 Recopilación de Antecedentes de la edificación.

El proceso de diagnóstico inicia indispensablemente por una etapa de recopilación de datos

que implica adquirir todo tipo de documentación gráfica o escrita sobre la edificación e

incluso entrevistas con los usuarios de la edificación o personas del sector para conocer más

datos que no están reflejados en la documentación.

En esta fase pueden obtenerse planos, fotografías, informes de diagnósticos anteriores,

órdenes de demolición, apuntalamientos, fecha de aparición o periodicidad de algunas

lesiones, usos del edificio, fecha de construcción, etc.

A cualquier diagnostico de una estructura, es definitivamente obligatorio obtener todos los

datos necesarios, tanto para mejora el sondeo de lesiones como para su correcto análisis e

interpretación de los resultados de los ensayos y pruebas.

 Control Perceptivo y estudio de la estructura

La finalidad de esta etapa es buscar la presencia de lesiones que se presenten como indicios

del proceso patológico y a partir de las cuales es posible conocerlo.

Lo primero es detectar las lesiones e identificarlas de procesos patológicos diferentes, con

el objetivo de seguirlos adecuadamente. Esto se realiza de forma visual, buscando cualquier

sospecha de lesión en la estructura para localizar defectos.

Esta etapa concluye con la elaboración del levantamiento de daños por lo cual esto puede

implicar un número reiterado de visitas. Los medios necesarios para esta fase son sencillos,

y van desde cámara fotográfica con flash, hasta una linterna, mandarria y cincel, etc.

Conviene que en las fotografías de detalle, aparezca una regleta o decímetro, a efectos de

poder tomar posteriormente medidas sobre la fotografía.

De esta manera, se puede conseguir una serie de datos físicos que suministren la

comprensión del proceso. Dentro de los datos que se recogen se encuentran: el tipo de

lesión, la descripción, las posibles causas, los materiales afectados, los elementos

constructivos dañados, la localización de las lesiones en el edificio o unidad constructiva,

etc.

Una vez realizada esta etapa, y a través de su estudio, podemos estar en condiciones de

formular las hipótesis de daños y origen de los mismos, para planificar un análisis más

profundo, y sobre todo, para tomar las medidas de urgencia necesarias

 Mecanismo y/ o ensayos para determinar la corrosión en el concreto armado

Esta etapa se ejecuta con el objetivo de evaluar en forma rápida los puntos más críticos del

lugar, para poder comprobar si necesitan ser intervenidos de forma urgente, Básicamente

consistirá en conseguir datos precisos de las lesiones detectadas (incluyendo métodos

agresivos) para asegurarnos de su origen y magnitud, así de su posible evolución y nivel de

peligrosidad. Para ello se emplearán aparatos o equipos de medida sencillos o muestras de

materiales como extracciones de testigos para saber de qué y cómo está compuesto un

elemento que no pueda ser observado a simple vista, entre otros ensayos.

Se utilizarán elementos de diagnostico (en función de los resultados en la etapa de control

perceptivo) como son fisurómetros, pachómetros, ultrasonidos, esclerómetros,

corrosímetros, etc, y se realizarán pruebas de carga, test de porosidad, de carbonatación,

etc.

Por último, hay que planificar el acceso a ciertas zonas, que implica en algunos casos el

montaje de medios auxiliares, grúas, etc.

 Selección del tipo de mantenimiento de la patología.

En aquellos casos en los que se constate un proceso de corrosión en la armadura, se

deberá analizar el grado y extensión de deterioro del hormigón de recubrimiento

(carbonatación, cloruros, etc), pues habrá que eliminarlo para dejar al descubierto la

totalidad de la superficie corroída o en proceso de corrosión.

Una vez descubierta la armadura, se deberá eliminar la capa de óxido con chorro de

arena, cepillos de alambre, etc. Si la capa de óxido es superficial, bastará con su

eliminación y posterior protección, pero en caso contrario, será necesario sustituir o

reforzar la armadura deteriorada

Cuando la simple reparación no es suficiente, pues la pieza reparada es insuficiente desde el

punto de vista de su resistencia mecánica, entonces se hace necesario reforzar la estructura

mediante uno de los siguientes sistemas: ƒ

 Reemplazando el material pobre o deteriorado, mediante un material (hormigón y/o

acero) de mejor calidad. ƒ

 Añadiendo material que colabore con el existente en su funcionamiento estructural.

Los condicionantes principales de todo refuerzo deben ser la compatibilidad plena y la

continuidad estructural con el material existente.

Picar el área del concreto armado dañada, hasta encontrar una superficie firme y sana con

respecto a sus resistencias mecánicas; también limpiar la superficie del hierro usando una

lija o cepillo de acero dejándola libre de polvo, grasa, pintura suelta y oxido superficial.

Después, para neutralizar el óxido y proteger al hierro, aplicar un químico transformador o

removedor de óxido sobre la superficie utilizando una brocha, y al cabo de una hora aplicar

una segunda mano. Si el acero ha perdido más del 15 % de su sección transversal, restituir

el material realizando un traslape y/o cambio del acero de los estribos, este método requiere

eliminar más volumen de concreto, que permita amarrar los nuevos aceros longitudinales

y/o colocar los nuevos estribos; y cubrirlas con un aditivo inhibidor. A continuación,

aplicar un aditivo para unir concreto antiguo con concreto nuevo utilizando una brocha,

rodillo o pulverizado.
Registro fotográfico

Un registro fotográfico debe ser detallado, referenciado y concordante con el levantamiento

de daños a través de las fotografías que sean una prueba de cada una de las patologías

identificadas, anexando un breve descripción y su ubicación dentro del plano del area

implicada.