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Partes: Ramírez Robledo, Leonel c/ Fisco de Chile | Falta de servicio - Recurso de casación
Fecha: 29-oct-2013
Producto: MJ
Doctrina:
1.- Se acoge el recurso de casación en el fondo deducido, toda vez que la sentencia
impugnada ha incurrido en error de derecho al aplicar las normas que regulan la falta de
servicio, a saber el artículo 2314 del Código Civil, a una situación que conforme a los hechos
de la causa no corresponde, y ello conduce a acoger el recurso en estudio sin que sea
necesario analizar los demás capítulos de casación, por innecesario.
2.- El desnivel era sólo de algunos centímetros y no se encontraba en la pista sino -según se
acreditó- en la orilla y en la zona de relevos, por lo que cabe también presumir que la pista por
donde se realizaría la carrera no tenía desniveles, es decir estaba apta para el desarrollo de la
competencia, tanto es así que el actor no cayó en la pista sino que fuera de ella y tampoco se
dio por establecido que algún otro de los corredores sufriera alguna caída en la pista o incluso
fuera de ella.
3.- Teniendo en cuenta que el legislador ha dado al juez únicamente orientaciones generales
del estándar de la persona prudente, diligente y razonable y que corresponde entonces a aquél
realizar una tarea eminentemente normativa al describir la regla de conducta que el
demandado debió observar en la situación, debe considerarse que de la persona diligente se
espera que minimice pero que no elimine por completo el riesgo, de ello se puede colegir que
no era previsible que los corredores se desviaran hasta ese lugar y aun en ese evento, ese
pequeño desnivel no hacía presagiar que uno de los participantes tropezara y cayera en ese
sitio.
4.- Hacer responsable a la Fuera Aérea por un desnivel que estaba fuera de la pista de carrera,
significaría enervar cualquier iniciativa deportiva que por sí conlleva un porcentaje de riesgo,
debiéndose considerar que la determinación de la diligencia supone valorar los intereses en
juego atendiendo a su relevancia y al modo en que condicionan la concreción de otros
intereses.
7.- La obligación de otorgar seguridad en el trabajo, bajo todos sus respectos, es una de las
manifestaciones concretas del deber general de protección del empleador; su cabal
cumplimiento es de una trascendencia superior a la de una simple obligación de una de las
partes en un negocio jurídico, pues ella mira a la prevención de los riesgos profesionales, lo
que importa a sus trabajadores, a sus familias y a la sociedad toda, tanto para proteger la vida
y salud de los trabajadores, como por razones éticas y sociales. (Del voto de disidencia del
Ministro señor Carreño)
Vistos:
En estos autos Rol N° 3-2013 caratulados "Ramírez Robledo Leonel con Fisco de Chile" sobre
indemnización de perjuicios, la demandada dedujo recurso de casación en el fondo en contra
de la sentencia de la Corte de Apelaciones de Iquique que confirmó la de primera instancia que
acogió la demanda deducida por el actor y condenó al Fisco de Chile a pagar $40.000.000
como indemnización por el daño moral sufrido a causa de un accidente ocurrido en el interior
de un recinto de la Fuerza Aérea de Chile en la ciudad de Iquique.
Considerando:
Primero: Que el Consejo de Defensa del Estado ha sostenido que la sentencia impugnada ha
incurrido en sendos errores de derecho que ameritan su invalidación y que agrupa en dos
capítulos.
Por el primer capítulo de casación se denuncia la infracción, por una errada calificación
jurídica, de la falta de servicio y la vulneración del artículo 2314 del Código Civil al
establecerla.En efecto, aduce que para que se configure la falta de servicio debe establecerse
un actuar negligente o un mal funcionamiento o un funcionamiento tardío que sea de una
entidad tal que provoque daño a los administrados por esa actuación, o por el no
funcionamiento en los términos que legalmente le correspondía funcionar a dicho órgano o
servicio, lo que en la especie no ocurrió. Refiere que la sentencia estableció la existencia de la
falta de servicio por un desnivel de algunos centímetros en la orilla de la pista en la zona de
relevo donde se produjo la caída violenta del actor que le ocasionó lesiones; sin embargo -
expone- la Fuerza Aérea de Chile tomó todos los resguardos al organizar la corrida atlética en
una pista plana por la que debió transitar el actor, y en consecuencia, la existencia de un
desnivel en la orilla de la pista por la que no debía desplazarse no puede ser constitutiva de
falta de servicio. Argumenta que los hechos establecidos en la sentencia no constituyen falta
de servicio, sin que se hayan incumplido los deberes de cuidado de la Fuerza Aérea de Chile
respecto de su personal porque proporcionó a éste una pista de carrera idónea donde organizó,
desarrolló y ejecutó debidamente la competencia y el desnivel en que cayó un único atleta se
encontraba al borde de la pista, por donde no se debía transitar ni formaba parte de la misma,
lo que demuestra que dicha institución tomó todos los resguardos que la actividad deportiva
ameritaba dentro de lo que era posible exigírsele.
Tercero: Que son hechos de la causa fijados por los jueces de la instancia, los siguientes:
a) que el 19 de julio del año 2007 el actor, entonces suboficial de la Fuerza Aérea de Chile,
participó en una carrera atlética consistente en una posta al interior de la Base Aérea Los
Cóndores de Iquique.
c) Se determinó el retiro del suboficial jubilándosele en primera categoría. El actor quedó con
secuela física al perder movilidad y fuerza en uno de los brazos. (Considerando octavo
sentencia de primera instancia).
d) Que el demandante cayó precisamente en una unión entre el asfalto y la calle de rodaje
llamada "foxtrot" en donde hay un desnivel. El deportista tropezó en ese desnivel lo cual le
provocó la caída, justo en el momento del relevo de la posta (motivo séptimo, fallo de primera
instancia). Ese desnivel de algunos centímetros se encontraba justo a la orilla de la pista, en la
zona de relevo y que tal circunstancia fue la causa de la caída. (Motivo duodécimo del fallo de
primer grado).
e) Que la participación del actor en la carrera no era opcional porque el actor obedecía
órdenes. (Motivo duodécimo del fallo de primer grado).
Quinto: Que en el primer capítulo de casación se cuestiona por el Consejo de Defensa del
Estado la existencia de falta de servicio, circunstancia que obliga a determinar si conforme a
los hechos establecidos en la causa puede imputarse a la parte demandada el haber incurrido
en ella.
Séptimo: Que acierta el recurrente en cuanto refiere que el artículo 42 de la Ley N° 18.575 no
regula este caso, ya que por disposición del artículo 21 de esa ley se excluye la aplicación del
título II sobre normas especiales, donde se ubica el artículo 42, a la Contraloría General de la
República, al Banco Central, a las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad, a las
Municipalidades, al Consejo Nacional de Televisión y a las empresas públicas creadas por ley,
de lo que se extrae que el sistema que regula a dichas instituciones y en el caso particular a
las Fuerzas Armadas, es el derecho común, criterio que por lo demás ha establecido
expresamente esta Corte, entre otros, en los autos Rol N° 371-2008, caratulados "Seguel con
Fisco de Chile", donde se sostuvo que para arribar a esa conclusión se tiene presente que
precisamente el desarrollo del derecho administrativo, allí donde ha ocurrido, ha sido a partir de
la distinta interpretación de las normas de derecho común para el Estado y para las relaciones
entre los particulares, permitiendo de estaforma la conciliación de la actuación estatal, dotada
de imperio público, como guardiana del interés colectivo, con la protección de los derechos de
los ciudadanos, de tal suerte que cabe aceptar la aplicación en nuestro país a partir del artículo
2314 del Código Civil de la noción de falta de servicio (considerando décimo quinto). Al
fundarse la noción de falta de servicio a partir de los artículos 2314 y siguientes del Código
Civil, debe reconocerse, entonces, que el criterio general de atribución de responsabilidad es la
culpa (en este caso del servicio), que constituye el fundamento general y supletorio en el
sistema de responsabilidad civil consagrado en el código del ramo, no existiendo diferencias
sustanciales entre la falta de servicio (del derecho público) y la culpa (del derecho civil), en
cuanto a la apreciación del criterio de atribución, desde que ambos suponen un
comportamiento que se aprecia objetivamente sobre un modelo estándar. De esta manera,
como también se indica en la sentencia citada, las personas jurídicas son capaces de culpa,
aunque carezcan de voluntad propia, porque la culpa civil no requiere voluntad ni siquiera
discernimiento, no es necesariamente una culpa moral; es suficiente con comportarse de
manera distinta a la que previsiblemente habría observado en parecidas circunstancias un
individuo cuidadoso. De acuerdo con este razonamiento y ampliándolo, puede no exigirse para
la responsabilidad de la persona jurídica Estado la culpa o dolo de sus órganos o
representantes; basta con que el comportamiento del servicio público fuera distinto al que
debiera considerarse su comportamiento normal; o sea basta con probar una falta de servicio
(considerando décimo quinto).
Respecto del primer requisito es útil tener presente que en su dimensión material se presenta
en un comportamiento positivo (la acción) o negativo (la omisión). Como lo sostiene la doctrina
"por regla general, los daños relevantes para el derecho son los producidos a consecuencia de
una acción, pues el comportamiento puramente negativo, la pura omisión, está sujeto a
requisitos particularmente exigentes para dar lugar a la responsabilidad: se requiere la
existencia de un deber especial de actuar en beneficio de otro".
"El deber concreto de cuidado sólo puede ser determinado sobre la base del contexto de la
conducta (lugar, medios, riesgos, costos, naturaleza de la actividad emprendida, derechos e
intereses en juego); en general, de todas las circunstancia externas que se pueden esperar
que sean tomadas en consideración por una persona razonable y diligente. La diferencia entre
una acción negligente (por la cual se responde) y un mero riesgo de la vida (que debe ser
soportado por aquél en quien recae el daño) reside a menudo en esas circunstancias".
(Enrique Barros Bourie, Tratado de Responsabilidad Extracontractual, Ed. Jurídica 2010,
página 61-62 y 86).
Noveno:Que junto con establecer que el demandante cayó precisamente en una unión entre el
asfalto y la calle de rodaje llamada "foxtrot" en donde hay un desnivel que le provocó la caída,
justo en el momento del relevo de la posta, se determinó que ese desnivel de algunos
centímetros se situaba a la orilla de la pista, en la zona de relevo y que tal circunstancia fue la
causa de la caída, de lo cual concluyó que era exigible a la Fuerza Aérea de Chile -
organizadora de dicho evento- velar por un buen estado de la pista de carrera, con miras a la
seguridad de los atletas; respecto de lo cual refiere que era esperable una pista llana, sin
desniveles, para lo cual debió instalar "vallas papales" u otros elementos que sirvieran para
delimitar el terreno evitando que los participantes se desviaran de la pista de carrera.
Teniendo en cuenta que el legislador ha dado al juez únicamente orientaciones generales del
estándar de la persona prudente, diligente y razonable y que corresponde entonces a aquél
realizar una tarea eminentemente normativa al describir la regla de conducta que el
demandado debió observar en la situación, debe considerarse que de la persona diligente se
espera que minimice pero que no elimine por completo el riesgo, ya que como sostiene Barros
Bourie (op.Citada página 106), la culpa supone tomar un riesgo excesivo, más allá de lo
razonable y en este sentido no puede pretenderse que la demandada de autos adoptara
medidas excesivas de resguardo de los corredores como "poner vallas papales u otros
elementos que sirvieran para delimitar el terreno, evitando que los participantes se desviaran
fuera de la pista de carrera, precisamente hasta el punto en que existían desniveles", sobre
todo porque como se estableció en el motivo duodécimo del fallo de primera instancia que el de
segunda instancia hizo suyo, ese desnivel era de "algunos centímetros como se muestra en
las fotografías de fojas 284 y 285 que forman parte de la inspección personal practicada en
autos", de lo que se puede colegir que no era previsible que los corredores se desviaran hasta
ese lugar y aun en ese evento, ese pequeño desnivel no hacía presagiar que uno de los
participantes tropezara y cayera en ese sitio, tanto así como para atribuir a la Fuerza Aérea de
Chile que debió eliminar en forma absoluta el riesgo, lo que no es posible como ya se dijo.
Decidir en sentido contrario significaría enervar cualquier iniciativa deportiva que por sí
conlleva un porcentaje de riesgo, debiéndose considerar que "la determinación de la diligencia
supone valorar los intereses en juego atendiendo a su relevancia y al modo en que condicionan
la concreción de otros intereses" (Barros Bourie, op., citada página 106).
Décimo: Que de lo dicho puede concluirse, que la demandada cumplió con un estándar de
conducta acorde a lo que se espera de un servicio normal, sin que pueda estimarse que
mejores implementaciones en la regulación de la actividad (vallas papales y otras medidas de
seguridad) correspondan a un deber de servicio concreto y determinado que encuentre
sustento en la ley.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artículos 764 , 765 , 767 , 785 y 805 del
Código de Procedimiento Civil, se acoge el recurso de casación en el fondo deducido en lo
principal de fojas 514 en contra de la sentencia de veintiocho de noviembre de dos mil doce,
escrita a fojas 511, la que por consiguiente es nula y se la reemplaza por la que se dicta a
continuación.
Acordada con el voto en contra del Ministro señor Carreño, quien estuvo por rechazar el
recurso de casación en el fondo en virtud de las siguientes consideraciones:
1°) Que en su concepto los jueces de la instancia han efectuado una correcta aplicación de la
normativa que rige el caso. En efecto, el artículo 2314 del Código Civil dispone que el que ha
cometido un delito o cuasidelito que ha inferido daño a otro es obligado a la indemnización, por
lo que siendo un hecho establecido por la sentencia impugnada que la participación del actor
en la carrera no era opcional, desde que obedecía órdenes dada su calidad de empleado de la
demandada (motivo duodécimo del fallo de primer grado), resulta evidente que la Fuerza Aérea
de Chile -a la sazón empleadora del actor- "era una deudora de seguridad a sus
trabajadores.La obligación de otorgar seguridad en el trabajo, bajo todos sus respectos, es una
de las manifestaciones concretas del deber general de protección del empleador; su cabal
cumplimiento es de una trascendencia superior a la de una simple obligación de una de las
partes en un negocio jurídico, pues ella mira a la prevención de los riesgos profesionales, lo
que importa a sus trabajadores, a sus familias y a la sociedad toda, tanto para proteger la vida
y salud de los trabajadores, como por razones éticas y sociales" (C.S. , 27.5.1999, RDJ, t.
XCVI, sec. 3, 89, citada por Barros Bourie en op., citada pág. 108). De esta manera una
somera revisión de la pista con antelación al desarrollo de la carrera habría bastado para
adoptar las medidas preventivas que evitaran el accidente que en definitiva ocurrió, esto es,
que uno de los funcionarios que participaron en la competencia tropezara en el desnivel
contiguo a la superficie utilizada circunstancialmente como pista de carrera y cayera al piso
sufriendo el daño físico que como resultado le causó un impedimento físico para seguir
prestando funciones en la Fuerza Aérea de Chile. Al respecto cabe además consignar que la
caída del actor se produjo en la zona de relevos de la carrera de posta, sector que en una
competencia de esa naturaleza es tan importante como la pista en que ella se desarrollaba.
2°) Que por tal consideración el disidente estima que en la especie concurren todos los
supuestos que hacen procedente la indemnización de perjuicios por responsabilidad
extracontractual, a saber:a) Una acción (u omisión) libre de un sujeto capaz, b) realizada con
dolo o negligencia, c) que el demandante haya sufrido un daño, y d) que entre la acción u
omisión culpable y el daño exista una relación causal suficiente para que éste pueda ser
objetivamente atribuido al hecho culpable de la demandada.
3°) Que, por consiguiente, los jueces del mérito se ajustaron a derecho al aplicar lo estatuido
por el artículo 2314 del Código Civil.
Regístrese.
Rol N° 3-2013.-
Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte Suprema integrada por los Ministros Sr. Héctor
Carreño S., Sra. María Eugenia Sandoval G., Sr. Ricardo Blanco H. y los Abogados
Integrantes Sr. Emilio Pfeffer U. y Sr. Arturo Prado P. No firma, no obstante haber concurrido
a la vista y al acuerdo de la causa, el Abogado Integrante señor Prado por estar ausente.
Santiago, 29 de octubre de 2013.
Autoriza la Ministra de Fe de la Excma. Corte Suprema.
En Santiago, a veintinueve de octubre de dos mil trece, notifiqué en Secretaría por el Estado
Diario la resolución precedente.
Vistos:
Segundo: Que, en efecto, basta considerar los ejemplos que otorga el legislador en el artículo
2329 del Código Civil y compararlos con los resguardos adoptados por la demandada, para
concluir que aquellos sí configuran acciones y omisiones que representan una falta de
diligencia o cuidado de una entidad mayor a la que se imputa a la Fuerza Aérea de Chile al
organizar la competencia en que resultó lesionado el actor. Tal es así porque un desnivel de
algunos centímetros no tiene parangón con la remoción de las losas de una acequia o cañería
en calle o camino que provoque la caída de los que por allí transitan de día o de noche, o con
la omisión del obligado a advertir la construcción o reparación de un acueducto o puente que
atraviesa un camino para evitar causar daño a los que transitan por él. Tampoco admite
comparación con la obligación de reparar los daños que se causaren con ocasión de un
accidente que sea consecuencia del mal estado de las vías públicas derivado de la falta o
inadecuada señalización, del modo que se regula en el artículo 174 inciso 5° de la Ley N°
18.290.
Tercero: Que todos los ejemplos referidos en el motivo que antecede dan a entender que la
omisión a que ellos aluden son de mayor relevancia y entidad e importan verdaderamente una
conducta negligente que sí podría dar lugar a la indemnización de los perjuicios en el caso que
se demanden y que difieren en mucho con el de la especie.Cuarto: Que, por consiguiente, no
habiéndose acreditado que la demandada faltara a su deber de seguridad, desde que las
medidas que se aduce omitió adoptar -instalación de vallas papales para separar la pista activa
de las calles de rodaje- no resultaban proporcionales a la actividad de competencia atlética
prevista realizar, más aún cuando se encuentra establecido que el actor cayó en la unión o
separación de ellas, cuando la corrida y el relevo en que interviene -momento en que tropieza-
solo debía transcurrir por la pista activa claramente identificada, son antecedentes más que
suficientes para descartar la falta atribuida.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artículos 186 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil, se revoca en lo apelado la sentencia de ocho de mayo de dos mil doce,
escrita a fojas 439 y se declara que se rechaza la demanda presentada a fojas 1, sin costas
por haber existido motivo plausible para litigar.
Acordada con el voto en contra del Ministro Sr. Carreño, quien fue de opinión de confirmar la
resolución en alzada en virtud de sus propios fundamentos y de lo expuesto por él en la
sentencia que antecede.
Rol N° 3-2013.-
Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte Suprema integrada por los Ministros Sr. Héctor
Carreño S., Sra. María Eugenia Sandoval G., Sr. Ricardo Blanco H. y los Abogados
Integrantes Sr. Emilio Pfeffer U. y Sr. Arturo Prado P. No firma, no obstante haber concurrido
a la vista y al acuerdo de la causa, el Abogado Integrante señor Prado por estar ausente.
Santiago, 29 de octubre de 2013.
En Santiago, a veintinueve de octubre de dos mil trece, notifiqué en Secretaría por el Estado
Diario la resolución precedente.