Principios 1

Principio de Responsabilidad

SENTIDO Y ALCANCE DEL PRINCIPIO DE RESPONSABILIDAD EN LOS TRIBUNALES DE

FAMILIA
Felipe Flores Fuentes
Universidad UNIACC
Jaime Fuica Martinez
22 de diciembre de 2020
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Introducción

La implementación de los tribunales de familia el año 2004 supuso un nuevo hito en la

modernización del poder judicial, al establecer órganos especializados en el conocimiento de las materias
del derecho de familia chileno y aplicar la oralidad para la realización del proceso. Pero esta
modernización involucra más allá de lo que sucede en el proceso que se lleva a cabo para resolver un
conflicto jurídico.

Un aspecto importante que cambió con el establecimiento de los nuevos tribunales de familia fue
su funcionamiento interno. A diferencia de los antiguos juzgados de letras de menores, los cuales en su
composición y funcionamiento se regían por las normas del Código Orgánico de Tribunales que
regulaban los juzgados de letras de mayor cuantía 1, los nuevos juzgados de familia adoptaron el
funcionamiento que tienen los juzgados de garantía y tribunales de juicio oral en lo penal 2, nacidos con la
Reforma Procesal Penal del año 1999. Esto implicó que nuevas figuras como el Administrador,
Subadministrador, Jefes de Unidad, entre otros, pasaran a ser quienes llevasen el funcionamiento diario
del tribunal, reemplazando a cargos como el de oficial, secretario, relator, que se encuentran aún en los
juzgados civiles.

La aparición de estas figuras en el funcionamiento rutinario de los tribunales trajo consigo la

incorporación de nuevos principios a la organización de los tribunales, a fin de velar por el correcto
desempeño de dichas funciones. Entre estos principios se encuentra el de responsabilidad, consagrado en
el artículo 4 del Auto Acordado 71-2016 otorgado por la Excma. Corte Suprema de Justicia. En el
presente trabajo analizaremos el sentido y alcance que tiene este principio en el funcionamiento de los
tribunales de familia y su manifestación práctica en la normativa jurídica.

1
El artículo 1 de la ley 14.550, que creaba los juzgados de letras de menores, establecía que “Los actuales Juzgados
Especiales de Menores y los que se creen en el futuro se denominarán Juzgados de Letras de Menores. Estos
Tribunales formarán parte del Poder Judicial y se regirán por las disposiciones relativas a los Juzgados de Letras
de Mayor Cuantía establecidas en el Código Orgánico de Tribunales y leyes que lo complementan…”
2
El artículo 118 de la ley 19.968 señala que “En todo lo referido a las materias que a continuación se señalan, se
entenderán aplicables a los juzgados de familia, en cuanto resulten compatibles, las normas del Código Orgánico
de Tribunales para los juzgados de garantía y tribunales de juicio oral en lo penal: comité de jueces, juez
presidente, administradores de tribunales, jefes de unidad, y organización administrativa de los juzgados.”
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I.- Principio de Responsabilidad

a. Concepto

Jurídicamente hablando, el principio de responsabilidad apunta a que los funcionarios “deberán

responder administrativamente por el cumplimiento de sus funciones…” 3. En otras palabras, los
funcionarios deben asumir toda consecuencia que se genere a partir de los actos que realiza en desempeño
de sus labores.

Ahora bien, para hacer efectiva esta responsabilidad, la misma norma establece dos requisitos:

1. Los funcionarios deben conocer, de manera explícita y con antelación, el alcance de sus
funciones. Esto implica que el titular del cargo debe saber el ámbito de sus funciones, conociendo
sus competencias y limitaciones. Y todo este conocimiento debe tenerlo desde el momento en que
empieza a desempeñar su labor.

2. Los deberes de cada funcionario deben constar por escrito.

b. Excepción a la aplicación del principio

El inciso 2 del artículo 4 del auto acordado establece una excepción a la aplicación del principio de
responsabilidad a aquellos funcionarios que, cometiendo una falta en el ejercicio de su función, ésta es
motivada por la falta de instrucciones o claridad de las mismas por parte de su superior jerárquico. Así, la
norma señala que  “No podrá sancionarse al funcionario que incurriere en un error motivado por la falta
de instrucciones que rigen sus funciones o de claridad de las mismas, debiendo en caso de conflicto
dirigirse sólo a la autoridad funcional competente en el tribunal (administrador, secretario, jefe de
unidad, coordinador u otro tipo de supervisión existente o definida al interior del mismo), teniendo en
consideración la orgánica estructural definida por diseño organizacional, bajo el concepto de unidad de
mando”. En estos casos, la responsabilidad de la falta cometida debe ser asumida por el jefe superior del
funcionario.

3
Artículo 4, inciso 1, auto acordado 71-2016
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c. Manifestación normativa del principio de responsabilidad

El principio de responsabilidad se encuentra normativamente plasmado en dos cuerpos legales, el

Auto Acordado 71-2016 de la Corte Suprema y en el Código Orgánico de Tribunales.

1) Auto Acordado 71-2016

Es el principal cuerpo legal donde encontramos desarrollado el principio de responsabilidad.

Además de la definición de dicho principio en su artículo 4, hay diversas normas que hacen
alusión o donde se manifiesta su preponderancia:

a) Artículo 9: Esta norma apunta al control y gestión de cada tribunal, estableciendo que
son el juez presidente del comité de jueces y el administrador los encargados de la
gestión y del resultado operativo del tribunal, radicando en ellos el deber de dar
cumplimiento a las obligaciones establecidas en virtud del principio de responsabilidad,
especialmente en la confección y aprobación oportuna del Plan Anual de Trabajo.

b) Artículo 12: establece la relación de dependencia de los distintos funcionarios del

tribunal. Así, señala que los funcionarios del escalafón de empleados y los jefes de
unidad dependen del administrador del Tribunal. Mientras que los consejos técnicos
dependen funcionalmente del juez presidente y administrativamente del administrador.

c) Plan Anual de Trabajo: normado en los artículos 18 y 19, su objetivo es “asegurar el

buen funcionamiento del tribunal, entendiéndose por tal ajustar sus procesos internos de
trabajo para una correcta administración de justicia en consideración al principio de
eficiencia, en concordancia con el Plan Estratégico del Poder Judicial y alineado con el
Plan Plurianual de la respectiva Corte de Apelaciones”4.

Según lo dispuesto en la letra b del artículo 18, es en el plan anual donde se contiene la
descripción y asignación de funciones con carácter obligatorio. El plan es confeccionado
por el administrador del tribunal y aprobado por el juez presidente.

4
Artículo 18, inciso 4
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d) Artículo 81: Norma establecida de manera exclusiva para los tribunales con
competencia en materias de familia, se refiere a los consejeros técnicos del tribunal. El
inciso 2 de esta norma establece la dependencia administrativa de los consejeros respecto
del administrador del tribunal, el cual tiene como obligación establecer respecto de ellos
procedimientos de trabajo, distribución y asignaciones de carga u otros aspectos
necesarios para el buen servicio y normal funcionamiento del tribunal.

2) Código Orgánico de Tribunales

En el artículo 389 F, inciso 2, encontramos el procedimiento administrativo en que se hace valer

el principio de responsabilidad, por las faltas cometidas por los funcionarios en el ejercicio de sus
labores. Si bien el título del párrafo 4 bis hace referencia a “Los administradores de tribunales con
competencia en lo criminal”, por remisión del artículo 118 de la ley 19.968, se hace aplicable a
los tribunales de familia.
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Conclusiones

El principio de responsabilidad apunta directamente al desempeño de labores de los funcionarios

de los tribunales, y en este trabajo en específico a aquellos que ejercen funciones en los tribunales de
familia, distintas a las funciones jurídicas que se desempeñan los jueces, por los cuales a ellos no le es
aplicable. En cambio, están sometidos a este principio los administradores de los tribunales,
subadministrador, jefes de unidad y empleados.

La incorporación de este principio como uno de los rectores de la organización de los tribunales
se relaciona directamente con el proceso de modernización llevado a cabo en los juzgados, mediante el
establecimiento de la oralidad en los procesos judiciales y en la separación de las funciones
administrativas y judiciales que se llevan a cabo en los tribunales, esto a efectos de que los jueces puedan
desempeñar de manera exclusiva la función jurisdiccional y que sean otras personas las que se dediquen a
la administración diaria de los asuntos ordinarios del tribunal.

Con el principio de responsabilidad se asegura que los funcionarios cumplan de manera debida
las funciones que han de desempeñar y obliga al superior jerárquico a cumplir sus funciones de manera
cuidada, asegurando una mejor y más expedita tramitación de las causas que conocen los tribunales de
familia.
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Bibliografía

Ley 19.968, crea los tribunales de familia (2004). Historia de la ley 19.968. Consultado el 22 de
diciembre de 2020 en https://www.bcn.cl/historiadelaley/nc/historia-de-la-ley/5746/

Ley 19.968, crea los tribunales de familia (2004). Consultado el 22 de diciembre de 2020 en
https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=229557

Ley 14.550, crea los juzgados de letras de menores (1961) Consultada el 22 de diciembre de 2020 en
https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=27761

Código Orgánico de Tribunales (1943). Consultado el 22 de diciembre de 2020 en

https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=25563&idVersion=2020-02-07&idParte=

Auto Acordado 71-2016 (2016). Consultado el 22 de diciembre de 2020 en

https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1092334&idParte=