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UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE HONDURAS

ÉTICA PROFESIONAL

TAREA #7

OSCAR ARMANDO CRUZ RODRIGUEZ

201810020136

M. ELIZABETH ZUNIGA

CAMPUS LA CEIBA

MIÉRCOLES 24/11/2021
INTRODUCCIÓN
No es lo mismo hacer lo correcto a que hacer lo que realmente queremos, no
conlleva a la felicidad el hacer lo que es correcto, ya sea porque no va de acuerdo
a lo que uno quiere o va en contra de los propios ideales, por eso, el cumplir con
nuestro deber necesariamente conduce a la felicidad.

La ética es la parte de la filosofía que se ocupa del obrar del humano,


enfocándose en lo que es socialmente correcto más que en lo que es legalmente
correcto. Esto hace que la ética sea una regulación del actuar del hombre,
permitiendole encajar con sus acciones.
OBJETIVOS

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CONTENIDO

Con el simple hecho de ser parte de la sociedad somos un gran riesgo, somos un
peligro en potencia, somos una amenaza para la sociedad. De nosotros depende
quienes somos para el mundo, si contribuimos u obstruimos.

“La ética discute y juzga las normas morales y jurídicas, siendo las primeras las
que regulan lo que la sociedad aprueba o desaprueba, y las segundas las que
regulan las prohibiciones, castigando el incumplimiento de las mismas. También
en ella se realiza por una parte la crítica y el análisis de la moralidad y por otra
propone normas, escala de valores o ideales que van a primar sobre otros.”

Nos preocupamos tanto por encajar que nos aseguramos ir con la corriente que
ir en contra, incluso si no fuera correcto, sólo lo hacemos por encajar. El
aislamiento, el rechazo que experimentamos de parte de la sociedad sólo por ser
diferente o no ser dignos de la aprobación de la misma es un daño psicológico
que se convierte en trauma cuando adultos. Incluso ya siendo adultos causa un
impacto en las personas del cual cuesta recuperarse.

“La ética profesional: Es el conjunto de normas de carácter ético aplicadas en el


desarrollo de una actividad laboral.”

Somos una pequeña pieza, pero fundamental dentro de la empresa en la que


laboramos, por muy pequeño que sea nuestra tarea, la calidad de ella se refleja
por nuestra dedicación.

“El ser humano es responsable de sus actos y debe responder ante sí mismo y
ante la sociedad e incluso de admitir su existencia ante Dios por ellos.”

Es decisión nuestra si sumar o restar, nuestros actos no dependen de nadie más


que nosotros mismos, no podemos responsabilizar a los demás por quienes
somos a la hora de tomar decisiones. Dios no va a pedir cuentas por nuestros
amigos, hermanos o familiares, nosotros vamos a rendir nuestra propia cuenta,
siendo honorables ante los ojos de los hombres y sobre todo de Dios Padre.

“El concepto de responsabilidad es quizás el más profundo de la ética, porque


nos da la dimensión moral del ser humano, sentirse responsable de uno mismo
y de los demás nos dice que es mejor que quien intenta evadir o excusar sus
responsabilidades, pero existen circunstancias y factores que alteran y
condicionan la responsabilidad en los actos morales, dichos factores se pueden
dividir en Psicológicos y Sociológicos.”

La responsabilidad es una sensación tan linda, que es diferente de cualquier otra,


que sólo puede experimentarla quien tiene el valor de responder de sus propios
actos. Sólo aquellos que son de palabra y tienen valores bien marcados son
quienes disfrutan del sentirse responsables. Es una sensación de plenitud ya que
agrega autoestima a la persona, ya que la hace sentir mejor a quien ya era y
superior que una persona mediocre.

Sólo los que dan la cara por los problemas, quienes afrontan las dificultades con
el pecho en alto son los que pueden sentirse responsables, porque responden
por ellos mismo, no esperan que alguien más responda por sus actos, porque en
vida real, nadie realmente va a responder por nosotros, más que nosotros
mismos.

“Un acto moralmente bueno se califica como un mérito, mientras que un acto
moralmente malo comporta un demérito. La sanción es la recompensa de los
actos morales, sancionamos un mérito con un premio, y un demérito con un
castigo.”

Esto es lo básico, el actuar bien recibe buena recompensa, que es lo que sucede
con los que hacen el bien. No necesariamente económicamente pero sí con algún
reconocimiento ya sea por su buen labor si es más seguido que sólo una acción
o simplemente con reconocerle su buen gesto.

Este, lo experimenta la gente de buena intención, porque buscan oportunidades


de hacer el bien, de ofrecer soluciones y satisfacer necesidades a las otras
personas, a la comunidad.

Por el otro lado el mal actuar también es premiado, pero como el actuar, viene
el premio. Este puede ser entregado de manera en que se exhiba al individuo,
como persona o con sus malos actuar. El extremo de estas sanciones es acorralar
al individuo al rechazo social, evitarlo y hasta exluirlo de actividades no oficiales,
sino organizadas por el mismo grupo.

“Todo ser humano tiene conciencia de que hay algo que está bien o mal
moralmente hablando, pues posee lo que llamamos sentido moral, por otro lado,
también existe la conciencia moral, que es la valoración sobre la moralidad de un
acto concreto.”

La misma experiencia nos permite determinar si lo que estamos haciendo está


bien o mal, como seres razonantes que somos, asimilamos lo que nos está
sucediendo en el momento y lo comparamos con alguna otra experiencia y
sacamos un veredicto, si estamos fallando o vamos por buen camino. Es un don
que tenemos, ya que no tropezamos con la misma piedra si no es por voluntad
propia.

“El ser humano procura obrar con conciencia recta, ello supone autorreflexión y
consulta a los demás, para ir adquiriendo una conciencia formada y madura.”

el problema se expone una vez que estamos en conciencia perpleja o en


conciencia dudosa, como ya hemos dicho la conciencia perpleja implica un
problema de deberes y poseemos que inclinarnos por el que nos parece más
profundo o imperioso, mientras que en la conciencia dudosa debemos descartar
para salir de dudas y luego conformar una conciencia moralmente cierta.

“dentro de la filosofía se reconocen dos grandes grupos: uno en el que los


filósofos no admiten más fundamento de la moralidad que la propia conciencia.
y otro que sin contradecir ni desautorizar a los primeros considera que las
exigencias imperativas del ser humano conducen al individuo a alcanzar la plena
realización, el bien natural en todas sus posibilidades.”

dentro del primer conjunto se resaltan filósofos como Kant, Levy-Bruhl, Durkheim
y Sartre. Kant aseguraba que obrar por causas exteriores a nuestra conciencia
del deber es decir obrar por placer, por poder, por popularidad, etcétera., implica
obrar con segundas intenciones; o sea un obrar que es más que inmoral, es
amoral, impropio del individuo humano.
CONCLUSIONES

Somos la amenaza en potencia más peligrosa de todas, como seres humanos,


somos capaces de lo incapaz, para nuestra suerte, actuamos en base a nuestros
valores, a nuestra ética.

Si no tuviéramos este raciocinio, seguiríamos en la edad de piedra, no seríamos


más que un individuo más que no aporta nada al avance de la sociedad. No sólo
para esta, sino como personas, somos mejores de lo que ya éramos, porque esa
es la verdadera carrera, ser mejor que nosotros mismos, no que los demás, sino
para los demás.

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