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Kripke salva la metafísica desde la filosofía del lenguaje, Crítica la teoría de la referencia de
Frege/Russel.; Critica la idea de los recursos primarios del lenguaje (nombres y descripciones)
no remitan directamente a la realidad sino al aparato cognoscitivo que hay detrás de todo eso.
Si afirmo “Kripke es alto”, hablo de Kripke, y no de lo que nosotros pensamos de Kripke. Los
nombres señalan la realidad. SE trata de una teoría de la referencia directa que presupone que
hay cosas en el mundo. Podemos descubrir verdades necesarias que son verdades metafísicas,
por ejemplo, que Hésperus es Phosphorus o que el agua es H2O.
EL problema le vendría a Kripke para explicar algunos nombres propios sin referencia, como
Flogisto (a lo que responde que no es un nombre propio). Los nombres de ficción, como
Mazinger Zeta (un personaje que no existe), a lo que respondería que el lenguaje de la ficción
no nos interesa porque no habla de la realidad. También los nombres de personajes históricos.
Su posición es que si existió el personaje no hay problema con ellos, pero si no existió,
simplemente no es un nombre. Los personajes que dudamos de su existencia (Abraham o
Sócrates) de igual se aplica lo mismo, no importa lo que creamos, lo que sepamos acerca de
ellos y como lo hayamos averiguado, porque se apoya en que es una distinción entre
epistemología y metafísica. Esto significa que para Kripke la existencia no es una propiedad,
decir “Platón existe” es una manera de resumir , o decir de otra forma que “hay Platón”. No se
puede predicar la existencia de platón, pero si Platón es un nombre propio, hay ese objeto
“Platón”, y eso es siempre verdadero. “platón no existe” por tanto, sería una afirmación
imposible.
Una idea general sobre la identidad en Frege y Russell; Nuestros recursos lingüísticos más
cercanos a la realidad son los nombres, los términos singulares. El problema es que estos
recursos que intentan señalar las entidades singulares no refieren a la realidad, dependen de
lo que el hablante conoce (dependen de la carga cognoscitiva).
Siguiendo a Kripke, cuando uso un nombre refiero a la persona del mundo, no a la carga
cognoscitiva, Señalo directamente a la realidad. La relación de identidad ha de entenderse
objetualmente y así es necesaria. Los nombres (propios) no son ni esconden descripciones
des-unidas abreviadas, ni tienen sentido, sino que refieren directamente al objeto. Por tanto,
podemos descubrir verdades necesarias; cuando descubrimos que hemos nombrado 2 veces al
mismo objeto; agua=h2o.
Como los nombres propios refieren directamente a los objetos, son designadores rígidos, y lo
son en todo mundo posible.
Sobre los mundos posibles. Los mundos posibles son una aplicación teórica para la lógica
modal. En esta teoría, se enfrenta a Quine. Pretende poder defender una necesidad de RE, es
decir, desde el mundo. Se basa en la separación metafísica-epistemología, en base a esa
necesidad
Ataca la concepción metafísica de Quine rescatando una diferente. Ellos atacan la metafísica
como una investigación que trata verdades necesarias. Era atacado por tanto desde la
epistemología. ¿Cómo conocemos esas verdades y como son sobre el mundo? si el
conocimiento es de la realidad, es empírico, pero no necesario, y por tanto, no se puede
conocer a priori. Ellos defienden que solo pueden ser contingentes. Por lo tanto, pensarían al
margen de la experiencia, y sacarlas a priori no tiene sentido. Para Kripke, tanto críticos como
defensores confunden lo necesario con lo a priori (El conocimiento necesario no es lo mismo
que el conocimiento a priori).
Sobre Wittgenstein.
Una lectura de Wittgenstein sui generis. Tratará el tema de la paradoja escéptica, a través de
una paradoja que Kripke inventa sobre las teorías de Wittgenstein. Puesto que no hay
normatividad lingüística, no hay hechos sobre el significado. No podemos tener certeza de lo
que hacemos cuando conocemos el significado de algo.
La paradoja escéptica. Kripkenstein “ninguna acción-lingüística- sigue una regla” Porque toda
acción puede ser determinada por una regla. Quiere decir que no hay hechos sobre el
significado.
Esta es una solución escéptica no esperada por el escéptico. No podemos tener certeza de la
regla, pero no significa que no podamos conocer el significado al igual que podemos significar.
El nombrar y la necesidad.
1º Que los objetos idénticos son necesariamente idénticos. Esto es un enunciado metafísico.
2º Que los enunciados de identidad entre designadores rígidos si son verdaderos, son
necesarios.
3º Que los enunciados de identidad verdaderos, entre lo que llamamos nombres en el lenguaje
real, son necesarios.
1º y 2º Son tesis de la lógica filosófica. Esto es; problemas metafísicos que se pueden estudiar
mediante la ontología, por ejemplo. Surgen desde preocupaciones metafísicas que se pueden
estudiar en la lógica. 2º se sigue de 1º, y está relacionada con el metalenguaje.
Kripke señala que las tres tesis son autoevidentes. La metafísica que hay detrás son principios
independientes del lenguaje ordinario. Son los grandes presupuestos de su sistema.
Sobre la primera tesis, señala que los enunciados de identidad verdaderos de los que
llamaríamos “nombres” en el lenguaje ordinario, son necesarios.
Los nombres del lenguaje real son designadores rígidos. La teoría de las
descripciones/significados de Frege-Russel de los nombres es falsa. Argumenta, que
enunciados contingentes resultarían necesarios. Toda descripción podría ser falsa de uno y
verdadera de otro (es un argumento modal, en contextos modales, descripciones valdrían de
referencia, pero los nombres, para Kripke, no varían)
El problema lo tiene la teoría descriptivista. El contexto es el que indica quien puede ser. Algo
que Kripke piensa que es irrelevante
En contextos modales, las descripciones definidas varían de referencia. Los nombres no varían,
son designadores rígidos.
El argumento modal. Aristóteles pudo no haber sido el maestro de Alejandro Magno, las
descripciones varían su referencia. Los nombres no varían.
**diferencia de dicto-de re
“De dicto y de re son dos frases que se usan para marcar importantes distinciones en
afirmaciones intensionales, asociados con operadores intensionales en muchas afirmaciones.
Las distinciones son muy reconocidas en la filosofía del lenguaje y la metafísica.
La traducción literal de la frase "de dicto" es "de la palabra" o "sobre el lenguaje" mientras que
"de re" se traduce como "de la cosa". El significado original de estas frases en latín era útil para
entender el sentido viviente de las frases, y la distinción que ellas marcan. La distinción se
entiende mejor con ejemplos de contextos intencionales de los cuales debemos considerar
tres: un contexto de pensamiento, un contexto de deseo, y un contexto de modalidad.”
(2) (x)L(x=)
La identidad es un tipo de propiedad de las cosas, la de ser idéntico a sí mismo. Este principio
se enfrenta a la idea que la identidad sea más bien una propiedad del lenguaje :
L(x)(x=x)
Todo el nombrar y la necesidad está estructurado de t al manera que se defienda la idea que
los nombres son designadores rígidos y que la teoría de las descripciones es falsa.
Se le puede reprochar que confunde lo que se llama “rigidez de los nombres propios” con el
principio de alcance primario. Las descripciones tampoco varían de referente.
LA RESPUESTA DE KRIPKE;
“Al maestro de Alejandro le gustan los perros” Es verdadero en el mundo en que Aristóteles es
el maestro de Alejandro y se gustan los perros.
No es una cuestión de alcance, con la recurrencia a los mundos posibles vuelve a traer el
argumento la idea de que la verdad o falsedad depende de la entidad a la que designa (si en
un mundo posible, Aristóteles es el maestro de Alejandro, el enunciado será verdadero su a
Aristóteles le gustan los perros.
Para Kripke, los mundos posibles no existen en ningún sentido interesante de la noción de
existencia. Siempre que hablamos lo hacemos de lo que hay. Por eso, el dominio de los
mundos posibles puede ser menos que el nuestro, pero nunca mayor, ¿puede inventarse
nuevos términos?
Las situaciones contrafácticas. Hablemos de los que hablemos, seguimos hablando de lo que
hay. Se fundamenta en los espacios lógicos. Por ejemplo, tenemos 2 dados. Los tiramos, sale
un resultado, aunque potencialmente hay muchos más. Los mundos posibles serían los otros
34 estados posibles. Kripke no habla de mundos existentes físicamente separados, pero
conectados de alguna manera con el nuestro. Podemos pensar “¿y si hubiera salido en vez de
7, 8?” pero no sirve para anda, porque de hecho, ha salido 7.
La consecuencia es que no busca A desde una descripción de mi mundo (A= situación en la que
los dados salen 8).
Intuitivamente, una propiedad cualitativa es una propiedad intrínseca a los objetos, que puede
ser instanciada por más de un objeto y que no involucra una relación con ningún otro objeto
particular. Por ejemplo, la propiedad de ser blanco. Sin embargo, no toda propiedad cualitativa
es no relacional, porque algunas propiedades relacionales no implican una relación con un
objeto particular. Por ejemplo, la propiedad de estar sobre una mesa cualquiera.
El segundo y el tercer principio ya son menos triviales, y existe un debate sobre si son
principios verdaderos y si son necesariamente verdaderos.
Usualmente se restringe el alcance del principio de identidad de los indiscernibles a los objetos
concretos.
Tampoco existen los particulares desnudos. La estidad es una última entidad metafísica
ejemplifica las propiedades u permite que contemos las cosas, estos es: Si es F puedo entender
las rosas como conjuntos de proposiciones, por lo tanto se distinguen entre sí por su “estidad”,
pero Kripke es esencialista aristotélico; cree en la existencia de entidades. Tengo entidades
que son indiscernibles, pero que son ellas, tienen esencia.
Kripke negara esto en base a que puede haber 2 sustancias mismas, y siguen siendo entidades
distintas.
No pudo haber unicornios, el unicornio no es una clase natural, sin embargo, sobre si
podríamos descubrir que hubo unicornios, Kripke plantea en el primer enunciado, que no
podemos preguntar sobre lo que pudo haber sido y no es, se está hablando del mundo, y para
Kripke, el mundo no es contingente, en el mundo hay lo que hay u no puede haber otras cosas,
(necesidad ontológica).
En el segundo caso, sobre si podemos descubrir que existen, se trata de falta de conocimiento,
no sabíamos que existieron los unicornios y descubrimos que sí existieron m se trata de un
cambio en nuestro conocimiento del mundo, pero no del mundo.
Identidad y necesidad
TESIS
(ii) (a=b)L(a=b)
La designación rígida; El nombre propio (o nombre común ) designa a una clase natural-
relación con las sustancias segundas aristotélicas, a un fenómeno, una propiedad.
Para Russell, los nombres propios esconden o abrevian descripciones. En el mundo no hay
entidades como esencias sino conjuntos de propiedades. Kripke se enfrenta afirmando que las
cosas son las cosas, Aristóteles es Aristóteles, no se puede sustituir por ninguna descripción de
propiedades.
Dos ideas;
Pero sería también contingente. La silla podría no haber sido marrón, o no haber estado a la
izquierda de Daniel.
A priori ≠ contingente
La distinción A priori/posteriori ≠ contingente/necesario
Epistemología ≠ Metafísica/ontología.
Las expresiones a priori (en latín: previo a) y a posteriori (en latín: posterior a) se utilizan para
distinguir entre dos tipos de conocimiento: el conocimiento a priori es aquel que, en algún
sentido importante, es independiente de la experiencia; mientras que el conocimiento a
posteriori es aquel que, en algún sentido importante, depende de la experiencia.
Por ejemplo, el conocimiento de que «no todos los cisnes son blancos» es un caso de
conocimiento a posteriori, pues se requirió de la observación de cisnes negros para afirmar lo
establecido. Los juicios a posteriori se verifican recurriendo a la experiencia, son juicios
empíricos, se refieren a hechos. Tienen una validez particular y contingente. Ejemplos: «los
alumnos de filosofía son aplicados», «los ancianos son tranquilos». En cambio, el conocimiento
de que «ningún soltero es casado» no requiere de ninguna investigación para ser establecido
como verdadero, por lo que es un caso de conocimiento a priori.
Historia
Según Kant, los juicios sintéticos a priori no son posibles en la metafísica, pero sí en
las matemáticas y en la parte racional de la física. El propio Kant pone los siguientes ejemplos:
«4 + 3 = 7», «la línea recta es la distancia más corta entre dos puntos», «la cantidad de materia
del universo se mantiene invariable», «en todo movimiento acción y reacción son siempre
iguales». También los juicios sintéticos tienen que ver con la lógica; ejemplo: «suba para
arriba», «salga para afuera».”
¿Hablaba Julio Verne de los submarinos actuales? Parece que no. Es como si nombramos
Sherlock Holmes a un detective actual.
Las descripciones definidas son designadores, pero no designadores rígidos. “El padre de mi
madre” (podía haber sido otro, es contingente) la existencia es contingente, sin embargo, de
mí mismo si puedo decir que tengo la propiedad necesaria de tener los padres que tengo, de
que mis padres sean mis padres. “el padre de Laura” no es un designador rígido porque Laura
podía no haber nacido, sin embargo, “la hija mayor de Manuel” sí sería un designador rígido.
Según Donelan, las descripciones no se pueden analizar como Russell propone. “el hombre que
está ahí bebiendo Vodka es filósofo” puede ser verdadero aunque esté bebiendo agua, si ese
hombre al que nos referimos es filósofo, la oración será verdadera. Para Russell, dicha
descripción es falsa, y por tanto la proposición también.
Para Kripke, por otro lado, no, semánticamente es falta, porque la descripción no señala al
hombre que hace la proposición verdadera por ser filósofo, lo que ocurre es que hemos
entendido que nos referíamos a ese hombre, aunque no esté bebiendo vodka. Separa la
semántica de la pragmática.
Es como el caso de las afirmaciones “tener corazón “ y “tener Riñones”, son intensionalmente
distintas pero extensionalmente equivalentes.
Toma el ejemplo de la conjetura de Goldbach para demostrar que en ese caso no sabemos
nada a priori, pero si sabemos, a priori, que una verdad matemática es necesariamente
verdadera/falsa. Quizás gracias al mecanismo de la intuición.
Quine
Para Quine, como mucho la necesidad puede estar en los enunciados, de dicto. Aquellos que
defienden necesidad de re (algo que Kripke defiende) no se da cuenta que nos referimos a las
cosas de formas distintas porque da muchos problemas referirnos de varias maneras al mismo
objeto y viceversa. Pero para Kripke, el enunciado no dice nada del mundo
La lógica modal se salta el principio de término singular. No se puede sustituir “Nixon” por
“presidente del 49”, porque es un designador rígido. La lógica modal no te dice qué esencias
hay en el mundo, solo te dice que si aceptas estos enunciados y reglas entonces tienes que
aceptar estas otras realidades. Lo novedoso en Kripke es que intenta cuantificar propiedades
“de re” ; cualquier cosa necesaria es verdadera en todo mundo posible.
Quine crítica de la lógica modal que no se puede sustituir términos singulares. El principio de
sustituibilidad no funciona.
Las propiedades esenciales son lo que defendería Kripke, pero con el riesgo de ser muy vaga su
definición y de caer en un esencialismo. Estas propiedades no cambiarían nunca, aunque
cambiemos de mundo posible.
Para ser enunciado contingente el 2 tiene que decir que el número de planetas no es un
designador rígido, sino un descriptor. Son proposiciones de las cosas (contingentes).
Pone el ejemplo del metro, o que el agua hierve a 100 grados. Según Wittgenstein, no se
puede saber si el Metro mide 1 metro. Es un enunciado a priori y contingente. Lo extraño es
que sea contingente. Tiene propiedades contingentes y necesarias. Wittgenstein nos da una
regla de uso.
Cuando decimos “esta barra mide un metro” lo que hago es aprender el uso de la palabra
Metro. Es un enunciado analítico no se sabe si es necesario. No tiene sentido preguntarse su
la barra B mide un metro cuando b es la barra de tal y tal que mide el metro (definición
ostensiva).
Kripke opina que puede ser un enunciado analítico, y dice Wittgenstein que no mide un metro,
eso no es posible, has introducido una descripción definida y le has asignado cualidades
contingentes. Para Kripke, 1 metro es un designador rígido, o nombre propio, porque ha
introducido a través de una descripción definida que;
- “estoy aquí ahora” ; se a priori que estoy aquí ahora, pero podría no estar aquí ahora.
- “yo pienso” ; no tengo que mirar al mundo para saberlo. Podía no estar pensando.
Todo lo que sabemos o creemos saber sobre moisés puede ser falso, pero esto no implica que
Moisés no exista.
Necesidad de la identidad.
En Russell, fallan, son problemáticas, porque estamos tomando la cosa por la descripción. Si
tomamos “mi yate no es más grande de lo que es” ó “el escritor de Hamlet pudo no haber
escrito Hamlet” Russell lo interpreta como que la cosa que sea el autor de Hamlet podría
haberlo no escrito. Esto es lo que Kripke utiliza para el caso. “El primer director de correos de
estados unidos es el inventor de las lentes bifocales” Para Kripke es un enunciado de identidad
necesario, pues ambos son Benjamín Franklin, y lo hace verdadero.
Quine pretende eliminar términos singulares. Siempre tenemos descripciones de algo para
hablar de ello. No hay entidad sin identidad; No hay ningún cicerón que si no tengo una
descripción .
Hay un descubrimiento empírico que permite relacionar esos nombres; podíamos haber
descubierto que no hay tal relación. Por lo tanto, los enunciados son contingentes.
Es lo opuesto a Kripke; Cicerón es tulio, una identidad que para Quine es contingente, depende
de un descubrimiento empírico, para Kripke es un enunciado necesario, por la distinción
Epistemología/metafísica.
Para Russell, Hay una entidad última a la que referimos con los términos lógicos (“a” o “b”) .
No son nombres lógicamente propios, sino abreviaturas de descripciones definidas. Remite al
caso de identidad entre descripciones
En Kripke encontramos que no son términos generales genuinos, los nombres propios son
lógicamente propios. Benjamín Franklin es un designador rígido, mientras que el inventor de
los bifocales no lo es. La crítica que se presenta es
a) Otro lenguaje (3 podía haber sido 5); no es una crítica, porque no es relevante.
b)¿ Se sigue la existencia por necesidad? No, podemos fijar en un mundo posible esa entidad
no existe, pero tenemos que hablar desde nuestro mundo.
Kripke vs. Quine, podemos imaginar que phosphorus no es hésperus, pero de hecho, lo son.
Si entendemos que la identidad es una propiedad, solo se puede predicar de lo que hay, los
objetos que no existen no son idénticos a sí mismos. Podemos imaginar que descubrimos que
el agua no es H2O, imaginamos el XYZ, pero no podemos descubrir que el agua no es H2O.
H2O es para Kripke un designador rígido, no un conjunto de propiedades del agua.
a) Para Quine, serían dos nombres de la misma cosa, sería la identidad entre nombres, el
metalenguaje. Quine habla de los descubrimientos (como que Hésperus es phosphorus), que al
poder ser de otra manera, son contingentes (pueden ser falsos). Que cicerón sea Tulio también
es contingente.
Que no haya entidad sin identidad significa que esa identidad nos da las propiedades (criterios
epistemológicos en términos de identificación).
Todas las descripciones definidas son términos singulares en contra de la lógica modal- Para
Kripke, las entidades no son conjuntos de descripciones. En lógica modal, el número de
planetas podría haber sido otro, o es otro en un mundo posible. Pero “9” sí es un designador
rígido, ser el número de planetas es una propiedad contingente del número 9, mientras que
ser 7+2 es necesaria o esencial de 9.
P.E. una botella no sería ella misma sin sus propiedades esenciales, pero la entidad, esa botella
no es la lista/conjunto de esas propiedades esenciales. Entonces queda una sustancia, a lo
aristotélico.
El origen de las cosas es necesario, pero puedes ir cambiando tu sustrato material (renuevas
las células diariamente, pero tus padres sin tus padres).
No vamos buscando propiedades en mundos posibles, sino entidades (Lewis)
b)Para Russell los nombres propios son abreviaciones de descripciones definidas. En Kripke,
podemos entenderlo con distintas “etiquetas” la identidad está en un plano ontológico, más
allá de la discusión nominalista.
La oración es informativa a demás. Sólo descubrimos que H es P, y nada más, no que el lucero
de la tarde sea el mismo que el lucero de la mañana, porque son descripciones, no
designadores rígidos.
Distintos sistemas
Crítica de Quine
Algo de semántica
Cum modo. Según el modo en que se afirman puede o no ser el caso (posiblemente,
necesariamente, imposiblemente)
Lógica modal.
LP y su negación ¬LP
L significa necesario
Igualmente
(2) está mal- confunde posibilidad con contingencia Debería ser QpQ¬p
(S5) MALMA
Los contextos modales, entre otros, son referentes opacos, donde se pierde la entidad de la
que hablo. No podemos sustituir sin afectar el valor de verdad de las fórmulas. Falla la
generalización existencial y la sustitución
Los contextos modales no son extensionales sino intensionales (extensional; depende de los
valores de verdad de sus componentes. Intensional; de una expresión compuesta no depende
el valor de verdad de sus componentes) EL valor de verdad de una expresión compuesta (Mp)
no queda determinad por el valor de verdad de sus proposiciones (Mp compatible con p=V y
p=F; Cp puede ser F aunque b=V)
Lago puede ser meramente posible sin ser el caso , distinguiendo posible de contingente.
Kripke utiliza la teoría de los modelos para haciendo semántica construir verdades desde
verdades.
La teoría de modelos sirve para ello, busca estructuras modelo <K,R,m0,[conjunto vacío]>
R= Relación que hace una proposición en el mundo sea verdadera u permite compararlo con el
nuestro.
La Fórmula de Barcan.
En la primera parte. Todo lo que hay tiene la propiedad P, es Py , y esto es así
necesariamente.
En la segunda parte. Esto está incluyendo el ámbito de lo posible, lo que no es , pero podría
haber sido. Y lo que no es, pero podría haber sido, no tiene por qué ser necesariamente P, si el
antecedente es que todo lo que hay es p.
EL presupuesto que Kripke critica a Barcan es que el dominio de los mundos posibles sea
mayor que el real.
El predicado de existencia
La existencia no es una propiedad, según Kant, no añade nada a lo que las cosas son.
¿Qué es existir?
Russell está del lado de Kant; existir es ejemplificar propiedades, los nombres propios son
abreviaturas del conjunto de propiedades.
Dos planos
Metafísico(ontológico)/Epistemológico
Enunciados de ficción.
Para Russel ambos son falsos. Sin embargo, para Kripke, como Sherlock Holmes es un
personaje de ficción, y no existe, no puede ser ni verdadero ni falso, aunque hablemos de él
como un personaje real, como su fuesen proposiciones. Son enunciados que tiene significado,
porque los entendemos. La entidad inventada es un personaje de ficción. Después se puede
hablar de ello.
Holmes fue creado por Doyle es un enunciado que refiere elípticamente. En el sentido que
refiere Holmes en el mundo real es en el que C. Doyle lo creó.
¿Existen las entidades de ficción? Según Kripke no, pero hacemos como si existiesen.
Entendemos enunciados fingiendo que son proposiciones.
Sherlock Holmes es un personaje de ficción, sin embargo, como nombre propio, refiere de
manera externa a esa entidad de ficción creada por Doyle.
¿Qué propiedades tiene?
Estas son proposiciones con valor de verdad. Demuestran que podemos referirnos con
enunciados contrafácticas a ella.
Lo que no podemos decir es “Holmes (entidad abstracta) fuma en pipa”. Sólo podíamos
decirlo elípticamente.
Clave de Kripke;
Primero el mundo, y luego el lenguaje; la ontología es algo común a todos, es lo que hay ,
pensemos lo que pensemos y digamos lo que digamos.
Existir es estar en el mundo real (sólo hay una manera de existir); Tener entidad, ser una
referencia.
Parece que expresan una proposición, pero en este caso, como los unicornios no existen, 2 es
V y 1 es F, y lo que significa 1 es que rechazamos que la proposición que hay sea verdadero, y
en 2 que rechazamos la proposición que hay unicornios.
Meinong; no puedo decir “los unicornios no existen” porque al referirme a “los unicornios”
para decir que no existen, me tengo que estar refiriendo a algo.
Russel, sí podemos decir que los unicornios existen, porque esto significa que no hay nada que
ejemplifique el conjunto de propiedades que entendemos tienen los unicornios.
Para Kripke; lo verdadero y falso no son las proposiciones, sino los enunciados (es
tarskiano/fregeano)
Ni (1) ni (2) son proposiciones, pues unicornio es un nombre de ficción, no son pues ni
verdaderos ni falsos. Sólo si fingimos que existen, podemos decir dentro de un contexto que
existen, Aunque parece que estamos predispuestos a decir que en el mundo (2) es verdadera.
Solución final. “los unicornios existen” es falsa , significa que rechazamos la proposición “hay
unicornios” eliminamos nuestro compromiso con la existencia de la proposición “hay
unicornios”.
No olvidemos que puede haber una persona que cumpla las características de Sherlock
Holmes, incluso llamarse igual, pero no es Sherlock Holmes, porque es un personaje de ficción.
Nuestra intuición va en contra de Kripke cuando piensa que Moisés existe, puede existir, con
independencia de todo lo que sabemos o creemos de él.
Enunciados de ficción.
Ningún nombre tiene significado, pero además, para Kripke, los nombres de ficción no tiene
tampoco referente. Lo que se dice, por ejemplo, de Lolita en la obra de Nabokov, no se refiere
a nadie (todo es ficción, aunque la pretensión del autor sea la de hacer una crítica)
El que los nombres refieran es un hecho absoluto; no es nuestra intención de referir lo que
cuenta, sino el lenguaje. Hay una cierta autonomía del lenguaje. Kripke se salta toda la
pragmática del lenguaje; da igual lo que hagamos con el lenguaje, Napoleón refiere a
Napoleón independientemente de lo que creamos y sepamos o no de él si hay una serie causal
que nos conecte o nos lleve a esa entidad napoleón. La pragmática sólo interesa para analizar
si esa cadena se ha roto o no.
Por otro lado, no siguen una lógica libre para el contexto de ficción, en ellos hacemos como si
los enunciados fueran proposiciones, por lo que podemos aplicar la lógica formal de mundo
sobre ellos.
Pero Kripke no está de acuerdo con esto. Los personajes de ficción-ficción (personajes ficticios
que inventan los personajes de una ficción, ¿qué son?¿entidades mentales en la cabeza de
Hamlet?¿Entidades doblemente mentales?
El Frege de Kripke
1. Creencias
2. Indéxicos temporales
3. Yo
Kripke se defiende de las críticas en torno a su interpretación de Frege. El fin último de Kripke
es demostrar que de Frege y Russel está más cerca de lo que parecen en lo que refiere a sus
posiciones acerca del sentido y las teorías descriptivistas. Busca responder a la pregunta ¿qué
es el sentido en Frege?
El sentido fregeano sería muy similar a las propiedades de las descripciones russellianas.
Los enunciados de identidad; Diego de la Vega y el Zorro son el mismo aporta información
porque tiene distintos sentidos y tiene la misma referencia.
Para Kripke el sentido fregeano es lo que lleva a la referencia: el modo de darse el referente, el
aspecto epistemológico de la teoría, la regla de cómo de da.
Nombres propios implican términos singulares. Varios nombres pueden tener la misma
referencia aunque cada uno tenga su sentido propio.
El sentido es el modo de darse del referente al sujeto. Lo que nos lleva a la referencia (Kripke)
2. Enunciados de creencia
Ana cree que va a llover a partir de “que” no tiene el mismo sentido la oración. Cambia su
referencia. El sentido es el pensamiento expresado por la oración.
Copérnico creía que las órbitas planetarias eran circulares. La referencia es el sentid de “las
órbitas planetarias eran circulares”.
Sentido indirecto; Nombrarse a sí mismo gracias al conocimiento directo del referente (que es
el sentido de “las órbitas…”) .
Si nos preguntamos por el sentido de los indéxicos temporales y “yo”, la referencia la posee el
contexto
Los indéxicos tienen sentido incompleto sin contexto. Nombrarse a sí mismo gracias al
conocimiento directo del referente.
La referencia de “las órbitas” es un/su sentido: es en lo que Copérnico cree. Luego hay otro
sentido, este es el sentido indirecto, de “las órbitas”, pero hay que preguntarse cual es este.
La crítica que le dedica Davidson es que a través de esto, solo llegaríamos a un regreso al
infinito; “Frege cree que Copérnico cree que las órbitas…”
Dummett sostiene que Copérnico creía el sentido de la expresión “las órbitas de los plañeras
eran circulares. Pero para Kripke esto no sirve, pues comprenderíamos son comprender, no es
un sentido cualquiera, no vale que Copérnico creía tal y tal, porque entendemos lo que creía,
el sentido debe ser revelador, y un sentido sólo es revelador si está conectado con la
referencia.
α Contexto de cita directa donde el sentido, de acuerdo con el directo, es que las palabras
refieren a sí mismas, y
β Contexto de cita indirecta, donde el sentido indirecto indica que las palabras refieren a sus
sentidos.
Ej.
Algo es el caso.
Referencia; lo verdadero o lo falso, dependiendo de si algo es o no es el caso.
Sentido; El significado que expresa este enunciado (que algo es el caso).
José dice que algo es el caso.
Referencia: el sentido de “algo es el caso”
Sentido; no se sabe, pero siguiendo a Kripke, que las palabras refieran a su propio sentido, un
sentido indirecto.
José dice “algo es el caso”
Referencia; las propias palabras
Sentido; indirecto, que las propias palabras se refieren a sí mismas.
Para Kaplan, Sobre los contextos de cita directa (el sentido indirecto, entrecomillado) las
palabras refieren a sí misma; “planeta” refiere a sí misma Pero entendido como tipo, no como
ejemplar. Nunca podremos decir la misma palabra cuando digo “Juan dijo “casa”” esa “casa”
es otro nuevo ejemplar del tipo “casa” al igual que la que dio Juan.
Diferencia
Type/Token
Tipo/ejemplar
Si esto es así, a Kripke le vale la interpretación que realiza Kaplan, pero hay una cita de Frege
en la que parece estar hablando del Token, y esto es un problema para kaplan, Kripke y Frege.
Contextos de cita indirecta; sentido indirecto. Las palabras refieren a los sentidos (B)
Para Kripke, la cita directa no tiene misterio, porque accedemos a la referencia (las palabras)
pero ¿cómo accedemos a la referencia de las citas indirectas? la respuesta que dan es
mediante B
Según Bunge, el significado lingüístico se opone al sentido en Frege. Los indéxicos como Hoy
llueve en granada se convierten en distintas proposiciones dependiendo del día que se diga.
Tiene un significado lingüístico independiente y con anterioridad a ser verdadero o falso.
Frege tiene que distinguir significado lingüístico y sentido. Para Frege hay proposiciones
distintas, porque aunque sea el mismo enunciado, hay referencia distinta, y referencia distinta
señala proposiciones distintas.
Para Kripke, esto no es lo que dice Frege, es una distinción que no está presente en Frege, y
que es independiente de Bunge. Frege no habla de significado lingüístico, la oración (1) es
incompleta; “hoy lleve en granada”, mientras no incluya el tiempo en que se emitió, no es una
proposición, “Hoy” designa según Kripke, en sentido fregeano es designarse a sí mismo,
designa “hoy”
Por tanto, las expresiones “hoy llueve en granada” dicho el miércoles, y “le miércoles llovió en
granada” son proposiciones distintas (con la misma referencia) según el Frege de Kripke. NO
dicen lo mismo, porque siguen distintos modos de especificar el mismo referente. La idea es
que mucha gente piensa que sí son la misma proposición, y Frege, según Kripke, no distingue
entre significado lingüístico y proposición
La opinión de Kripke;
Los indéxicos son designadores rígidos, y como tales, carecen de sentido sin el contexto en el
que designan/refieren.
Los enunciados de creencia refieren al sentido. Remiten a una proposición (que sería en la que
la persona cree) pero no es un elemento o entidad mental.
Davidson frente a esto esgrime un argumento epistemológico; si eso fuese así, (la regresión)
no podríamos aprender las lenguas extranjeras. La respuesta de Kripke es que el sentido
indirecto debe ser revelador.
Indéxico Temporal; Hoy llueve. La referencia cambia. El sentido depende del contexto.
Por tanto, la intuición de Kripke es que como el sentido de algo siempre nos lleva a la
referencia, y aquí la referencia es el sentido de α, el sentido indirecto sería el de llevarnos a sí
mismo por el conocimiento directo del referente. α no presenta misterio porque accedemos a
la referencia (las palabras) y en las citas indirectas mediante β se accede a esa referencia, por
tanto, no hay ningún misterio.
El problema; no podemos creer que Xantipa tiene creencias contradictorias. No quiere negar
que Platón sea Aristocles.
¿Hay contextos de creencia donde Aristocles no es Platón? Esto quiere decir que no se puede
sustituir porque cambia su valor de verdad en contextos proposicionales. No son sustituibles
en términos correferenciales.
Es la solución habitual; los términos correferenciales no son sustituibles salva veritate, en
contestos proposicionales (creencia, concomimiento, deseo)
Platón es Aristocles
La solución que propone es que tienen mismo sentido pero distinto referente. Refiere al
sentido de la proposición, no a su valor de verdad. Platón refiere al modo en que se da para
Xantipa. Hay dos modos de darse la referencia. Distinto sentido.
Tenemos dos maneras de hablar de la misma cosa, por ello, que Platón sea fuerte es
informativo.
Pero Kripke no acepta esa solución, afirma que los nombres propios refieren directamente al
referente, no a conjuntos de descripciones.
4) Un puzle es un puzle.
Soluciones:
El puzle es un puzle;
El problema surge cuando se aplican los principios de traducción y dentro de la misma lengua
EL puzle surge siempre en contextos proposicionales, donde de quien decimos eso desconoce
el enunciado de identidad verdadero
Tenemos que afirmar que Pierre cree que Londres es jolie y que London isn´t beauty.
La solución de Frege-Russel:
Para Kripke sin embargo, estaríamos hablando del mismo Londres todo el tiempo.
London es diferente de Londres. Cambiaríamos los criterios de traducción. Pero Habría que
mantener los nombres propios para no perder el sentido, se produciría una ensalada de
palabras. Los nombres propios para Kripke refieren rígidamente. Habría que aplicar este
principio de traducción a muchas cosas, por ejemplo, las clases naturales.
Cambiar criterios de traducción no resuelve la paradoja, sino que añade más problemas de los
que resuelve. Paderewsky es otro caso. Pierre no sabe que Paderewsky es Paderewsky. Se
debe aceptar una contradicción aquí, pero no lo hace.
Wittgenstein plantea una paradoja escéptica con una respuesta escéptica porque acepta los
presupuestos de la paradoja – cae en solipsismo.
El problema ¿cómo conocemos las otras mentes (que las hay)? y no tanto cómo conocemos a
los otros “yo”.
Nosotros creamos y aceptamos nuestra vida mental y a partir de ahí lo aplicamos a los otros,
algo que según el solipsismo es imposible.
Primera respuesta;
El yo no es una entidad metafísica, sino gramatical; El “yo” es mi mente.
Segunda respuesta;
El otro (las otras mentes) es mi respuesta lingüística conductual ante “él”. Una actitud, no una
creencia ni una extrapolación gramática.
Miramos a la adscripción de los estados mentales para ver qué papel juegan en nuestra vida.
EL solipsismo niega hechos sobre los demás. Para Wittgenstein no hay ningún tipo de hecho,
no hay estados mentales, no entra el en problema del solipsista. Lo que Wittgenstein acepta es
que no se puede interpretar la vida mental de los otros a partir de la nuestra propia, puesto
que no puedo imaginar la vida mental de los otros, tampoco puedo conocer su yo.
Qué es el dolor.
Dolor es el significado de dolor. Toda nuestra expresión y conducta de dolor es lo mismo que
la expresión verbal. Nunca llega a decir que no haya sensaciones internas, en el sentido
metafísico, pero parece que es lo que se refiere. Dolerte es decir “me duele”
Sensaciones privadas
Sólo los otros pueden saber o no si tengo dolor; no es que yo lo sepa, simplemente lo tengo.
Saber que tengo dolor es igual que tener dolor.
Wittgenstein acepta que hay una sensación interna, pero en otros fragmentos parece decir
que no la hay, la cosa es que el yo que está sintiendo no forma parte del lenguaje. Solo yo
puedo saber que si me duele es falso; los demás también pueden saberlo.
Para Kripke no es una proposición empírica, sino gramatical; depende de tal y como usemos
“yo”. No podemos decir que dudamos o sabes si nos duele. Yo nunca me conozco.
¿Podemos preguntarnos; a) si se que a los demás les duele y b) pueden los demás saber que a
mí me duele? Para Kripke y la tradición sí.
Para Kripke, detrás de esto está Hume (haz de percepciones); no hay indicios de un yo a partir
de mis emociones/sensaciones.
Wittgenstein es Kantiano, todo lo que uno dice de Wittgenstein puede ser compatible con una
lectura Kantiana. Yo atribuyo dolor, sensación a otro porque hay un yo trascendental en ellos.
Kant; Me conozco como yo empírico, como fenómeno, Sé que veo algom siento dolor, pienso;
,i yo trascendental nomuménico , al que nunca tenemos acceso,, es condición de posibilidad e
mis experiencias, no parte de ellas. LA lectura Kantiana de Wittgenstein, (el ojo no se ve en el
campo de visión) atribuimos emociones, sensaciones, pensamientos, etc. Su yo trascendental
no es parte de mi atribución de experiencia, pero es condición de posibilidad de mi atribución
de experiencia (yo fuera del lenguaje) el yo es el límite. Porque atribuyo sensaciones, me
compadezco, hay otro yo, no porque crea que hay otra mente, atribuyo un yo, sino al revés.
Sólo puedo conocerme como yo empírico (apercibiéndome de fenómenos) sé que hay un yo-
nomadico, pero no tengo acceso a él.
No somos conjuntos de estados mentales, es compatible con un yo en los límites del lenguaje.
Es parte de mi atribución de experiencia, me compadezco.
Malcom opina que desde que conocemos el propio caso del dolor podemos aplicarlo a otros
cuerpos.
*Kripke intenta demostrar que hay un problema escéptico que Wittgenstein intenta resolver
todo el tiempo.
Malcom opina que si aprendo el dolor de una sensación propia es imposible proyectando a
otros porque sería una contradicción. El dolor es esencialmente mío; Algo que yo siento.
Forma parte del que siento al ser mío, no puedo entender el dolor de otro. Para Kripke , esta
postura está equivocada.
253- comentado por Malcom. Que se mi dolor no influye, el ser mío ya no es algo esencial de
mi dolor. CONTRA EL SOLIPSISMO: No podemos hablar de “Mis “o “tus” dolores. No habría
dueño, es una realidad pública.
¿Puedo sentir mi dolor? Puedo sentir dolor en la medida en que otros pueden decir “te duele”
Uno puede aceptar que el dolor es necesariamente mío, pero imaginar cosas metafísicamente
imposibles, como que una piedra u otro sienta dolor.
281.282. ¿no hay conducta de dolor? en la medida en que asuma que algo es como un ser
humano, le atribuimos estados mentales.
Si puede hablar, comunicar, podemos entiende. Los entendemos más que ser seres humanos
por ser personas, entes responsables (moral y legalmente), en algún sentido, de lo que hacen.
Esta sería una lectura más continental, desde la posición analítica, la lectura es más humeana.
Sellars y Kripke entre otros opinan que el yo concebido socialmente, no hay un yo en la medida
que nos relacionan como yo, pero ese yo puede ser construido, no existe por debajo de esto.
Para Wittgenstein, el yo es público, pero no es lo que se dice.
282. Wittgenstein no aceptaría la teoría Kripkeana de la referencia, porque para él decir que
alguien tiene dolor, no es señalar con el lenguaje un estado mental, sino entrar en los mismos
juegos lingüísticos. Tener dolor no es estimulación de las fibras z, aunque sea la explicación
empírica.
350. Para las sensaciones/ estados mentales, los caso azul/silla/dolor, son diferentes a la hora
de resolver. Para Kripke, el problema del dolor va más allá del problema de cómo seguir una
regla.
En la tradición, el problema conceptual es qué tiene mente, Kripke pregunta qué es el yo sobre
la persona ser-yo.
Para Descartes, puedo dudar de todo menos de mi mente, de mi yo. Hume, sin embargo,
apoya que no hay un yo más allá de un haz de percepciones. No hay una mente que percibe,
sino que se percibe directamente. Mientras que para Descartes no puedo dudar de mi
existencia, para Hume no tengo una manera de acceder a mi yo.
Que no perciba mi yo no puedo significa que no exista, es una tesis que sostiene Kant, y que
trae a colación Kripke. En Wittgenstein, el yo no es solipsista, pero Kripke entresaca lo más
humeano de Wittgenstein.
Kripke intenta hacer de Wittgenstein un escéptico para poder enfrentarse a él. Pero su
semántica no tiene nada que ver con la de Kripke.
Plantea la paradoja escéptica; es imposible imaginar la vida mental de otros desde la idea de la
nuestra propia, no tiene sentido adscribir sensaciones a otros, al menos en el sentido en que
nos las adscribimos nosotros mismos. Su respuesta es que abandonemos el intento de
preguntar qué es un “yo” miremos en cambio el papel de las adscripciones de estados
mentales juegan en nuestra vida.
Aceptemos que puesto que no puedo imaginar la vida mental de otros, no conozco su “yo”
“El mundo tal como lo encontré” sería una expresión kripkeana de Wittgenstein a través de la
noción humeana de Yo. Kripke dice que en Wittgenstein no hay un yo, el problema de
extrapolar sensaciones a otros porque no hay un yo ni un mundo.
No hay un yo desde el que entender el dolor de una silla. Wittgenstein dice que puedes
entender el convertirte en piedra y seguir sintiendo dolor. Lo que no puedes saber es el dolor
de otro, porque a lo más que llego es a sentir mi dolor.
Pero de esto no se sigue que no hay un yo, solo dice Wittgenstein que no se encuentra el yo en
el mundo de los hechos ni ene los demás.
¿Qué hay en el mundo según Wittgenstein? Las consideraciones lógicas no pueden decírnoslo.
La ciencia tampoco, porque muestra lo contingente. La sustancia del mundo se muestra en el
lenguaje. En las proposiciones simples se refiere a objetos del mundo. Yo- usuario del
lenguaje=límite del lenguaje, determina el mundo, pone el limite al mundo con su nombrar. El
“sujeto metafísico” determina el mundo.
El examen sorpresa.
La paradoja;
El profesor anuncia que la semana siguiente hay examen sorpresa. No puede ser viernes
porque el día de antes, jueves, ya lo sabría
Cualquier día es sorpresa a partir del día del anuncio, pero todos los días de la semana sabes
que el viernes no es un examen sorpresa.
Para Quine, el razonamiento falla porque los alumnos nunca saben cuándo es el examen. Si los
alumnos están dispuestos a concluir que no haya examen, pueden también tener en cuenta
esa posibilidad todo el tiempo, y nunca saben si tienen examen o no.
Kripke responde a Quine, diciendo que se equivoca. Nunca se sabe cuándo va a haber examen
sorpresa. No puedo concluir que habrá examen sorpresa. Pero para Kripke sí se puede saber,
sé que si llega el jueves y no ha habido examen puede haberlo el Viernes.
¿Qué falla? Los alumnos no pueden hacer el mismo razonamiento todos los días. El jueves lo
sabrán. Para Kripke los alumnos pueden dejar de saber. El jueves no saben lo que sabían el
lunes.