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“Ezequiel Zamora”.
Programa Ciencias Básicas y Aplicadas.
Subprograma PFG Arquitectura.
Subproyecto: Técnicas de Expresión Plástica
San Carlos - Cojedes
Caricaturas y Cómo
se Elaboran
Noviembre – 2.021
Caricatura
El término caricatura, cuya raíz etimológica se halla en la lengua italiana, alude a
una sátira gráfica que se desarrolla deformando la apariencia de algo o de alguien. Se
trata de un dibujo con fines humorísticos, que suele ridiculizar a su modelo.
Las caricaturas suelen crearse a través de la distorsión o la exageración de
rasgos. La caricatura de un hombre de gran altura, por citar un caso, puede presentarlo
como alguien tan alto como un edificio. Una persona narigona o nariguda, por su parte,
puede aparecer en una caricatura con una nariz más grande que todo su cuerpo.
Por ejemplo: “Esta mañana vi en el diario una caricatura muy graciosa del
presidente”, “Polémica por una caricatura de Mahoma que publicó una revista europea”,
“Cuando mi hijo vio su caricatura, se largó a llorar: no entendió que se trataba de una
broma”.
La caricatura es un retrato divertido en el que representamos a una persona
acentuando sus rasgos para que el resultado genere comicidad. También se entiende por
caricatura a los dibujos de reinterpretación que realizamos de otro retrato, de un cómic o
de una ilustración.
A través de la caricatura podemos crear personajes como un superhéroe por
ejemplo. Si vemos la imagen original de Superman creada para el cómic, precisaremos
que este personaje tiene unos rasgos particulares “una personalidad” que lo hace ser el
personaje inconfundible que es, es decir, él responde a una iconografía particular
reconocida universalmente.
Además de lo expuesto, tenemos que establecer que para poder realizar una
buena caricatura hay que seguir estas indicaciones que te indicamos a continuación:
-La regla más importante es que la caricatura tiene que contar con cierto
parecido a la original.
-La clave es exagerar los rasgos faciales más significativos de la persona en
cuestión. Rasgos que pueden sorprender tanto por ser muy grandes como muy
pequeños. Por ese motivo, hay que tener en cuenta que quien va a realizar la caricatura
es necesario que previamente analice bien el rostro del individuo que tiene delante.
-Aunque hay que exagerar esas características de la cara, es importante que el
caricaturizador no deforme demasiado aquella. Claro, porque si lo hace lo que va a
conseguir es que la persona no sea reconocible.
-Entre los pasos que se establece que van a permitir realizar una buena caricatura
destacan los siguientes: dibujar el círculo del rostro y establecer las líneas guía teniendo
en cuenta la perspectiva, establecer en cada zona de la cara los ojos, las orejas, la nariz,
las cejas y la boca mediante trazos básicos. A partir de ahí habrá que continuar
delineando y resaltando para luego proceder a establecer la totalidad del rostro.
Más allá de la comicidad, las caricaturas también pueden realizar una denuncia o
constituirse como una crítica. Para esto se suele apelar a alegorías o a simbolismos. Si
un dirigente político es caricaturizado como un buitre o un cuervo, se lo estará
asociando a un ave de rapiña, que se alimenta de cadáveres.
Entre los personajes más famosos que se convierten en objetivo de los trabajos
de los expertos en caricaturas son celebridades tales como políticos, actores, cantantes y
deportistas. No obstante, cualquiera puede tener la suya pues son muchos los artistas
que ofrecen este servicio, especialmente en zonas turísticas.
En algunos países, se llama caricatura a la serie o la película de dibujos
animados: “Cuando era chico pasaba todas mis vacaciones viendo caricaturas en la
televisión”, “Mañana vamos a ir a ver una película de caricaturas al cine”, “Mi hija ama
las caricaturas”.
En el lenguaje coloquial, por último, se califica como caricatura a aquello que
pretende ser algo pero no lo logra: “No entiendo cómo el club contrató a esta caricatura
de futbolista”, “Esto no es un proyecto serio, es apenas una caricatura”.
Historia
La caricatura en su sentido moderno, nació en Bolonia a finales del siglo XVI,
en la escuela de arte fundada por una familia de pintores, los Carracci. Los estudiantes
de esta academia se divertían haciendo retratos de los visitantes bajo la apariencia de
animales u objetos inanimados, esto llegó a ser compartido por Gianlorenzo Bernini. El
grabador Pier Leone Ghezzi, que trabajaba en Roma, continuó esa tradición y, por un
módico precio caricaturizaba a los turistas. Lo que estos artistas italianos hacían eran
retratos humorísticos para uso privado y casi nunca resultaban satíricos o maliciosos, en
este sentido Giandomenico Tiepolo también incursionó en el género de la caricatura.
En tanto al género la caricatura política nace en Inglaterra; la sátira impresa
evidenció las luchas entre el Papado y Lutero, e incluso Luis XIV fue víctima de
tempranas caricaturas. Sin embargo, el género de caricatura política solo se estableció
hasta 1770, cuando en Inglaterra se tomó como un arma de defensa contra quienes
manejaban asuntos de Estado. El pintor William Hogarth entre los siglos XVII y XVIII
realizó ilustraciones burlonas de crítica social, decididamente dedicados a la caricatura
estuvieron George Cruikshank (siglo XVIII-XIX), James Gillray ( siglos XVIII-XIX) y
su coetáneo Thomas Rowlandson, Max Beerbohm (siglo XIX), Henry Mayo Bateman y
el célebre John Tenniel quien, a más de hacerse mundialmente conocido por las
ilustraciones dedicadas a Alicia en el País de las Maravillas fue uno de los más
destacados caricaturistas de la revista "Punch".
Paso 2:
Observación
Observa muy bien las fotos, para precisar los rasgos más importantes y
característicos de la persona o personaje.
Mira bien su peinado, su forma de rostro si es redondo o cuadrado, si sus ojos
están muy separados uno de otro, si su nariz es pequeña, grande, ganchuda o respingada,
si sus cejas son pobladas muy finas, la frente es un dato esencial, boca y barbilla deben
ser muy bien captadas, y las orejas no deben faltar, obsérvalas muy bien, todos tenemos
orejas particulares en relación a la totalidad de nuestro rostro.
Si la caricatura es solo del rostro, perfecto ya con estos datos es suficiente para
comenzar, pero si deseas hacerla de cuerpo entero, es importante que veas qué tipo de
ropa o estilo usa, en caso que desees representarlo con su vestimenta tradicional, pero si
deseas cambiarle el look también es válido.
Pude ayudar para darle más carácter al dibujo, que obtengas información sobre
aspectos psicológicos del representado, ejemplo sus gustos, aficiones. Esto le dará un
plus especial. Si sabes que a la persona le gustan las flores, o es fans de Harry Potter, te
servirá como elemento que podrías emplear para sacarle provecho.
En la actualidad muchas personas se hacen videos, si fuera este el caso, puedes
observar al personaje en movimiento y así te vas familiarizando con sus gestos.
Paso 3:
El boceto base, líneas guías
Dibuja un círculo u óvalo. Esta será la forma de la cabeza que estaremos
dibujando.
Dependiendo del personaje que estés dibujando, la forma de este círculo variará.
Si en tu observación detallaste que la persona es de cara ovalada entonces en vez de un
círculo, dibuja un óvalo.
Ahora traza una línea al centro de la anterior figura para dividirla en dos
mitades, Si quieres al personaje de frente dibújala totalmente al centro para que las dos
mitades sean simétricas pero si quieres hacerla de perfil, coloca la línea dejando un lado
más ancho que el otro, asimétricamente.
Coloca un círculo o triángulo en el centro donde va la nariz del representado, si
éste tiene la parte de la cabeza muy larga, seguramente la nariz no irá tan centrada, sino
más hacia la parte inferior de la figura.
Paso 4:
Dándole sitio a cada parte del rostro
Paso 5:
Delinear y resaltar
Ahora sí debes ir detalle a detalle remarcando cada parte, uno a la vez sin perder
de vista los rasgos que en el paso 1 has observado cómo llamativos.
Paso 6:
Exagerar
Una vez que ya has dibujado por ejemplo la boca lo más parecida a la de la foto,
ahora vas a exagerarla, estirándola, agrandándola, engordándola, etc., para darle el
carácter de comicidad que siempre caracteriza a las caricaturas.
Si estás trabajando solo con lápices de grafito, repasa líneas o sombrea para dar
volumen a cada parte dibujada.
Procede a borrar las líneas guías que ya no hacen falta, ellas solo sirven al inicio
del trabajo para ir encajando cada parte donde va.
En ambos casos dibujamos a una persona, solo que en el retrato se busca
representar fielmente los rasgos y en la caricatura se exageran y distorsionan para darle
la comicidad que toda caricatura desea lograr.