Entre las funciones que corresponde a la Corte de Constitucionalidad, es la que se
encuentra delimitada en la Constitución Política de la República y en la Ley de Amparo,
Exhibición Personal y de Constitucionalidad, al establecer que su función principal es la defensa del orden constitucional. Es importante mencionar que la Corte de Constitucionalidad conoce las inconstitucionalidades de leyes, reglamentos o disposiciones que tengan algún vicio total o parcial de la norma. Entre los efectos que tiene la inconstitucionalidad si fuere total de carácter general, éstas quedarán sin vigencia, y si la inconstitucionalidad fuere parcial, quedará sin vigencia en la parte que se declare inconstitucional. En ambos casos dejarán de surtir efecto desde el día siguiente al de la publicación del fallo en el Diario oficial (Diario Centro América), esto se encuentra establecido en el articulo 140 de la Ley de Amparo, exhibición Personal y de constitucionalidad.
Dentro de este orden de ideas, se va abordar la Inconstitucionalidad de Carácter General del
expediente acumulados número 001-2001, 2-2001 y 4-2001, el cual trata sobre el Decreto 85-2000 del Congreso de la República, Ley de Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio fiscal 2001, en el cual se interpuso una inconstitucionalidad parcial del artículo 2 de la misma, se decretó la suspensión provisional parcial del artículo 2 de la Ley de Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado 2001, en las secciones ¨Presupuesto de Egresos por Institución y Funcionamiento (En Quetzales), renglón ¨Obligaciones del Estado a Cargo del tesoro¨, en los textos y cantidades siguientes: Aporte Constitucional al Organismo Judicial 177,992,751 (columna total funcionamiento), 177,992,751 (columna Gastos de Administración)¨, Aporte Extraordinario al Organismo Judicial 263,159,126 (Columna total funcionamiento), 263,159,126 (columna total funcionamiento), 9,364,355 (columna Gastos de Administracion), esta suspensión Provisional se decreta de oficio y sin formar artículo, dentro de los 8 días siguientes a la interposición, la suspensión provisional de la ley, reglamento o disposición de carácter general si, a su juicio de la Corte, la inconstitucionalidad fuere notoria y susceptible de causar gravámenes irreparables. La suspensión tendrá efecto general y se publicará en el Diario Oficial al día siguiente de haberse decretado, esto se encuentra contemplado en el articulo 138 de la ley de Amparo, Exhibición personal y de constitucionalidad. Entre los fundamentos de la Impugnación de lo expuesto por los solicitantes se resumió de forma siguiente: la Corte de Constitucionalidad se estableció como un órgano de control sobre los actos del poder público. Su función esencial es proteger los principios de supremacía y rigidez de la Constitución, así como mantener a aquel poder dentro del límite de las facultades que la Ley Suprema establece. En su condición de órgano eminentemente jurisdiccional y como superior jerárquico en materia de justicia constitucional, goza tanto de independencia funcional como económica. La independencia funcional se traduce en el ejercicio de una jurisdicción que le es propia, única y exclusiva, y en la capacidad de regirse por sí, sin intervención de órganos ajenos, los asuntos internos de la Institución y los de la materia atinente a la justicia constitucional. En cuanto a la independencia económica el artículo 268 de la Constitución establece que "... la independencia económica de la Corte de Constitucionalidad será garantizada con un porcentaje de los ingresos que correspondan al Organismo Judicial"; y el artículo 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad reglamenta que "Es atribución de la Corte de Constitucionalidad formular su propio presupuesto; y con base en la disposición contenida en el artículo 268 (función esencial de la Corte de Constitucionalidad) de la Constitución de la República, se le asignará una cantidad no menor del 5% del mínimo del 2% del presupuesto de ingresos del Estado que corresponda al Organismo Judicial… De las normas antes trascritas deviene que la independencia económica de dicha Corte incorpora la asignación de una cuota no menor del 5% del mínimo del 2% del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado que corresponde al Organismo Judicial; la formulación de su propio presupuesto y la capacidad de obtención de fondos privativos derivados de la administración de justicia constitucional. De conformidad con el artículo 171 de la Constitución Política de la República el Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado es elaborado por el Ejecutivo y aprobado por el Legislativo. En la programación del gasto público se deben observar, las normas constitucionales que establecen porcentajes de asignación presupuestaria y las asignaciones de índole técnico-financiera formuladas por el Estado. En este orden de ideas el legislador puede aprobar, conforme criterios políticos, financieros y sociales y a su prudente arbitrio, los porcentajes que asignará a las dependencias del Estado que no tienen asignación obligatoria en la Ley Suprema; no sucede lo mismo con las que tienen asignación presupuestaria constitucional, en las que el legislador no puede aplicar dichos criterios financieros o de cualquier otra índole para inobservar la referida asignación. El Decreto 85-2000 del Congreso de la República, Ley del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio Fiscal 2001, específicamente el prefijo "Extra" que aparece en la partida presupuestaria "Aporte Extraordinario al Organismo Judicial", contenida en el renglón "Obligaciones del Estado a Cargo del Tesoro", el cual figura en el apartado "Presupuesto de Egresos por Institución y Funcionamiento (En Quetzales)" del artículo 2. De los egresos del Decreto impugnado, viola los artículos 268 de la Constitución y 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad antes aludidos. El segundo párrafo del artículo 237 de la Carta Magna establece que la unidad del presupuesto es obligatoria y que todos los ingresos del Estado constituyen un fondo común indivisible, destinado exclusivamente a cubrir sus egresos, por lo que resulta contrario a dicho precepto constitucional que el Congreso de la República divida la asignación presupuestaria que corresponde al Organismo Judicial en "aporte constitucional" y "aporte extraordinario", sin tomar en consideración que de conformidad con el artículo 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y Constitucionalidad aporte Constitucional. Además, se vulnera el artículo 268 de la Constitución Política de la República en donde establece: ¨La independencia de la Corte de Constitucionalidad será garantizada con un porcentaje de los ingresos que correspondan al Organismo Judicial¨. y conforme el artículo 213 de la Ley de Amparo, le corresponde un porcentaje no menor del 2% del Presupuesto de Ingresos Ordinarios del Estado¨. Sin que se pueda dividir el mismo en forma alguna. Asimismo, se indicó que la división del presupuesto del Organismo Judicial en ¨Aporte constitucional¨ y ¨ Aporte extraordinario¨ que realizó el congreso, constituye un engaño para asignar a la Corte de Constitucionalidad una cantidad inferior a la asignada en los últimos ejercicios fiscales anteriores, lo cual va en detrimento de la independencia económica de dicho Órgano. Y, por último, se ataca de inconstitucionalidad el aporte de nueve millones, trescientos sesenta y cuatro mil trescientos treinta y cinco quetzales que asigna el artículo 2 del decreto 85-200 del Congreso de la República a la Corte de Constitucionalidad, porque dicha cantidad no corresponde al 5% constitucionalmente asignado en el artículo 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad. La norma impugnada establece un aportes al Organismo Judicial por un valor total de 441,081,877 quetzales, el cual de conformidad con el artículo 1 del Decreto 85-2000, proviene de los ingresos corrientes del Estado, es decir de una misma fuente de financiamiento; es esta suma total por la cual se debe calcular el aporte del 5% constitucional, que por razón del artículo 268 de la Constitución y 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, el Estado debe otorgar a la Corte de Constitucionalidad, con el objeto de garantizar su independencia económica. Concluye que el aporte mínimo que la Corte de Constitucionalidad se le asignó solo el 2.65% y no el 5% que correspondería.
Posteriormente, se dio audiencia al Organismo Judicial, y en sus alegatos afirmó que
existía una flagrante violación del artículo 237 de la Constitución Política de la República, ya que el Congreso de la República hizo una separación en aporte constitucional, y en aporte extraordinario al asignar fondos al Organismo Judicial, que contradecía el principio de unidad y universalidad del presupuesto, el cual era un exceso en el uso de su facultad legislativa y al haber hecho la división generaba un desequilibrio en el sistema de justicia.
La Procuraduría General de la Nación al presentar sus alegatos, indicó que el presupuesto
de ingresos y egresos del Estado se incluyen todos los ingresos a obtener, lo que implica que no hay ingreso que no se comprenda por ser la unidad una de sus condiciones y características, y que la norma aludida dispone de manera imperativa la unidad de presupuesto, lo que indica que no puede ser dividido en varios presupuestos, y que por lo tanto todos los ingresos del presupuesto constituye un fondo común indivisible por lo que no es constitucionalmente posible dividir ese fondo común en varias partes; la Procuraduría sostenía que el Congreso de la República hizo una clasificación de aportes a la partida asignada al Organismo Judicial, la cual no se encuentra contemplada en la Constitución ni en la Ley de Amparo, y estaba vulnerando el artículo 237 de la Constitución Política de la República, en el cual se encuentra el principio fundamental de unidad obligatoria del presupuesto, y por ello se le asignó un presupuesto menor a la Corte de Constitucionalidad.
Además, el Ministerio Público indicó en su oportunidad, que el artículo 2 del Decreto
impugnado incide en el vicio de violación de los artículos 213 y 237 constitucionales, ya que El Congreso dividió, clasificó y calificó en dos categorías los fondos estatales para el Organismo Judicial, y que tal clasificación generó disminución a la asignación presupuestaria de la Corte de Constitucionalidad, al no calcularse el porcentaje sobre la totalidad de los fondos destinados para el organismo Judicial, y que se rompió la unidad del presupuesto que es obligatoria, ya que los ingresos del Estado constituye fondo común indivisible, para cubrir los egresos; y al recortar el presupuesto se violenta el artículo 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal, el cual regula que, con base en lo dispuesto en el artículo 268 de la Constitución Política de la República, corresponde asignar a la Corte de Constitucionalidad una cantidad no menor del 5% del mínimo del 2% del presupuesto de ingresos del Estado que corresponden al Organismo Judicial.
En sentido opuesto a los alegatos anteriormente expuesto, el Congreso de la República, en
su alegato dijo que el Decreto impugnado fue aprobado en ejercicio legítimo de sus funciones y atribuciones legales constitucionales; y que la Constitución obliga al Estado a otorgar un aporte a la Corte Suprema de Justicia, pero no le limita a que pueda hacerle asignaciones extraordinarias, porque lo que la ley no prohíbe está permitido; que con la asignación extraordinaria, no se vulnera ni altera la unidad de presupuesto; porque está contenido en un solo cuerpo legal, que es el Decreto Impugnado.
Y por último, en sus alegatos el Ministerio de Finanzas Públicas, sostuvo que el
Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado, constituye un instrumento mediante el cual se concretan los objetivos y metas de los planes gubernamentales, vía la asignación de los recursos, y en su elaboracion se toman en consideración principios y parámetros de tipo técnico jurídico; que los aportes para el Organismo Judicial se deben obtener de los ingresos ordinarios del Estado, que están comprendidos dentro de los ingresos corrientes. Si el Organismo legislativo, decidió otorgarle un monto adicional, este resulta ser independiente de los ingresos ordinarios, y no puede tomarse en consideración para la sumatoria del porcentaje, que se le es asignado a la Corte de Constitucionalidad, ya que el aporte extraordinario otorgado a el Organismo Judicial, constituye un fondo que reviste carácter coyuntural para el fortalecimiento de la administración de justicia, y que los Interponientes, no tienen pleno conocimiento de los principios y técnicas de formulación y aprobación del Presupuesto General de Ingreso y Egresos del Estado.
La corte de constitucionalidad examinó las disposiciones conforme a los principios y
caracteristicas que quedaron enunciados, en la que la ley del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado, en la parte que corresponde al Presupuesto de egresos por Institución y funcionamiento y sección Obligaciones del Estado a cargo del tesoro, se determinó que efectivamente dividía el aporte que corresponde al Organismo Judicial. Transgrediendo el artículo 237 de la constitución, porque en el artículo 205 literal b indica que la independencia económica mediante la asignación única de una cantidad no menor del 2% del presupuesto de Ingresos Ordinarios del Estado, sin prejuicio de sus fondos privativos (son aquellos ingresos que administran la misma organización que los percibe y estos provienen de la venta de bienes y servicios de las entidades) y en segundo se violentó también porque la cantidad vinculada, para el efecto de cálculo, en el párrafo segundo del artículo 268 de la Constitución, en cuanto a la independencia económica de la Corte de Constitucionalidad, debe ser garantizada con un porcentaje de los ingresos que corresponden al Organismo Judicial, el cual se concreta ese porcentaje en una cantidad no menor del 5% del mínimo del 2% del presupuesto de ingresos que corresponde al Organismo Judicial, como lo establece la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, Decreto 1-86, en donde se establece, la cantidad asignada a la Corte.
En conclusión, la resolución de las tres acciones de inconstitucionalidad del Decreto 85-
2000 del Congreso de la República de Guatemala, Ley del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el ejercicio fiscal 2001, resolvió que coincidieron en que fueron infringidos los principios de unidad, universalidad e indivisibilidad contenidos en el artículo 237 de la Constitución Política de la República, por el hecho de dividir el Aporte Constitucional al Organismo Judicial y Aporte Extraordinario al Organismo Judicial, y por ende, la disminución que se reflejaba en la Corte de Constitucionalidad, transgredió el artículo 237 de la Constitución, porque la misma garantiza en su artículo 205 literal b, la independencia económica mediante la asignación única de una cantidad no menor del 2% del presupuesto de ingresos ordinarios del Estado, sin prejuicio de sus fondos privativos. Además, esta cantidad está vinculada, para el sólo efecto de cálculo, el párrafo segundo del artículo 268 de la constitución, en cuanto a la independencia económica de la Corte de Constitucionalidad, será garantizada con el porcentaje de los ingresos que corresponden al Organismo Judicial. Concretándose ese porcentaje en una cantidad no menor del 5% del mínimo de 2% del presupuesto de ingresos del Estado que corresponden al Organismo Judicial, como quedó dispuesto en el artículo 186 donde se establece el Presupuesto de la Corte de Constitucionalidad, en la ley de amparo, exhibición personal y de constitucionalidad. Esa vinculación normativa que sustenta la base de cálculo de asignaciones para aquel organismo y para la corte se ve alterada por la norma que se impugna, ya que esta no admite la división acordada y aprobada por el Congreso de la República de Guatemala, en la referida ley del presupuesto general de ingresos y egresos del Estado para el ejercicio fiscal 2001.
La Corte de Constitucionalidad declaró con lugar las acciones de inconstitucionalidad
planteadas, y en consecuencia, se deja sin efecto, el artículo 2 del Decreto número 85-2000 del Congreso de la República, parte ¨Presupuesto de Egresos por Institución y Funcionamiento (En Quetzales)¨, sección ¨Obligaciones del Estado a Cargo del Tesoro¨, en el texto y las cifras siguientes: ¨Extra¨ incluido en la frase, ¨Aporte Extraordinario al Organismo Judicial¨ (columna total funcionamiento), ( columna Gastos de Administracion)¨y 9.364.355 que aparece en la frase ¨Aporte a la Corte de Constitucionalidad¨(columna total funcionamiento), y 9.364.355 (columna gastos de administracion)¨. Y quedó sin vigencia el prefijo y cifras declaradas inconstitucionales de la norma citada, cuyos efectos se retrotraen al día siguiente de la publicación de su suspensión provisional, ya que este es el efecto del artículo 141 de la ley de amparo, exhibición personal y de constitucionalidad.