UNIDAD PORTEÑA

UNIDAD PORTEÑA | 1

Año 02 | N° 20 Órgano Informativo del Comité Regional del Callao-PCP 30 octubre 2021

¡No al paquetazo antilaboral

del Congreso y la CONFIEP!
¡A defender los
derechos de los
trabajadores!

ss
ssss

s
2 | UNIDAD PORTEÑA
Luis Alberto Sánchez E.
Responsable Político-C.R. CALLAO
D
esde el Congreso de la
República, a través de
la mayoría derechista y
de ultraderecha surgieron seis
ilegales y nocivos proyectos
de ley contra los trabajadores/
as pretendiendo conculcar
derechos de los trabajadores/
as logrados tras una ardua y
permanente lucha contra las
patronales y el Estado peruano.
Una vez más, la mayoría
derechista guardián de
la política económica del
neoliberalismo pro patronal
Órgano Informativo del
Comité Regional del Callao
Partido Comunista Peruano
Correo:
unidadporteñacallao@gmail.com
EDITORIAL
quiere arrasar con las leyes
y seguir precarizando el
trabajo de los trabajadores/as
y el derecho laboral atacando
directamente a los sindicatos,
federaciones y centrales
sindicales con la finalidad de
ablandarlos y aniquilarlos.
Uno de los mecanismos de
resolución de conflictos en el
ámbito laboral es el Consejo
Nacional de Trabajo, que
es un espacio de diálogo y
concertación entre el Estado,
la Patronal y las Centrales
Sindicales. El Ministerio de
Trabajo fue el gran ausente
en este tema, desde esta
tribuna demandamos cuál es
la responsabilidad y función
Director - Editor
Moisés Rocha
del ministerio de trabajo y del
poder ejecutivo.
La derecha y la extrema
derecha capitalista neoliberal
siguen conspirando contra
el gobierno a través de la
acción política de la vacancia
presidencial en el congreso y
contra el pueblo organizado
en sus sindicatos y sus
centrales sindicales. En estos
momentos es la hora de actuar
resueltamente con vigor y
organización en los sindicatos
y federaciones. Nuestra clase
obrera tiene experiencia
y organización, seguir
persistiendo en la unidad
sindical y con el pueblo. ¡Sin
luchas no hay victorias!
Consejo de Redacción:
Roberto Carbonel
Alberto Quiróz
Luis Alberto Sánchez
Miguel Chipana
Ricardo Parodi
Alfonso Yáñez

Big Data: la inteligencia artificial (IA),
los Gobiernos y el empleo público
Presentamos este
artículo de interés y de
actualidad en el que se
aborda el avance tecnológico
que ha creado y desarrollado
la academia mundial que
tendrá repercusiones en
el mundo del trabajo y su
impacto en los trabajadores
particularmente en el
sector público de nuestra
región. Tema que debe ser
analizado con premura por
las centrales sindicales de
nuestro país.
Alfredo Zaiat
Economista argentino
La pandemia acele-
ró los procesos productivos
que incluyen automatización
e inteligencia artificial (IA).
Esto plantea desafíos
para los gobiernos para de-
sarrollar una fuerza de tra-
bajo con perfiles y habili-
dades para adaptarse a la
transformación que tendrán
los empleos que hoy existen.
Un informe del Banco de
Desarrollo de América Latina
(CAF) apunta que en Estados
Unidos, entre el 20% y el 45%
del tiempo de los funcionarios
públicos se dedica a tareas que
podrán ser automatizadas, y
entre el 45% y el 60% correspon-
de a tareas que podrán ser com-
plementadas por la tecnología.
En América Latina el 30%
de la fuerza laboral de las ad-
ministraciones públicas trabaja
en ocupaciones con alto ries-
go de sustitución tecnológica.
¿Qué es la inteligencia
artificial?
En términos simples, inte-
ligencia artificial (IA) se refiere
a sistemas o máquinas que imi-
tan la inteligencia humana para
realizar tareas y pueden mejorar
en forma repetitiva a partir de
la información que recopilan.
La IA se manifiesta de varias
formas con el insumo de la Big
Data. Algunos ejemplos son:
Los chatbots utilizan la
IA para comprender más rápi-
do los problemas de los clien-
tes o usuarios y proporcio-
nar respuestas más eficientes.
Los asistentes inteligentes
utilizan la IA para analizar in-
formación crítica proveniente
de grandes conjuntos de datos
para mejorar la programación.
Los motores de recomen-
dación pueden proporcionar
respuestas automatizadas según
las consultas de los usuarios.
La IA trata mucho más
sobre el proceso y la capaci-
dad de análisis de datos. Aun-
que la IA muestra imágenes
de robots de aspecto humano
de alto funcionamiento que se
apoderan del mundo, la IA no
pretende reemplazar a los hu-
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manos. Su objetivo es mejorar
significativamente las capacida-
des y contribuciones humanas.
Desafíos
La Inteligencia Artificial tie-
ne tres grandes retos para lograr
impactar al sector público en
América Latina que están expues-
tos en el documento Datos e Inteli-
gencia Artificial en el sector público.
1. Definir e implementar po-
líticas públicas basa-
das en principios éticos.
2. Adoptar marcos de gober-
nanza de los datos y al-
goritmos, soportados
en marcos regulatorios.
3. Preparar la fuerza laboral
para agregar valor a su tra-
bajo y contribuir al desa-
rrollo económico y social.
Sergio Díaz-Granados, pre-
sidente ejecutivo de la CAF, enti-
dad responsable de la edición de
este documento de investigación,
aseguró que la institución está
impulsando la agenda de trans-
formación digital, que también
abarca la modernización digital
de los Estados de América Latina.
Afirmó que “en 2019 se
creó la Dirección de Innovación
Digital del Estado, que pro-
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mueve Gobiernos más ágiles,
abiertos e innovadores, apo-
yándose en las nuevas tecnolo-
gías y la inteligencia de datos”.
Para agregar que “el obje-
tivo es fomentar mejoras en la
eficiencia y transparencia de la
Administración, así como en la ca-
lidad de los servicios a los ciuda-
danos. Además, trabajamos para
proveer financiamiento a inicia-
tivas de modernización digital”.
El testimonio de Carme Ar-
tigas, secretaria de Estado para
la Digitalización y la Inteligencia
Artificial del Gobierno de Espa-
ña, detalló la experiencia de su
país, al destacar que el auge de
la IA permite diseñar el futuro y
la recuperación económica, con
un impacto evidente en la reac-
tivación del sector productivo.
Señaló que existe un pro-
yecto emblemático de su país,
que consiste en la Carta de De-
rechos Digitales: “Es una inicia-
tiva pionera orientada a ofrecer
un marco de referencia para
abordar los principales retos en
materia ética, social y legislati-
va que implica la digitalización
como elemento transformador”.
Estrategias
En atención al posible efec-
to que podrá tener la adopción
de la IA en el empleo público
en América Latina, la Direc-
ción de Innovación Digital del
Estado de la Vicepresidencia
de Conocimiento de la CAF
realizó un estudio de revisión
de este potencial impacto para
apoyar a los países de la región
en el análisis y estimación con
el fin de aportar herramientas
para una mejor preparación.
El informe encontró que,
con excepción de ciertos países
como Estados Unidos y el Rei-
no Unido, la mayoría de los go-
biernos del mundo no ha tran-
sitado aún de la definición de
políticas y objetivos generales
en esta materia a la implemen-
tación de estrategias efectivas, y
con suficiente escala, que trans-
forman significativamente la
naturaleza del empleo público
ante los retos del nuevo entorno.
No obstante, diferentes
organizaciones privadas en el
mundo han implementado es-
trategias de preparación de la
fuerza de trabajo que pueden
servir de referencia para los go-
biernos. Estas políticas incluyen:
• La implementación de en-
foques integrales de trans-
formación organizacional
basada en datos e IA, que con-
templan el desarrollo de habi-
lidades en la fuerza de trabajo.
• El desarrollo de diagnós-
ticos de habilidades y de
programas permanentes y
personalizados de forma-
ción, soportados en plata-
formas digitales, datos e IA.
• La creación de roles y equi-
pos interfuncionales que
planean y gestionan el ba-
lance entre el trabajo huma-
no y el trabajo autónomo.
• La implementación de es-
trategias en materia de
bienestar laboral, empode-
ramiento de los empleados
y desarrollo de cultura or-
ganizacional ágil y abierta.
• La implementación de indica-
dores clave de desempeño que
permiten gestionar la prepa-
ración de la fuerza de trabajo.
Los casos de Chile,
Colombia y Uruguay
Como parte del estudio
de la CAF se desarrolló una
metodología para determinar
el grado de preparación de los
países de América Latina para
la adopción de la IA en lo que
respecta al empleo público.
Esametodologíasecompone
de tres dimensiones principales:
i. Ambiente de Política.
ii. Estructura y Organización.
iii. Talento, Habilidades y Cul-
tura.
Se incluyó también un
conjunto de factores e indica-
dores asociados, que permi-
tieron analizar los avances y
aspectos críticos que enfrenta-
rán los países en esta materia.
Con esa base conceptual,
el estudio analiza los casos de
tres países: Chile, Colombia y
Uruguay. Determina que la can-
tidad de empleos públicos en
riesgo de sustitución tecnoló-
gica para los próximos años es
de 165.000 en Chile, 274.000 en
Colombia y 88.000 en Uruguay.
Sin embargo, la investiga-
ción señala que se puede esti-
mar que el impacto neto en el
empleo público posiblemen-
te será menor por la posibili-
dad de reubicar trabajadores
en ocupaciones no sustituidas
por la IA, así como por la posi-
ble creación de nuevos empleos
públicos que traerá la adop-
ción de la IA en los gobiernos.
Los tres países analiza-
dos poseen un nivel de pre-
paración intermedio para la
adopción de la IA en el empleo
público. Se detectó que estos
países presentan avances sig-
nificativos en el desarrollo de
ambientes de política favora-
bles para la adopción de la IA.
Los mayores desafíos
para avanzar en esta pre-
paración se encuentran en:
1. La estimación del impacto
esperado de la IA en el em-
pleo público.
2. La revisión de las estructu-
ras y roles del Estado.
3. El diagnóstico y desarrollo
de habilidades para la IA en
los empleados públicos.
4. Las estrategias de cambio
cultural organizacional en el
Estado.
Potenciales riesgos
Las grandes compa-
ñías, usando de manera es-
tratégica la inmensa cantidad
de datos que obtienen de sus

clientes, están cada vez mejor in-
formadas para tomar decisiones
y agilizar sus procesos, mejorar
la calidad y el direccionamien-
to de sus productos y servicios.
Quedarse atrás en este sen-
tido representa para el sector
público el riesgo de ser supe-
rado en su capacidad de actuar
de manera estratégica y aten-
der de manera rápida y efi-
ciente las necesidades sociales.
Aquí aparece uno de los
riesgos: la privacidad de los
datos. Este es un derecho que
tienen los individuos a esta-
blecer límites sobre la informa-
ción que de ellos se divulga, a
no ser observados y a que se
mantenga su confidencialidad.
El creciente volumen de da-
tos generado por unos y captura-
do por otros diariamente repre-
senta un riesgo para mantener
ese derecho, sobre todo porque
gran parte de esa captura está
sucediendo a través de dispositi-
vos y procedimientos que no son
conocidos o autorizados por los
propietarios de los datos, como
cámaras y sensores en lugares
públicos, aplicaciones para telé-
fonos móviles o redes sociales.
La utilización y protección
de la información personal
Siendo los datos persona-
les y colectivos el pilar funda-
mental de la IA, su análisis, di-
vulgación, uso y reutilización
pueden generar resultados o
conclusiones que los propieta-
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rios de la información no quie-
ren que sean divulgados o em-
pleados para ciertos propósitos.
Por ejemplo, a partir de
la triangulación de informa-
ción de una misma persona
en diferentes conjuntos de da-
tos es posible identificar su
identidad, su estado de sa-
lud o sus tendencias políticas.
Para generar confianza,
tanto en las instituciones públi-
cas como en la tecnología misma,
es clave que las personas sientan
que no pierden su derecho a la
privacidad. Por esta razón, es
fundamental que los gobiernos
garanticen que los sistemas de
IA diseñados e implementados
se ajusten a las normas y re-
gulaciones vigentes sobre pro-
tección de datos en cada país.
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Diseñan una computadora que tardaría un

milisegundo en resolver tareas que llevarían al
ordenador más potente 30 billones de años
Jiuzhang 2.0, un septillón
veces más poderoso que la su-
percomputadora más avanzada
del mundo, contribuirá a la teo-
ría de grafos, el aprendizaje au-
tomático y la química cuántica.
En un intento de lograr la
supremacía cuántica, un equipo
de investigadores dirigido por
el profesor Pan Jianwei, de la
Universidad de Ciencia y Tecno-
logía de China, ha desarrollado
un prototipo de computadora
cuántica bautizado Jiuzhang 2.0
a través de la cual se detectaron
113 fotones. El estudio fue publi-
cado este lunes en la revista cien-
tífica Physical Review Letters.
China reta la ‘suprema-
cía cuántica’ de Google al de-
sarrollar una supercomputa-
dora capaz de resolver tareas
cientos de veces más difíciles
La supremacía cuántica se
da cuando un nuevo prototipo
de computadora cuántica consi-
gue realizar una tarea específi-
ca utilizando exponencialmente
menos recursos que las computa-
doras existentes más poderosas.
Jiuzhang 2.0 se basa en el
algoritmo de muestreo de bosón
gaussiano expansible, un algorit-
mo de simulación clásico que le
permite alcanzar un rendimiento
sin precedentes. Este modelo es
un septillón de veces más pode-
roso que la supercomputadora
más avanzada del mundo y tar-
dará un milisegundo en resolver
tareas que llevarían al ordenador
más potente existente 30 billo-
nes de años, según China Daily.
Se espera que la nueva su-
percomputadora se muestre
muy eficaz para profundizar en
los conocimientos en áreas como
la teoría de grafos, el aprendizaje
automático y la química cuántica.
Su versión anterior,
Jiuzhang, que se presentó en di-
ciembre del año pasado, marcó
la primera vez que China alcan-
zó la supremacía cuántica, con-
virtiéndose en el segundo país
del mundo en lograr esta meta.
Fuente: RT

JiuzhangUniversity of Science and Technology of China

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2. Actualizando. Cambio y Revolución

Jorge Yubinet
Economista

“La misma palabra Revolución,

en esta América de las pequeñas
revoluciones, se presta bastante al
equívoco. Tenemos que reivindicarla
rigurosa e intransigentemente.
Tenemos que restituirle su sentido
estricto y cabal. La revolución
latinoamericana, será, nada más y
nada menos, que una etapa, una
fase de la revolución mundial. Será
simple y puramente, la revolución
socialista. A esta palabra se
puede agregar, según los casos,
todos los adjetivos que queráis:
‘antimperialista’, ‘agrarista’,
‘nacionalista-revolucionaria’. El
socialismo los supone, los antecede, c. J.C. Mariátegui. El Maria- Al 2021 entre teorías de
los abarca a todos”. teguismo y el Bolivaria- complejidad y prevalencia de
JCM. Ideología y Política nismo. redes sociales, el horizonte de
7 Ensayos…(1928). (p93, 94: d. El enfoque de clase como cambios ha cubierto, como lava
XCV,XCV) eje imprescindible de de volcán, a la revolución. Se
una política revoluciona- habla de revoluciones industria-
ria. les, la tercera, la cuarta, la quinta,
El documento busca contri- 2.7. La necesaria revolución en pero ninguna alcanza el nivel de
buir al debate sobre anteceden- Perú. una revolución de los elementos
tes, condiciones, características y centrales del poder económico,
enfoque de la revolución en Perú. 2.1. Cambios o las pequeñas político, cultural y militar. Nin-
revoluciones guna conlleva un cambio de cla-
El siglo XXI está trabajan- se en la dirección de la sociedad.
Contenido En los últimos años (2016 a
do a destajo por descubrir re-
voluciones, descubrir no de en- 2021) en USA (Estados Unidos
2.1. Cambios o las pequeñas
contrar, descubrir como revelar, de Norte América), ha cambia-
revoluciones.
mostrarse, decir Aquí Estoy. El do políticamente, ha pasado de
2.2. La revolución capitalista en
siglo XX, en sus primeros veinte ser gobernado por D. Trump a
Perú. 1968-1975.
años produjo un cataclismo con J. Biden y aunque hay una crisis
2.3. Aspectos singulares de la
efectos de largo alcance que, si pandémica de por medio, cada
revolución 1968-1975.
bien luego se ha trastocado, ge- semana se ve que no hay cambio
2.4. Un capitalismo sin clase
neró una llama roja que aún tiene alguno, salvo el de un republica-
burguesa.
calor suficiente para continuar no (D. Trump) por un demócrata
2.5. La revolución como un en-
arropando a pueblos que no (J. Biden). Hasta los slogans son
foque de desarrollo social.
resignan el combate por su su- estratégicamente equivalentes:
2.6. Marco general de la revolu-
pervivencia, dignidad y nuevas Trump: Make America Great
ción.
formas de vida. Algunos pensa- Again (Hagamos nuevamen-
a. Capitalismo monopóli-
mos que el Antropoceno, la eta- te Grande a América); J Biden:
co. Capital Financiero y
pa o edad en que la humanidad America First (América Primero).
Oligarquía Capitalista.
dirige racionalmente, su presen- En Alemania, luego de 16
b. Parasitismo y Descom-
cia, su participación, sobre el pla- años de gobierno de Angela
posición del Capitalismo.
neta Tierra, empezó el año 1917. Merkel, en las elecciones del 26
Los Estados Fallidos.
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de setiembre2021, los del partido
Demócrata Cristiano, por estre-
cho margen, han quedado en se-
gundo lugar, después de los So-
cialdemócratas con su candidato
Olaf Scholz. Naturalmente es un
cambio de partido político en
el gobierno. El potencial nuevo
grupo gobernante, Socialdemó-
cratas, plantean: Justicia social,
Protección climática y Transfor-
mación verde en la economía y la
sociedad. Este es un cambio si-
guiendo el enfoque ideológico
de la clase media, que no signi-
fica ningún cambio importante,
relevante, en la situación de la
mayoría de la población alema-
na, ni en las relaciones de poder
al interior y exterior de Alemania.
En la historia de Perú se en-
cuentra que cualquier asonada
o movimiento que conllevase el
uso de armas y específicamente
para derrocar a un gobierno, ha
sido tomado como revolución,
son las “pequeñas revolucio-
nes” a las que se refiere JCM.
Veamos algunos ejemplos: Ni-
colás de Piérola fue un persona-
je que encabezó una de ellas el
21 de diciembre de 1879 contra
Mariano Ignacio Prado(1); luego
tendremos al teniente Luis Mi-
guel Sánchez Cerro quien en 1914
participó en el derrocamiento de
Guillermo Billinghurst (2) aun-
que es necesario reconocer que
el levantamiento contra Billin-
ghurst fue dirigido por el general
Oscar Raimundo Benavides La-
rrea, quien luego en 1930 encabe-
zó la revolución contra Augusto
Bernardino Leguía -que murió
en prisión (3); el general Manuel
Apolinario Odría el 28 de octu-
bre de 1948 hizo una revolución
o levantamiento militar contra
el gobierno de José Luis Busta-
mante y Rivero (4); Ricardo Pío
Pérez Godoy, general del ejérci-
to, se levantó contra el gobierno
de Manuel Prado Ugarteche en
julio de 1962 y en marzo 1963
fue a su vez revolucionado por
el también general del ejército,
Nicolás Eduardo Lindley López
(5); el 03 de octubre de 1968 me-
diante levantamiento militar o
revolución el general del ejército
Juan Francisco Velasco Alvarado
derrocó a Fernando Belaúnde
Terry; algunos años después, el
29 de agosto de 1975, el también
general de ejército Francisco
Morales Bermúdez sustituyó a
Juan F. Velasco Alvarado, na-
turalmente mediante una re-
volución institucional, es decir,
del ejército y en el ejército (6)
De todos estos sucesos
el de octubre 1968 se reclamó
como Gobierno Revoluciona-
rio de las Fuerzas Armadas y
formalmente permaneció hasta
1980 cuando Fernando Belaún-
de Terry retomó el gobierno del
cual fue separado en octubre de
1968. Se aprecia cierta circulari-
dad política en la presencia de F.
Belaúnde como presidente, pero
en escenarios muy diferentes.
Los sucesos anotados, de
1879 hasta 1963, fueron cam-
bios, “pequeñas revoluciones”,
sustituciones en el gobierno.
Ninguno llegó a constituir una
revolución es decir ninguno
conllevó un cambio de orienta-
ción de clase dominante; el jue-
go político usando medidas de
fuerza y armas ocurría entre te-
rratenientes y brozas de comer-
ciantes, elementos menores de
manufactura y personajes aven-
tureros dispuestos a enriquecerse.
2.2. La revolución capitalista
en Perú. 1968-1975
Centralmente el domi-
nio de los terratenientes y las
relaciones de servidumbre se
mantuvieron, por una combi-
nación y complicidad con los
sectores capitalistas internacio-
nales, como sector dominan-
te en la formación económica
social (FES) peruana, como
dominio de clase, hasta las ac-
ciones del gobierno de Juan F.
Velasco Alvarado donde clara
y planificadamente se generó,
de modo coercitivo, cambios en
la propiedad de la tierra de la
sierra y la costa para suprimir la
servidumbre del gamonalismo
(terratenientes en la sierra) y lo
enclaves económicos autónomos
de las grandes haciendas de la
costa, mientras que generaba un
marco legal para el traslado de
capital y daba facilidades para
inversiones en los sectores deno-
minados modernos, que no eran
otros que los de la industria, fi-
nanzas y los asociados a ellos (7).
El objetivo político, enun-
ciado por los militares, fue la de
prevenir un estallido revolucio-
nario en el campo, específica-
mente en la sierra. Fue un mo-
vimiento político preventivo y
que tuvo que desarrollar una re-
volución capitalista desde arriba,
desde el gobierno (top-down).
Existen documentos, especial-
mente las de Conferencias de
Punta del Este -Uruguay de 1961
y 1962, en los que la diplomacia
de USA planteaba la necesidad
de cambios económicos y políti-
cos en países de América Latina,
que condujesen a la moderniza-
ción (nombre con se identifica-
ba y aún algunos lo usan, para
referirse a las relaciones econó-
micas capitalistas). USA contri-
buyó a apoyar a los países para
“ingresar a la modernización”,
creando el programa de ayuda
Alianza Para el Progreso durante
el gobierno de John F. Kennedy,
La Fuerza Armada, dirigi-
da por Velasco (1968-1975), enca-
bezó una revolución, la única en
la historia republicana de Perú,
quiere decir desde 1821. Fue una
acción de fuerza encauzada por
los militares, que buscaba cons-
cientemente un cambio en el gru-
po dominante, entre las clases
dominantes; la revolución buscó
desplazar a los terratenientes y
sus intereses de servidumbre, a
favor de capitalistas o burguesía

que, los militares y muchos teó-
ricos y luchadores de izquierda
(socialcristianos (8) y marxistas),
creyeron podría formarse o por
lo menos articularse rápidamen-
te, para ejercer el gobierno de
acuerdo a sus intereses como
grupo social dominante, de cla-
se dominante. No fue posible.
2.3. Aspectos singulares de
la revolución 1968-1975
El escenario de la revolu-
ción de J. F. Velasco muestra
elementos singulares. Primero,
siendo una revolución capitalis-
ta hecha de arriba hacia abajo, no
tenía actores involucrados entre
quienes se suponía eran los di-
rectamente interesados, no ge-
neró entusiasmo entre los “em-
presarios modernos” quienes,
se asumía, eran los favorecidos.
Segundo, ante el vacío
creado, los militares asumieron
algunas ideas para el necesario
apoyo social que requería la re-
volución, así se organizó a seg-
mentos campesinos -formando
unidades asociativas: Coopera-
tivas y Sociedades Agrícolas de
Interés social o SAIS-, a obreros
urbanos y pequeña burguesía
urbana – modelando la Comu-
nidad Industrial y las Empresas
de Interés Social- lo cual, asocia-
do a las empresas nacionaliza-
das en los sectores de petróleo,
minería, transporte, generó una
corriente favorable pero no deci-
siva, entre campesinos y grupos
de trabajadores urbanos, que se
consolidó con la prédica decla-
rativa asociativa de SINAMOS.
Tercero, las acciones im-
pulsadas por el sector “pro-
gresista”(=de izquierda) de los
militares, robusteció el temor
al socialismo, que se asumía (y
aún al 2021 se cree) era igual a
estatizaciones o nacionalizacio-
nes de empresas y predominio
de empresas estatales en la eco-
nomía. La publicidad contra-
ria al gobierno de los militares
señalaba con el dedo acusador,
formado por dólares USA, ha-
cia Cuba como un ejemplo que
Perú estaba siguiendo. A fines
de agosto de 1975, arribó el ge-
neral Francisco Morales Ber-
múdez para tranquilizar la tor-
menta generada en la laguna.
Cuarto, La construcción del
socialismo en Chile y la revolu-
ción de los militares en Perú, en
los primeros años de los años 70,
suscitó una gran confusión. Los
gobiernos de Allende (con ra-
zón) y Velasco (sin razón), se vie-
ron en su momento como formas
de avanzar al socialismo, como
grandes cambios hacia el socia-
lismo. Era un asincronismo. El
derrotero final de los principales
protagonistas muestra palpable-
mente las diferencias. Salvador
Allende, falleció en setiembre de
1973, durante el golpe militar de
A. Pinochet. Juan F. Velasco fue
separado del gobierno por sus
camaradas de armas en 1975, sin
disparo alguno, pacíficamente.
La diferencia estribaba en
que en Chile el problema entre
terratenientes y capitalistas se
solucionó en la primera mitad
del siglo XX (1925). Recordemos
que en plena Guerra del Pací-
fico, en Chile se libró una gue-
rra civil entre los terratenientes
y los empresarios de comercio
junto a los nacientes capitales
manufactureros, que condujo al
expresidente José Manuel Bal-
maceda, derrotado por los te-
rratenientes (aliados como Par-
lamento y Armada), al suicidio
el 19 de setiembre de 1891 (9).
2.4. Un capitalismo sin
clase burguesa propia
Podría señalarse como una
tragedia que, disponiendo de
todas las facilidades del Esta-
do, en 22 años, de 1968 a 1990,
la burguesía peruana no haya
capitalizado sus espacios eco-
nómicos y políticos, no se haya
consolidado como clase con in-
UNIDAD PORTEÑA | 9
tereses propios y no haya sido
capaz de articular un mercado
interno sólido, en el cual tu-
viese dominio indiscutido y se
hubiese proyectado al merca-
do internacional. Sin embargo,
no se trata de lamentar nada.
La historia muestra que
la burguesía en Perú está auto-
limitada, autocastrada. Su pre-
sencia en Perú se ha hecho sin
esfuerzo, sin luchar, desde su
confabulación con los rezagos
señoriales y de servidumbre de
inicios de siglo XX, que JCM
comprendió con perspectiva his-
tórica, hasta su conchabamiento
con la burguesía chilena (ella sí
grupo social con intereses nacio-
nales y ambición internacional),
en los último 30 años, cumplien-
do el rol de “facilitadora”, de ce-
lestina, para que los intereses de
la burguesía chilena copen rápi-
damente sectores económicos sin
limitaciones, para luego buscar
“invertir” en Chile, desde una
posición asimétrica, subordina-
da. Y están felices con sus empre-
sas de join venture; por ejemplo,
el grupo Crédito que no tiene
sucursal en Santiago, está pro-
moviendo que su asociada BCI
(banco de origen chileno) abra
una sucursal en Lima en 2022.
El final del primer gobier-
no de Alan García (1990) es el
hito bajo el cual está enterrada,
para los escépticos, los teóricos
burgueses optimistas, los razo-
namientos lineales y unilatera-
les, la burguesía peruana como
clase social con intereses pro-
pios. Si la historia pudiese ha-
blar quizá le diría, como aquella
copla: “cuando quise (gobierno
de Velasco) no quisiste, y aho-
ra que tú quieres (hipótesis no
demostrada) ya no quiero”.
La acción de los llamados
Doce Apóstoles (10) de 1985 a
1990, hace ostensible la visión
del capitalismo en Perú: sin
perspectiva estratégica, sin am-
bición histórica, sin sentido
10 | UNIDAD PORTEÑA
de mercado propio o de patria,
su excesivo privilegio del corto
plazo, su ausencia de visión de
grupo dominante y sus intereses
altamente individualizados, su
ausencia, sin remordimientos,
de una visión de clase dominan-
te. Pero lo anterior solamente
muestra que el capitalismo en
Perú, que la burguesía en Perú,
que es una clase simple de ideas,
“pragmática” la llaman algunos
analistas, es una feliz seguidora
de las tendencias del capitalismo
internacional y con ello se sien-
te plenamente realizada; en los
primeros años del siglo XXI se
muestra servilmente amical con
la burguesía chilena. Y esto tiene
consecuencias para todo enfoque
de cambio y revolución en Perú.
2.5. La revolución como un
enfoque de desarrollo
social
Una revolución es la susti-
tución de una clase dominante
por otra. Cualquier otra acción
es solamente un cambio polí-
tico. Al primer cuarto del siglo
XXI se discute si puede ser pací-
fica o violenta, lo cual solamente
se podrá decidir con el desarrollo
de los acontecimientos, por la re-
sistencia del adversario. En Perú
cada mes, cada año, está más cla-
ro para los trabajadores, para el
pueblo, que la burguesía tiene
que ser sustituida, apartada, de-
rrocada, por los trabajadores or-
ganizados. Y en Perú esta acción
revolucionaria cumple además
la función de preservar el país,
de mantener nuestra historia y
cultura de pueblo autónomo, de
pueblo con cultura propia irra-
diándolo al mundo. Hemos sido
un ejemplo, un foco cultural en
América del Sur y esa identidad
debemos mantenerla. Debemos
honrar a nuestros antepasados.
Las revoluciones que lle-
varon a la burguesía al poder o
lo que es lo mismo, que la convir-
tió en dominante en la formación
económica social o sociedad, en
Inglaterra, Francia, los países
clásicos en el desarrollo del ca-
pitalismo, fueron violentas por
antonomasia. En el mundo la
Revolución Francesa de 1789 es
el máximo ejemplo revolucio-
nario aceptado sin cuestiona-
mientos. Simétricamente la Re-
volución Gloriosa de Inglaterra
(1688-1689) es un hito central en
el crecimiento político burgués,
que permite ver la interacción de
los cambios económicos-políti-
cos, pero que “en última instan-
cia” (11) los aspectos económicos
o de relaciones de producción,
son los que condicionan la po-
lítica, la cultura y los cambios
militares, así como la construc-
ción de la dominación o hege-
monía del modo de producción
capitalista en la sociedad ingle-
sa, como ejemplo histórico (12)
La guerra civil en USA,
conocida también como Gue-
rra de Secesión, de 1861 a 1865,
también fue una revolución por
el dominio del capitalismo en
USA, liquidando la servidumbre
y esclavismo de los territorios
del Sur (13), además de aplas-
tar los últimos rezagos ideo-
lógicos asociados a Inglaterra.
Tanto respecto a la Revo-
lución Gloriosa, la Revolución
Francesa o la Guerra Civil USA,
no se relata, no se dice y lo que
no se quiere decir es que me-
diante esos cambios violentos,
el capitalismo, la burguesía,
construyó y afianzó su dominio
político, económico, cultural y
militar en la sociedad inglesa,
francesa y de USA, ejerciéndose
el prevalente dominio del modo
de producción capitalista, que
luego se convirtió en hegemóni-
co en Inglaterra, Francia, USA y
a nivel mundial, y que es explica-
do, percibido y justificado ahora,
al año 2021, como algo normal,
natural y necesario para la so-
ciedad humana. Se oculta que
es un producto histórico y como
tal esta sociedad será sustituida
por otra que tome sus logros y
avances, para continuar con el
progreso y bienestar humano.
En el caso de Perú de 1968
a 1975, la violencia o potencial
uso de la misma contra los terra-
tenientes, contra las relaciones de
servidumbre, contra los enclaves
autónomos agrícolas y petrole-
ros, estaba garantizada por que
la Fuerza Armada encabezó el
derrocamiento de estos grupos
como clase dominante. Hubo
violencia para que el capitalismo
se afiance en Perú? Naturalmen-
te, obviamente que sí. La revo-
lución fue llevada a cabo por las
Fuerzas Armadas de Perú. Que
los gamonales, funcionarios y
empleaditos de enclaves y sus
descendientes se hayan sentido
desplazados, es porque ello era el
objetivo de esa revolución y ade-
más, algunos no se adecuaron a
las transformaciones, de modo
que junto a otros, continúan
mostrando su oposición, discon-
formidad, añoranzas y posición
contraria a la revolución que se
llevó a cabo de 1968 a 1975, y
cuyos objetivos fueron asentar e
impulsar el capitalismo en Perú.
Que la revolución capitalis-
ta (1968-1975) y de modo general
el período de impulso decisivo a
un capitalismo peruano, es decir
un crecimiento capitalista con
objetivos de nación o Estado ca-
pitalista propio de Perú, que se
encuentra desde 1968 a 1990, no
haya generado una clase bur-
guesa con objetivos nacionales,
una clase con ambición de creci-
miento, de presencia y dominio
económico y presencia interna-
cional, es un resultado histórico
del capitalismo en Perú, como
parte del capitalismo interna-
cional dominante a nivel mun-
dial, al cual con mucho agrado
se adscriben nuestros burgue-
ses, pues obtienen beneficios y
seguridad, situándose en una
posición de colonia del capital fi-

nanciero internacional. Pero este
comportamiento, esta forma de
“ser capitalista” es propio, úni-
co o solamente observable en
Perú? NO, de ninguna manera.
2.6. Marco general de la
revolución
El principio general dice
que sin teoría revolucionaria no
es posible una revolución, se ve-
rifica y agudiza en el siglo XXI.
Para tratar sobre la revolución
es imprescindible actualizar el
análisis de cuatro temas que for-
man, en Perú y Latinoamérica,
el marco teórico-práctico de la
alternativa política actual: So-
cialismo o Barbarie (C. Marx).
a. Capitalismo Monopólico,
Capital Financiero y Oligar-
quía Capitalista.
b. Parasitismo, Descomposi-
ción del Capitalismo y los
Estados Fallidos.
c. J.C. Mariátegui. El Mariate-
guismo y el Bolivarianismo.
d. El enfoque de clase como
eje imprescindible de una
política revolucionaria.
a. apitalismo Monopólico,
Capital Financiero y
Oligarquía Capitalista.
El primer tema se refie-
re a las condiciones materia-
les de reproducción de la vida
humana en un sistema capita-
lista, en este primer cuarto del
siglo XXI. El capitalismo como
modo de producción tiene en
El Capital de Carlos Marx, cu-
yos tres libros fueron publica-
dos en 1867(I), 1885(Ii) y 1894
(III), un análisis crítico vigente.
Los desarrollos del capi-
talismo como gran capital, ca-
pital monopólico y capital fi-
nanciero han sido analizados
y criticados centralmente en El
imperialismo, fase superior del
Capitalismo (1917) de Lenin,
un enfoque que al 2021 mantie-
ne esencialmente actualidad.
El ámbito científico y epis-
temológico que cubren las obras
citadas y otras, que en conjunto
conforman la teoría marxista o
teoría revolucionaria respec-
to al capitalismo, provocan en
la ciencia burguesa reacciones
como ignorarlos, tergiversar-
los, sustituirlos, luego de haber
tratado de combatirlos median-
te diversas perspectivas (Von
Hayek, Von Mises, Rosens-
tein-Rodan, Keynes, Rostow,
Friedman por ejemplo), desde
el último cuarto del siglo XIX.
Es importante reconocer
que al 2021 existe un aplastante
dominio ideológico-cultural de
la burguesía que, como su ten-
dencia económica, es mundial
y se presenta en dos perfiles:
I. Colonialidad. “…el colo-
nialismo ha calado tan hon-
damente en nosotros, que
sólo leemos con verdadero
respeto a los autores antico-
lonialistas difundidos des-
de las metrópolis”. Roberto
Fernández Retamar, citado
por A. Borón (14) en el artí-
culo “La cuestión del Impe-
rialismo” (p. 477)
II. Academicismo. Como una
forma asociada a la anterior
se encuentra que, quienes
UNIDAD PORTEÑA | 11
escriben sobre marxismo,
deben estar reconocidos por
la academia, deben ser doc-
tores en algo -porque no hay
doctorados en marxismo. Si
ello no ocurre, las ideas no
circulan, no tienen acogida,
son ignoradas aún en círcu-
los obreros o donde llegue
la influencia ideológica bur-
guesa de esta tendencia, olvi-
dando que, así como no hay
doctorados en marxismo, la
teoría marxista no ha sido
desarrollada en la academia
porque la cultura burguesa
no la ha aceptado, no la acep-
ta ni la aceptará, aunque sí la
tolera como muestra de su
apertura y aparente “espíritu
democrático”. O la historia
muestra un enfoque en la an-
típoda de lo aquí señalado?
En este contexto no es extra-
ño que no se reconozca vigencia
a los aportes de Lenin sobre su
teoría del capital monopolísta,
el capital financiero, y se plan-
tee “desarrollar”, “actualizar” la
teoría marxista tratando temas
secundarios como si fuesen deci-
sivos y escribiendo por ejemplo,
como lo hace Atilio A.Borón en
12 | UNIDAD PORTEÑA
el artículo sobre el Imperialismo
(La cuestión del Imperialismo),
sin considerar en la bibliogra-
fía al Imperialismo, fase supe-
rior del capitalismo, de Lenin !!!
En el documento indicado, A.
Borón (2006) anota:
Es indudable que el impe-
rialismo en su fase actual –su
estructura, su lógica de funcio-
namiento, sus consecuencias
y sus contradicciones– no se
puede comprender adecuada-
mente procediendo a una re-
lectura talmúdica de los tex-
tos clásicos. No porque ellos
estuviesen equivocados, como
lo afirma con insistencia la de-
recha, sino porque el capitalis-
mo es un sistema cambiante y
altamente dinámico que, como
escribieran Marx y Engels en
El Manifiesto Comunista, “se
revoluciona incesantemente a
sí mismo”. Por consiguiente,
mal se podría entender al im-
perialismo de comienzos del
siglo XXI armados con el ins-
trumento teórico y conceptual
que nos proveen solamente los
autores referidos anteriormen-
te. (p. 485), (negrita, del autor)
Es momento de ver que
es lo que no se podría entender
(del) imperialismo, armados con
el instrumento teórico y concep-
tual que nos proveen solamen-
te los autores (clásicos). Qué
es aquello a lo que no debería
aplicarse una “relectura talmú-
dica”. Al tratar sobre el impe-
rialismo, indudablemente es a
Lenin (15) a quien nos referimos
y de cuyo texto nos permitimos
resumir que el imperialismo es:
• Concentración. Monopolios
(de Producción, de Capital).
• Fusión Bancos e Industria.
Capital Financiero. Rentis-
tas.
• Grandes excedentes moneta-
rios. Exportación de Capital
• Reparto del mundo entre las
grandes potencias que llega
a su fin.
• Obtener Superganancias
de la explotación mundial.
Explotación de naciones
pequeñas y débiles.
• Crecimiento de la Ideología
Imperialista.
• Tendencia política a la Vio-
lencia y a la Reacción.
• Creación y fortalecimiento
de Estados Acreedores, Ren-
tistas: Capitalismo parasita-
rio y en descomposición.
• Tendencia a corromper las
relaciones sociales y al movi-
miento obrero en particular,
robusteciendo el oportunis-
mo, el aburguesamiento del
proletariado.
• Crecimiento del capitalismo
a una velocidad mayor que
antes, con mayor desigual-
dad.
• Elevada socialización de
la producción, lo que hace
que sea un capitalismo en
transición que “con todo (la
envoltura de las relaciones
de economía y de propiedad
privada que ya no corres-
ponden al contenido)… será
ineluctablemente suprimi-
da” (Lenin, 2017; p. 209;
paréntesis del autor). El do-
minio del capital financiero
es la etapa de transición del
capitalismo a una formación
económica social superior.
En 2017 se conmemoró cien
años de la publicación de Lenin,
de la cual es importante citar:
El Imperialismo, o do-
minio del capital financiero,
es el capitalismo en su grado
más alto, en el que esta sepa-
ración (propiedad-produc-
ción; capital monetario-capital
industrial; rentistas-gestores
directos del capital) adquiere
unas proporciones inmensas.
El predominio del capital fi-
nanciero sobre todas las de-
más formas de capital impli-
ca el predominio del rentista
y de la oligarquía financiera.
( p 182) (paréntesis, del au-
tor, con ideas del original)
De manera que pue-
den usarse como sinónimos:
Imperialismo=
=Dominio del Capital Financiero
= Predominio de la Oligarquía
Financiera.
O sucinto:
IMPERIALISMO=CAPITAL
FINANCIERO=OLIGARQUÍA
FINANCIERA
Algunos, por no decir mu-
chísimos analistas, científicos,
teóricos o comentaristas del mar-
xismo, sostienen abiertamente
y “demuestran” los errores de
este análisis, de esta corriente de
pensamiento. Parece que es po-
sible encontrar otros que, con la
mayor buena voluntad de la que
son capaces de reunir, refuer-
zan o “hacen avanzar” las ideas
del marxismo hacia cumbres
insospechadas, aún para ellos.
Cómo sostener que el en-
foque sobre el Imperialismo de
autores clásicos como Lenin, es-
tán en ya anticuados? Pues plan-
teando que la teorización clásica
del Imperialismo (recordemos:
sin tener en la bibliografía a Le-
nin), ingresó en un período de
crisis por la inadecuación, al si-
glo XXI, de sus (tres) “premisas
más distintivas”, siendo ellas:
1. La clásica relación: crisis
capitalista y expansión
imperialista. Tesis que fue
desmentida, según exhibe A
Borón (2006, p 478-479)
2. La rivalidad económica
entre las grandes potencias
metropolitanas ya no se tra-
ducía en conflictos armados
como en la 1ra y 2da guerras
mundiales. Esta “constata-
ción”, muestra lo arcaico del
enfoque del Imperialismo,
sostiene A. Borón (2006, p
.479).

3. Se ha constatado una acele-
rada fase de mundialización
de la acumulación capitalis-
ta, una expansión sin pre-
cedentes del capitalismo a
lo largo y ancho del planea.
Lo cual deja desfasada a las
ideas del enfoque Imperia-
lismo clásico, argumenta A.
Borón (2006, p 479-480)
Antes de continuar es nece-
sario comentar: la premisa 1) no
es posible encontrarla formulada
en la obra de Lenin; la 2) deja de
lado, por razones desconocidas
proviniendo las ideas de un teó-
rico marxista como A. Borón, la
creación del campo socialista
luego de la 2da G.M y la abierta,
dura y sin cuartel lucha librada
con la URSS, así como la induda-
ble hegemonía de USA sobre Eu-
ropa y Japón; sobre la 3) solo di-
remos que ya Lenin (2006) señaló
que en la etapa del Imperialismo
En su conjunto, el ca-
pitalismo crece con una ra-
pidez incomparablemente
mayor que antes, pero este
crecimiento no sólo es cada
vez más desigual, sino que
la desigualdad se manifiesta
asimismo, de un modo par-
ticular, en la descomposición
de los países donde el capi-
tal ocupa las posiciones más
firmes (Inglaterra) (p. 208)
El impulso con la que A.
Borón tiene intención de con-
tribuir con el marxismo hoy
(siglo XXI) contiene, además
de las precisiones anteriores,
tres alcances que percibe como
“novedosas contribuciones”:
1. El fenómeno de la finan-
ciarización de la economía
mundial. A. Borón (2006, p
481)
2. El rol de USA como potencia
integradora y organizadora
del sistema imperialista. A.
Borón (206, p. 481).
3. Nuevos instrumentos de do-
minación (FMI, BM, OMC,
BID), que reemplazan y/o
complementan los disposi-
tivos clásicos disponibles a
comienzos del siglo XX. A.
Borón (2006, p. 482).
Sobre el tema 1, parece que
Lenin lo ha planteado cuando se-
ñala la exportación de capital, las
superganancias a nivel mundial
pero sobre todo cuando remarca
el dominio del capital financiero
sobre las demás formas de capital.
Para el tema 2, es clave con-
siderar el rol de un estado USA,
como sede de las principales
empresas monopólicas y del ca-
pital financiero, luego fortalecer
su economía y especialmente su
control militar sobre el resto es-
tados capitalistas, especialmente
luego de la 2da G.M, se ha con-
vertido en hegemónico en el
mundo capitalista. Este fenóme-
no lleva, de modo natural a USA
a implementar políticas interna-
cionales para consolidar y man-
tener su dominio. No obstante, el
resurgimiento del capital finan-
ciero en Europa y Japón y el rápi-
do crecimiento de la producción
en China incrementa, a partir de
1970 y cada vez con mayor fre-
cuencia e intensidad, las friccio-
nes con las empresas USA y por
tanto con el Estado USA, ponien-
do en debate y superando la idea
de un mundo unipolar (USA).
Que la hegemonía de USA
haya ocurrido, no ha significado
en ningún período de los úl-
timos 76 años (1945-2021) que
haya paz en el mundo, de modo
que la idea de “Ultraimperia-
lismo” (o Superimperialismo)
de Karl Kautsky, que A. Borón
(2006) destaca como “una tesis
sumamente sugerente -en la me-
dida que aludía a (la) posibilidad
de una colusión entre grandes
monopolios” (p. 479), no se ha re-
flejado en la hegemonía de USA
por una sola razón: el argumento
UNIDAD PORTEÑA | 13
de Lenin era correcto cuando se-
ñalaba que el crecimiento del Ca-
pital Financiero y el Capitalismo
en general no es capaz, no puede
trabajar por el bienestar de la hu-
manidad, no es competente para
trabajar (producir, intercam-
biar) sin violencia, sin guerras,
mediante la colaboración entre
capitalistas en general y finan-
cieros en particular, cual era la
tesis de K. Kautsky, que Lenin
llamó como un posible “ultra-
disparate”. Lenin (1917) (p. 196),
por ser un elemento de distrac-
ción de las contradicciones exis-
tentes, reales, del capitalismo.
Respecto al tema 3, cabe
tener presente que el capitalis-
mo tiene de manera intrínseca,
entre otras, dos características:
la división del trabajo en áreas
cada vez más especializadas y
una gran planificación de sus
actividades. Para los capitalistas
lo esencial es mantener y am-
pliar su acumulación, delegan-
do las actividades que no son
centrales a ello, pero mantener
a su disposición todas las herra-
mientas que puedan concebir,
para fortalecer su influencia y
control. Las instituciones inter-
nacionales de control financiero
y de proyectos que se refieren
a préstamos, endeudamientos
con Estados, venta de activos o
condiciones de operación para
extraer materias primas, fueron
creadas por y están sujetas a los
intereses del capital financiero,
como un desarrollo natural de
la división del trabajo en el capi-
talismo. Es una novedad? Tanto
como que la luna pasa por fa-
ses, hasta llegar a la luna llena.
El dominio del capital fi-
nanciero, de la oligarquía finan-
ciera, es un elemento central en
la economía y política al año
2021. Económicamente nos en-
contramos con sectores econó-
micos monopolizados, a nivel
internacional y nacional. En este
escenario, aún para desarrollar
14 | UNIDAD PORTEÑA
el capitalismo, recurrir a la pe-
queña producción, a la media-
na producción, es una posición
romántica, candorosa, de buena
voluntad e intención y en algu-
nos casos abiertamente reaccio-
narios. El capitalismo, desde hace
un siglo es capitalismo monopó-
lico; la libre competencia es un
slogan ideológico sin contenido
real, que no tiene impacto efecti-
vo en la economía oligopolizada
en la que nos encontramos. Por
esta razón y para concentrar las
reflexiones y el objetivo a com-
batir, es preferible el concepto
Oligarquía Capitalista, que a
su vez comprende la oligar-
quía financiera como articula-
dor central de la clase burguesa.
Cualquier alternativa eco-
nómica y política actual, tiene
que asumir procesos producti-
vos, inversiones de magnitudes
internacionales, estar enfocada
hacia el mercado internacional
y, especialmente, tomando en
cuenta las variables y procesos
con los que el capitalismo finan-
ciero actúa en los mercados y
países. En este contexto el sector
líder o agente económico cen-
tral, político y social del capita-
lismo es la Oligarquía Financie-
ra, en quien se debe concentrar
no solo el análisis, sino la edu-
cación de la población y las ac-
ciones políticas para combatirla
en los planos económicos, polí-
ticos, culturales y geopolíticos.
b. Parasitismo y Descomposición
del Capitalismo. Los Estados
Fallidos
El parasitismo y la descom-
posición del capitalismo, son
resultados tangibles de la etapa
de los monopolios, del capitalis-
mo financiero, de la oligarquía
financiera, del imperialismo.
Sintetizan un tema de fondo, el
control de la economía capitalis-
ta por el capital financiero, que
continúa generando fenómenos
económicos, políticos, cultu-
rales y militares, en gran parte
identificados por Lenin en la se-
gunda década del siglo pasado
y que se han profundizado. Ver
Lenin (2017) VIII. El parasitismo
y descomposición del capitalismo.
El parasitismo (ganar di-
nero sin producir), se ha confi-
gurado de manera monstruosa,
deforme, unilateral, pasando del
capitalismo monopólico Acree-
dor de inicios del siglo XX, a un
Capitalismo monopólico Deu-
dor-centralizado en el principal
estado del Capitalismo Finan-
ciero como es USA, con mayor
dureza a partir de la supresión
del patrón oro (1971). Este fenó-
meno tuvo su formulación teóri-
ca como economía monetarista
y ha derivado en la “financiari-
zación” de la economía, es de-
cir en la percepción que toda la
economía (de persona, empresa
o sociedad), es finanzas, endeu-
damiento, especulación, cual-
quier forma de actividad que sea
equivalente a tener dinero con el
menor esfuerzo posible (sin tra-
bajar o con el mínimo trabajo).
El copamiento de las eco-
nomías capitalistas por parte del
capital financiero, ha generado
que la financiarización y los
movimientos monetarios, sean
la tendencia mundial del capi-
talismo, económica e ideológi-
camente. Es trivial señalar que
la tendencia surge en las econo-
mías capitalistas avanzadas y
es repetida en los demás países
así, el mundo de las finanzas, de
los bienes raíces, de la economía
rentista (parasitaria), constitu-
ye la cúspide de las expectati-
vas económicas y sociales, el
modelo deseado para cualquier
pequeño burgués que crea que
sabe algo de finanzas. Estos fe-
nómenos se ven reforzados por
el incremento de los precios de
bienes raíces (tierra y edificios)
y el crecimiento exponencial de
los rendimientos de las bolsas
de valores, especialmente la de
Nueva York, de manera general
y de acciones de empresa tec-
nológicas de consumo masivo
en particular. Que sea una bur-
buja especulativa, poco importa.
Se dijo anteriormente que
el Capitalismo Financiero pasó
de ser Acreedor (inicios XX) a ser
Deudor (desde el fin del patrón
Oro, 1971), esto significa que la
Oligarquía Financiera ha pa-
sado de ganar dinero prestan-
do, arriesgando, a enriquecerse
recibiendo dinero, sin riesgo
y por tanto sin límite para sus
acciones. Como es posible ga-
nar dinero siendo Deudor? Por
la mayor centralización del ca-
pital financiero, por la tenen-
cia de un monopolio monetario
(US$), que ha capitalizado, en
el tiempo, la anterior posición
de acreedor (prestamista) y el
uso potencial de la coerción, de
la fuerza económica y diplomá-
tica que permiten controlar los
movimientos financieros, co-
merciales e indudablemente la
fuerza militar. Todo esto se ha
manifestado en la expansión
del Estado Rentista en USA.
Este avance y cambio del
capitalismo financiero se mues-
tra en el libro de Michael Hud-
son (16) “Super Imperialismo. La
Estrategia del Imperio Americano”,
publicado en 1972, reeditado
en 2003. La financiarización es
posible tanto como resultado
monopolístico del capitalismo,
siguiendo la dinámica del ca-
pitalismo financiero, como por
las nuevas condiciones creadas
por las necesidades de financiar
las guerras que tenía USA, de
modo que los déficits presu-
puestales condujeron a que en
1971 (guerra de Vietnam), el país
no tenía capacidad para mante-
ner la cobertura de oro del dólar
USA (ya el dólar USA no podría
cambiarse por oro a 35 dólares
la onza) (Hudson (2002), (p.4);
situación que -inadvertidamen-
te=sin planificarlo de esa forma-
creó un nuevo sistema finan-
 UNIDAD PORTEÑA | 15

ciero internacional, basado en 6. A través del FMI y BM, 8. Los Tratados de Libre Co-
la deuda en dólares, esencial- el capital financiero USA mercio (TLC) o “acuerdos
mente mediante los Bonos del moviliza ayuda multila- de reparto mercado ordena-
Tesoro USA (algunos se refieren teral para subsidiar a las do” bilaterales; contienen las
o referían al mismo, sin mucha oligarquías clientes y a los limitaciones para los países
precisión, como “patrón dólar”). partidos políticos (en diver- como parte de un “acuerdo
M. Hudson (2003) reseña sos países), que sirven a los entre iguales”(siendo dos
que en una conferencia luego de intereses de USA antes que países profundamente asi-
“describir cómo el nuevo están- a los de su propio país. Con métricos desde el punto de
dar de letras del Tesoro de las el FMI y BM obligan a los vista económico, en el caso
finanzas mundiales había reem- gobiernos a deformar sus de Perú-USA, por ejemplo).
plazado al estándar de cambio economías para servir los Los TLC no toman en cuenta
de oro”.. (Herman Kahn, otro diseños USA. (p. 12) la capacidad de producción
conferencista comentó que) “He- 7. Las políticas del FMI y BM local, antes bien, garantizan
mos logrado la mayor estafa ja- obligan a los países deudo- una participación de merca-
más lograda” (p. 10). La gestión res a seguir las políticas de do, fija o creciente, a provee-
de los Bonos de Tesoro, permite: austeridad, privatizaciones, dores USA. (p. 13)
1. Que una política que favo- dependencia agrícola, finan- En la Figura 1 se muestra el
rece al capital financiero, ciera, tecnológica y militar esquema de lo que Michael Hud-
sea vista como una acción hacia USA. La dependencia son denomina Super Imperialis-
técnica del Estado USA, sin agrícola se refiere a alimen- mo, que no es sino un fenómeno
aparente sector económico tos (maíz, trigo, papa y de evolución del Capital Finan-
beneficiado; algo para “to- otros), no a exportaciones ciero en su etapa de Deudor,
dos los ciudadanos USA” de artículos consumidos “en que ha sucedido a la de Acree-
2. Que USA cambie una debi- el mercado internacional” dor que tuvo hasta la década de
lidad (Déficits de pagos) en como arándanos, uvas, pal- los años 60 del siglo XX, y que
una fortaleza. tas etc. Los alimentos agríco- fue analizada por Lenin en la
3. Que USA utilice el discur- las son subsidiados en USA primera década del aquel siglo.
so del libre mercado para y UE. Figura 1. Esquema de Es-
adecuar “las fuerzas del
Figura 1
mercado a fin de promover
la dependencia internacional
de USA” (p. 11)
4. Al ser parte de la base mo-
netaria mundial, los Bonos
del Tesoro no tendrán de
pagarse, pudiendo circular
indefinidamente, caracte-
rística que lo convierte en
un impuesto que se aplica a
todos los países y por tanto
a todas las personas, para
mantener y acrecentar el
bienestar de la oligarquía
capitalista
5. Con los Bonos de su Tesoro,
USA sostiene un sistema
monetario que le permite
endeudarse sin restricciones
internas. Esto exige que No
se creen bloques regionales
de compensación de divi-
FED: Federal Reserve System (Sistema de Reserva Federal de USA)
sas, que se convertirían en
X<M: Exportaciones menores que Importaciones. Genera déficit en la
verdaderas “amenazas a la
Balanza Comercial
existencia de USA”.
Fuente: Michael Hudson. Super Imperialismo… Elaboración propia.
16 | UNIDAD PORTEÑA
tado Deudor del Capitalismo
Financiero de USA, desde la dé-
cada de los años 70 del siglo XX.
Hagamos un paréntesis.
Busquemos una explicación a la
pregunta: Qué ha llevado, qué
hizo posible que el Capital Fi-
nanciero USA haya progresado
hasta el nivel alcanzado en 2021?
Una de las razones es la propia
dinámica del capitalismo y el rol
del capital financiero en el grupo
dominante, la financiarización
es la revelación de la transfe-
rencia de excedentes desde el
capital productivo, comercial,
bienes raíces, hacia el capital
especulativo puro y duro de
acciones, bonos y derivados fi-
nancieros; en ese sentido puede
leerse como una suerte de explo-
tación del capital financiero a los
demás sectores del capital. Pero
ese no es el problema de fondo.
Al formular la teorización
sobre el imperialismo o domi-
nio de la oligarquía financiera,
Lenin denunciaba también que,
en la estructura del movimien-
to obrero se percibía una ten-
dencia al aburguesamiento de
algunos dirigentes. Ello no era
sino el cumplimiento de la pa-
rábola cristiana de Esaú: vender
la primogenitura por un plato de
lentejas (Génesis 25: 30-34). Los
movimientos obreros o de iz-
quierda o revolucionarios de los
países de capitalismo avanzado
(UE,USA, Japón y otros) fue-
ron material e ideológicamente,
aplastados por el capitalismo
luego de la 1ra y con mayor cru-
deza post 2da Guerra Mundial.
La burguesía que aprende
rápido e internacionaliza sus
conclusiones, vía los mecanis-
mos estatales a su disposición,
ha profundizado, sistemática-
mente las características del
fenómeno descrito por Lenin,
respecto a sus adversarios: el
movimiento obrero y los revo-
lucionarios, ha desplegado y
continúa haciéndolo, niveles
de control por ejemplo median-
te organizaciones paralelas a las
formadas por los trabajadores,
otorgando dádivas a dirigentes
populares, corrompiendo ma-
terial e ideológicamente a otros,
con el objetivo de desvirtuar
y adocenar a los movimientos
populares, evitando la articu-
lación revolucionaria. En Perú
y América Latina conocemos
el paralelismo, la traición y co-
rrupción de dirigentes y orga-
nizaciones gremiales y políticas.
Como parte de esta tenden-
cia en Latinoamérica, en base
al sentimiento de colonia tan
presente en algunos sectores de
nuestras sociedades, movimien-
tos internacionales burgueses
actúan como asesores, y educan
ideológicamente y en las calles,
a partidos políticos y movi-
mientos populares. En este ru-
bro, instituciones del partido Re-
publicano USA están presentes
a través de las diversas iglesias
protestantes o “cristianas”, como
les agrada denominarse, las cua-
les tienen roles de partidos políti-
cos, persiguen objetivos políticos
disfrazados de prédica religiosa.
El partido Vox, que en Es-
paña es tildado de fascista, a
partir de agosto 2021 se ha mos-
trado ampliamente en Latinoa-
mérica, especialmente en Méxi-
co. En Perú Vox se ha presentado
(agosto-setiembre 2021), con ba-
gajes y banderas de Borgoña
junto a Fuerza Popular, Avanza
País y sobre todo Renovación
Popular, organización política
de la cofradía cristiana, apos-
tólica y romana del Opus Dei.
En Europa (para el caso,
USA tiene un nivel menor de
progreso y por tanto de alter-
nativas) la socialdemocracia es
ahora un conjunto temeroso
de políticos, incapaces de pro-
nunciar la palabra revolución,
porque sería políticamente in-
correcto. En los movimientos de
izquierda se debaten soluciones
teóricamente parciales, limitadas
a casos puntuales como salario
mínimo o salario universal, vi-
viendas desocupadas, migran-
tes, ecología, igualdad racial y
de género, minorías sexuales y
audazmente llegan a luchas por
el cambio climático y las conse-
cuencias de la colonización en
los pueblos sometidos en los si-
glos XV-XIX o brindan asesorías,
adecuadamente remuneradas y
políticamente de baja utilidad,
a movimientos populares lati-
noamericanos ingenuos o con
alguna conciencia de coloniaje.
Sin oponente, la burgue-
sía oligárquica se ha apropiado,
literalmente, del mundo. No
obstante, siguiendo un princi-
pio general, sus numerosas y
acumuladas actividades están
transformándose en fenóme-
nos cualitativamente diferen-
tes. Cerremos el paréntesis.
La propensión del Capita-
lismo Financiero hegemónico en
USA, ha llevado que, a partir de
la crisis hipotecaria y financiera
de 2008, este país y la UE lleven a
cabo una política de incrementar
la masa monetaria, llamada Ex-
pansión Cuantitativa (QE), como
forma de apalancar sus merca-
dos y evitar (posponer), la crisis.
A 2021 la deuda se ha incremen-
tado y los volúmenes de efectivo
en el mercado son tan elevados
que existen intereses negativos
para depósitos bancarios en al-
gunos bancos centrales y aún con
algunos segmentos de clientes,
especialmente en la Unión Euro-
pea (UE), aunque las orejas del
pequeño monstruo (alta deuda
+ intereses negativos), se mues-
tran también, limitadamente
en USA, que oficialmente dice
tener problemas con una ten-
dencia pasajera de la inflación.
Como resultado de la QE,
a octubre 2021 se estima que los
riesgos de inflación son altos
en USA, encontrándose analis-

tas que sostienen que el camino
para una hiperinflación ha em-
pezado y no se detendrá hasta
que el mercado se reestructure
radicalmente, lo que es igual a
decir que estamos a puertas de
una gran crisis generada por el
capital financiero. En este mar-
co, el gobierno demócrata de J.
Biden tiene programas de re-
activación de su economía que
comprende inyectar más dinero.
Están en discusión 3 mil millo-
nes de dólares, para estimular-
la y “recuperar competitividad
frente a China”. Que lo consiga
es un acertijo que es respondi-
do negativamente por algunos
estudiosos de la misma USA.
Además de lo anterior, el
capitalismo financiero mantie-
ne sus conocidos y tradiciona-
les métodos para el traslado de
excedente económico desde
países explotados, por vías di-
rectas (remoción de ganancias,
intereses por préstamos, endeu-
damiento y renegociación, venta
de productos industrializados,
y otras) e indirectas (extracción
de recursos naturales, compra
de insumos o productos semie-
laborados, compra de agroex-
portación), las cuales continúan
mostrando, en el largo plazo,
precios con tendencias de cre-
cimiento menores a la de pro-
ductos que importan los países
periféricos; a lo anterior debe
adicionarse la explotación de la
mano de obra cuyos salarios son,
por definición, muy inferiores a
los de la mano de obra de países
capitalistas avanzados. El profe-
sor Ruy Mauro Marini, a inicios
de los años 70, planteó ideas que
aún son parte del debate (17).
La Descomposición del ca-
pitalismo significa la renuncia,
el abandono, la segregación, la
separación del capital producti-
vo del capital financiero, fenó-
meno que alcanza su máxima
expresión en la especialización
del Estado Rentista por exce-
lencia, que no es otro que USA.
Los “marxistas” Richard
Nixon (Presidente USA) y Henry
Kissinger (Secretario de Estado),
se entrevistaron oficialmente
con Mao Tse Tung (Presidente
de China, entre otros cargos) y
Chou En Lai (Canciller), el 21-
2-1971, para restablecer las rela-
ciones diplomáticas China-USA,
visita que geopolíticamente se
interpretaba como el cerco a
la URSS por parte de USA, te-
niendo a China de aliado. Lo
que tenía algo de cierto basán-
dose en aquello de “el enemigo
de mi enemigo, es mi amigo”.
Luego, la terrible y tosca reali-
dad demostró que solamente era
un paso más en la descompo-
sición del capitalismo en USA.
Luego de la visita, la oligarquía
financiera USA se frotaba las
manos, porque para el capitalis-
mo se trata siempre de negocios
y más que eso, de ganancias.
Lo de “marxistas” a Nixon
y Kissinger, es porque luego
circularon comentarios, que
persisten en parte, en el sentido
que la idea de fondo que mane-
jaban es que, si su economía era
capitalista, luego la población
exigiría “más libertad y demo-
cracia, lo que destruiría al siste-
ma comunista, llevando a China
al capitalismo”. (La conocida
relación Basa-Superestructura,
que parece no es tan lineal). So-
bre si China es o no capitalista,
es un debate abierto, pero que
el sistema político se mantiene
luego de 50 años, no hay duda.
Realmente porqué la visita
de Nixon a China ? En la década
de los 70 el sistema capitalista re-
quería nuevas formas de ampliar
sus ganancias, nuevos mercados
donde valorizarse, nuevos es-
pacios para generar plusvalía y
ampliar sus mercados. El abierto
conflicto con la URSS (“Guerra
Fría”), era una forma de con-
flicto tradicional por mercados
del capitalismo, en este caso con
UNIDAD PORTEÑA | 17
una alta carga ideológica, contra
el “comunismo”. La otra forma
era atacar, con distinta táctica,
al otro gran mercado, que por
coincidencia era también “co-
munista”, China el país con la
mayor población del mundo;
un gran mercado potencial. Na-
turalmente que la expectati-
va pasaba por hacer de China
una colonia capitalista más, al
igual que con Rusia que, para
sorpresa de los estrategos USA
tuvo un fuerte brote de nacio-
nalismo que lo ha convertido en
país competidor para algunos
productos naturales, con la UE.
El movimiento de inver-
siones hacia China manifestaba
una cara de la descomposición
del capitalismo, porque lo di-
rigía la oligarquía financiera en
un movimiento para incremen-
tar sus descendentes ganancias
mediante la plusvalía generada
en China, mediante las ventas
en China, para lo cual desloca-
lizó industria de USA, con des-
tino a China, quedándose con
un país cuya economía, central-
mente, se llevaba a cabo en las
bolsas de valores de Nueva York
y Chicago, además de la produc-
ción militar y la creciente priva-
tización del programa espacial.
Al año 2021, cincuenta años
luego del desembarco en Chi-
na, la economía en USA tiene
la mayor financiarización en-
tre las economías de capitalis-
mo avanzado. Con inyecciones
constantes de dinero a empresas
y familias, “para no suspender la
cadena de pagos, para mantener
el consumo”; con planes de con-
tinuar con la Expansión Cuanti-
tativa, sin límite, versus el riesgo
de la explosión del descontento
social, diferencias étnicas y una
inmigración que es rechazada
oficialmente, no obstante ser la
única fuente de mano de obra
para trabajos que los anglosajo-
nes nativos no desean realizar.
USA ha llegado a ser una
18 | UNIDAD PORTEÑA
economía sin capacidad pro-
ductiva que compita con las eco-
nomías de Asia; una economía
que en algunos sectores se re-
convirtió a exportadora de insu-
mos, los cuales son trasladados
a China, que devuelve produc-
tos terminados, a costos difíciles
de ser reducidos en USA. Una
economía que va lentamente
dejando en el camino indicado-
res relevantes como número de
patentes al año; empresas inno-
vadoras en sectores de capital
productivo; y viajes espaciales
con empresas privadas que reci-
ben financiamiento del gobierno.
Al conjunto señalado se
agregan características del mer-
cado laboral actual: a) constante
reducción de salarios o costos
de producción mediante nuevas
formas de trabajo fundamental-
mente en Servicios, así se tiene
la profunda Precarizacion labo-
ral (trabajos sin beneficios, sola-
mente un Salario bajo), la Ilusión
del emprendimiento; b) Reduc-
ción de costos fijos -teletrabajo,
menor uso de locales, mayor
robotización; c) Elitización de
los puestos de trabajo (estudios
asociados a determinados cen-
tros, “meritocraria” como forma
de encubrir relaciones sociales)
d) Explosión de la informalidad
como forma de supervivencia.
La descomposición multi-
plica el riesgo de violencia para
mantener los términos econó-
micos en que se basa su bien-
estar, y para utilizar las fuerzas
armadas con mayor alcance y
poder de combate de toda la his-
toria humana. Gasolina y yerba
seca juntos. Un escenario propi-
cio para el aventurerismo políti-
co, como el de Donal Trump o la
inacción por carencia de alterna-
tivas aceptables con Joe Biden.
Esta descomposición lleva a
reconfigurar a nivel internacio-
nal la presencia del capital finan-
ciero, ahondando rasgos como:
a) otorgar mayores obliga-
ciones a los asociados del
capital financiero en sus res-
pectivos países; esto desde
la perspectiva USA significa
que sus socios luchen por sí
mismos;
b) impulsar alianzas con países
o partidos políticos que
desplieguen acciones duras,
violentas, como parte de una
estrategia de supervivencia
y expansión (por ejemplo
UK, Brasil, Australia, Israel,
Corea del Sur; grupos como
Isis entre los musulmanes,
Pax en España, entre otros);
c) abandono físico de zonas
territoriales que son costo-
sas de atender, por ejemplo
Afganistán;
d) Priorizar la atención de
mercados que la Oligar-
quía Financiera conoce con
mayor detalle y, lo que es de
mayor importancia, tienen
una mayor concentración de
capital físico, mayor enraiza-
miento del capital financiero
o tienen alta importancia
geopolítica para USA, como
son la UE, Japón, Australia,
UK, Ucrania;
e) Concentrarse en el sudeste
asiático, alrededor de China
con políticas de control y
potencial amenaza de con-
flicto bélico;
f) Fuerzas armadas con un
perfil de alta tecnología y
soldados de diversas nacio-
nalidades y tipo de contrato,
manteniendo la dirección de
nativos USA.
Si se compara con el esce-
nario previo a las guerras mun-
diales (1ra y 2da), es posible
identificar rasgos semejantes.
Se trata del capitalismo puro y
duro, con su sector oligárquico
hegemónico y defendiendo sus
posiciones. Y eso es importante
tenerlo presente: ninguna clase
social, ninguna elite abando-
na su primacía en el escenario
histórico sin defender su mun-
do, su ideología, sus intereses.
El Estado Fallido (EF) es
una construcción política eco-
nómica del capital financiero
y la geopolítica de USA. Esta
es una nueva forma de control
que, en los primeros 20 años del
siglo XXI, va instalándose a ni-
vel internacional. Formalmente
es analizada y justificada (en el
sentido de su inevitabilidad),
por la ideología dominante,
mediante estudios promovidos
en laboratorios de ideas (think
tanks) subsidiados generalmen-
te por USA. Ashraf Ghani pre-
sidente de Afganistán hasta su
huida el 15 de agosto de 2021,
ante el avance militar de los Ta-
libanes, era un teórico en Esta-
dos Fallidos que fue protegido y
apadrinado por USA para llegar
al gobierno; luego abandonado
como muchos colaboradores del
imperio cuando ya no son útiles.
Los teóricos destacan dos
características en el EF: a) inter-
namente, no es capaz de ejercer
el poder coercitivo de modo sis-
temático en todo su territorio;
b) externamente, genera peligro
para los países vecinos por su
inestabilidad política, oleadas
de refugiados que salen de sus
fronteras, conflictos y revolu-
ciones, de manera que no es de-
seado como miembro de la co-
munidad internacional. John S.
Zapata, en La Teoría del Estado Fa-
llido: Entre Aproximaciones y Di-
sensos, muestra un panorama de
discusiones sobre el tema (18).
Si traducimos lo anterior
a lenguaje cotidiano tendremos
como particularidades del EF: el
punto a) coincide con: fragmen-
tación política y/o religiosa, con
fuerza militar. Pobreza y Desor-
ganización social con Altos Ni-
veles de Corrupción; el punto
b) significa preferencia discre-
cional: el Estado que muestra
alguna o varias de las particu-
laridades citadas y que NO sea

juzgado amigablemente por la
oligarquía capitalista, recibirá
campañas de publicidad interna-
cionales y nacionales, por todos
los medios posibles (tv de señal
abierta, tv por cable, internet, re-
des sociales, radio, periódicos y
revistas), mostrando el “peligro
social” que representa y justifi-
cando las acciones económicas,
de aislamiento y bloqueo, ade-
más de promover movilizacio-
nes de la población en contra del
gobierno, desgastando la econo-
mía y la organización del Estado.
Al avanzar el desgaste del Esta-
do, llega a una condición de EF,
que equivale a ser un país inde-
seable por la comunidad interna-
cional, lo que a su vez refuerza
las características del punto a).
La pregunta central es
por qué no se implementan
acciones violentas y de fuerza
militar, con el respectivo com-
ponente interno, que estarían
legitimadas por ir en contra de
un Estado y gobierno que son
indeseables al mundo, es decir
al capital financiero USA. Con-
sideramos que la descomposi-
ción del capitalismo lo lleva a
una condición de estancamien-
to de estas posibles soluciones,
tanto por el nivel de desgaste
y compromiso económico que
conlleva soportar un gobierno en
condiciones de EF, como porque
los negocios van por otro carril.
Es decir que la descomposición
del capitalismo también se ex-
tiende a sus zonas de influencia,
desintegrando Estados y países.
Consideramos que la con-
UNIDAD PORTEÑA | 19
dición de EF está inconclusa,
o si se quiere: el negocio está
empezando. Recordemos que
el capitalismo no se basa en fa-
vores ni es una institución fi-
lantrópica. Se trata siempre de
negocios, de ganancias. Recor-
demos que estos Estados o paí-
ses tienen recursos naturales o
son mercado de oferta, aunque
como demanda no tengan rele-
vancia. Constituyen una reser-
va estratégica con altos niveles
de desintegración, corrupción y
fuerzas militares “artesanales”,
no de alta tecnología, que con-
tinuarán desangrándose. Y ante
las prioridades globales frente a
Rusia y China, pueden esperar.
FIN DE LA PRIMERA PARTE.
20 | UNIDAD PORTEÑA
Esta sociedad, nuestra sociedad
Jorge Rendón Vásquez
Doctor en Derecho Universidad de
San Marcos
Docteur en Sciences Sociales du
Travail por la Université Paris I
(Sorbona)
Cuando un campesino in-
dígena se encontraba en el ca-
mino con otro solían pregun-
tarse a manera de saludo: ¿De
dónde vienes? ¿Adónde vas?
Las mismas preguntas po-
demos hacerle a nuestra sociedad.
Antes de que los conquis-
tadores españoles se derrama-
ran sobre el gran territorio del
Tahuantinsuyo, la patria de
nuestros remotos antecesores,
habían aquí cientos de miles de
hectáreas de tierras cultivadas
con agua del cielo o llevada por
canales que partían de las cum-
bres nevadas y recorrían cientos
de kilómetros, inmensas mana-
das de auquénidos domestica-
dos y una red de caminos que
unían a los pueblos por alejados
que estuvieran. Había también
grandes construcciones pétreas
y viviendas para todos. El oro y
la plata, abundantes por doquier
como efigies religiosas, vasijas
domésticas y adornos, carecían
de valor monetario. Todas estas
obras y riqueza fueron realiza-
das día a día, en un período cuyo
comienzo se hunde en el misterio
del tiempo y que solo se explican
por la inteligencia, el conoci-
miento de la naturaleza y la la-
boriosidad de aquellos remotos
antecesores de nuestro pueblo.
Los conquistadores espa-
ñoles se apoderaron de todo
esto, autorizados por capitula-
ciones expedidas por las muy
magnánimas majestades de Es-
paña, redactadas por abogados
del Consejo de Indias, salidos de
la sapiente Universidad de Sala-
manca, y bendecidas por los pa-
pas y la noble jerarquía católica.
Como los reyes de España no da-
ban nada por nada, impusieron a
los empresarios y mercenarios fa-
vorecidos con esos documentos
que les entregaran el quinto de
cuanto bien o servicio se apode-
raran u obtuvieran de las pobla-
ciones y territorios conquistados
(se diría ahora el 20%). Previen-
do que los pueblos de tan lejanas
tierras resistirían la dominación,
los reyes de España confirieron
a los conquistadores, por cláu-
sulas explícitas e implícitas, el
derecho de esclavizar, sojuzgar,
depredar, matar, torturar y des-
preciar a sus habitantes y arran-
carles el fruto de su trabajo que
pasaría a convertirse en propie-
dad de los reales socios coman-
ditarios y de sus comisionados.
En la Europa de los siglos
XV y posteriores, la explota-
ción de los siervos y, luego, la
de los obreros se basaba en el
predominio legal e ideológico
de los señores feudales, la no-
bleza parasitaria, los maestros
y los capitalistas sobre gentes
que eran racialmente iguales.
En la América hispánica, a
esa dominación absoluta se aña-
dió la discriminación racial. Por
disposiciones del Consejo de In-
dias, el ministerio de colonias de
España, la sociedad fue dividida
en castas raciales, de manera que
los blancos quedaron situados en
la cúspide de la pirámide racial
con todos los poderes, siguien-
do hacia abajo los mestizos,
pardos, negros y, en el último
lugar, los indios, en una situa-
ción cercana a la de las bestias.
Solo los blancos podían ser
propietarios de fundos, minas,
obrajes y tiendas de comercio,
educarse, ocupar los cargos del
virreinato, y ser parte de la vida
social y cultural. Los mestizos,
pardos, negros e indios estaban
destinados al trabajo: los negros
no podían ser sino esclavos; los
indios siervos, salvo los de comu-
nidades respetuosas de las leyes
de España; los mestizos y par-
dos artesanos o auxiliares de los
blancos en el sojuzgamiento y la
represión de los negros e indios.
Y, en la mente de todos ellos, se
creó una ideología de superiori-
dad natural en la casta blanca y de

sumisión e impotencia en las cas-
tas calificadas como inferiores.
Establecida la República,
por la acción de los ejércitos li-
bertadores venidos de Argen-
tina, Chile y la Gran Colombia,
la estraficación social del vi-
rreinato, sólidamente instalada
en la mente de todos, se man-
tuvo en vigencia. El poder de
mandar fue heredado por la
casta blanca, sobre todo la ave-
cindada en Lima, ciudad que,
por ello, y por la obsecuencia
de sus dependientes continuó
siendo el centro del dominio es-
tatal y cultural en la República.
Durante los cien años que
siguieron, como había aconte-
cido en los trescientos de domi-
nación hispánica, no se añadió
ni una hectárea a las tierras cul-
tivadas, la actividad productiva
más importante. Al contrario, se
perdieron muchas, por abando-
no o pérdida de los canales que
las abastecían de agua. Tampo-
co se construyó algún camino
nuevo. Las minas se agotaron.
La oligarquía blanca y sus se-
gundones se dedicaron a pa-
rasitar a sus trabajadores y al
Estado y a hacer de la corrup-
ción una regla normal de vida.
Hacia fines del siglo XIX, el
capitalismo recién pudo abrirse
camino, y aparecieron nuevas
empresas y con ellas una peque-
ña clase obrera, conformada, en
su mayor parte, por trabajado-
res mestizos radicados en las
ciudades o emigrados a ellas. Y
también comenzó a cambiar el
panorama político, muy lenta y
difícilmente, por la presencia de
estos nuevos ciudadanos, cuyos
votos resultaron necesarios para
los candidatos de la oligarquía
y sus vasallos profesionales.
Pero el capitalismo, in-
cipiente y débil, fue incapaz
de desarrollarse por sí y so-
breponerse a la economía feu-
dal. Requería el impulso del
Estado que advino con el Le-
guiismo y el Velasquismo.
En la tercera década del
siglo XX, el presidente de la Re-
pública Augusto B. Leguía, le
atribuyó al Estado una función
promotora de la economía, para
lo cual creó el Banco Central y la
Contraloría General de la Repú-
blica, promovió las inversiones
extranjeras y el desarrollo de en-
tidades financieras e industria-
les, inició una legislación laboral
favorable a los empleados priva-
dos y la primera reforma univer-
sitaria, emprendió una política
de irrigaciones (Olmos, El Im-
perial, La Joya) y la construcción
de nuevos caminos, utilizando
en parte mano de obra indígena
forzada (la conscripción vial).
Para la oligarquía, dueña de las
haciendas más grandes de la
Costa, y para el gamonalismo
feudal de la Sierra, estos cam-
bios no podían ser admitidos,
aunque se beneficiaran de algún
modo con ellos, y se concertaron
para echar abajo a Leguía con la
complicidad de una parte de la
oficialidad militar, la clase media
blanca y cierta poblada carente
de conciencia política, ante la in-
comprensión de los grupos con-
testarios de izquierda que ha-
bían surgido en las dos décadas
anteriores. Mal comienzo para
esta izquierda que en los noven-
ta años posteriores ha seguido
siendo, en los hechos, tributaria
de la oligarquía y a la que las
clases trabajadoras no le deben
ninguna norma de protección.
El Perú de hoy, su econo-
mía y su conformación social,
política y cultural es el resulta-
do del arranque (el take off) em-
prendido por el grupo de oficia-
les de las Fuerzas Armadas y los
técnicos civiles que comandó el
general Juan Velasco Alvarado,
entre 1968 y 1975. El feudalismo
fue disuelto y la oligarquía agro-
pecuaria liquidada, las tierras
expropiadas fueron entregadas a
sus trabajadores, se crearon nue-
UNIDAD PORTEÑA | 21
vos derechos sociales, el Estado
asumió un rol promotor del de-
sarrollo, se impulsó la industria-
lización, se promovió una refor-
ma educacional para el trabajo y
el desarrollo de la personalidad
de los educandos (saboteada
por los grupos de cierta preten-
dida izquierda conformes con
la oligarquía y el feudalismo),
se pusieron las bases de un Po-
der Judicial independiente de los
grandes intereses económicos y
basado en los méritos de los con-
cursantes, etc.; y, poco después,
el Perú se convirtió en un gran
mercado, bullente de producción
e intercambio, en el que comen-
zaron a surgir nuevos grupos
capitalistas y una nueva clase
profesional procedente de las ca-
pas trabajadoras urbanas y rura-
les, en su mayor parte mestizas.
En los 45 años posterio-
res al gobierno de Velasco, la
conformación social y políti-
ca del Perú cambió respecto
de la que había existido has-
ta antes de aquel momento.
En las elecciones de 2021,
una parte de la nueva clase
profesional provinciana, orga-
nizada en un nuevo partido y
sin experiencia en el manejo del
Estado, se movió hacia el poder
político y, en la primera vuelta
electoral, logró colocar a 37 re-
presentantes en el Congreso de
la República y, en la segunda,
su candidato ganó la Presiden-
cia de la República, un maestro
de escuela de origen campesi-
no, limpio y con muchas ganas
de darle a las mayorías sociales
más equidad y oportunidades.
Para el poder empresarial y su
base social, el establishment li-
meño y blanco, esto era inaudi-
to, porque rompía los cánones
discriminatorios de la conquista
hispánica y les arrebataba el do-
minio del Poder Ejecutivo que
siempre habían ejercido por sí
o por interpósita persona. No
es extraño, por eso, que piensen
22 | UNIDAD PORTEÑA
en una segunda versión del des-
cuartizamiento de Túpac Ama-
ru. Sus soldados de choque,
instalados en el Congreso de la
República con los ojos cerrados
ante los cambios en nuestra so-
ciedad, no tienen otra fuerza de
propulsión que su creencia de
que pueden blandir su poder
circunstancial sin consecuencias
para ellos y para los grupos que
los han financiado, y sin que les
importe que su obstruccionismo
perjudique a nuestro país y aten-
te contra una existencia social
armónica, una conducta que los
ha hecho del todo disfunciona-
les y le evoca al pueblo la históri-
ca frase: Quousque tandem abu-
tere, Catilina, patientia nostra?
Este conflicto no es me-
ramente coyuntural, político.
Es una contradicción de pro-
fundas raíces históricas, cuyo
conocimiento exige la iden-
tificación minuciosa de sus
términos antagónicos, tanto
en la estructura capitalista,
como realidad necesaria que
requiere ser reformada, redis-
tribuyendo la riqueza creada
por el trabajo para convertirla
en obras y servicios públicos,
como en la superestructura
política, asegurando la vigen-
cia de una democracia y Esta-
do de Derecho basados en una
real igualdad de todos ante la
ley y en la erradicación de la
discriminación en todas sus
formas, y en particular la racial
cuyo ciclo debe ya terminar.

Comunicado de la FSM sobre el Día Internacional para
la Erradicación de la Pobreza, 17 de octubre de 2021
“La pobreza en cual-
quier lugar es un reto para la
prosperidad en todas partes”,
subrayó la Declaración de Fi-
ladelfia de la FSM, la Interna-
cional Sindical de clase, que
declaró la guerra a la pobreza.
– Casi la mitad de la ri-
queza mundial se concentra en
manos del 1% de la población
más rica. La riqueza del 1%
de las personas más ricas del
mundo asciende a 11 trillones
de dólares, lo que equivale a
65 veces la riqueza total de la
mitad de la población mundial.
– La mitad inferior de
la población mundial po-
see lo mismo que las 85 per-
sonas más ricas del mundo.
– Siete de cada diez per-
sonas viven en países don-
de las desigualdades eco-
nómicas han aumentado
en las últimas tres décadas.
– En Estados Unidos, el
1% más rico acaparó el 95%
del crecimiento posterior a la
crisis financiera desde 2009,
mientras que el 90% más po-
bre se empobreció aún más.
– El 1% más rico au-
mentó su parte de ingre-
sos en 24 de los 26 países.
– La muerte de niños por des-
nutrición supera los 115 millones.
Estas fueron algunas de
las constataciones reveladas hace
unos años. Las desigualdades
del sistema de desarrollo capita-
lista en todo el mundo han pro-
vocado y multiplicado el número
de personas pobres y que pade-
cen sufrimientos indescriptibles.
En muchos países, “las
empresas determinan las re-
glas, los gobiernos se com-
portan como (malos) árbitros,
promulgando las reglas esta-
blecidas por el capitalismo au-
toritario. Las empresas, las
multinacionales y los gobiernos
NO elegidos tienen el poder.
Una investigación de la OIT
(Organización Internacional del
Trabajo) reveló que la mitad de
los trabajadores del mundo no
ganan lo suficiente para que ellos
y sus familias puedan superar el
umbral de pobreza de 2 dólares
al día. El resultado obvio es que
“la codicia de los ricos se satisfa-
ce y las necesidades de los pobres
no se satisfacen”. El número cre-
ciente de “trabajadores pobres”
es inevitablemente el resultado
de la vía de desarrollo capitalis-
ta. La FSM hace un llamamien-
to contra su desarrollo desigual.
El populismo de Derecha
de la Panemia Covid -19, y el
aumento del autoritarismo han
cambiado el mundo para peor,
millones están desempleados.
Muchos se enfrentan a la desnu-
trición. Países y jóvenes desem-
pleados se han visto afectados
de forma desproporcionada.
Una transformación social más
profunda requerirá organización
y movilización. Este ha sido el
llamamiento de la FSM constan-
temente en todos los continentes.
El llamado programa de
alivio de la pobreza y los progra-
mas de reducción de la pobreza
en muchos países se quedaron
solo en el papel. Una protección
social más inclusiva y un desa-
rrollo sostenible, una seguridad
alimentaria adecuada y basada
en las necesidades y la seguridad
de los ingresos son necesarios.
Las necesidades de las personas
más vulnerables, de los jóvenes
trabajadores, de los migrantes, de
los trabajadores del sector infor-
mal, etc., deben defenderse con
luchas de clase, declara la FSM.
La crisis climática es una
crisis global que exacerba la
UNIDAD PORTEÑA | 23
desigualdad entre países y den-
tro de sociedades. Si no nos en-
frentamos a la crisis climática,
se verán afectados la seguridad
alimentaria, el suministro de
agua y los sustentos de millo-
nes de trabajadores vulnerables.
Se trata, pues, de una cues-
tión de justicia social y de orga-
nización de los trabajadores. Te-
nemos que fomentar el accionar
de los sindicatos de trabajadores
y, siempre que sea posible, es-
tablecer alianzas con otros mo-
vimientos sociales progresistas.
La mano de obra migrante
ha sido un rasgo del desarrollo de
las economías capitalistas duran-
te varios años. Los regímenes y
las prácticas patronales han vuel-
to vulnerables a los trabajadores
migrantes. Los sindicatos tienen
que desempeñar un papel clave
en la protección de estos traba-
jadores. El programa de la FSM
siempre ha incluido la protección
de los trabajadores migrantes.
Más del 40 % de los paí-
ses del mundo carecen de una
democracia plena y contribu-
yen a economías sustanciales
y a la injusticia política. Es ne-
cesario construir una solidari-
dad internacional con ellos. Se
les niega la libertad de sindica-
ción, el derecho a organizarse y
la negociación colectiva. Estos
son caminos que conducen a un
enorme aumento de la pobre-
za. En estos casos el Gobierno
no es la solución a nuestro pro-
blema. Pero el Gobierno es el
problema; por lo tanto, la movi-
lización del pueblo contra esos
gobiernos retrógrados es una ta-
rea inmensa e inevitable. Nues-
tras organizaciones de clase de-
ben estar al frente de las luchas
La FSM continúa su guerra
contra la pobreza; las necesida-
des de los pobres y del proleta-
24 | UNIDAD PORTEÑA
riado deberán ser atendidas de
todas formas. Las luchas con-
tinuas cambian a los gobiernos
cuyas políticas perpetúan la
pobreza. Renovamos nuestro
llamamiento a la clase obrera
mundial y a las masas trabaja-
doras para que se unan como
una fuerza gigantesca para eli-
minar la pobreza. Lucha, lucha
continua y luchas militantes
para eliminar la pobreza y eli-
minar tales programas de los
capitalistas y de los gobiernos
que explotan al hombre por el
hombre. Instamos a las organi-
zaciones internacionales de las
Naciones Unidas y de la Organi-
zación Internacional del Trabajo
a que se esfuercen por lograr
la erradicación de la pobreza.
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