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Contenido
Introducción..........................................................................................................................3
La Dominación Masculina En La Sociedad........................................................................4
Conclusión..............................................................................................................................7
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Introducción

La dominación masculina, tema por abordar y analizar, sus orígenes vienen desde la
naturaleza del hombre y de la mujer, el hombre que es el activo y la mujer que viene siendo
su figura pasiva, por medio de una observación, se cuestiona los cambios que se realizan en
el orden sexual, por el cual se deberá estudiar su estructura y la constancia, de una manera
acertada se podrá notar las refutaciones y transformaciones que presenta el hombre y la
mujer.

Otro de los puntos de abordar, es su política del como ellos se relacionan, como a surgido
los cambios a través de los tiempos y qué beneficios traería aquellos cambios, ya que por
medio de la culturización el género de la mujer ha tenido unos balances hacia una
orientación dominal en el hombre, por lo que se debe tener un orden tanto cronológico
como significativo en su conocimiento. Las fuerzas históricas que presenta la mujer, se
tendieron a una movilización por medio de un grupo colectivo para unas reformas jurídicas
y políticas que buscan un cambio biológico y psicoanalítico.

Un punto a analizar es la sociedad, su causal proviene desde el núcleo de una familia, y se

va forjando desde una cultura, por medio de sus instintos primitivos se van civilizando y
creando normas para limitar una libertad. En este escrito, se va argumentando los
mecanismos históricos que corresponden a una deshistoricizacion que muestra sus
divisiones sexuales y sus principios correspondientes, tema que viene siendo central en la
estructura social.
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La Dominación Masculina En La Sociedad.

El hombre y la mujer han ido percibiendo históricamente su modo de posicionamiento,

cabe recalcar que el pensamiento del hombre tiende a ser más dominante por su naturaleza,
ya que su identidad y presencia, su antropología, que es por medio de su aspecto físico y su
evolución que presenta su cultura, su cosmología muestra su origen y que puesto ocupa en
la civilización humanística. Cabe recalcar que su aspecto sexual se ha ido formando por
medio de su erotismo y sentido, de sus movimientos y el cuerpo sexual-izado en la sociedad
por sus posiciones y placeres que se fueron dando por medio de su hábito historial.

La dominación sexual masculina la vemos expuesta en todos los ámbitos, y es por ello que
su comunicación es simbólica, la vemos ratificada; en la división sexual del trabajo,
clasificación desde la intensidad del trabajo por medio de asignaciones de los dos sexos, en
su espacio y su contexto que son las reuniones o el mercado, que son reservados para los
hombres, para las mujeres se les reserva la casa doméstica, y en ella entra la parte
masculina como líder de hogar y la mujer; como el establecimiento, la comida y la parte de
dedicación del tiempo a su ciclo de vida. Su mundo social se va organizando por medio de
una realidad sexual, de principios y de visión, que por medio de la diferencia biológica
entre el cuerpo masculino y el femenino se da la diferencia social.

El comportamiento del hombre cuando está ausente por un largo periodo, le dice a su mujer
que “regresarán con un jarrón de leche, de leche cuajada” o cuando la mujer por medio de
su aposento le dice al hombre que se ha derramado leche cuajada en la barba o que ella ha
comido y bebido, significa que el hombre acabe de hacer el amor, ya que se lo dice de una
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forma muy referencial y cultural, haciendo saber que por medio de su coito y su relación
extraconyugal, han tenido relaciones, es entonces que la mujer se vuelve sumisa a lo que
diga el hombre, porque desde él parte una comunicación unilateral, es entonces que la
diferencia entre los órganos masculinos y femeninos forman una construcción social y que
por principio de su división de la razón, se forma los estatutos sociales del hombre y la
mujer.

Para la mujer, su comportamiento físico ante la sociedad impone feminidad, como el

cinturón; apretado, los brazos cruzados sobre el pecho, un traje abrochado… Son rituales
que por semejanza indica una delicadeza. El tema de su parte intima se considera como un
tabú, ya que se determina como un secreto o algo sagrado por el cual puede generar e
incubar una vida.

Uno de los ejemplos más considerables y explicativos para hacer entender la dominación
del hombre hacia la mujer, fue el que nos regaló Pierre Bourdieu que nos dice:

“El primer hombre encontró a la primera mujer. Ella estaba sacando agua cuando el
hombre, arrogante, se le acercó y pidió de beber. Pero ella había llegado antes y también
tenía sed. Molesto, el hombre la empujó. Ella tropezó y cayó al suelo. El hombre vio
entonces los muslos de la mujer, y eran diferentes de los suyos. Se llenó de estupor. La
mujer, más astuta, le enseñó muchas cosas. "Acuéstate", le dijo, "te contaré para qué
sirven tus órganos." Él se echó al suelo; ella le acarició el pene, que aumentó dos veces de
tamaño, y se acostó encima de él. El hombre sintió un gran placer. Seguía por doquier a la
mujer para repetir la cosa, ya que ella sabía más cosas que él, alumbrar el fuego, etc. Un
día el hombre le dijo a la mujer: "Yo también quiero enseñarte; sé hacer unas cosas.
Túmbate y me echaré encima de ti." La mujer se echó en el suelo y el hombre se colocó
encima de ella. Sintió el mismo placer y dijo entonces a la mujer: "En la fuente, eres tú
(quien domina); en la casa, soy yo." En la mente del hombre lo que más cuenta son
siempre las últimas palabras, y a partir de entonces a los hombres siempre les gusta
subirse encima de la mujer. Así es como se convirtieron en los primeros y en los que deben
gobernar.” [ CITATION Pie98 \l 9226 ]
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Es por ello, que la relación social se debe dar por la dominación, que se contribuye a través
del funcionamiento y diversidad entre lo masculino que viene siendo lo activo y el
femenino que es el pasivo, se unen, se crean y se organizan para tener un deseo entre las
posiciones y la combinación erótica, ya que desde el deseo femenino viene la dominación y
subordinación hacia la mujer.

En la asimilación de la domesticación, partiendo de una concepción realista, la visión de los

géneros sitúa al hombre como el fundamento principal del núcleo social sustentado en la
fisiología y en la construcción social como por ejemplo la división del trabajo. El orden
social excluye a la mujer siendo posteriormente a través de la historia dominantes y
abusivos, asimismo atribuyéndoles una minoritaria identidad. Hay que reconocer, que los
manipulados y sometidos, asimilan la dominación como hábito natural y como
consecuencia denigra la sociedad por falta de ética y resignación por parte de la mujer al
propender conllevar un comportamiento sumiso hacia el hombre, ya que la mujer ve al
hombre como el conteniente de toda la razón y protección hacia ella (por consiguiente se
seducen ante la potestad), esto se debe a una cultura que se adopta mediante la religión, las
instituciones , el estado y entre otras.

Siendo así, la sociedad puede incurrir a un cambio partiendo desde una transición que
transmite la percepción familiar, social y estructural de la sociedad, con una proposición de
igualdad en ámbitos morales éticos y políticos, orientados fundamentalmente a principios
que por el cual va rompiendo el paradigma establecido a través de la historia de violencia
simbólica. La igualdad formal partiría de manera eventual en la que la comunidad
reconozca la sexualidad de una forma biológica, es decir, no situarla como una división de
poderes.

El amor se llega a principios de la comunicación entre ambos sexos, por lo cual entre el
hombre y la mujer surge una estabilidad emocional y un gusto psicológico o físico, es por
ello que puede llegar a confundir a los dominados presentándose perspicazmente latente
ante la violencia que la persona la asimilaría como aceptación, pero hay que tener como
objeto principal, que el amor puede llegar a ser una dominación aceptada, ya sea por parte
de la mujer o por parte del hombre, ya que genera una pasión, felicidad o desdicha.
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Aunque, a medida del tiempo, el amor puro se fue dando por medio del arte, las letras, las
crónicas y temas que buscaban una aceptación tanto en las sociedades, y el poder reprimir
sus emociones por medio de una interacción física, es algo muy increíble, porque el tema
del amor, que simplemente era una estructura de comportamientos hacia la otra persona, se
fue materializando y expresando el ser de cada quien. Pero, por medio de aquel expresar (el
amor por el amor) la mujer se fue situando en una igualdad correspondida, y fue tomando el
mando para tener un dominio sobre él. Es por ello que nace el desconocimiento mutuo,
porque se va justificando el existir de las personas y sus razones para ser, por lo cual se van
creando signos para de una reciprocidad por ambas partes y se va formando una confianza
mutua, en donde lo desconocido se va forjando institutos y ritmos hacia la sociedad, ya que
son normas que se forjan para la realización de una comunicación entre ambas partes. Es
entonces, la dominación no simplemente se genera por parte del hombre, ya que, al pasar de
los tiempos, la mujer se ha ido ubicando en una fuente más organizada para dominar y
gobernar.

Conclusión.

Gracias a las investigaciones abarcadas por Pierre Bourdieu, se ha ido estudiando

detenidamente la dominación en los efectos sociales, sus sentidos opuestos, y su
comunicación expuesta entre ambas partes, por lo cual, sus orígenes vienen desde las
relaciones sexuales en pareja, allí se demuestra de primer paso que el hombre es aquel que
debe forjar y construir una dominación, también lo vemos expuesto en el trabajo, en las
actividades de ambos. Deja claro que, desde la epistemología, la familia es el núcleo central
de la sociedad, por lo que se van derivando de una cultura que nace desde sus contextos y
bienestar individual. La dominación por parte de la mujer, se ha ido fortaleciendo por el
sentir de ambas partes que es el amor, ya que es un sentir de ambas partes, por lo que unen
emociones, interacción, unión, ser muy abiertos sin pensar en consecuencias por falta de
comunicación.
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