Está en la página 1de 18

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES IZTACALA


CARRERA DE PSICOLOGÍA

Libertad o ilusión: una mirada al libre albedrio desde la


perspectiva conductual.

Alan Jhasua Carrillo Hernández

Los Reyes Iztacala, noviembre de 2014


Índice

Introducción……………………………………………………………………………………………………………..1

Capítulo 1. Libertad un enfoque general…………………………………………………………………. 2

Capítulo 2. Libertad en el ámbito jurídico………………………………………………………………….4

Capítulo 3. Libertad en el ámbito religioso…………………….…………………………………………7

Capítulo 4. La libertad vista desde el enfoque conductual skinneriano……………………..10

Conclusiones. …………………………………………………………………………………………………………..15

Referencias.……………………………………………………………..…………………………………..16
INTRODUCCIÓN.

El tema de la libertad, es un tema a la vez complejo e interesante, especialmente


para la juventud de nuestra época y un tema del cual no es fácil tener ideas claras.
Parece que la premura de la propia vida moderna no nos da tiempo para analizar,
objetivar y pensar, por lo tanto debemos contentarnos con admitir la existencia de
la libertad como un hecho y derecho en ciertas conductas de nuestra existencia.

Existen instituciones de índole religiosa, social y gubernamental. Estas


instituciones nos hablan de un concepto ambiguo tal como el de la libertad por lo
tanto es pertinente contrastar estas nociones, con el fin de aclarar el camino por el
cual se puede dar un panorama general hacia la existencia o no de la o las
libertades.

Asimismo a lo largo de la literatura y de la cultura en la que nos encontremos


inmersos podemos encontrarnos y visualizar diferentes nociones de esta palabra
en diferentes ámbitos. Lo que me hace pensar, realmente, ¿existe algo tal como
la libertad? Hablamos pues de una libertad metafísica o una gubernamental, ¿con
base en que argumentos, ya sean religiosos, políticos o sociales las personas
pueden llamarse seres libres?, y lo más importante ¿qué es la libertad?.

Por lo tanto, trataremos de ver aquí, brevemente cuál es el concepto de libertad


psicológica que podemos admitir, si aceptamos la teoría conductista Skinneria, Por
consiguiente en el presente trabajo se abordara el concepto de libertad desde la
religión católica, ya que es la predominante en México.

Skinner (1978). Nos menciona que cuando recurrimos a sentimientos o ideas para
poder entender la conducta humana ponemos en peligro el manejo adecuado por
medio del cual podemos abordar la conducta, ya que dejamos de lado las
contingencias medio ambientales útiles que permitirían un análisis científico del
tema. Y, claro está, el concepto de libertad no ha sido la excepción.

Entonces podemos divisar que nuevas incógnitas surgen si nos ponemos en


concordancia con la postura psicológica mencionada con antelación, las cuales
podremos apuntar más adelante en este trabajo, empero, “Tal vez el mayor logro
del hombre haya sido su éxito en liberarse de las molestias y peligros de su medio
ambiente físico y de los aspectos punitivo y de explotación de su medio ambiente
social. Le ha liberado para desarrollar otras clases de comportamiento con
consecuencias altamente reforzantes –en las ciencias, las artes y las relaciones
sociales-. Al mismo tiempo, le ha dado el sentimiento de libertad, y tal vez ningún
sentimiento ha causado más problemas que este.” Skinner (1974).
Capítulo 1.
Libertad un enfoque general.

Al buscar el concepto de libertad en el diccionario de la real academia de la lengua


española, nos dice lo siguiente: “Facultad natural que tiene el hombre de obrar de
una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos.”
Claro está, que no es muy claro este concepto, da a entender que el hombre, en
toda su totalidad y complejidad humana viene equipado de manera “natural” con
una suerte de facultad para hacer, o entiéndase, comportarse de cierta manera y
además el atribuirle responsabilidad a estos comportamientos.

El problema de la ambigüedad conceptual que se tiene acerca de la libertad, es


donde muchas veces se tiene una falsa creencia acerca del concepto, podemos
encontrar incluso hasta las personas que atribuyen este constructo lógico a
animales infra humanos, como las instituciones encargadas de los derechos de los
animales (ahora bien derecho incluso es otro constructo lógico que no tendría
cabida en la cuestión de los organismos infrahumanos), podemos observar a
gente que detiene investigaciones provechosas con estos organismos,
desconociendo que es gracias a muchas de estas investigaciones que ellos gozan
de muchas comodidades en la vida cotidiana.

Por estas y otras razones es de vitalidad revisar conceptos que se han ido
modificando a lo largo de las diferentes culturas, Nociones jurídicas ya bien
conocidas como multas o castigos infernales al no cumplir las órdenes impuestas
por dios, entiéndase libre albedrio.

Por lo tanto podemos encontrar infinidad de conceptos y significados de la palabra


libertad, ya sean de orden, político, social, religioso, educacional, etc.

En el tratamiento de Tomasini (2004) hace mención que para empezar, lo que hay
que decir es que el problema de la libertad queda explícitamente caracterizado
ante todo como un problema concerniente a la acción humana y se le deja de ver
como un problema de causación universal. El objetivo de discutir si se es libre o no
es comprender las acciones de las personas, para determinar quién es
responsable, por qué, en qué medida, etc. La pregunta de arranque, por
consiguiente, no es ya 'si, somos libres? sino más bien '¿de qué acciones o clases
de acciones decimos que son libres o voluntarias?'.
Con esto se refiere a que si bien, todos los cuerpos que se encuentran inmersos
en la tierra están sujetos a las leyes de la física, la perspectiva mentalista nos dice
todo lo contrario, ya que, podemos observar gente que piensa que de alguna
manera posee algo como una libertad inmutable y que de alguna manera esta se
somete al deseo y voluntad de quien es dueña.

Empero, “Ahora bien, lo que parece estar implicado en el estudio de van Wright es
sencillamente que la idea de libertad humana no es la misma en todas las
sociedades o culturas, es decir, no hay una única concepción, una concepción
universal, transhistórica y transcultural de libertad”, Tomasini (2004).
Capítulo 2.
Libertad en el ámbito jurídico.
En la constitución de los estados unidos mexicanos, encontramos varios usos y
significados de la libertad, bajo los términos libre, libremente, autonomía.
Recordemos un poco estos términos con algunos artículos de la constitución
acerca del concepto de “libertad”:

ARTÍCULO 5 - A ninguna persona podrá impedirse que se dedique a la profesión,


industria, comercio o trabajo que le acomode, siendo lícitos. El ejercicio de esta
libertad sólo podrá vedarse por determinación judicial, cuando se ataquen los
derechos de tercero, o por resolución gubernativa, dictada en los términos que
marque la ley, cuando se ofendan los derechos de la sociedad. Nadie puede ser
privado del producto de su trabajo, sino por resolución judicial. 

ARTICULO 7 - Es inviolable la libertad de escribir y publicar escritos sobre


cualquier materia. Ninguna ley ni autoridad puede establecer la previa censura, ni
exigir fianza a los autores o impresores, ni coartar la libertad de imprenta, que no
tiene más límites que el respeto a la vida privada, a la moral y a la paz pública. En
ningún caso podrá secuestrarse la imprenta como instrumento del delito. 

ARTÍCULO 10 - Los habitantes de los Estados Unidos Mexicanos tienen derecho


a poseer armas en su domicilio, para seguridad y legítima defensa, con excepción
de las prohibidas por la ley federal y de las reservadas para el uso exclusivo del
Ejército, Armada, Fuerza Aérea y Guardia Nacional. La ley federal determinará los
casos, condiciones, requisitos y lugares en que se podrá autorizar a los habitantes
la portación de armas. 

ARTÍCULO 11 - Todo hombre tiene derecho para entrar en la República, salir de


ella, viajar por su territorio y mudar de residencia, sin necesidad de carta de
seguridad, pasaporte, salvoconducto u otros requisitos semejantes. El ejercicio de
este derecho estará subordinado a las facultades de la autoridad judicial, en los
casos de responsabilidad criminal o civil, y a las de la autoridad administrativa, por
lo que toca a las limitaciones que impongan las leyes sobre emigración,
inmigración y salubridad general de la República, o sobre extranjeros perniciosos
residentes en el país. 

ARTÍCULO 24 - Todo hombre es libre para profesar la creencia religiosa que más
le agrade y para practicar las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo,
en los templos o en su domicilio particular, siempre que no constituyan un delito o
falta penados por la ley.

El artículo 5 nos habla de la libertad de trabajo y como es que cada persona tiene
el derecho de escoger y practicar el trabajo que mejor se acomode a las
necesidades de cada persona, claro está, con ciertas restricciones. Por su parte el
artículo 7 nos habla de la libertad de imprenta y de poder escribir cualquier cosa,
sin embargo aunque este artículo menciona que en ningún momento se verá
interrumpido este derecho, también se puede leer que el único limitante será el
respeto a la vida privada, a la moral y la paz pública. Para el caso del artículo 10
nos menciona acerca de la libertad de tener armas en casa, en este caso se
puede observar que son más explícitas las restricciones que aplican. El artículo 11
nos habla de la libertad que tienen las personas sobre el poder escoger donde
vivir, así como de igual forma el poder salir dentro y fuera de la república
mexicana, sin embargo de nuevo se aplican restricciones. Para terminar con
broche de oro esta lista de artículos, tenemos aquel que tiene que ver
enteramente con las creencias religiosas y metafísicas, este por su parte,
menciona que todas las personas pueden profesar la religión y / o creencia que
más le agrade, siempre y cuando estas prácticas no sean un delito para ley.

Estos artículos que acabo de presentar, se encuentran como ya mencione, en la


constitución mexicana, y claro está, son presentados como una forma de derechos
que todas las personas tienen por el sólo hecho de nacer dentro de este país, sin
embargo, podemos observar que en todos existen restricciones acerca del uso de
estos derechos o nociones de libertad.

De igual forma Villanueva (2011) nos menciona que “Hay múltiples formas en que
el derecho implica al concepto de libertad, pero baste recordar que si no se
asumiera que las personas son libres no tendría sentido elaborar normas, aprobar
códigos, llevar a cabo juicios, imponer sanciones o penas, etcétera. Las normas
jurídicas —y primordialmente las normas constitucionales— presuponen la libertad
de las personas a las que van dirigidas esas normas y buscan que las personas
las obedezcan o de lo contrario se expongan a las sanciones que esas mismas
normas estipulan. El derecho presupone con la ética, la política, la historia, la
economía, entre otras, la propiedad del mérito, de lo que merecen las acciones u
omisiones de las personas.”

Entonces es necesario aclarar que para el orden jurídico, no existe algo como una
libertad, a saber, podemos decir que la libertad jurídica está inmersa en tres
rubros; ordenado, prohibido y lo que es permitido. Lo permitido es todo aquello
que no está ni prohibido ni ordenado, lo ordenado es todo aquello que debemos
hacer, ya que si no se hace lo ordenado entonces obtendremos una sanción, y por
último, lo prohibido es todo aquello que debemos omitir y / o dejar de hacer, ya
que de lo contrario sufriríamos las consecuencias que estípula la ley.

Luego entonces podemos objetar que de acuerdo con esto la libertad aparece
como algo intrínseco a las personas mientras que el derecho aparece como algo
dispensable. En la vida cotidiana, la libertad nos aparece como algo inescapable:
no sabríamos vivir sin pensar que somos libres y además sin ser de alguna
manera libres. Una persona que carece de todo tipo de libertad parece algo
ininteligible. Una persona puede carecer de esta u otra libertad, pero no de toda
libertad. Es necesario que una persona merezca alabanza o reprobación por las
acciones que ha llevado a cabo o por sus omisiones. El mérito o el castigo van
adheridos a cada una de nuestras acciones u omisiones y a nuestra vida toda.

A manera de conclusión Villanueva (2011) nos menciona “Sin embargo, a pesar


de lo aferrado que está el concepto de libertad en nuestras vidas, es posible que
no exista tal libertad y que por el contrario, que el mecanismo sea el caso, es
decir, el determinismo universal; en cuyo caso la experiencia de la libertad
devendría algo ilusorio, una especie de fuego fatuo. Pero además, si el
mecanismo es el caso, entonces se abre la posibilidad de que exista el derecho
sin esa libertad, es decir, que no haya ni libertad empírica ni libertad jurídica, una
hipótesis que choca enormemente al sentido común.”
Capítulo 3.
Libertad en el ámbito religioso.

Me es pertinente reiterar aquí que el concepto de la palabra libertad al cual las


personas se encuentran sujetas, es tan ambiguo que difiere bastante a lo largo de
las diferentes culturar y sociedades. Por su parte el concepto que nos da la
religión católica, no es la excepción, este de igual forma se ve expresado a lo largo
de los diferentes pasajes que son presentados a los fieles creyentes.

Daremos paso a hacer mención de algunos cuantos para su posterior revisión:

1 Pedro 2:16 
Andad como libres, pero no uséis la libertad como pretexto para la maldad, sino
empleadla como siervos de Dios. 

Gálatas 5:13 
Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; sólo que no uséis la
libertad como pretexto para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros. 

2 Corintios 3:17 
Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, hay
libertad. 

Hechos 7:25 
Pensaba que sus hermanos entendían que Dios les estaba dando libertad por
medio de él, pero ellos no entendieron. 

1 Corintios 7:39 
La mujer está ligada mientras el marido vive; pero si el marido muere, está en
libertad de casarse con quien desee, sólo que en el Señor. 

Para el primer pasaje bíblico citado nos dice que la ir como personas libres,
empero, está libertad no debe ser utilizada de forma maléfica sino más bien, como
buenos siervos de dios. O como buenos obedientes de esta entidad.

Por lo tanto el concepto de libertad, se reduce a si y sólo si, dios la aprueba con
base en sus ya conocidos diez mandamientos dentro de los cuales se encuentran;
El libro del Éxodo 20: 1-17 contiene la siguiente narración:
1
 Y habló Dios todas estas palabras, diciendo:
2
 Yo, Yahveh, soy tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de
servidumbre.
3
 No tendrás dioses ajenos delante de mí.
4
 No te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que hay arriba en el cielo, ni
abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
5
 No te inclinarás ante ninguna imagen, ni las honrarás; porque yo soy Yahveh tu
Dios, fuerte, celoso, que castigo la maldad de los padres sobre los hijos hasta la
tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,
6
 y hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos.
7
 No tomarás el nombre de Yahvé tu Dios en vano; porque no dará por inocente
Yahveh al que tomare su nombre en vano.
8
 Acuérdate del día del sábado para santificarlo
9
 Seis días trabajarás, y harás toda tu obra,
10
 Mas el séptimo día es reposo para Yahveh tu dios; no hagas en él obra alguna,
tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que
está dentro de tus puertas.
11
 Porque en seis días hizo Yahveh los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas
que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Yahveh bendijo el día de
reposo y lo santificó.
12
 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que
Yahveh tu DIOS te da.
13
 No matarás.
14
 No cometerás adulterio.
15
 No hurtarás.
16
 No dirás falso testimonio contra tu prójimo.
18
 No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su
siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo.

Sería lógico pensar que si está de por medio un castigo divino el cual incluye el
ser torturado para siempre, si no se acatan estás normas, claro está que las
personas lo seguirán y más si es reforzado o castigado el comportamiento que se
desea o el que se desdeña. Por otra parte Según se enseña en el Compendio del
Catecismo de la Iglesia católica los Diez Mandamientos en su fórmula
catequética son:

1. Amarás a Dios sobre todas las cosas.


2. No dirás el nombre de Dios en vano.
3. Santificarás las fiestas.
4. Honrarás a tu padre y a tu madre.
5. No matarás.
6. No cometerás actos impuros.
7. No robarás.
8. No darás falsos testimonios.
9. No consentirás pensamientos ni deseos impuros.
10. No codiciarás los bienes ajenos.
Podemos observar que dejan de lado algunos mandamientos, como lo son 4 No te
harás imagen ni ninguna semejanza de lo que hay arriba en el cielo, ni abajo en la
tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
5
 No te inclinarás ante ninguna imagen, ni las honrarás; porque yo soy Yahveh tu
Dios, fuerte, celoso, que castigo la maldad de los padres sobre los hijos hasta la
tercera y cuarta generación de los que me aborrecen.

Claro está que estos pasajes no les convienen ser revisados, ya que por lógica la
religión católica es enteramente sobre imágenes y santos, eh incluso se puede
observar que la libertad de creer en algo o alguien es contemplada por la o las
personas que imparten una religión, puesto que, esta se encuentra inmersa a lo
largo de años de culturalización por parte de instituciones, asimismo es pertinente
mencionar que al menos, la libertad jurídica se contrapone al noción de libertad
religiosa, con base en la elección de cualquier creencia, pero, una de las
similitudes, es que en cualquiera si no se hace lo que marcan, ya sea las ordenes
o leyes, o los mandamientos, las consecuencias pueden ser variadas, pero existirá
un castigo de por medio. Con lo cual podemos apuntar a que como ya había
mencionado no existe tal concepción de una única libertad.

Con respecto a los pasajes bíblicos antes citados, podemos considerar que en su
mayoría el vocablo libertad, se subordina a una entidad inerte e inmutable, a la
cual algunas personas tienden a llamar dios. Conseguimos entonces una noción
más cercana a la realidad metafísica-religiosa que permea este pensamiento en
los mexicanos, ya que, menciona la INEGI en el 2012 que el 83.9 por ciento de las
personas en este país profesan la religión católica, con lo cual quiere decir que
cerca de ocho de cada diez personas se declaran católicos, luego entonces, si
asumimos que los pasajes religiosos antes citados declaran que la libertad se
encuentra en esta entidad, podemos afirmar que esta libertad que por sentido
común en donde las personas son capaces de hacer lo que les venga en gana o
que por el contrario son conscientes de sus actos y saben comportarse de
acuerdo a sus necesidades, es aminorada a los mandatos que este libro, uno de
los más leídos en el mundo, mandandoles que es lo que deben o no hacer.
Capítulo 4

La libertad: un análisis desde el enfoque conductual skineriano.

A lo largo de los capítulos anteriores, pasamos por un camino empinado y


espinoso, con al concepto turbio de la libertad, si bien nos llevó por las veredas de
un callejón sin salida y de dimensiones sinuosas, podemos aguzar los sentidos al
análisis experimental de la conducta y no dejar de lado que tal vez, no es lo que
llamaríamos, la tierra prometida, pero, se acerca bastante.

Comencemos analizando el problema del concepto de libertad. Tomasini (2004)


nos menciona que no existe un concepto universal de la libertad,
consecuentemente la pregunta en materia seria ¿cómo es que se desvirtúa tal
concepto?, en el tratado que realiza Emilio Ribes (2004) titulado ¿es posible
unificar los criterios sobre los que se concibe la psicología?, alude al problema que
la ciencia de la conducta enfrenta, sobre si es que es posible aun llamar psicología
a una sola ciencia, cuando, tenemos diferentes teorías de que es lo psicológico,
de este modo podemos prestar atención a las influencias de la religión judeo-
cristiana y a una descontextualización del leguaje.

Ribes (2004) nos dice: Imaginar, pensar, razonar y muchos otros términos, que
tienen sentido sólo en el contexto de expresiones en situación, no significan
actividades ocultas o entidades misteriosas que poseemos pero que somos
incapaces de identificar. Estos términos y sus expresiones sólo significan lo que
los actos del que habla y los que escuchan representan como practicas
contextualizadas por una situación.

Por consiguiente no podemos decir, que en la frase “lo tengo en la punta de la


lengua” se refiera a que alguien tiene en su boca una “idea” la cual necesite ser
extirpada para su uso, o no observamos a gente que tome analgésicos para aliviar
el dolor que le produjo una decepción amorosa. Es por esto que lo mismo pasa
con el concepto de libertad, ya que, no es lo mismo decir, que una persona es libre
de escoger que zapatos ponerse a decir que una persona es libre de escoger que
religión profesar o por otra parte decir que no eres libre si no crees en una deidad
superior libre de toda ley física.
De esta forma podemos afirmar que “las expresiones siempre son componentes
de una práctica social, siempre ocurren en situaciones o contexto y su significado
proviene justamente de su uso en un contexto determinado, en un momento
determinado y por una comunidad lingüística específica”, (Ribes, 2004). Por estas
razones se encuentran problemas al analizar la conducta de los organismos, ya
que al parecer los únicos que partieron del lenguaje ordinario al técnico fueron los
psicólogos.

Skinner (1978) por su parte nos dice que cuando no sabemos porque la gente
hace una cosa en vez de hacer otra, decimos que la gente elige, o toma
decisiones. Elegir y decidir, son por tanto, forma conspicua de conducta; no
obstante, los psicólogos cognoscitivos han inventado sustitutos internos.

Cuando hacemos la otra revisión donde, ahora la influencia se encuentra inmersa


en la religión, conceptos como libre albedrio salen a flote. Originalmente el
concepto de libre albedrío y autodeterminación era que el alma del individuo
divinamente otorgada era la responsable de su conducta, (Staats, 1997).
(Skinner, 1971) nos indica que una persona no actúa sobre el mundo, el mundo
actúa sobre ella. Que quiere decir esto, imaginemos por un momento, que el día
esta lluvioso, luego entonces, las personas tenderían a salir a la calle con un
paraguas o al menos abrigados, claramente el comportamiento se encuentra en
función de medio ambiente, y por consiguiente si este evento es reforzado, como
por ejemplo con no enfermarse, la probabilidad de que está conducta se repita es
muy alta. Por otra parte imaginemos ahora el típico adolecente que, dice ser libre
de la tiranía capitalista, sin embargo esto lo comenta desde su Smartphone, ya de
entrada de qué libertad puede él estar gozando, incluso en su manera de vestir se
ve en función del medio ambiente y de las posibles historias interactivas que
encuentre en él, ya sean de reforzamiento o castigo, por consiguiente, incluso si
nos dijera que él es libre de escoger, por ejemplo, sus zapatos, podemos decir que
esos zapatos ya han sido escogidos con antelación, y que incluso, sólo puede
escoger lo que las compañías ofrezcan a su aparente elección deliberada.

Entonces, a una de las preguntas del ¿por qué las personas siguen creyendo en
algo tal como la libertad?. Podemos explicar ese comportamiento con base en su
historia interactiva de reforzamiento- castigo que el sujeto haya tenido, sin
embargo, en ningún momento estoy diciendo que es igual para todos, las historias
mencionadas son, por lo tanto, variantes a cada sujeto, por ejemplo cuando una
chica dice que le gusta el pescado, mientras que otra dice que le disgusta, de
entrada se puede ver un comportamiento variante, a lo que la gente común
llamaría gusto, por otra parte si hacemos un análisis más complejo tendríamos
que examinar en que momento de la historia interactiva de esta chica, el comer
pescado se correlaciona con un evento aversivo, más que decir que ella es libre
de escoger lo que le gusta o lo que no. Ahora bien lo mismo pasa con las
creencias, si los organismos son reforzados cada que dicen que los humanos son
libres de escoger, o de decidir, es muy altamente probable que la conducta se
vuelva a repetir en un futuro. Y es así que podemos afirmar que no existe magia
alguna en el análisis experimental de la conducta

Algunos términos mentalistas se refieren a las condiciones que afectan, tanto a la


susceptibilidad de refuerzo como a la fortaleza del comportamiento ya reforzado.
Usamos la palabra «querer» para describir un déficit: un hombre hambriento
quiere alimento en el sentido simple de que necesita alimento. Originalmente,
«necesidad» significaba fuerza violenta, restricción o compulsión, y todavía
hacemos una distinción entre querer actuar (por razón de las consecuencias
positivamente reforzantes) y necesitar actuar (porque dejar de actuar tendría
consecuencias aversivas), pero para muchos fines, los términos son
intercambiables. Decimos que un automóvil necesita gasolina y, en sentido menos
figurado, que se necesita gasolina, pero decir que una persona «quiere salir»
sugiere un control aversivo. El hecho importante es que la persona que necesita o
quiere alimento tiene una particular probabilidad de reforzarse con alimento, y que
tiene una particular probabilidad de emitir cualquier comportamiento que
previamente se haya reforzado con alimento. La persona que está bajo control
aversivo tiene una probabilidad particular de reforzarse si escapa y emite un
comportamiento que ya ha conducido al escape, Skinner (1974).

De igual forma las consecuencias que moldean y mantienen al comportamiento


llamado operante no están presentes en el lugar donde ocurre la respuesta; se
han convertido en parte de la historia del organismo. El lugar presente en un
momento dado puede afectar la probabilidad de una respuesta, pero no es la
única cosa que lo hace. Alterar una probabilidad no es provocar una respuesta,
como en el caso del reflejo. La aparente falta de una causa inmediata en el
comportamiento operante ha llevado a la invención de un hecho iniciador. Se dice
que el comportamiento empieza cuando la persona desea actuar. Corrientemente,
la palabra «libertad» significa ausencia de restricción o coacción, pero de manera
más amplia significa ausencia de cualquier determinación previa: «Con excepción
de los actos de voluntad, todas las cosas que llegan a ser tienen causas»,
(Skinner, 1974, 1978).

Pero podremos pensar, ¿qué importancia tiene estudiar esto? O ¿cuál sería el fin
y en qué manera puede causar daño el que las personas continúen con estas
creencias erronas y mágicas?. La respuesta se puede ver en el gobierno y
sociedad actual, ya que todas estas instituciones atentan contra la integridad de
un pueblo agobiado por las penas y el control aversivo. ¿Qué de importante tiene
entonces el análisis experimental de la conducta?. Los eventos aversivos juegan
un papel importante en la vida diaria. De hecho, las técnicas aversivas están
profundamente implicadas en muchas de las instituciones sociales, incluyendo el
gobierno y la ley (por ejemplo multas y prisión), las instituciones educativas (por
ejemplo, reprobar exámenes y ser expulsado), la religión (por ejemplo la culpa y el
infierno) y en las convivencias sociales comunes de todos los días (por ejemplo, la
discriminación, la censura, la humillación y la estigma social).

Las interacciones rutinarias de la mayoría de los individuos, en sus ambientes


tanto físico como social, resultan en eventos aversivos, que van desde una
quemadura de una estufa caliente hasta el abuso verbal de un conocido, (Kazdin,
1994). El emplear la aversión como técnica de modificación conductual tiene sus
limitantes y los postulantes de modificación conductual evitan el castigo siempre
que es posible. La situación aversiva suele relacionarse con efectos colaterales
indeseables, como reacciones emocionales, escape y evitación de situaciones. De
acuerdo con Kazdin, (1994) el castigo por su parte puede fomentar asociaciones
indeseables con respecto a diferentes agentes (padres, maestros), situaciones,
(hogar, escuela), y conductas(hacer tarea).

Por lo tanto, podemos enfocarnos en este foco de alarma, ya que todos los
sistemas de gobierno funcionan mediante control aversivo, al igual que el control
religioso, con castigos, multas y recargos como ya lo había mencionado, entonces,
si partimos de la premisa, donde el control aversivo puede producir efectos
indeseables a la conducta de los organismos, incluida la conducta humana,
entonces, ¿por qué es que se sigue usando?. Una de las razones que Skinner
(1974) nos menciona es que el control aversivo tiene resultados más rápidos y
observables que el reforzamiento positivo.

Por lo tanto si las personas son dirigidas a cuidar de su cultura, entiéndase,


gobierno, religión, sociedad, etc., mediante castigo, es aquí cuando su libertad se
ve sacrificada, por otra parte si este cambio y cuidado se logra mediante el
reforzamiento positivo se intensifica su sentido de libertad, Skinner (1971).

Por estas razones, se hace un hincapié, en revisar de manera minuciosa la


propuesta Skinneriana del análisis experimental de la conducta, puesto que, un de
las cosas que nos propone, es cambiar el control aversivo, por un
condicionamiento basado en el reforzamiento positivo, si bien, los resultados de
este cotrol no son perceptibles, de manera casi inmediata, como en el control
aversivo, los resultados a la larga son mucho mejores.
Conclusión.

A lo largo del presente trabajo, se ha hecho hincapié en el hecho de poder


desenmarañar conceptualmente el uso de la palabra libertad en los diferentes
contextos que es empleada esta palabra. Pasando desde los más importantes
desde mi parecer, como lo es el jurídico y religioso, además, la revisión que nos
compete como psicólogos, no se puede soslayar al lenguaje ordinario como lo
habíamos referido.

Caemos en cuenta que no existe algo tal como una libertad, que, sea considerada
como facultad inherente de los seres humanos en cuanto llegan a este mundo. Por
lo tanto cabe mencionar que el concepto de libertad, no es único, y depende de
múltiples factores a evaluar.

Por otra parte, el análisis experimental de la conducta, nos abre camino en medio
de esta nubosa creencia errónea conceptual, dándonos las posibles herramientas
para la resolución de problemas.

Me gustaría concluir este fragmento del libro de skinner, titulado, reflexiones sobre
conductismos y sociedad: “Entonces, en resumen, no soy psicólogo cognoscitivo
por varias razones. No veo evidencias de un mundo interno de vida mental relativo
ya sea al análisis de la conducta como una función de fuerzas ambientales, o a la
fisiología del sistema nervioso. Las respectivas ciencias de la conducta y la
fisiología avanzarán más rápidamente si sus dominios se definen y analizan
correctamente.
Estoy igualmente interesado en las consecuencias prácticas. El recurrir a estados
y procesos cognoscitivos es una desviación que bien podría ser responsable de
nuestro fracaso en la resolución de nuestros problemas. Necesitamos cambiar
nuestra conducta, y solamente podremos hacerlo cambiando nuestros medios
ambientes físico y social. Escogemos el camino equivocado desde el principio
cuando suponemos que nuestra meta es cambiar la mente y el corazón de
hombres y mujeres, en lugar del mundo en el que ellos viven." Skinner (1978).
Bibliografía

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Diario Oficial de la


Federación 5 de febrero de 1917 Fe de erratas 6 de febrero de 1917

Kazdin, A. E. (1994). Modificación de la conducta y sus aplicaciones prácticas. California:


Manual moderno.

Ribes Iñesta, E. (2004). ¿Es posible unificar los criterios sobre los que se concibe a la
psicología? Suma psicológica, 9-28.

Skinner, B. (1971). Beyond Freedom and Dignity. Nueva york: Hackett Publishing Company.

Skinner, B. (1974). Sobre el coductismo. Nueva York: Planeta de Agostini.

Skinner, B. (1978). Reflexiones sobre conductismo y sociedad. Nueva Jersey: prentice hall.

Staats, A. W. (1997). Conducta y personalidad conductismos psiccológico. New York:


Desclé de Brouwer.

Villanueva, E. (2011). Derecho y libertad. Cuestiones constitucionales, 293-313.

También podría gustarte