Superación de la lectura de autoayuda como manera de explicar el mundo y el proceder de uno y de los

demás

Partimos considerando que lo observado por uno es la materia prima de las explicaciones posteriores
para dar cuenta de lo que acontece en nuestro entorno. Lo observado y transmisible lo es en lenguaje
(un objeto o suceso inscrito en material literario no puede ser referido si no se cuenta con palabras para
ello, si bien en lo cotidiano uno incluso podría señalar con el dedo el objeto desconocido o la situación
de la que quiere dar cuenta a otro).

Los materiales literarios dan cuenta de aquello que el autor pueda poner desde lo que conoce, a partir
de sus abstracciones de otros materiales literarios, sus observaciones o aquella ideología en la que está
inscrito. Explicaciones de "lo que es o acontece ahora" no excluyen que pueda hacer declaraciones (bien
objetivadas o disfrazadas en metáforas) de "lo que debiera ser".

Debo declarar que nos atenemos a analizar en lo observado "lo que las personas dicen" una vez que la
lectura de autoayuda define su proceder respecto a la práctica de lectura, no tratamos de definir cómo
ésta define su proceder respecto al mundo, las posibles interpretaciones subjetivas o el reporte ocasional
que puedan dar de bienestar a nivel incluso fisiológico que pueda producir la lectura de estos materiales.

Como justificación de porqué la literatura de autoayuda es algo que debe ser superado partimos de
consideraciones propias del autor al respecto y entrevistas y material escrito por el crítico literario Jesús
G. Maestro. Desde ya declaramos que la autoayuda no es operatoriedad en el mundo, al igual que
reportes psicológicos, sólo parecen definir lo que la persona dice de sí misma y marcan buena parte de
las pautas de comunicación de esta persona al referirse a todos sus asuntos.

NO DECLARAN DE MANERA PRECISA LO QUE SON LAS COSAS, ASUMEN CÓMO DEBIERAN SER ÉSTAS Y EN
ULTIMA INSTANCIA SE VUELVEN UNA PRÁCTICA QUE DA VUELTAS SOBRE SÍ MISMA (NO PERMITE
CONSTRUCCIONES POSTERIORES, DICE LO MISMO DE DIVERSAS MANERAS O TOMA EL SABER POPULAR
Y LO DESCRIBE EN SUS PROPIOS TÉRMINOS, ESTO IMPROPIO DE CUALQUIER CIENCIA Y CUYA APOLOGIA
SE PUEDE VER EN AUTORES COMO JORDAN PETERSON QUE DECLARAN QUE UN CONOCIMIENTO
ARTICULADO TIENE VALOR EN TANTO ALGO QUE SE APRENDE CON DOLOR O EXPERIENCIA Y ES DIFICIL
DE TRANSMITIR ALCANZA SU MEJOR FIN CUANDO ES "PUESTO EN PALABRAS")

Se podrá usar como justificación de quienes leen y escriben estos materiales literarios el argumento de
"no hacer daño a otros", "sirve a buenos propósitos" y "no nos importa que no sea considerada
literatura ni ciencia".

En primera instancia conviene hacer notar que en lo social y psicológico, las caracterizaciones que se
puedan hacer de un grupo o persona serán las que den cuenta de si estos están inscritos en la categoría
de lectores de autoayuda. La distinción hecha es de importancia en tanto podemos hablar de la
comunidad de lectores de autoayuda así como del individuo observado (el lector de autoayuda) que
entra dentro la anterior categoría.
Una vez hecha la distinción, que podrá requerir diversas maneras de definirse, ya sea por
autopercepción de los consultados, pruebas respecto a lo que es la literatura de no autoayuda respecto
a lo que pudieran leer y haber leído las personas consultadas o de ser posible un análisis de lo que
suelen referir los consumidores de estos libros respecto a su entorno en comparación con quienes leen
productos literarios de los que hacemos mayor estima en este articulo. A la vez podremos tomar de un
medio social limitado las respuestas a preguntas que puedan dar cuenta de lo que hace una persona
lectora de los libros mencionados.

Desde ya asumo que tienen menor vocabulario, dan menor cuenta de las reglas del lenguaje mismo
(ortografía, sintaxis), su explicación para lo que consideran como funcional u operante en el mundo no es
en grados (observaciones naturales, categorías, abstracción de lo común a la categoria y distinción de
niveles sin interferir ni explicar unos a otros)

Partimos de una noción de avance por grados de lo que a uno le confiere la lectura de auténtica
literatura. Esto responde a la consideración de que el material de autoayuda requiere: 1. Muy poco
conocimiento de vocabulario y reconocimiento histórico de lo que ha constituido la literatura y las
filosofías o ideologías disfrazadas en lo escrito en sus libros.