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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINITERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION UNIVERSITARIA.


ALDEA UNIVERSITARIA “HEROES DE CANAIMA 4F”.
UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA.
ESTUDIOS JURIDICOS.

DESPLAZADOS, REFUGIADOS, EXILIADOS, ASILADOS, ESTATUS


JURÍDICOS BAJO SISTEMA VENEZOLANO.

Profesor: Oscar Ochoa


Triunfador: Oswaldo Madera Aular
Cédula: 26.900.725

Naguanagua, 06 de Enero de 2022


INTRODUCCION

Es sabido que el derecho de las personas a salir y regresar a un país está


consagrado en el derecho internacional. Como todo derecho, está sujeto a
reglamentaciones razonables, ya que se reconoce el legítimo interés del Estado
en mantener un orden en el control de las fronteras y en el registro de la presencia
o ausencia de las personas, especialmente para evitar que la salida sea usada
para evadir otras obligaciones exigibles.
En general, se invoca este derecho para impugnar restricciones a las
migraciones basadas en categorías ideológicas, políticas o religiosas, o las que se
puedan invocar como pretexto para restringir los derechos a la libre asociación y a
la expresión o comunicación de las ideas
No puede, por lo tanto, entenderse como un derecho a ingresar en cualquier
país ni como derecho a permanecer en un país con el que no se tienen lazos de
nacionalidad o residencia legal. El derecho a salir y a regresar al país de uno
es, en consecuencia, un derecho inherente a la ciudadanía y no un derecho
inherente a la persona humana.
El derecho internacional de los derechos humanos no tiene una respuesta
genérica, aplicable a todos los migrantes, respecto a la cuestión fundamental de
su estatus migratorio, es por ello que en el siguiente trabajo se investigara la
condición de Desplazados, Refugiados, Exiliados, Aislados, y el estatus Jurídico
bajo el Sistema Venezolano.
DESPLAZADOS, REFUGIADOS, EXILIADOS, ASILADOS, ESTATUS
JURÍDICOS BAJO SISTEMA VENEZOLANO.

DEFINICIÓN DE DESPLAZADOS.

Un desplazado es toda persona que se ha visto obligada a abandonar su hogar


o residencia habitual en el marco de un fenómeno conocido como migración
forzosa.

Según el ACNUR, a finales de 2014 había 59,5 millones de personas en esta


situación por todo el mundo, lo cual constituye la cifra más elevada desde
la Segunda Guerra Mundial: un total de 19,5 millones eran refugiados; 1,8 millones
se encontraban en asilo humanitario y 38,2 millones constaban como desplazados
internos.

No hay ninguna definición legal para desplazado, como allí es para un


refugiado, sin embargo, un informe de los Naciones Unidas, Guiando los Principios
en los usos del Desplazamiento Interiores la definición,: las personas internamente
cambiadas de sitio son personas o grupos de personas que han sido forzadas o se
han obligado huir o dejar sus casas o lugares de residencia habitual, en particular
como resultado de o para evitar los efectos de conflicto armado, situaciones de
violencia generalizada, las violaciones de derechos humanos o los desastres
naturales o humano, y quién no ha cruzado una frontera Estatal
internacionalmente reconocida.

El uso del término se empezó a popularizar durante la Segunda Guerra Mundial


y el consiguiente éxodo de refugiados procedentes de Europa del Este.3 En aquel
entonces se empleaba, en concreto, para denominar a aquellos a quienes se
expulsaba de su país natal en calidad de refugiados, presos o nuevos esclavos. A
partir de la segunda mitad del siglo XX, ha experimentado un incremento
significativo de sus acepciones. Por lo demás, a otros conceptos como migrante
forzoso y refugiado se les da a menudo un uso equivalente. En este último caso,
no obstante, se produce cierta confusión entre la categoría genérica de todo aquel
que abandona su hogar (persona desplazada) y la figura del refugiado, que goza
de un amparo específico por parte del derecho internacional.
La mayor parte de las víctimas de la Segunda Guerra Mundial así como de los
refugiados políticos y de los desplazados que provocó aquella contienda eran
ciudadanos que procedían de Ucrania, Polonia, los países eslavos o los Estados
bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) y que se negaban a regresar a sus países de
origen tras el telón de acero.

REFUGIADOS:

Los refugiados son personas que se encuentran fuera de su país de origen


por temor a la persecución, al conflicto, la violencia generalizada, u otras
circunstancias que hayan perturbado gravemente el orden público y, en
consecuencia, requieren protección internacional. La definición de refugiado se
puede encontrar en la Convención de 1951 y en los instrumentos regionales
relativos a los refugiados, así como en el Estatuto del ACNUR.

Personas que han huido o han sido expulsadas de su patria a causa de una
catástrofe natural, guerra u ocupación militar o como consecuencia de
persecución, religiosa, religiosa, racial o política.

La tendencia a confundir a los refugiados y los migrantes, o referirse a los


refugiados como una subcategoría de migrantes, puede tener graves
consecuencias para la vida y la seguridad de las personas que huyen de la
persecución o el conflicto.

Sin lugar a dudas, todas las personas que se desplazan entre los países
merecen el pleno respeto de sus derechos humanos y su dignidad. Sin embargo,
las personas refugiadas son un grupo específicamente definido y protegido en el
derecho internacional, porque la situación en su país de origen les imposibilita el
regreso a sus hogares. Llamarlos por otro nombre puede poner sus vidas y su
seguridad en peligro.
A pesar de que la definición de refugiado varía de acuerdo con la época y el
lugar, la creciente preocupación internacional por la difícil situación de los
refugiados ha generado un consenso general. La Convención de 1951 sobre el
Estatuto de los Refugiados (la Convención de los Refugiados), define a un
refugiado como la persona que:

A pesar de que la definición de la Convención de los Refugiados es empleada


por organizaciones internacionales tales como las Naciones Unidas, este término
se sigue empleando mal y con frecuencia se utiliza de manera contradictoria en el
Lenguaje corriente.

La Convención relacionada con el estatuto de refugiados de las Naciones


Unidas es una convención internacional que define quien es un refugiado, y decide
las reglas de los individuos a los que se les garantiza el asilo y las
responsabilidades de las naciones que garantizan el asilo. La convención también
decide que personas no se consideran como refugiadas, tales como criminales de
guerra. La Convención también asegura (prevé) algunos viajes sin visado para los
que portan documentos de viaje, conforme a la convención

Tras la Segunda Guerra Mundial, la Asamblea General de las Naciones Unidas


estableció el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR). El mandato del ACNUR es proteger y buscar soluciones permanentes
al problema de los refugiados. Sus actividades se fundan en un conjunto de
normas e instrumentos internacionales, que incluye la Declaración Universal de
Derechos Humanos de 1948 y los cuatro Convenios de Ginebra (1949) sobre el
derecho internacional humanitario, así como una multitud de tratados y
declaraciones internacionales y regionales, vinculantes y no vinculantes, que
abordan específicamente las necesidades de los refugiados

Causas de persecución de un Refugiado.

Las causas de persecución deben coincidir con uno de los cinco puntos
siguientes que figuran en el Artículo 1 A (2) de la Convención de los Refugiados:
 Raza: se emplea en el más amplio sentido e incluye a los grupos étnicos y
a los grupos sociales con ancestros comunes.
 Religión: también se emplea en un amplio sentido. Incluye la identificación
con un grupo que tiende a compartir creencias o tradiciones comunes, así
como la práctica activa de una religión.
 Nacionalidad: incluye la ciudadanía de las personas. A la persecución de
los grupos étnicos, lingüísticos y culturales dentro de una población también
se la considera como persecución basada en la nacionalidad.
 Grupo social determinado: se refiere a las personas que comparten
antecedentes, costumbres o posición social comunes. Por lo general, esta
categoría comparte elementos con la persecución basada en alguno de los
otros cuatro puntos. Esta categoría se ha aplicado a las familias de los
capitalistas, terratenientes, homosexuales, empresarios y antiguos
miembros de las fuerzas militares.
 Opiniones políticas: se refiere a ideas que las autoridades no toleran,
entre las que se incluyen las opiniones que enjuician los métodos y políticas
gubernamentales. Las personas que no han expresado sus opiniones
políticas antes de huir del país podrían ser elegibles para el refugio si
pueden demostrar la posibilidad de que cuando regresen a su patria los van
a perseguir debido a sus opiniones.

En estas condiciones y en particular cuando los civiles huyen por causas


similares, se puede declarar 'en grupo' la condición de refugiado, mediante la cual
todos los civiles de dicho grupo se consideran refugiados, a no ser que se
demuestre lo contrario.

Propuestas de las Organizaciones que protegen a los refugiados

Las organizaciones que ayudan y protegen a los refugiados generalmente


propenden por tres "soluciones duraderas" para mejorar la suerte de los
refugiados:
La repatriación voluntaria: el refugiado puede regresar a su país de origen porque
cesaron las circunstancias que amenazaban su vida y libertad.

La integración local: el gobierno del país de destino permite que el refugiado se


integre al país donde solicita asilo por primera vez.

La reubicación en un tercer país: la repatriación lo pondría en peligro y el país


donde solicitó asilo por primera vez se niega a la integración local.

EXILIO:

El exilio consiste en el alejamiento de un individuo del lugar en el que reside o


de su tierra natal. Cuando ese apartamiento es obligado y se produce por
cuestiones políticas, se habla de expatriación.
Las consecuencias que vive una persona que está exiliada y al sitio en el que ésta
se encuentra también se denominan exilio.

En tiempos de la Segunda Guerra Mundial, cuando los nazis y


los comunistas dominaban una gran cantidad de naciones, se llevaron a cabo
exilios en muchos países. Desde los judíos que escapaban de la persecución
hasta aquellos que tuvieron que marcharse por su compromiso político, millones
de personas debieron instalarse en regiones alejadas de sus tierras..

Es una forma extrema de castigo que conlleva a la perdida de la ciudadanía y a


la expatriación forzosa.

También se puede decir que exilio es el estado de encontrarse lejos del lugar
natural (ya sea ciudad o nación) y puede definirse como la expatriación, voluntaria
o forzada, de un individuo. Algunos autores utilizan el término "exiliado" con el
sentido de "refugiado". Aunque el exilio por antonomasia es ese desplazamiento
fuera del país, también se habla de un «exilio interior» respecto a personas que se
ven obligadas a reasentarse dentro del propio país de residencia (deportaciones) o
bien que, estando en el mismo, se ven cortadas sus posibilidades de actuaciones
a través de prohibiciones de desarrollar sus actividades (generalmente literarias o
artísticas) o de manifestar públicamente la disensión respecto al régimen.

ASILADOS

Un asilado es una persona a la que se la ha otorgado asilo. Los asilados tienen


autorización para trabajar en los Estados Unidos, pueden solicitar una tarjeta de
seguro social, pueden pedir permiso para viajar al extranjero, y pueden presentar
una petición para traer miembros de su familia a los Estados Unidos.

Los asilados también podrían tener derecho a beneficios federales o beneficios


de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados, como Medica id o Asistencia
Médica Para Refugiados.

Después de un año, el asilado puede solicitar la residencia permanente legal


(Green card). Siendo residente permanente, se puede solicitar la ciudadanía
después de cuatro años.

También se le llama asilados a personas que por motivos, políticos, encuentra


asilo con protección oficial, en otro país o en embajadas o en centros que gozan
de inmunidad diplomática.

El asilo político es el derecho que tiene una persona a no ser extraditado de un


país a otro que lo requiere para juzgarle por delitos políticos.

Cuando el asilo político se concede a personas que se encuentran en lugares


que por las convenciones diplomáticas se consideran una extensión del territorio
nacional, tales como la sede de embajadas o consulados, la residencia del
embajador o los buques de guerra anclados en puertos extranjeros, se lo
denomina asilo diplomático.
La ley internacional acepta el derecho a pedir asilo, pero no obliga a ningún
Estado a concederlo. Hay ocasiones en que los países ofrecen 'protección
temporal' cuando enfrentan un ingreso repentino y colectivo de personas y los
mecanismos regulares de asilo se saturan. Por medio de este mecanismo las
personas pueden ingresar de manera ágil en países seguros, pero sin ninguna
garantía de obtener asilo permanente. Por la tanto, la 'protección temporal' es útil
tanto para los gobiernos como para los solicitantes de asilo en circunstancias
especiales. Aunque es tan sólo un complemento, no sustituye las amplias medidas
contenidas en la Convención de los Refugiados.

ESTATUS JURÍDICO BAJO SISTEMA VENEZOLANO:  

Como sabemos dentro del derecho a buscar y recibir asilo, el principio de no


devolución permanece como el pilar fundamental del Derecho Internacional de
Refugiados, en tanto garantía de protección a la vida e integridad de los
refugiados.

Ahora bien, el desplazamiento forzoso y refugio no son problemas locales o


estáticos, razón por la cual, el verdadero desafío en una comunidad globalizada
radica en la implementación de una solidaridad internacional fundada en el respeto
y vigencia de los DDHH, que abarque integralmente el tratamiento del tema desde
una perspectiva de protección de la persona humana a permanecer con seguridad
en el país de origen o residencia.

Desplazados, refugiados, exiliados, asilados, se encuentran en un estatus jurídico


bajo sistema jurídico venezolano, consagrados en la Ley Orgánica Sobre
Refugiados o Refugiadas Y Asilados o Asiladas.
La presente Ley tiene por objeto regular la materia sobre Refugio y Asilo, de
acuerdo a los términos consagrados en la Constitución Bolivariana De Venezuela
y en los instrumentos internacionales sobre refugio, asilo y derechos humanos
ratificados por la Republica, así como determinar el procedimiento a seguir por los
órganos y funcionarios de los Poderes Públicos Nacionales encargados de su
cumplimiento.

Derechos bajo el estatus Jurídico del Sistema Venezolano:

Derecho a permanecer: lo que implica la prevención ante las causas que originan
el desplazamiento. Así como, el salir del país de origen o residencia y ser recibido
en el país aislante.

Derecho a buscar y recibir asilo: lo que supone la protección de la persona


durante la etapa en que debe vivir como refugiado en país extranjero, y por último,
poder regresar en condiciones de seguridad y dignidad al país de origen o
residencia.

Derecho a retornar: En este contexto, el desarraigo, como principal consecuencia


del desplazamiento forzoso y del refugio, es una tragedia humana que requiere de
una verdadera nueva forma de solidaridad y protección que abarque desde la
protección de los derechos humanos y reducción de las causas que originan los
flujos migratorios en los países expulsores, incluyendo la responsabilidad
internacional del mismo, hasta un adecuado tratamiento de la situación de refugio
en los países aislantes, lo que supone necesariamente la revisión de la definición
y alcance de protección actual.

Las consecuencias del desarraigo, con la pérdida de elementos propios y


cotidianos que dan a cada persona el sentido de vida, de utilidad y productividad,
futuro y perspectivas, origina en los refugiados, un sentido de exclusión y
vulnerabilidad en la comunidad receptora. Lo que aunado, a políticas de cierre de
fronteras, militarización o medidas de restricción o suspensión de derechos y
garantías, sin la adopción de medidas de protección sobre todo en países en
donde existe debilidad institucional, en la presencia de órganos civiles del poder
público, o inseguridad en sus zonas fronterizas por la presencia de actores
armados, deja a los refugiados y defensores de derechos humanos en una grave
situación de vulnerabilidad y desamparo.

Las condiciones de vida actuales de los solicitantes de refugio en Venezuela


están marcadas por la incertidumbre, y la sobrevivencia denotándose diferencias,
según se trate de refugiados urbanos o residentes en zonas rurales fronterizas. En
el primero de los casos, las necesidades más urgentes corresponden a la ayuda
humanitaria financiera, dado el poco margen de inserción laboral en la sociedad,
con el contrapeso de contar con la cercanía de los órganos del Poder Público y la
emisión de un documento, que aunque inadecuado, al menos ha servido para
dejar constancia de la cualidad de solicitante ante el Estado venezolano.

Los márgenes de inserción laboral, auto sostenimiento, y asistencia de los


niños al colegio están dados por una mayor dificultad de producción económica,
necesidad de acudir a la economía informal, aún en los casos de
profesionalización del solicitante y mayor dificultad para la inscripción en colegios.

La República Bolivariana de Venezuela no produce refugiados, porque en


nuestro país no se persigue a nadie por su religión, sexo, raza, grupo social o
ideas políticas. Pero si somos un país receptor. La causa fundamental de este
hecho es la situación que vive Colombia desde antes de que existiera el ACNUR.
Ya son más de cuatro millones de colombianas y colombianos que, huyendo de la
pobreza y la violencia, encontraron en Venezuela una vida digna, y hoy comparten
con nosotros hogar, esperanza y futuro. Pero aunque el fenómeno lleva décadas
desarrollándose, fue a partir de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela que se creó un sólido sistema sobre refugiados.

En nuestro ordenamiento jurídico el refugio tiene el más alto rango posible:


desde 1999 la Constitución prevé ese derecho –Art. 69, se cuenta con una Ley
Orgánica sobre Refugiados o Refugiadas y Asilados o Asiladas (2001) que ha sido
calificada recientemente por el Representante de ACNUR en nuestro país como la
más avanzada por él conocida. (Mohammed Alwash Representante ACNUR en
Venezuela, 07/11/11.

Contamos con una Comisión Nacional de Refugiados de rango presidencial,


que es la autoridad competente en la materia, a cuyas reuniones asiste el
Representante de ACNUR en calidad de observador. Es bueno señalar que, tanto
a las personas refugiadas como a las que han solicitado ese estatus, les asisten
los principios de no sanción, no devolución, no discriminación, debido proceso,
confidencialidad y unidad familiar; este último le ha garantizado a refugiados y
solicitantes traer a sus familiares y mantener la sagrada unidad de la familia. Ello
ha permitido que cientos de niñas, niños y adolescentes accedan a todos los
derechos que les consagra el Estado de justicia que rige en nuestro país al influjo
de la Revolución Bolivariana.

Todas estas personas están incorporadas a las masivas e inclusivas Misiones


Sociales de la Revolución Bolivariana que les garantiza acceso gratuito sin
discriminación a los servicios de salud con la Misión Barrio Adentro que llevamos a
cabo con apoyo de la República de Cuba, o el derecho a la educación pública y
gratuita en todos los niveles de nuestro sistema educativo y con las Misiones
Robinson, Rivas, Sucre, Cultura y otras. Estos hermanos compran sus alimentos
en la Misión Mercal y los Abastos Bicentenarios, que son un mecanismo masivo
de comercio justo ejecutado por el Gobierno Bolivariano junto a las organizaciones
del Poder Popular. También acceden a energía y transporte baratos subsidiados
por el Estado.
CONCLUSION

Ante esta grave situación para los solicitantes de asilo o condición de


refugiado, desplazados exiliados, coincidimos con las recomendaciones del
presente estudio, en el sentido de que debe fortalecerse a la mayor brevedad la
respuesta institucional para atender las necesidades de protección de las
personas refugiadas, por medio de un esfuerzo para compatibilizar el sistema
interamericano de asilo con el sistema universal de protección de los refugiados,
los aportes del derecho internacional humanitario y, fundamentalmente, mediante
la interpretación de todo el conjunto normativo de conformidad con los contenidos
y criterios de interpretación que surgen del derecho internacional de los derechos
humanos.

Quedan muchas tareas pendientes en el ámbito del derecho de los


desplazados, refugiados, exiliados y asilados. Sin duda una de las más
apremiantes en el contexto de las Américas, es la de avanzar decididamente hacia
una interpretación evolutiva de las normas reconocida a partir de la Conferencia
Mundial de Derechos Humanos de Viena, 1993.

No se trata de confundir las migraciones económicas que eternamente han


acompañado a la humanidad y que en los últimos años, como consecuencia de las
transformaciones económicas mundiales, se han agudizado con el fenómeno que
indico. Se trata de hacer una lectura, a la luz de los tiempos, del derecho de los
desplazados, refugiados, exiliados y asilados conjuntamente con el derecho de los
derechos humanos, bajo el derrotero común de propiciar los más amplios
escenarios de protección para las personas.

No obstante, el derecho internacional sí se ocupa del status de ciertas


categorías de migrantes, comenzando por el caso más claro de normas de
derecho positivo y claramente exigibles como obligaciones internacionales, en
este caso los derechos de los refugiados y peticionarios de asilo, a quienes se
aplican las normas de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, de 1951
y el Protocolo sobre el Estatuto de los Refugiados, de 1967, con respecto a los
cuales sí es posible hablar de un derecho a ingresar y a permanecer en un país
que no es el de su nacionalidad.

La legislación venezolana sobre refugiados está fundamentada en el artículo 69


de la Constitución Bolivariana de Venezuela, que reconoce y garantiza el derecho
de asilo y refugio. Con base en las Disposiciones Transitorias de la Constitución,
la Asamblea Nacional sanciona el régimen aplicable a los solicitantes de refugio.
De conformidad con la ley, la Comisión Nacional para los Refugiados es el órgano
gubernamental principal que coordina la política de protección y asistencia a los
refugiados y lleva a cabo la declaración jurídica del estado de refugiado.

Básicamente, en Venezuela la condición de refugiado está consagrada en el


artículo 5 de la LORA. Según este artículo el Estado venezolano considera como
refugiado o refugiada a toda persona a quien la autoridad competente le
reconozca tal condición, para este reconocimiento se adoptan los parámetros de la
Convención. 

En el artículo 2 de la LORA se declaran las previsiones de principios rectores


que rigen la materia en Venezuela: 1- Toda persona puede solicitar asilo y refugio
en la República Bolivariana de Venezuela, ante fundados temores de ser
perseguido por los motivos y condiciones establecidos en el Protocolo de 1967
sobre el Estatuto de Refugiados

Asimismo, se consagra la garantía de los derechos mediante la prerrogativa de


recursos administrativos y judiciales, según lo dispone el artículo 20 (recurso
administrativo de reconsideración), asegurándose la permanencia dentro del
territorio nacional, hasta tanto se decida definitivamente el recurso, sea
administrativo o judicial.
BIBLIOGRAFIA

Consultoría para los derechos humanos y el desplazamiento. Boletín No.


54. Bogotá. 2004. En formato electrónico: http://www.codhes.org.co. Consulta: 15,
junio, 2006.

GONZÁLEZ, María. Las Migraciones. El entorno económico actual. Colección


Negocios. Madrid, Editorial Thompson. 2003.   

Ley Orgánica sobre refugiados o refugiadas y asilados o asiladas. Gaceta Oficial


No. 37.296 del 03 de octubre de 2001 y su Reglamento, Decreto No. 2.491 del 4
de julio de 2003. 

PETIT, Juan. Migraciones. Vulnerabilidad y políticas públicas. Impactos sobre los


niños y sus derechos. No. 38, Santiago de Chile. 2003.   

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