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C.A.

de Santiago
Santiago, once de octubre de dos mil dieciocho.
Visto y teniendo presente:
Primero: Que, comparece don Christian Espejo Muñoz, abogado,
domiciliado en Alonso de Córdova N°5710, oficina 202, comuna de Las
Condes, Santiago, quien interpone acción constitucional de amparo a favor
de Jaime Torres Gacitúa, actualmente recluido en el Penal Punta Peuco, por
estimar que se ha infringido la forma de cumplimiento de sus condenas.
Sin señalar ninguna petición concreta, ni dirigir de forma explícita el
arbitrio en contra de persona o autoridad específica, únicamente, pide que se
ordene lo que en derecho corresponda.
Funda su pretensión cautelar señalando que según los antecedentes
obtenidos, se ha suscitado una situación ilegal y arbitraria originada por que
el amparado se encuentra cumpliendo dos condenas en orden sucesivo,
debiendo ser un cumplimiento simultáneo, en virtud que esta es una norma
que beneficia a los condenados, resguardando sus derechos humanos
inherentes a todas las personas, aunque se encuentren privadas de libertad.
Indica que en la actualidad se encuentra cumpliendo ambas condena en
forma sucesiva: una condena por secuestro de 10 años y un día; otra
condena por asociación ilícita de 5 años y un día. Dichas penas se cumplen a
su juicio, no como está establecido en el ordenamiento jurídico, es decir, en
forma simultánea conforme el artículo 74 del Código Penal, motivo por el
cual, se encuentra privado de libertad por las dos condenas las que está
cumpliendo su totalidad en forma sucesivas.
Refiere que el artículo 74 del Código Penal establece que las penas de
igual naturaleza correspondientes a las diversas infracciones deben cumplirse
simultáneamente y solo cuando ello no fuere materialmente posible por
resultar ilusoria una de las penas, se deberán cumplir en orden sucesivo.
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Señala que según Clara Szczaranski –sin indicar la fuente de la cita-:


“Entender que las penas privativas de libertad coincidentes en el tiempo se
cumplen simultáneamente lo estimo obligatorio, pues el cumplimiento de las
penas rigen dos reservas legales: la de la ley penal y la de las excepciones.
Además tratándose de la ley procesal penal rigen por cierto las normas
generales de interpretación de la ley, válidas para toda las ramas del
derecho, que no permiten dar un precepto legal un sentido que lo anule,
llevando una suerte de derogación judicial, ajena del todo a nuestro sistema
jurídico penal.”
Sin embargo, los tribunales, salvo contadas excepciones, no aplican la
precitada norma que beneficia a los condenados y disponen el cumplimiento
sucesivo, sumando las penas de privación de libertad correspondientes a
cada delito por separado. Al actuar así sin respetar la legalidad vigente, los
jueces violan los principios de legalidad y de benignidad y, además, violentan
los derechos humanos consagrados para los condenados.”
Recalca que el amparado está cumpliendo 15 años y dos días de
condena efectiva, a lo menos con las expectativas normales de un ser
humano un 20% de concepto que según la RAE significa que no tiene ningún
valor ni puede producir ningún efecto; o bien, que es irreal o ficticio y
solamente existe en la imaginación.
Expresa que la autoridad “a” (sic) actuado en forma absolutamente
arbitraria y se encuadra de pleno derecho en los requisitos para solicitar un
amparo en virtud a lo establecido por la Constitución Política.
Segundo: Que en apoyo de su pretensión cautelar el recurrente
acompañó un certificado de condena del amparado.
Tercero: Que evacua el informe requerido el Ministro de la I. Corte de
Apelaciones de Santiago señor Alejandro Madrid Crohare, quien expuso que
tramitó como ministro en visita extraordinaria la causa rol Nº7981 dictando
sentencia de primer grado el 10 de septiembre de 2010, por la que se
condenó al amparado, inicialmente, a las penas de cinco años y un día de
presidio mayor en su grado mínimo como autor de un delito de secuestro de
Eugenio Berríos Sagredo, descrito en el inciso 4º del artículo 141 del Código
Penal, perpetrado en Santiago, desde el mes de octubre de 1991. Asimismo,
se le condenó como coautor de un delito de asociación ilícita del artículo 292
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del Código Punitivo, sancionado en el artículo 293 del mismo cuerpo legal.
Agrega que apelada que fuere la sentencia, las penas fueron
aumentadas a 10 años y un día y cinco años y un día, respectivamente,
llegando la causa incluso hasta la Excma. Corte Suprema, dándose ingreso
como rematado al amparado el 13 de agosto de 2015.
Acompaña al efecto, copias de las sentencias respectivas.
Cuarto: Que, evacua el informe solicitado don Christian Alveal
Gutiérrez, Director Nacional (S) de Gendarmería de Chile, quien expresa que
la Ficha Única de Condenado del amparado que acompaña, indica como
fecha de inicio de su condena el 13 de agosto de 2015 y término original de la
misma el 19 de julio de 2029; fecha de tiempo mínimo para beneficios
intrapenitenciarios el 19 de enero de 2021. Añade que el recurrente cumple
las penas de 10 años y 1 día, más 5 años y 1 día por los delitos de Secuestro
y Asociación Ilícita, registrando 393 días de abono en la causa Rol N°7981-0
de esta I. Corte Apelaciones de Santiago.
En relación a considerar el cumplimiento simultáneo o sucesivo de las
condenas, explica que dicha determinación no es resorte del Servicio
Penitenciario, en virtud de lo expresado en el artículo 3º letra b) del Decreto
Ley N° 2859 que Fija la Ley Orgánica de Gendarmería de Chile, que dispone
que: “Corresponde a Gendarmería de Chile: b) Cumplir resoluciones
emanadas de autoridad competente, relativas al ingreso y a la libertad de las
personas sometidas a su guarda, sin que le corresponda calificar el
fundamento, justicia o legalidad de tales requerimientos”.
Quinto: Que, el recurso de amparo constituye jurídicamente una
acción cautelar, de índole constitucional, cuyo contenido específico es el
requerimiento de tutela jurisdiccional frente a privaciones de libertad
ambulatoria con infracción de lo dispuesto en la Constitución o en las leyes;
frente a amenazas arbitrarias o ilegales al ejercicio de dicha libertad, y frente
a privaciones, perturbaciones o amenazas a la seguridad individual, sin
limitaciones y sin que importe el origen de tales atentados.
Sexto: Que la controversia que se presenta en el arbitrio intentado,
dice relación con la forma de interpretación del inciso segundo del artículo 74
del Código Penal y los efectos que dicha norma produce en las condenas
impuestas al sentenciado cuyo amparo se pretende por la vía de esta acción
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constitucional.
Como primera aproximación al problema, conviene dejar asentado que
el amparado ha sido objeto de dos condenas como autor de los delitos de
secuestro y asociación ilícita, por 10 años y un día y cinco años y un día,
respectivamente. Estos hechos jurídicos son inalterables, desde que emanan
de sentencias que gozan de autoridad de cosa juzgada.
Séptimo: Que, a juicio de esta Corte, el ejercicio hermenéutico dado
por el recurrente respecto de la norma contenida en el inciso 2º del artículo 74
del Código Punitivo no es correcto y va en abierta contradicción con todas las
opiniones dogmáticas relevantes que la doctrina ha dado, a propósito del
análisis de dicho precepto. En efecto, el destacado jurista Enrique Cury
señalaba que: “con arreglo al art. 74, inc. segundo, cuando ello es posible, ‘el
sentenciado cumplirá todas sus condenas simultáneamente’. Esto ocurrirá si
las penas impuestas no sólo son de diferente naturaleza, sino que además
afectan a bienes jurídicos también distintos. Así, una pena privativa de
libertad (prisión, reclusión, presidio) puede cumplirse al mismo tiempo que
una pecuniaria (multa, comiso), pero no que una restrictiva de libertad
(confinamiento, extrañamiento, relegación, destierro).
“Cuando la ejecución simultánea no es posible, ‘o si de ello hubiere de
resultar ilusoria alguna de las penas’, el sujeto ‘las sufrirá en orden sucesivo,
principiando por las más graves, o sea las más altas en la escala respectiva,
excepto las de confinamiento, extrañamiento, relegación y destierro, las
cuales se ejecutarán después de haber cumplido cualquiera otra pena’
privativa de libertad. Debe entenderse que el cumplimiento simultáneo de
dos penas hace ilusorio el de una de ellas cuando la imposibilidad de ejercer
el derecho afectado por esta última está ya implícita en la afectación de aquel
a que concierne la otra. Por lo que se refiere al orden establecido para la
ejecución, se explica por sí solo, así como también la excepción al mismo,
que tiene por objeto asegurar la persona del condenado para el cumplimiento
de las penas restantes” (CURY URZÚA, Enrique, Derecho Penal. Parte
General, 8º edición ampliada. Ediciones Universidad Católica de Chile,
Santiago, 2005, p. 661).
Conviene resaltar que las fundamentaciones antes expresas son
compartidas y reietradas, además, por diversos autores nacionales, entre
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ellos, Mario Garrido Montt en su obra, Derecho Penal. Parte General Tomo II,
4ª edición, Editorial Jurídica de Chile, Santiago, pp. 448-449; también por
Sergio Politoff L., Jean Pierre Matus A. y María Cecilia Ramírez, en su obra
Lecciones de Derecho Penal Chileno, Parte General, 2ª edición, Editorial
Jurídica de Chile, Santiago, pp. 449-450).
Octavo: Que, las opiniones e interpretaciones antes expresadas por el
profesor Cury son compartidas por esta Corte, toda vez que el claro tenor del
inciso segundo del artículo 74 del Código Penal, exige como presupuesto
para el cumplimiento simultáneo de las condenas, que ello sea posible,
presupuesto jurídico que sólo puede materializarse cuando entre unas y otras
no exista contraposición en relación al objeto de la sanción, como ocurre
entre las penas de multas y las privativas de libertad, pero dicha situación no
concurre en el evento de existir dos penas privativas de libertad, ya que es
físicamente imposible cumplir al mismo tiempo ambas sanciones.
De entender la hipótesis propuesta por el recurrente, las sanciones de
menor entidad que hayan sido impuestas al condenado serían absorbidas por
la de mayor entidad, dejando en una suerte de impunidad el castigo por el o
los ilícitos de menor severidad cometidos.
Por estas consideraciones, normas legales citadas y visto, además, lo
dispuesto en el artículo 21 de la Constitución Política de la República, se
rechaza el recurso de amparo interpuesto por don Christian Espejo Muñoz,
a favor de Jaime Torres Gacitúa, en contra de
Regístrese, comuníquese y archívese en su oportunidad.
N°Amparo-2017-2018.

JORGE LUIS ZEPEDA ARANCIBIA FERNANDO IGNACIO CARREÑO


Ministro ORTEGA
Fecha: 11/10/2018 13:25:15 Ministro
Fecha: 11/10/2018 13:25:16

CRISTIAN LUIS LEPIN MOLINA


ABOGADO
Fecha: 11/10/2018 13:24:17
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Pronunciado por la Undécima Sala de la C.A. de Santiago integrada por los Ministros (as) Jorge Luis Zepeda
A., Fernando Ignacio Carreño O. y Abogado Integrante Cristian Luis Lepin M. Santiago, once de octubre de
dos mil dieciocho.

En Santiago, a once de octubre de dos mil dieciocho, notifiqué en Secretaría por el Estado Diario la
resolución precedente.

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Este documento tiene firma electrónica y su original


puede ser validado en http://verificadoc.pjud.cl o en la
tramitación de la causa.
A contar del 12 de agosto de 2018, la hora visualizada
corresponde al horario de verano establecido en Chile
Continental. Para Chile Insular Occidental, Isla de Pascua
e Isla Salas y Gómez restar 2 horas. Para más
información consulte http://www.horaoficial.cl.

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