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Gorgias

Nacido en Silicia hacia el 483 a.C., y discípulo de Empédocles, Gorgias fue


junto con Protágoras el más afamado de los sofistas. Su vida transcurre entre las
distintas ciudades griegas, frecuentemente en Atenas, y se prolonga hasta el 375.
Su principal obra filosófica lleva por titulo “Sobre la naturaleza o el no ser”.
Gorgias fue el más admirado maestro de retórica de la antigua sofística, y
tanto es así que algunos creen, como Filóstrato, que se le debe atribuir la
paternidad del arte oratorio de los sofistas.
Como orador debe considerársele fundador de la oratoria epidíctica. Los
discursos que nos han sido conservados son: un Epitafio, un Olímpico, un Pítico,
un Elogio de los eleáticos, todos ellos en fragmentos. Nos queda, en cambio, el
texto íntegro de los ejercicios sofísticos, el Elogio a Helena y la Apología de
Palamedes. En todos ellos, Gorgias hace ostentación de su habilidad dialéctica.
Según la visión clásica de Gorgias, con él nos movemos en el mundo de la
mera opinión, siendo la verdad para cada uno de nosotros aquello que nos
persuade como tal. La retórica es la técnica de la persuasión, y el sofista, el
maestro de la opinión.
Sin embargo, hay investigaciones más recientes que vienen a situar a
Gorgias y la Retórica como defensores de la democracia y enemigos de la
violencia, ya que "el arte del discurso-razón [···] facilita la comunidad lingüística".
Además, en Gorgias, la verdad sería eliminada en favor de la verosimilitud, con
importantes consecuencias políticas, ya que "toda la oratoria griega de época
clásica es política, hasta la de los discursos ficticios". Al fin y al cabo, si alguien
conoce la Verdad, podría comunicarla o imponerla a cualquier precio. Sin
embargo, con la verosimilitud gorgiana, no conocemos nada, sino sólo el lógos,
las palabras, con las que construimos los discursos. Por lo tanto, no habría
ninguna verdad última de ningún tipo. Esto supone, contra Platón, que no habría
ningún modelo político ideal y que, por lo tanto, mediante la Retórica es posible
cambiar democráticamente el tipo de orden político cuando la Retórica "está bien
adaptada a la situación". Esta divergencia política con Platón explicaría los
motivos por los que este censuraba a los sofistas.
Su doctrina filosófica tiene como fundamento la radical oposición al
eleatismo que se manifiesta en estas tres tesis:
«Primero: nada existe; segundo: si algo existe, no puede ser conocido por
los hombres; tercero: si se puede conocer, no se puede comunicar y explicar a los
demás».
La primera tesis la defiende de la manera siguiente: si algo existe debería o
bien ser eterno o no serlo, así como es de ser o no es de ser. Si fuese eterno,
habría de ser infinito y, si fuese infinito, no podría estar en nada. Pero, lo que no
está en nada no existe. Por otra parte, si no fuese eterno, debería haber
comenzado a ser (debería haber nacido, haber sido creado), pero, para comenzar
a ser, antes debería no ser, lo que es imposible, ya que el no ser no es (lo que no
existe no puede engendrar la existencia). Así, ni es eterno ni tiene origen y, por
tanto, no es. Nada puede existir.
La segunda tesis parte de la afirmación de Parménides según la cual no es
posible pensar el no ser. Pero, si el no ser no pudiese ser pensado, afirma
Gorgias, no existiría el error. Dado que el error existe, se infiere que puede
pensarse el no ser. Así, podemos decir que hay cosas no pensadas que existen, y
cosas no existentes (como personajes míticos, por ejemplo) que pueden ser
pensadas. De esta manera señala que existe una división entre pensamiento y ser
y, por tanto, si algo existiese, no podría ser pensado. “Si lo pensado no existe, lo
existente no es pensado”
La tercera tesis defiende que la palabra no comunica más que sonidos.
Mediante el lenguaje no transmitimos colores, sabores, tamaños, etc., sino
solamente sonidos (es decir, no transmitimos las cosas en sí sino solo palabras).
Y, al igual que la vista no ve los sonidos, el oído no oye los colores. Con ello pone
de manifiesto el divorcio existente entre signo y significado (entre el término que
designa y el objeto designado), y destaca la imposibilidad de transmitir la realidad
mediante la palabra.
Esto se podría resumir en: 1) antítesis entre la exterioridad (respecto a
nosotros) de la subsistencia de los objetos y la interioridad de la palabra; 2)
imposibilidad, por ello, de que la palabra tenga la función de representar el objeto
exterior, el cual, en cambio, tiene la función de revelarnos a nosotros la palabra,
suscitándola por medio de las impresiones sensibles (los sentidos); 3) diferencia
entre la subsistencia visible (los objetos) y auditiva (la palabra), e
irrepresentabilidad recíproca.
Se ha afirmado que estas tesis de Gorgias eran más bien un mero ejercicio
retórico por el cual quería demostrar que, mediante el uso habilidoso del lenguaje,
es decir, mediante la retórica, se podían defender incluso las tesis más absurdas.
Sin embargo, más bien se cree que, aunque realmente Gorgias quiso poner en
ridículo las tesis de los seguidores de la escuela de Elea, acabó abrazando un
profundo nihilismo y escepticismo. Por ello, partiendo de esta situación de crisis,
se volcó en la enseñanza de la retórica, pero sin querer enseñar la virtud, sino
solamente el uso persuasivo del lenguaje. De esta manera, concibió su enseñanza
como transmisión de un arte de persuasión basado en una ética de situación
fuertemente relativista. Destacó el inmenso poder de la palabra, la magia del logos
que seduce, persuade y transforma el alma, y la comparó a la acción de los
fármacos sobre el cuerpo. También el lenguaje puede sanar o enfermar un alma.
Además, fue el primero en estudiar el lenguaje desde una perspectiva estética y
analizó la esencia de la poesía. Concebía el arte como un engaño, pero un
engaño inteligente que ennoblece a quien lo practica (porque muestra su
capacidad de fabulación e imaginación) y a quien se deja engañar (porque
muestra la inteligencia de comprender el mensaje del artista). Estas reflexiones
sobre el arte fueron posteriormente recogidas por Platón (que destacó el aspecto
de engaño y de imitación del arte) y por Aristóteles (que subrayó el aspecto
purificador o catártico del arte). Otras obras destacables de Gorgias son: Encomio
de Helena, y Defensa de Palamedes.
Preguntas

1. Según Gorgias, el mayor bien que se alcanza a través del arte de la retórica es
R: Persuasión
2. En el diálogo de Platón, titulado “Gorgias”, ¿éste se presenta como maestro de?
R: Oratoria
3. ¿Cómo definen las investigaciones recientes a Gorgias y la retórica?
R: defensores de la democracia y enemigos de la violencia
4. ¿Cuál es el fundamento de su doctrina filosófica?
R: la radical oposición al eleatismo que se manifiesta en estas tres tesis
5. Cuales son las tres tesis que presenta Gorgias en su doctrina?
R: Primero: nada existe; segundo: si algo existe, no puede ser conocido por los
hombres; tercero: si se puede conocer, no se puede comunicar y explicar a los
demás

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