusión a niveles críticos parece típica de la migraña con aura y no de la sin aura, pues en
ambas existe hipoperfusión 22.
Hay una serie de mecanismos demostrados de forma independiente en los procesos migrañoso e
isquémico que establecen un puente en la fisiopatología de ambos procesos, aunque aún no se ha
podido establecer la secuencia patogénica precisa en las alteraciones. En el caso de la migraña, la
disminución del flujo cerebral combinada con el estado de hiperagregación derivado de la
disfunción plaquetaria, así como las fluctuaciones en los niveles plasmáticos y en el LCR de
diversos neurotransmisores: serotonina, catecolaminas, aminoácidos neuroexci-tadores (glutámico
y aspártico), puede desembocar en una trombosis vascular y el consiguiente infarto 24.
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9. Collaborative Group for The Study of Stroke in Young Women. Assciated risk factors. JAMA
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El tratamiento profiláctico de la migraña está indicado en aquellos pacientes con migrañas que
interfieran en su vida cotidiana de manera importante o que les resulten incapacitantes, bien por su
intensidad, bien por su frecuencia. Se suele recomendar en pacientes con más de 2 crisis
mensuales de migraña. El tratamiento profiláctico suele tardar entre 2 y 6 semanas en ejercer su
acción, y su administración se debe mantener de 3 a 6 meses. Los fármacos más utilizados son los
siguientes.
— Amitriptilina, en una sola dosis nocturna con una pauta ascendente hasta
llegar a los 10–75 mg./día. — Imipramina, del mismo modo oscilando las dosis
entre 25–75 mg./día.
— Sertralina, 50 mg./día. —
Paroxetina, 20 mg./día.
Síntomas de alarma
• Cefalea de muy alta intensidad o "distinta" a las previas
• Cefalea subaguda de intensidad creciente, presentación súbita
• Cefalea unilateral, siempre en el mismo lado
• Cefalea provocada (esfuerzo, postura)
• Cefalea que se extiende o se inicia en la región posterior o anterior (carotidinia) del cuello
• Cefalea acompañada de síntomas neurológicos diferentes a los del aura
Signos de alarma
• Presencia de fiebre
• Cifras de presión arterial muy elevadas
• Cualquier anomalía en la exploración neurológica (desde la presencia de edema de papila hasta la
somnolencia, pasando por cualquier dato de focalidad neurológica) o general (por ej., arteria
temporal engrosada y dolorosa a la palpación en una persona de edad avanzada).
1- Welch KMA. Drug therapy of migraine. N Eng J Med 1993;329:1476-83. 2- Pascual J, Combarros
O, Leno C, Polo JM, Reboll M, Berciano J. Distribución por diagnósticos del dolor de cabeza como
motivo de consulta neurológica. Med Clin (Barc) 1995;104: 161-4. 3- Pascual J. Migraña:
diagnóstico y tratamiento. Med Clin (Barc) 2001;116: 550-5. 4- Headache Classification Committee
of the International Headache Society. Classification and diagnostic criteria of headache disorders,
cranial neuralgias and facial pain. Cephalalgia 1988;8 (supl 7):1-96. 5- Pascual J. Diagnóstico y
diagnóstico diferencial. En Pascual J, Migraña. Barcelona. Masson,2001;75-88. 6- Gronseth GS,
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headache: a review of the literature. Neurology 1995;45:1263- 7. 7- Raskin NH, Peroutka SJ.
Headache, including migraine and cluster headache. En Braunwald E, Fauci AS, Kasper DL, Hauser
SL, Longo DL, Jamenson JL Harrison ́s Principles of Internal Medicine. 15a ed. New York. McGraw-
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naproxen and placebo compared. Cephalalgia 1985;5: 115-9. 9- Kloster R, Nestvold K, Vilming ST.
A double-blind study of ibuprofen versus placebo in the treatment of acute migraine attacks.
Cephalalgia 1992;12: 169-71. 10- Tfelt-Hansen P, Henry P, Mulder LJ, Scheldewaert RG, Schenen
J, Chazot G. The effectiveness of combined oral lysine acetylsalicylate and metoclopramide
compared with oral sumatriptan for migraine. Lancet 1995; 346:923-6. 11- Meyler WJ. Side effects
of ergotamine. Cephalalgia 1996;16:5-10. 12- Tfelt-Hansen P, Saxena PR, Dahlof C, Pascual J,
Lainez M, Henry P et al. Ergotamine in the acute treatment of migraine. A review and European
consensus. Brain 2000;123:9-18.
Caso clínico
11c
Mujer de 28 años de edad que acude al servicio de consulta externa. Su padecimiento actual inició
hace 4 años, cuando sus ciclos menstruales empezaron a ser irregulares. Su ritmo actual es de 40-
90 x 3-4. FUR: hace 3 meses. Inició vida sexual a los 23 años y no ha podido embarazarse. En la
exploración física encontramos la piel ligeramente seca, hay salida de líquido blanquecino escaso a
la expresión del pezón izquierdo y tiene giordano positivo derecho.
1.- El estudio que decide realizar, por ser el de mayor utilidad para el diagnóstico es:
a) Prueba de embarazo b)
Mamografía c) LH, FSH y
estrógenos d) Prolactina
a) menopausia precoz b)
embarazo c) hipotiroidismo
primario d) prolactinoma
Prolactinoma Es el tumor hipofisario más frecuente, cerca de 50 % del total, es benigno y en 90%
de los casos es pequeño (microadenoma: menor de 1cm); además excepcionalmente aumentan de
tamaño. El cuadro clínico típico se compone de trastornomenstrual (generalmente amenorrea),
esterilidad y galactorrea; muy raramente se acompaña de síntomas neurológicos. Los
macroprolactinomas son iguales o mayores de 1 cm y es la variedad más frecuente en el hombre;
por ello se extienden fuera de la silla turca y ocasionan síntomas neurológicos, así como
compromiso de la visión. La magnitud de la hiperprolactinemia guarda cierta relación con el tamaño
del prolactinoma.
3.- Las irregularidades menstruales que presenta esta paciente están relacionadas a:
Dopaminérgicos Los fármacos derivados de la ergocriptina son los mejor conocidos porque se
cuenta con una amplia experiencia, entre ellos el Mesilato de bromocriptina en forma de tabletas
(2.5 y 5.0 mg) que se administran una o dos veces al día. La Lisurida tiene un efecto semejante y
se presenta en tabletas de 0.2 mg. Otros agentes como la Cabergolina y Quinagolida, tienen un
efecto selectivo sobre los receptores dopaminérgicos del tipo 2 y por ello se produce una mayor
acción inhibitoria sobre la secreción de prolactina y producen menos efectos indeseables. La
efectividad en cuanto a la restauración del funcionamiento gonadal y la reducción de la masa
tumoral parece ser semejante entre los dos grupos de dopaminérgicos, de tal manera que la
selección terapéutica se hace con base en la tolerancia, la adherencia a largo plazo y el costo del
medicamento (Cuadro I). La Cabergolina, que es un derivado de las ergolinas y posee un efecto
prolongado, se presenta en tabletas de 0.5 mg que se pueden administrar una o dos veces por
semana. La Quinagolida que no es derivada del ergot se presenta en tabletas de 25, 50 y 75 mg
para administrarse una vez al día.6 Es importante tomar en cuenta el objetivo del tratamiento para
decidir la forma de la administración de dopaminérgicos y un esquema práctico es el siguiente: a)
corrección de la esterilidad. En tiempo relativamente corto se induce la ovulación y se favorece la
consecución de embarazo, incluso antes de que se normalice la concentración de prolactina. Una
vez que se comprueba el embarazo, se suspende el dopaminérgico y no hay necesidad de hacer
determinaciones seriadas de prolactina ni estudios de imagenología y/o campimetría visual durante
el resto de la gestación. De manera excepcional se presenta crecimiento del adenoma, pero cuando
esto ocurre se reanudan los dopaminérgicos y esto mantiene controlado al tumor; además se ha
demostrado que estos medicamentos están desprovistos de daño al feto.7 La lactancia no afecta al
prolactinoma y no se reanuda el uso de dopaminérgicos hasta que se vuelva a valorar el caso.
Referencias:
1.- La patología puede explicar mejor los signos, síntomas y datos analíticos de este paciente es: a)
• Síntomas constitucionales
• Afectación de las vías aéreas superiores
• Afectación de las vías aéreas inferiores
• Glomerulonefritis necrozante focal segmentaria
• Artralgias y/o artritis
• Manifestaciones oculares
• Manifestaciones cutáneas
• Neuropatía periférica
• ANCA positivos (80 – 90 %)
a) Mayor en mujeres. b)
Niños. c) Lactantes. d)
Ambos sexos.
3.- Los estudios de laboratorio y gabinete que se han realizado a este paciente y que apoyan mejor
el diagnóstico son:
Los ANCA son anticuerpos cuya diana son dos de los principales componentes de los granulocitos
neutrófilos: la serina PR3· y la mieloperoxidasa. Los anticuerpos contra PR3 son prácticamente
patognomónicos para GW, mientras que los anticuerpos antimieloperoxidasa son más sugestivos
de otras vasculitis primarias necrotizantes, fundamentalmente en la poliangeitis microscópica26.
Existen dos tipos de pruebas para detectar ANCA: inmunofluorescencia o ELISA («enzime-linked
immunosorbent assay»). La inmunofluorescencia distingue los anti-PR3 de los
antimieloperoxidasa en función del patrón de tinción: los primeros se asocian a cANCA y los
segundos a pANCA14. La detección por medio de ELISA (presencia de anti-PR3 o bien de
antimieloperoxidasa) ofrece una mayor especificidad, pero cuando se combinan ambos métodos la
sensibilidad y la especificidad para el diagnóstico de GPA aumentan hasta un 90 y un 98%
respectivamente27. Un 10% de los pacientes con GPA presentan un patrón perinuclear en la
inmunofluorescencia, y hasta en un 20% de los pacientes con GPA activa no tratada se detectan
ANCA negativos. Este porcentaje aumenta hasta en un 30% en las formas localizadas de la
enfermedad15, 18. En un paciente con historia clínica sugestiva y test de cANCA negativo, la
realización de estudios serológicos seriados puede finalmente demostrar unos cANCA positivos18.
4.- Los datos clínicos de mayor importancia y frecuencia en éste paciente, que le han orientado
para llegar al diagnóstico son:
La GPA afecta de forma característica al tracto respiratorio superior, siendo también frecuente la
afectación del tracto respiratorio inferior y los riñones, completando todo ello la triada clásica de
esta enfermedad. La afección pulmonar abarca desde la presencia de nódulos pulmonares
asintomáticos a infiltrados pulmonares y hemorragias alveolares fulminantes 13. La afectación renal
más habitual es la presencia de glomerulonefritis segmentaria necrotizante, aunque también es
frecuente la presencia de una glomerulonefritis proliferativa 14. Las manifestaciones renales pueden
estar presentes en el momento del diagnóstico en un 18% de los pacientes, si bien los pacientes
pueden desarrollar afecciónrenal a lo largo de la evolución13, 15.
Muchos otros órganos pueden estar afectados en la GPA, dando lugar a clínica articular, cutánea
(púrpura palpable, úlceras, nódulos subcutáneos), neurológica (mononeuritis múltiple, neuropatías
periférica, meningitis) y síndrome constitucional (fiebre, astenia, anorexia y pérdida de peso)13.
La presencia de afectación ORL en pacientes con GPA oscila entre el 72,3 y el 99% de los casos
dependiendo de la realización o no de estudios sistemáticos de cabeza y cuello ante
la sospecha o diagnóstico de la enfermedad, así como la reevaluación periódica en brotes de
actividad de la misma14, 16
a) Neumónicos.
b) Infecciosos. c)
Articulares. d)
Vasculíticos.
Las vasculitis son un grupo heterogéneo de enfermedades, caracterizadas patológicamente
por la evidencia de inflamación vascular, que produce grados variables de oclusión e
isquemia tisular, y clínicamente, por un conjunto de síntomas y signos 1) VASCULITIS DE
VASOS GRANDES
Arteritis de células gigantes (temporal) Arteritis de
Takayasu 2) VASCULITIS DE VASOS
MEDIANOS
Poliarteritis nodosa Enfermedad de
Kawasaki 3) VASCULITIS DE VASOS
PEQUEÑOS
Granulomatosis de Wegener
Síndrome de Churg-Strauss
Poliangeitis microscópica Púrpura de
Henoch-Schönlein Vasculitis
crioglobulinémica esencial Angeitis
leucocitoclástica cutánea
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Linnaeus, 1758, tiene apariencia de hoja carnosa, mide hasta 30 mm de longitud por 13 mm de
anchura. El distoma adulto se localiza principalmente en el hígado y las vías biliares, en donde se
lleva a cabo la ovipostura y los huevecillos salen en la bilis y con la materia fecal, el ciclo vital se
completa dentro del agua dulce, cuando la larva o miracidio penetra en el caracol Lymnaea y
termina cuando se enquista sobre las hojas de los berros Nasturtium officinale. La infección se
adquiere al ingerir plantas acuáticas crudas.
Definición
La Fasciolosis es una zoonosis parasitaria causada por la Fasciola hepática que ocasiona patología
y sintomatología hepato-biliar.
Clínic
a
Diagnóstico de Laboratorio
En las formas crónicas, la búsqueda de huevos en heces es lo indicado. Son útiles la
sedimentación rápida de Lumbreras (8). Recientemente se han preparado anticuerpos
monoclonales contra el parásito y ello ha permitido elaborar la técnica de ELISA para detectar los
coproantígenos (E/S) del parásito en heces. La ecografía de vías biliares (v.b.) puede detectar al
parásito moviéndose en las v.b. o vesícula. En formas extrahepáticas, la eosinofilia alta es
orientadora; F. hepatica en las biopsias confirma el diagnóstico.
FASCIOLOSIS
Diagnóstico de
laboratorio
FASCIOLOSIS Diagnóstico de
laboratorio Serológico
Exame
n
❖Contrainmunoelectrofór
esis ❖Inmunodifusión
❖Hemaglutinación
indirecta ❖ELISA
a) Larva rabditoide b)
Metacercaria c)
Ooquiste d) Huevo
larvado
El parásito y su ciclo evolutivo
La Fasciola hepatica adulta, es un gusano aplanado en forma de hoja . Mide de 2-5 cm. Es
hermafrodita. Los huevos en el exterior y en un ambiente acuático, desarrollan en su interior el
miracidio, que al eclosionar, busca al caracol Lymneido (2)., lo penetra y se desarrollan los estadios
larvarios de esporoquiste, redia madre, redia hija y cercarias, las que abandonan al caracol y se
adosan a las hojas y tallos de las plantas acuáticas, transformándose en metacercaria (forma
infectante).
FIGURA 1
Esta es ingerida por el animal o el el hígado hasta las vías biliares, donde
hombre, en el "berro", verduras de tallo finalmente se desarrolla el adulto. El
corto o en el agua, deja en libertad la tiempo entre la ingesta de la metacercaria
forma juvenil en el intestino, la que y la localización del adulto es de 2 a 3
penetra la pared intestinal, cae a la meses.
cavidad peritoneal y se dirige al hígado, Ciclo biológico de Fasciola hepática (tomado de
perfora la cápsula de Glisson y migra por Atías-Parasitología Médica).
3.- Los exámenes de laboratorio que debe solicitar para confirmar el diagnóstico son:
a) Albendazol b)
Nitazoxanida c)
Secnidazol d)
Triclabendazol
Tratamiento
Bibliografía:
Casos clínico 8b
Se trata de masculino de 43 años, acude a consulta con el médico familiar porque desde hace un
año notó aumento en el número de calzado. Al interrogatorio dirigido refiere hiperhidrosis y piel
grasosa y aumento de peso. Hace 2 años le diagnosticaron diabetes mellitus tipo 2. Exploración
física: estatura: 1.73, peso 92 kg, acentuación de los rasgos faciales, prognatismo, diastema,
tiroides aumentada de tamaño 1 vez, de forma difusa, cardiopulmonar normal, aumento de tejidos
blandos de manos y pies.
1. El diagnóstico más probable en este paciente es:
a) Hipotiroidismo b) acromegalia
c) diabetes mellitus descontrolada
d) hipertiroidismo
a) yodo radiactivo b)
hormonas tiroideas c)
cirugía d) insulina
Tratamiento quirúrgico: Es considerado el tratamiento de elección, los niveles de hormona del
crecimiento son controlados una hora después de haber removido el adenoma. La cirugía
transesfenoidal mínimamente invasiva es la más usada en microadenomas, el abordaje
transcraneal se utiliza en tumores grandes e invasores con fines descompresivos y en pacientes
con evidencia de un piso selar muy estrecho, en manos expertas (definido como realización de
cincuenta cirugías anualmente de manera activa14) la mayoría de los pacientes (70-80%) que
tienen microadenoma38 y concentraciones séricas de hormona del crecimiento menores a 40
ng/mL19 tienen criterios de curación en y 50% de los pacientes con macroadenomas.39 La
mortalidad posquirúrgica es rara; en el abordaje transcraneal se ha reportado hasta 6%.40 La
mayoría de las complicaciones son transitorias; la más frecuente es diabetes insípida transitoria en
20%, diabetes insípida permanente, rinorraquia, hemorragia y meningitis se desarrollan en menos
de 5% correlacionándose con el tamaño e invasión del tumor.38,41 Se observa hipopituitarimo en
5-10% de pacientes operados, se ha reportado también parálisis oculomotora, deterioro de la
visión, lesión de la arteria carótida y epistaxis en menos de 1%.14 Se estima que la tasa de
recurrencia es de alrededor de 12 % a diez años y la reintervención quirúrgica sólo tiene una
probabilidad de éxito de 30%.42 En microadenomas algunos autores han sugerido que el
tratamiento previo con análogos de somatostatina reduce los días de estancia hospitalaria; si bien
no esta contraindicado, no existe suficiente evidencia para recomendarlo de rutina.14
a) diabetes tipo 1 b)
diabetes lipoatrófica c)
diabetes secundaria d)
diabetes tipo 2
Desde el punto de vista fisiológico, durante el ayuno, este efecto insulino-antagónico de hormona
del crecimiento constituye una importante y favorable adaptación para impedir la demanda de la
gluconeogénesis.22 En los pacientes con acromegalia las concentraciones de hormona del
crecimiento se elevan también en el periodo posprandial, lo que explica la resistencia insulínica en
el hígado, tejido adiposo y músculo, con incremento en la producción endógena de glucosa,
disminución de la captación por el músculo y aumento de glucosa sérica.20 Además de la baja
actividad de la PI3K, Muggeo y colaboradores encontraron decremento en la concentración de
receptores de insulina y menor afinidad de unión a la insulina en los monocitos. Pav y
colaboradores encontraron en eritrocitos alta afinidad, pero baja concentración de receptores de
insulina en pacientes con acromegalia.20 Se requiere mayor evidencia al respecto. La cetoacidosis
diabética raramente se encuentra en pacientes con acromegalia. Kreze y colaboradores estudiaron
diez posibles factores de riesgo para desencadenar cetoacidosis diabética: edad mayor a cuarenta
años, duración de la enfermedad superior a seis años, antecedentes familiares de diabetes,
obesidad, hipertensión, sexo femenino con hirsutismo, hormona del crecimiento mayor a 2.5 mcg/L,
hiperprolactinemia y macroadenoma pituitario,23 pero encontraron mayor correlación con
hipertensión e historia familiar de cetoacidosis diabética.
Acromegalia Rosa Ruiz Betanzos,* Edgar Gerardo Durán Pérez,** Sara Apolonia Arellano
Montaño,*** Valentín Sánchez Pedraza,**** Óscar Tarciso Moreno Loza,1 Francisca del Carmen
Mendoza Hernández2 Med Int Mex 2009;25(6):468-480
Casos clínico 8c
Se trata de mujer de 25 años de edad, acude al hospital por presentar cefalea hemicraniana
izquierda de 48 horas de evolución, que se incrementa con la actividad física, de intensidad 7/10 en
la escala visual análoga, de tipo pulsátil, acompañada de fotofobia, fonofobia, náusea y vómito.
Quince minutos previos a la aparición de la cefalea, la paciente presentaba parestesias en el
miembro torácico izquierdo y hemicara ipsilateral además de teicopsias. La cefalea no la
despertaba y disminuía durante el sueño. Refiere varios episodios en el transcurso del año. Niega
síntomas autonómicos acompañantes. A la exploración física no se detectan signos de focalización.
El resto de la exploración física y neurológica normales. Refiere sólo tratamiento con paracetamol
500mg. v.o. cada 8 hrs.
Introducción
La migraña es una patología neurológica extremadamente común que puede ser subdividida en
diferentes formas de acuerdo a los síntomas individuales. Las dos formas más importantes son la
migraña con aura (MA) y la sin aura o migraña común (MC). La prevalencia de la migraña en
general varía significativamente y es aún materia de controversia.
La MA representa el 10-20% de todos los casos de migrañas, siendo ligeramente más frecuente en
mujeres (1,5:1, mujer: hombre). El diagnóstico y la clasificación correcta de los tipos de cefalea han
sido difíciles de realizar, lo que ha dificultado la implementación de estudios epidemiológicos y
genéticos reproducibles. La introducción de criterios diagnósticos por la Sociedad Internacional de
Cefalea (IHS)(4) ha permitido una estandarización de los diagnósticos clínicos. La diferenciación
clínica correcta entre MA y MC es de especial importancia pues estudios de flujo cerebral y
contenido plaquetario de serotonina sugieren que ambas patologías tienen mecanismos
fisiopatológicos diferentes.
Los estudios de las bases genéticas de la MA sugieren la existencia de una agregación familiar,
aunque la falta de acuciosidad y los diferentes criterios diagnósticos usados en los estudios han
llevado a diferencias significativas en la estimación del componente genético de la
misma. Problemas tales como cuestionarios de validez incierta o la falta de discriminación entre la
MA y la MC en los estudios iniciales han determinado que la estimación real de las bases genéticas
de estas dos patologías sean muy variables.
Signos y Síntomas
Migraña sin aura A. Al menos 5 ataques que cumplan los criterios B-D B. Cefalea que dura de 4
a 72 horas (sin tratamiento o insuficientemente tratado) C. Cefalea que reúna dos de las
siguientes características: Localización unilateral Característica pulsátil De moderada a severa
intensidad del dolor Empeora por o causando evitar la actividad física habitual (por ej. caminar o
subir escaleras) D. Durante la cefalea ocurra uno de los siguientes: Náuseas y/o vómitos.
Fotofobia o fonofobia. E. No atribuida a otra enfermedad
Migraña con aura A. Al menos 2 ataques que cumplan con el criterio B B. Migraña con aura que
cumplan con los criterios B-C para alguna de las subformas (migraña con aura típica, cefalea no
migrañosa con aura típica, cefalea sin aura típica, migraña hemipléjica familiar, migraña
hemipléjica esporádica, o migraña tipo basilar) C. No atribuida a otra enfermedad
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2.- En el servicio de urgencias el tratamiento más indicado es:
Una vez establecido el diagnóstico de migraña debe aplicarse el tratamiento adecuado. Aunque la
situación más frecuente en urgencias es el enfermo que consulta con cefalea ya instaurada, a
continuación comentamos las diferentes posibilidades terapéuticas en todas las fases de la
migraña. Existen múltiples fármacos que pueden ser utilizados. En general, hay que indicar que los
AINEs, narcóticos y ergóticos solo son claramente efectivos en la fase inicial de la migraña,
resultando generalmente ineficaces una vez establecida la fase de cefalea (a diferencia de los
triptanes). El tratamiento se debe iniciar lo antes posible, ya que es inútil aguantar el dolor. Las
premisas fundamentales a tener en cuenta son: 1. Utilizar dosis óptimas desde el principio del
tratamiento. 2. Si no obtenemos la respuesta adecuada en 1 ó 2 horas, después de una dosis
óptima, añadir otro fármaco de otro grupo terapéutico. 3. Consideramos "ineficaz un fármaco"
después de haber fracasado en tres crisis, siempre que se haya utilizado a las dosis correctas y
óptimas. Por ello no está indicado seguir tomándolo a la espera de un efecto no obtenido con
antelación. 4. La ineficacia de un fármaco en un paciente no implica que otro del mismo grupo
terapéutico no pueda ser de utilidad para dicho paciente. 5. Debemos evitar combinaciones a dosis
fijas y con poder subanalgésico de fármacos.
Hoy día solo dos fármacos deben ser considerados de primera línea en el tratamiento de la
migraña: en migrañas leves AINEs (solos o asociados a antieméticos antagonistas de la dopamina)
y en migrañas moderadas o graves triptanes. Hay que preguntar al paciente sobre su experiencia
con diferentes fármacos para utilizar esta información en el tratamiento que se va a instaurar. Como
norma general, se puede mantener combinaciones de analgésicos con otros preparados o bien
productos ergóticos en aquellos pacientes que presenten crisis de migraña con poca frecuencia y
observen buena respuesta clínica a estos fármacos.
Triptanes El uso de triptanes se considera hoy como el tratamiento de elección debido tanto a su
selectividad de acción como a su eficacia y tolerabilidad. La introducción de sumatriptan, cabeza de
serie de estos agentes, ha sido seguida por otros entre los que zolmitriptan, rizatriptan, naratriptan y
almotriptan . Los triptanes se comportan como fármacos específicos y selectivos en el tratamiento
sintomático de las crisis de migraña.
Son específicos porque actúan directamente bloqueando los mecanismos potencialmente
implicados en la génesis de la migraña. Son selectivos porque su espectro de acción se circunscribe
a modular la acción un grupo limitado de receptores serotoninérgicos; en ello se diferencian de los
agentes ergóticos que actúan también sobre otros receptores y sus reacciones adversas son más
numerosas, frecuentes y persistentes. Los triptanes muestran una elevada afinidad de unión hacia
dos subgrupos de receptores de serotonina (5-HT2B y 5- HT2D) y menor hacia los receptores 5-
HT1A, 5-HT1F y 5-HT7. La acción antimigrañosa parece estar relacionada preferente-mente con los
receptores 5-HT2B. La activación de dichos receptores por estos fármacos se traduce en acción
vasoconstrictora, inhibición de la inflamación neurógena e inhibición de la activación del trigémino.
En el comportamiento farmacocinético es donde se aprecian las diferencias más significativas entre
los diversos triptanos e incluso entre distintas formulaciones galénicas del mismo fármaco. Un
problema que afecta a la absorción oral de los fármacos durante la crisis de migraña es que ésta a
menudo se acompaña de náuseas y vómitos y, aunque éstos no estén presentes, suele existir un
estado de paresia gastrointestinal que enlentece la absorción del medicamento. Por ello la
administración de un triptan oral, que puede ser de gran utilidad al comienzo de la crisis, no
constituye, por lo general, la alternativa más idónea para el paciente que acude a un servicio de
Urgencias, siendo preferible en principio recurrir a una vía de administración no enteral. Sumatriptan
es el único triptan que se ha preparado en formulaciones aptas para utilización no enteral; este
fármaco puede administrarse tanto por vía subcutánea como intranasal. La absorción de
sumatriptan subcutáneo es muy completa y rápida lo que, en relación a la vía oral, implica mayor
eficacia terapéutica y rapidez de acción analgésica; la contrapartida a estas
ventajas es que también aumenta la proporción de efectos adversos dosis-dependientes.
Sumatriptan intranasal se introdujo como una vía alternativa a la inyección subcutánea y al
comprimido con ventajas potenciales sobre ambas por cuanto podría ser mejor tolerada que la
primera y de acción más rápida que la segunda. En cuanto a la ganancia terapéutica con los
diferentes triptanes, el fármaco que alcanza mayor grado de eficacia es sumatriptan cuando se
administra por vía subcutánea, correspondiendo la menor al naratriptan oral. Desde el punto de
vista de la eficacia y de la rapidez del efecto, la elección más idónea es el sumatriptan subcutáneo;
no obstante, y como ya se ha comentado previamente, éste presenta el problema de originar
reacciones adversas en un porcentaje elevado de sujetos. El sumatriptan nasal, a este respecto, se
presenta como una alternativa terapéutica razonable con menos efectos secundarios. Una ventaja
adicional del sumatriptan nasal es que se sabe que puede ser utilizado en niños mayores de 12
años y adolescentes18,19.
a) Hemorragia subaracnoidea. b)
Infarto del lóbulo occipital. c)
Herniación uncal. d) Status
epilepticus.
Complicaciones de la migraña
Status migrañoso
Infarto migrañoso
Se entiende por infarto migrañoso la persistencia completa o parcial de alguno de los síntomas del
aura migrañosa después de más de una semana. También se entiende por infarto migrañoso,
persistan o no los síntomas, si se confirma por técnicas de neuroimagen la presencia de infarto
cerebral.
Los estudios epidemiológicos indican que el padecer migraña, especialmente migraña con aura, es
un factor predisponente para sufrir infarto cerebral, lo mismo, aunque no con igual magnitud que
otros factores como el tabaquismos o la hipertensión arterial. En estos casos la patogenia del
infarto es la aterotrombosis igual que la de la mayoría de la población. La importancia de la migraña
como factor de riesgo de ictus isquémico es, probablemente, solo, significativa en el grupo de
mujeres jóvenes.
El verdadero infarto migrañoso que es el que precede a una crisis de migraña y solo se presenta en
un aproximado 30% de los infartos que se observan en pacientes jóvenes.
Se establece el diagnóstico solo cuando en pacientes sin otros riesgos de padecimiento vascular, el
aura con déficit (hemianopsia, hipoestesia,disfasia),se prolonga más de 7 días o es permanente y
se corrobora con estudios de TAC-RM.
Si nos ceñimos exclusivamente al infarto inducido por la migraña su definición exige que se
cumplan los siguientes criterios:
Aunque es mucho más frecuente en la migraña con aura, se han descrito también casos en el
transcurso de ataques típicos de migraña sin aura 17, 19.
Epidemiología
La prevalencia de infarto migrañoso en adultos jóvenes con isquemia cerebral focal oscila entre el
4-20%. Esta variabilidad probablemente venga condicionada por la metodología, fundamentalmente
por los criterios de inclusión y en particular por la edad. Aunque es evidente que la edad no puede
ser considerada un criterio de exclusión en lo que respecta a la potencial relación migraña-infarto,
en la realización de estudios es importante establecer un límite superior de inclusión en los 40 años,
pues a partir de ahí la incidencia de la ateromatosis como factor de riesgo vascular se incrementa
significativamente. Dada la prevalencia de migraña con aura de casi el 1% en este subgrupo, el
riesgo de que un paciente migrañoso desarrolle una complicación isquémica durante una crisis de
migraña es casi cuatro veces más que el de otro adulto joven (80 por 100.000 habitantes/año) 20. Si
tenemos en cuenta todas las edades, el infarto migrañoso constituye la causa etiológica aislada de
infarto cerebral en el 0,7% de los casos 21.
Fisiopatología
El infarto migrañoso es una complicación que surge en el desarrollo de una crisis de migraña, más
concretamente del aura migrañosa. Las manifestaciones visuales en el aura de la migraña se han
relacionado con una reducción significativa del flujo sanguíneo cerebral en la corteza visual. En
ocasiones, después de episodios repetidos de migraña, algunos pacientes pueden presentar
alteraciones permanentes del campo visual. Es posible, por tanto, que reducciones repetidas del
flujo sanguíneo cerebral durante la migraña puedan originar una lesión irreversible en algunas
neuronas más sensibles, aunque este hecho no ha podido ser demostrado por técnicas de
neuroimagen.
Por otro lado hay mecanismos fisiopatológicos específicos de la crisis migrañosa que pueden incidir
en la aparición de la isquemia cerebral. El aura visual se correlaciona con el fenómeno neurológico
de la depresión propagada por Leao y con el fenómeno de la obliguemia propagada. Todos estos
fenómenos tienen una velocidad de desarrollo similar (2-3 mm/min). El fenómeno vascular parece
secundario a la supresión neuronal y durante el mismo se observa una correlación estricta entre los
síntomas propios del aura y el tiempo y la topografía vascular en la que se registran alteraciones de
la perfusión.
La caída del flujo sanguíneo local puede alcanzar en muchos casos, en determinadas zonas del
parénquima encefálico, niveles mantenidos de isquemia, incluso por debajo del umbral en particular
en áreas posteriores. Además, la hipoperfusión parece durar más que los síntomas focales y la
hipoperfusión a niveles críticos parece típica de la migraña con aura y no de la sin aura, pues en
ambas existe hipoperfusión 22.
Hay una serie de mecanismos demostrados de forma independiente en los procesos migrañoso e
isquémico que establecen un puente en la fisiopatología de ambos procesos, aunque aún no se ha
podido establecer la secuencia patogénica precisa en las alteraciones. En el caso de la migraña, la
disminución del flujo cerebral combinada con el estado de hiperagregación derivado de la
disfunción plaquetaria, así como las fluctuaciones en los niveles plasmáticos y en el LCR de
diversos neurotransmisores: serotonina, catecolaminas, aminoácidos neuroexci-tadores (glutámico
y aspártico), puede desembocar en una trombosis vascular y el consiguiente infarto 24.
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El tratamiento profiláctico de la migraña está indicado en aquellos pacientes con migrañas que
interfieran en su vida cotidiana de manera importante o que les resulten incapacitantes, bien por su
intensidad, bien por su frecuencia. Se suele recomendar en pacientes con más de 2 crisis
mensuales de migraña. El tratamiento profiláctico suele tardar entre 2 y 6 semanas en
ejercer su acción, y su administración se debe mantener de 3 a 6 meses. Los fármacos más
utilizados son los siguientes.
— Amitriptilina, en una sola dosis nocturna con una pauta ascendente hasta
llegar a los 10–75 mg./día. — Imipramina, del mismo modo oscilando las dosis
entre 25–75 mg./día.
— Sertralina, 50 mg./día.
— Paroxetina, 20 mg./día.
Síntomas de alarma
• Cefalea de muy alta intensidad o "distinta" a las previas
• Cefalea subaguda de intensidad creciente, presentación súbita
• Cefalea unilateral, siempre en el mismo lado
• Cefalea provocada (esfuerzo, postura)
• Cefalea que se extiende o se inicia en la región posterior o anterior (carotidinia) del cuello
• Cefalea acompañada de síntomas neurológicos diferentes a los del aura
Signos de alarma
• Presencia de fiebre
• Cifras de presión arterial muy elevadas
• Cualquier anomalía en la exploración neurológica (desde la presencia de edema de papila hasta la
somnolencia, pasando por cualquier dato de focalidad neurológica) o general (por ej., arteria
temporal engrosada y dolorosa a la palpación en una persona de edad avanzada).
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Cephalalgia 1992;12: 169-71. 10- Tfelt-Hansen P, Henry P, Mulder LJ, Scheldewaert RG, Schenen
J, Chazot G. The effectiveness of combined oral lysine acetylsalicylate and metoclopramide
compared with oral sumatriptan for migraine. Lancet 1995; 346:923-6. 11- Meyler WJ. Side effects
of ergotamine. Cephalalgia 1996;16:5-10. 12- Tfelt-Hansen P, Saxena PR, Dahlof C, Pascual J,
Lainez M, Henry P et al. Ergotamine in the acute treatment of migraine. A review and European
consensus. Brain 2000;123:9-18.
Caso clínico 9a
Estando a cargo de la jefatura de jurisdicción en una región del Estado de México, ha tenido reportes de
que aparentemente existe un incremento en los casos de Tuberculosis. Las autoridades estatales ya están
enteradas de la situación y le solicitan a usted información más detallada para conocer el fenómeno y
determinar si se requiere instituir acciones específicas. Cabe mencionar que esta información deberá
entregarla en tres semanas y cuenta con muy poco presupuesto.
1. ¿Que tipo de estudio debe realizar para conocer la frecuencia de Tuberculosis en su jurisdicción y
describir los posibles factores de riesgo que pueden estar influyendo para la aparición de casos en el
ultimo año?
a) Un estudio transversal b) Un
estudio de casos y controles c) Un
estudio de cohorte d) Un ensayo
clínico
2. Para saber cual es la relación de hombre y mujer con tuberculosis debe calcular:
3. ¿Qué cálculo debe realizar para conocer el porcentaje de casos de Tuberculosis que se esta
presentando en cada uno de los municipios de su jurisdicción?
a) Tasas de mortalidad
b) Tasas de letalidad c)
Razones d)
Proporciones
Las proporciones son medidas que expresan la frecuencia con la que ocurre un evento en relación con la
población total en la cual éste puede ocurrir. Esta medida se calcula dividiendo el número de eventos
ocurridos entre la población en la que ocurrieron.
Moreno A. Principales medidas en epidemiología. Rev Salud Pública Mex, 2000;42(4): 339
a) Prevalencia b)
Incidencia c) Razón
de momios d) Riesgo
relativo
La prevalencia es una proporción que indica la frecuencia de un evento. En general, se define como la
proporción de la población que padece la enfermedad en estudio en un momento dado, y se denomina
únicamente como prevalencia (p)
Moreno A. Principales medidas en epidemiología. Rev Salud Pública Mex, 2000;42(4): 342
5.- ¿Cómo podría saber que los resultados encontrados tiene significancia estadística?
Las pruebas de hipótesis sirven para comprobar si la medida de asociación tienen significancia
estadística. En el caso de los estudios transversales se construye una tabla de contingencia para
comparar las tasa de prevalencia entre expuesto y no expuestos y se realiza una prueba de chi cuadrada.
CARIOTIPO TRISOMÍA
18
Síndrome polimalformativo, consecuencia de un imbalance cromosómico debido a la
existencia de tres cromosomas 18.
Trisomía de toda o gran parte del cromosoma 18. El 95-96% de casos corresponden a trisomía
completa producto de no-disyunción, siendo el resto trisomía por traslocación. La trisomía parcial y
el mosaicismo para trisomía 18 suelen presentar un fenotipo incompleto, con ausencia de algunas
de las anomalías típicas del s. de Edwards, aunque en algunos casos el fenotipo completo, típico,
de trisomía 18 puede darse asociado a mosaicismo. No se ha identificado una región cromosómica
única, crítica, responsable del síndrome aunque parece que es necesaria la duplicación de dos
zonas, 18q12-21 y 18q23 para que se produzca el fenotipo típico de s. de Edwards, con una zona,
18q12.3-q21.1 con fuerte influencia en el retraso mental.
a) 1/7500 RN b)
1/2500 RNV c)
1/12000 RNV d)
1/50000 RNV
TRISOMÍA
18
femeninos.
• Edad materna
avanzada.
CLÍNICA:
Asesoramiento genético:
Debe ser:
– Confidencial – No directivo –
Confiable Dirigido a:
– Otros familiares probables portadores –
Enfermedad materna – Edad materna
avanzada – Fertilización asistida
Debido a:
❖ Familias con padecimientos específicos ❖ Uno o ambos miembros de la pareja portadores de
cromosomas o genes anormales ❖ Consanguinidad
❖ Exposición laboral y/o ambiental a teratógenos
RIESGO DE RECURRENCIA:
5. Multifactorial (4 – 12%)
La trisomía 18 suele darse de forma aislada en familias por otra parte normales. En estos casos el
riesgo de recurrencia estimado es del 0,55%. En los casos de trisomía por traslocación, los padres
deben ser remitidos a un servicio de genética para estudio citogenético. Es más frecuente en
madres de edad avanzada: A partir de los 35 años la frecuencia aumenta progresivamente desde
1/2.500 nacidos vivos a los 36 años hasta 1/500 a los 43. En mujeres de edad >35 años, o con hijo
anterior con trisomía 18 debe ofrecerse amniocentesis genética en los siguientes embarazos. Un
reciente estudio sobre trisomía 18 en mosaico (Tucker et al., 2007) ha planteado la cuestión de si
es recomendable realizar sistemáticamente cariotipo a los padres de todo recién nacido con
trisomía 18. Esta cuestión se basa en el hecho de que varios casos de trisomía 18 en mosaico se
diagnosticaron en adultos sin rasgos dismorficos llamativos ni retraso mental, siendo el motivo de
realizar el estudio la presencia de un hijo con trisomía 18 completa o problemas tales como estudio
de infertilidad, abortos de repetición ó estudio para donación de médula ósea. Dadas las
importantes implicaciones para el asesoramiento genético y para otros riesgos de salud (fallo
ovárico prematuro) del diagnóstico de mosaicismo 18, la recomendación actual debería ser hacer
cariotipo a los padres de todo recién nacido con trisomía 18.
BIBLIOGRAFÍA:
Multigesta, G.5. A.0 C.1 P.3 que acude de urgencia en la semana 34 de embarazo por haberse
iniciado de forma súbita dolor abdominal generalizado que se acompaña de metrorragia de sangre
oscura y cantidad discreta, pero persistente. Los cinco controles previos realizados durante el
embarazo actual resultaron normales excepto una tensión arterial de 130/90 Mm Hg., detectada en
la penúltima visita realizada 1 mes y medio antes, y que no se constató en un nuevo control
tensional (115/70 Mm Hg) practicado al cabo de una semana del anterior. Refiere sensación de
fatiga. E.F. con discreta disnea, destaca su sensación de dolor e hiperestesia cutánea abdominal.
El pulso es de 104/min., la Fr. de 24/min., la tensión arterial de 90/60 Mm Hg y la albuminuria y
glucosuria son negativas. Por palpación abdominal se aprecia un útero fuertemente contraído,
hipertónico, que dificulta la identificación de la estática fetal. Por tacto vaginal, el cuello uterino es el
propio de una multípara en esta fase del embarazo, grueso, ligeramente acortado, permeable a uno
o dos dedos y a cuyo través se aprecia una bolsa amniótica a tensión. Mediante ultrasonidos se
consigue auscultar el latido cardíaco fetal con cierta dificultad, profundo, que late a 76/80 Lat./min.
a) Placenta previa b)
Corioadenoma de destruens c)
DPPNI d) Trabajo de parto
pretérmino
Respuestas 1 y 2
Tanto por los datos clínicos y exploratorios, como por el momento de su presentación (últimas
semanas de embarazo), esta paciente presenta un cuadro típico de desprendimiento prematuro de
placenta normalmente inserta (DPPNI) o abruptio placenta. Si bien la abruptio placenta y la
placenta previa constituyen las dos causas fundamentales de hemorragia en la segunda mitad del
embarazo, la etiología exacta de la primera queda por establecer en la mayoría de casos. Sólo la
hipertensión arterial materna (preclampsia-eclampsia y vasculopatías crónicas) parece ser un
factor etiológico directo, especialmente en los casos graves de abruptio en los que la hipertensión
arterial se presenta aproximadamente en el 50% de los casos.
Como otras causas posibles, pero poco frecuentes, de desprendimiento precoz de placenta se han
señalado la existencia de un cordón umbilical excesivamente corto, malformaciones o tumores
uterinos que deforman la cavidad y dificultan la placentación y traumatismos maternos graves. La
descompresión súbita del útero tras la amniotomía en presencia de un hidramnios o tras el
nacimiento del primer gemelo, puede conducir al desprendimiento placentario precoz. Es posible
papel etiológico del déficit materno de folatos no ha sido definitivamente probado. Existen una serie
de factores que parecen estar estadísticamente asociados a la abruptio placentae: paridad
elevada, consumo materno de tabaco, alcohol y cocaína, déficit nutricional con escaso aumento
ponderal en el embarazo, hipofibrinogenemia congénita, y enfermedad tromboembólica de
repetición asociada al anticoagulante lúpico.
En el caso de nuestra paciente no existe ningún factor etiológico evidenciable, por lo que
correspondería al grupo de abruptio placentae de causa desconocida que es como ya se comentó
anteriormente el más frecuente. Aunque en mujeres con más de 5 embarazos la frecuencia de
DPPNI es 3 veces superior que en primigestas y la toxemia gravídica se asocia aproximadamente a
la mitad de los casos graves de abruptio placentae, ni la paridad de esta paciente ni unas cifras
tensiónales propias de toxemia leve en un solo control a lo largo del embarazo parecen justificar el
cuadro.
En las formas leves de DPPNI (desprendimiento de menos de una tercera parte de la superficie
placentaria para algunos autores o coágulo retroplacentario inferior a 30 ml para otros) y en
casos de DPPNI en la cara posterior del útero, el diagnóstico clínico puede no resultar fácil de
realizar y el cuadro puede simular el de una placenta previa.
4.- La siguiente complicación constituye una de las más frecuentes encontradas en este
padecimiento:
a) Insuficiencia Renal b) CID (coagulación
intavascular diseminada) c) Embólia de líquido
amniótico. d) Síndrome de Sheehan
Los trastornos de la coagulación sanguínea, el shock hipovolémico con o sin insuficiencia renal
aguda, la apoplejía uteroplacentaria (útero de Couvelaire), las hemorragias posparto y la embolia de
líquido amniótico constituyen las complicaciones más importantes del DPPNI, cuya aparición
depende tanto de la intensidad como de la duración del proceso.
Para contrarrestar la CID se origina una hiperfibrinólisis reaccional que a menudo es excesiva y ello
crea más problema hemorrágico ya que los productos de degradación de la fibrina (PDF) tienen
acción antitrombina, acción antipolimerizante de la fibrina y originan una alteración de la función
plaquetaria dificultando su capacidad de agregación y adhesividad. Con todo, es importante
destacar el carácter autolimitado de estas coagulopatías obstétricas de origen no séptico, lo cual
significa que si se elimina la causa responsable, cesa el trastorno de la coagulación. Este hecho
tiene importantes implicaciones terapéuticas y obliga en estos casos a la evacuación rápida del
útero, habiéndose comprobado que los PDF se negativizan a partir de las 4 horas del parto.
La paciente afecta de un DPPNI puede presentar un estado de anemia aguda y shock (palidez,
sudoración fría, taquicardia, hipotensión arterial, oliguanuria, alteraciones de la conciencia, etc.)
desproporcionado a la hemorragia externa visible ya que pueden pasar cantidades sustanciales de
sangre al ligamento ancho y espacio retroperitoneal. El riñón de shock y el depósito de fibrina en los
capilares renales pueden dar lugar a una insuficiencia renal aguda con necrosis de la corteza renal,
complicación que aparece en el 1-3% de casos
de DPPNI. En ocasiones existe oligoalbuminuria e hiperazoemia debido a la hipovolemia, pero sin
llegar al fallo renal agudo.
a) Uteroinihibición b) Reposo
absoluto c) Inductoconduccion del
parto. d) Interrupción de
embarazo
La conducta obstétrica que debe seguirse en el caso de esta paciente con un DPPNI y con feto vivo
y viable (34 semanas) es, sin duda, la práctica de una cesárea urgente. Sólo si existiera una
dilatación cervical muy avanzada que hiciera prever un parto inmediato. Podría permitirse la vía
vaginal. El parto vaginal mediante amniotomía y administración de oxitócicos puede intentarse
también en los casos de feto muerto o no viable, pero recurriéndose a la cesárea cuando el parto
no evoluciona satisfactoriamente en el periodo de unas 6 horas, ya que el fallo renal agudo y los
trastornos de la coagulación se presentan con más frecuencia cuando el intervalo entre
desprendimiento y el parto es superior a dicho periodo de tiempo. Por ello, aun con el feto muerto,
si las condiciones obstétricas (p. ej., paciente primípara con cuello formado y cerrado) hacen prever
un parto demasiado largo que sobrepase las 6 horas, también esta indicada la cesárea ya
inicialmente.
Tal como se ha dicho, en algunas pacientes con DPPNI puede constatarse la existencia de un útero
de Couvelaire durante la cesárea. Esto no es por si mismo indicación de histerectomía, si bien, en
ocasiones, las dificultades para la sutura uterina y las hemorragias por atonía o coagulopatía
pueden obligar a la extirpación del útero e incluso a la ligadura de las hipogástricas.
En algunos casos de Cesárea por abruptio placentae se han descrito aspiraciones masivas de
sangre materna por parte del feto con desarrollo subsiguiente de una hemoglobinuria transitoria
Además de los aspectos obstétricos, en los casos de DPPNI son de capital importancia para el
pronóstico materno una serie de medidas terapéuticas generales y hemoterápicas. Así hay que
tratar eficazmente la hemorragia materna administrando sangre y soluciones electrolíticas a fin de
mantener el hematócrito y la diuresis dentro de unos niveles aceptables (por encima de 30% y de
30ml/h. respectivamente). Se monitorizará a la paciente controlando estrictamente TA, pulso,
diuresis, pH y equilibrio electrolítico, y presión venosa central, si fuera necesario ( p.ej., en casos de
oliguria persistente o signos de edema pulmonar). Se estudiará el estado de la coagulabilidad
sanguínea a intervalos de 4 horas mediante recuento plaquetario y determinación del tiempo de
protrombina, de las fibrinogenemia y de los PDF. La plaquetopenia, el tiempo de protrombina y
unos PDF aumentados indican la presencia de una CID. Los factores de la coagulación consumidos
deben ser repuestos, utilizándose concentrados de plaquetas si son <50,000 plasma fresco para
sustitución de los factores de la coagulación si el tiempo de protrombina es <60 y crioprecipitados si
los niveles de fibrinógeno descienden por debajo de 100mg/100ml.
∎ Balasch, J.: Desprendimiento prematuro de la placenta normalmente inserta. Otra patología placentaria.
En González-Merlo, J., y Del Sol, J. R. (dirs): Obstetricia, 3° ed., pág. 432, Salvat Editores, Barcelona.
∎ Knab, D.R.: Abruptio placentae: an assessment of the time and method of delivery.
Obstet. Gynecol., 52,625.
Caso clínico
10a
Hombre de 65 años antecedente de Diabetes Mellitus tipo II de 12 años de evolución, con última
glicemia en ayuno de 310 mg/dl tratado deficientemente con glibenclamida-metformina 5/500mg
dos veces al día , hipertenso de 25 años de evolución controlado con Metoprolol 100 mg cada 12
hrs., refiere hipertrigliceridemia e hipercolesterolemia sin conocerse las últimas cifras del
laboratorio. Tabaquismo positivo de 50 años de evolución, sedentarismo se comenta que sufrió
una caída de aproximados 5 metros de altura 8 días previos al inicio del cuadro clínico el cual
inicia con cefalea holocraneana aguda, acompañada de vómito en proyectil y posterior pérdida
del estado de alerta, con deterioro neurológico importante y con pobre respuesta a los estímulos
externos desviación de la mirada hacia la izquierda y anisocoria a expensas de midriasis
izquierda, al estímulo doloroso presenta pronoextensión solo de hemicuerpo derecho.
Hemorragia
Subaracnoidea
Los signos y síntomas suelen aparecer en forma súbita en un individuo que por lo general no
presentaba alteraciones neurológicas previas. El inicio frecuentemente esta precedido por una
actividad física intensa, si bien se observó que en una serie de 500 pacientes con hemorragia
subaracnoidea, en un 34% de los casos se desarrolló durante actividades no estresantes, y un
12% se produjo durante el sueño. Los signos y síntomas más frecuentes se enumeran en la tabla 1.
Porcentaje
Manifestación
(%)
Cefalea 74-80
Náuseas y vómitos 70-80
Alteraciones de la conciencia 60-70
Pérdida transitoria conciencia de la
50
2.- De acuerdo al diagnóstico, la escala que debe utilizar para estadificar para estadificar a éste
paciente es:
Clínic
a
La HSA es una emergencia médica, siendo esencial su diagnóstico precoz e ingreso para
tratamiento en un medio adecuado. Siempre se debe sospechar la presencia de HSA cuando
existe una cefalea intensa ("la más fuerte de mi vida"), de aparición brusca, pudiendo ir seguida
de alteración en el sensorio.
Las escalas de evaluación clínica inicial más utilizadas en los pacientes con HSA son:
HUNT - HESS (9) WFNS (1)
GRADO I Asintomático, o cefalea y rigidez de nuca grave. Par craneal.
leves GCS 13-
. 14
GCS
15 GRADO III Confusión o letargia, puede haber leve
déficit focal.
GRADO II Cefalea y rigidez de nuca moderada o GCS 13-14, con déficit focal
GRADO IV Estupor, moderada o severa hemiparesia. GCS 7-12, +/- déficit focal
Hunt WE, Hess RM. “Surgical risk as related to time of intervention in the repair of intracranial
aneurysms.” Journal of Neurosurgery 1968 Jan;28 (1):14-20.
Hunt WE, Meagher JN, Hess RM. “Intracranial aneurysm. A nine-year study.”
Ohio State Medical Journal 1966 Nov;62 (11):1168-71.